La noche pasó con tranquilidad, pero también fue una de las mas extrañas que haya tenido en mi vida (Como casi todo lo que ha pasado últimamente). Primero la singular situación de Alma con Will que desencadenó una reacción bastante inadecuada, estúpida y vergonzosa de mi parte diciéndole cosas que ni siquiera debí decir, osea, en primer lugar ni siquiera me debería importar. Pero de todas formas, lo que creía que había sucedido, no pasó gracias a Dios, no es que realmente me importe, lo digo por Victoria. Si la situación hubiera sido real posiblemente Victoria habría enloquecido, o quizás yo lo hubiera hecho. Sin embargo la situación fue diferente, y gracias a las buenas acciones de Alma, Victoria y Will desaparecieron toda la noche, no supe si preocuparme o dejarlos tranquilos, así que opte por la segunda opción ya que al parecer era el sueño de los dos y no quería arruinarlo con mis estúpidas suposiciones (Otra vez). En consecuencia de eso pasé la noche en la fogata con Alma, lo cual no fue para nada aburrido y esa es la principal razón por la cual fue la noche más rara de mi vida. Por primera vez en mucho tiempo pude pasar toda una noche con una chica sin tener sexo, sin tocarla ni tener una insinuación sexual y lo disfruté, me reí por horas sin tener que forzarlo para poder causar una buena impresión y pude molestarla , jugar , tontear sin el miedo de que la conquista pudiera arruinarse y quedar atrás en la competencia que compartía con William. Fue una de las noche más raras de mi vida ya que tuve ese dolor en el pecho denuevo, y eso definitivamente no es bueno.

Desperté debido a que el sol de la mañana me llegaba directo a los ojos, cuando pude abrir los ojos me di cuenta de que estaba acostado en el suelo del jardín aun con un dolor de espalda horrible. Cuando me senté para poder salir de esa improvisada cama infernal me di cuenta que Alma estaba durmiendo a mi lado , mientras que la fogata estaba apagada , pero estoy casi seguro que no lo hice yo.

—¿Ganaste?—hablo Will detrás de mi haciendo que saltara del susto.

—Casi me matas del susto

El rió

—Y dándole respuesta a tu pregunta — me levanté del suelo con dificultad, limpiándome la tierra que quedó en mis pantalones — No he ganado nada.

Miramos a Alma juntos, no parecía despertar con nuestra conversación y tampoco tenía la intención de despertarla aun, por lo cual simplemente me acerqué a Will y nos sentamos en un tronco no muy lejano que reposaba ahí.

— ¿Cómo te fue?—restregué mis ojos del sueño

William se quedó callado

—Me estás preocupando—De un momento me sentí más despierto con la preocupación que me causo William.

—Digamos que me fue bien— Soltó junto a un suspiro

— ¿Qué le hiciste?

—Hablamos toda la noche, sobre posiblemente todo, reímos, jugamos...

Parecido a mi noche

— ¿Y?—lo miré con la cara de sospecha que me pone Amanda cuando me descubre en algo.

—Soy un estúpido —suspiró

Era de esperarse

— ¿Qué hiciste?

William miró a Alma

—Ven— Se levantó y me llevó a caminar junto a él hasta llegar al lago.

—Me gusta demasiado— Miró hacia otro lado — Más de lo que pensé

— ¿Qué tiene de malo eso?

—Que no sé que hacer Sam—sonaba preocupado

—Simplemente dile

—Se lo dije de la forma que pude— me miró nervioso— Soné como un estúpido, tartamudeé, sudé más que nunca en mi vida

—¿Y qué te dijo?

—Me correspondió— un brillo especial comenzó a notarse en sus ojos— Me correspondió a pesar de haber parecido un idiota cuando lo dije.

—Eso es bueno — reí y le di unas palmaditas en la espalda

—No lo es

— ¿Por qué no?

—Porque no se que hacer ahora—Se agarró la cabeza con desesperación.

Desde que conozco a William, nunca ha tenido una novia real, o quizás más que novia real, una relación real. Todas las mujeres que ha tenido Will duran aproximadamente 1 semana, además de que sus primeras experiencias en el amor fueron en este mismo juego de galán, por lo que creo que no ha percibido lo que es tener una relación seria. Posiblemente yo no ayudaba mucho en que la tuviera ya que lo único que le metía en cabeza era lo mierda que es el amor y que nunca se enamorara ya que era malo.

Lo más probable es que por eso nunca admitió que le gustaba Victoria y lo guardó solo para si. Alma tenia razón.

—William simplemente déjate llevar a lo que sientes

—Pero no entiendo como funcionan estas cosas ¿Si no hago lo que ella quiere?

—Ella va a querer lo que tu le des, si te correspondió es por que tu le gustas también— Después de esa respuesta vi como Will pudo respirar más tranquilo.

—No quiero arruinar esto

—Solo hay una regla para no hacerlo

Él me miró como si le fuera a ofrecer la clave del éxito

—Que ella sea la única— respondí junto a un suspiro

—Osea que...—  me miró asustado — ¿Ya no puedo competir contigo?

—No William, no puedes— Lo miré serio

— ¿Eso significa que ganaste?

—No, tu ganaste al encontrar algo mejor que lo que hacíamos—dije mirando la piedra que pateé hacia el lago

—No sé si pueda dejar de jugar con chicas tan de repente—Se rascó la cabeza de forma incomoda.

—Si le haces algo a Victoria—Me puse de frente a él y lo mire directamente a los ojos con la mirada más amenazante que pude poner—te mato aunque seas mi mejor amigo.

