─Creo que deberíamos terminar.

Musitó Jungkook con total seriedad, y Jimin simplemente colapsó.

─¿Terminar? ¡¿Me estás hablando enserio?! ─cuestionó con la voz rota, a lo que el otro asintió─. Es que no te lo puedo creer.

─Pues hazlo, porque es lo mejor.

─¿Cómo demonios acabar con todo lo lindo que hemos construido durante un año puede ser "lo mejor"? ¿Es que acaso no te importa lo que hemos vivido y lo mucho que nos queremos?

─Sí me importa, pero si de un tiempo para acá lo único que hacemos es discutir sin encontrar solución alguna algo debe significar ─Se cruzó de brazos.

─Claro que significa algo... ¡Significa que no tenemos comunicación! Y eso no resuelve separándonos, se resuelve hablando como dos personas civilizadas que ponen su amor por encima de cualquier dificultad ─Jimin se puso de pie y comenzó a caminar con desesperación por toda la sala.

─Es que justamente empezamos a hablar y mira cómo te pusiste.

─¡¿Es que cómo no quieres que me ponga así si tú no cooperas en nada, Jungkook?! ─gritó y las lágrimas corrían de sus ojos como cascadas─. Desde que empezaron los problemas lo único que haces es imponerme tu punto de vista o ignorarme, para nada me escuchas ni le das valor a lo que pienso... Y hoy me propones la maravillosa idea de terminar.

─Es que viendo cómo están las cosas y tu reacción no se me ocurre otra cosa ─Alzó la voz intimidando un poco a Jimin.

─Habiendo mil soluciones como sentarnos a hablar sinceramente y sin tapujos, pasando más tiempo juntos, incluso yendo a terapia de pareja ─Se encogió de hombros─. Pero no, para ti es mucho mejor acabar con todo y ya.

Al decir eso se quedó pensativo por un momento y comenzó a morder sus uñas. Luego de un momento miró fijamente a Jungkook y le preguntó:

─¿Acaso quieres terminar porque hay otra persona? ¿O es que ya no me quieres? Bueno, tal vez nunca me quisiste.

─No digas eso, no es por ninguna de esas razones ─Se frotó levemente la sien─. Yo estuve hablando con mis amigos y me dijeron que los problemas podrían ser causados por la diferencia de edad, porque ambos pensamos diferente y queremos cosas diferentes.

Dijiste que si fuéramos más cercanos en edad tal vez hubiera estado bien.

─¿Enserio le vas a echar la culpa a los años que me llevas? Porque hasta hace poco no habían representado un problema.

─Pero bueno, ahora lo hacen. Y yo no contemplo otra solución, lo siento mucho.

─¿Entonces lo vas a dar todo por sentado y me vas a dejar así? ─A estas alturas ya Jimin no podía casi ni respirar, y el dolor en el pecho lo estaba matando.

─Perdóname, pero esa es mi decisión.

─Para ti es muy fácil decirlo, ¿no? ─Soltó una amarga carcajada─. No quieres ni pensar en alguna solución positiva porque ya no soy lo que quieres a tu lado, y buscas otras excusas para que no me dé cuenta y me sienta mal... Ya entiendo.

─No es tan así, solo...

─No digas más, yo ya entendí ─Se limpió bruscamente los rastros de lágrimas con la manga de su suéter y suspiró─. Voy a subir a recoger mis cosas y me voy para casa de mis padres... Mi verdadera casa.

─¿A esta hora? Bueno, déjame llevarte por lo menos ─ofreció, pero Jimin le dio la espalda y fue en dirección a las escaleras.

─No, gracias. Yo tomaré un taxi o algo así.

─Jimin, son casi las diez de la noche y estamos en medio de la nada, prácticamente ─Lo siguió escaleras arriba─. ¿Qué taxi vas a tomar, por Dios?

─No lo sé, caminaré hasta el centro y allí podré tomarlo, o un bus ─Abrió el clóset y comenzó a echar sus prendas en su maleta.

─El taxi te va a costar bien caro de aquí a donde vivías, ¿sabes? ─Jimin lo ignoró y siguió guardando sus cosas─. Además, el centro está como a tres kilómetros y caminando...

─¡Yo veré qué hago, Jeon! ─espetó y su estómago se revolvió.

Nunca lo había llamado por su apellido.

─Está bien, ya veo que no puedo hacer nada por ti.

─Ya has hecho suficiente, gracias.

Resentido y cansado, el joven cerró su maleta con fuerza y se puso una chaqueta debido a que afuera hacía un poco de frío. Le brindó una última mirada de dolor a Jungkook y salió de la habitación, para luego dirigirse a la puerta y salir de esa casa que alguna vez consideró un hogar. Con el corazón hecho pedazos y la mente un enredo, empezó a caminar suavemente en dirección al centro de la ciudad creyendo que se la iba a pasar así toda la noche. Hasta que por suerte iba pasando uno de los vecinos en su auto y se detuvo junto a él.

─Oh, ¡buenas noches, señor Lee! ─Hizo una reverencia y sonrió levemente.

─Buenas noches, jovencito. ¿Vas al centro de la ciudad por alguna casualidad? ─preguntó mirando con curiosidad la maleta del muchacho.

─Eh, sí. Tengo asuntos que resolver ─Rascó su nuca un tanto incómodo.

─Pues sube, te llevaré hasta allá ─Le abrió la puerta del asiento de copiloto─. Mi sobrino está ingresado en la clínica, así que iré a pasar la noche con él.

─Ay, espero que se mejore entonces ─No quiso indagar sobre lo que le ocurría al chico─. Por cierto, ¿dónde dejo mi maleta?

─Tírala ahí en los asientos de atrás, así no tengo que bajarme a abrirte el maletero ─dijo el anciano y ambos rieron.

Jimin le hizo caso y después fue a sentarse junto a él en la parte delantera del auto, se abrochó el cinturón y le agradeció al señor por hacerle el favor.

Una vez en el centro le costó un poco encontrar un taxi a esa hora, pero lo consiguió y llegó a su casa antes de la medianoche. En medio del viaje no pudo contenerse y se echó a llorar otra vez, por lo que el taxista se apiadó de él y no le cobró a pesar de los intentos del joven de pagarle. Se bajó del auto, le dio las gracias al hombre y caminó hasta la puerta, la cual tocó dos veces con muy poca fuerza.

Su madre abrió con muy mal humor y se iba a quejar porque esas no eran horas de llamar a la puerta, pero al ver que se trataba de Jimin y este se veía bastante demacrado por tanto llorar palideció, y su enojo se transformó en sorpresa y preocupación.

─Hijo mío, ¿qué haces aquí a esta hora? ¿Y esa cara? ─Agarró sus mejillas con su manos y se percató del objeto junto a él─. ¿Por qué traes una maleta? ¿Tuviste algún problema con Jungkookie?

Jimin no aguantó más y se lanzó a