William rió incomodo, quizás hasta algo asustado para luego darme un cálido abrazo

—Gracias por apoyarme— me soltó — espero que las cosas salgan bien de ahora en adelante.

—Espero que la trates como se merece

Su cara aun parecía nerviosa y algo tensa, es como un niño experimentando sus primeras acciones, sin saber que lo que hace esta bien o esta mal , esperando que no lo regañen por cada decisión que toma. Así que para apaciguar su estado de animo, puse mi mano en su hombro y lo incite a caminar de vuelta a la casa. 

— ¿Te gusta?— soltó Will de repente.

— ¿Quién? — miré su rostro y parecía enfadado — Mira Will sé que llevo años junto a Victoria pero solo la veo como una amiga

—No hablo de Victoria imbécil — me golpeó el brazo — Hablo de Alma

—¿¡Qué!? — Reí algo nervioso — estás loco

— ¿Estás seguro de que no?

— ¿Por qué demonios lo preguntas en primer lugar?

—Porque para mi era una apuesta, pero pareciera que para ti es algo mas que eso.

—Es porque la detesto, y la odio— puse una cara de desagrado al pensar en su cara

—Del odio al amor un paso—comenzó a reír

Yo solo reí junto a el, pero con su comentario volví a pensar en el dolor de pecho que experimenté anoche, se que no fue algo que comí pero tampoco quiero darle nombre a lo que sentí. Y luego de caminar unos metros mas , el foco de una idea con la solución se prendió 

Premio numero 38 voy por ti cuando llegue a casa. 

Seguimos hablando sobre otras cosas hasta que por fin llegamos a casa. Alma ya no estaba en el suelo, así que posiblemente despertó y entró a desayunar con Victoria. Will y yo entramos a casa pensando en que tendríamos que cocinar para las chicas, pero Victoria nos estaba esperando en la cocina.

—El desayuno está en la mesa

Mire a William y su cara se torno casi de un color rojo vivo mientras evitaba mirarme a los ojos.

— ¿Dónde esta Alma?— Saqué un trozo de pan de la mesa y comencé a comerlo

Victoria y William me miraron

— ¿Qué?— los miré a ambos— Quiero dejarlos solos un momento—traté de cambiar el tema de conversación mientras agarraba mi taza de cafe

—Está en la habitación—Victoria me miró sonriendo— ¿No vas a sentarte a comer?

—Comeré con ella— mordí otra vez mi pan— Gracias por la comida — le devolví la sonrisa y comencé a subir las escaleras hasta la habitación. Sin pensar en como estuviera otra vez abrí la puerta sin siquiera tocar antes y al entrar la vi arreglando su bolso, mientras saltaba del susto por mi entrada sorpresiva.

—Podría estar desnuda algún día ¿Sabes?

—No seria algo por lo cual yo estaría molesto— sonreí mientras me sentaba en la cama para verla ordenar sus cosas.

¿Por qué estoy haciendo esto?

— ¿Por qué viniste?

—Quería dejar a los chicos solos... — tomé de mi cafe — ya sabes, para que pudieran besarse en paz 

—Que buen amigo—sonrió mientras doblaba sus blusas

—Sabes...— dejé lo que quedaba de cafe en la mesa de noche — Con respecto a lo que pasó anoche— la miré a la cara y suspire— lo siento, de verdad... lo siento mucho.

Ella dejó de ordenar su ropa y me miró

—Te dije que no quería oír eso— respondió seria

—Lo sé, lo sé, pero no quería que las cosas se quedaran así

—Mi actitud no iba a cambiar respecto a ti, desde el principio supe que eras así— comenzó a ordenar su ropa nuevamente

—Si pero tu dijiste que pensabas que era diferente— fruncí el ceño involuntariamente

—Como tu bien lo dijiste— me miró directo a los ojos lo pensaba—sonrió de una forma extraña, podría decir que casi triste.

— ¿Ahora que soy para ti?

¿Qué tipo de pregunta es esa?

— ¿Qué tipo de pregunta es esa?— rió 

—Ya sabes... —comenzó a salirme una voz nerviosa— Para ver si no te hayas enamorado de mi— reí nervioso al ver que el cambio de tema no parecía funcionar ya que me miró de forma extraña

Soy anormal.

—Eres mi amigo Sam— rió como lo hace normalmente— Un estúpido, guapo, mujeriego amigo

Por primera vez en mi vida la palabra 'Amigo' me molestó. Nunca otra mujer me llamo amigo aparte de Victoria, menos una apuesta.

— Así que, ¿Crees que soy guapo?—Sonreí de forma coqueta para poder cambiar el tema y olvidarme de que me llamo así.

—No— dijo seria—solo lo digo por amabilidad— terminó por sacarme la lengua mientras cerraba su bolso.

—Estúpida , hieres mis sentimientos—le arrojé una almohada en la cara

— Tu no tienes sentimientos Sam— río mientras me arrojaba la almohada de vuelta

—Los tengo muy en el fondo de mi corazón y algún día alguien los encontrará—me acosté en la cama con mi cabeza hacia donde estaba ella.

—Espero que sea la chica indicada para ti— se acercó a mi cara para mirarme directo a los ojos — la que se atreva a hacer esa barbaridad— sonrió de nuevo, dejando ver sus perfectos dientes cerca de mi rostro.

La punzada del pecho volvió a parecer mientras sonreí involuntariamente por su tierna acción.

Yo también espero que lo seas.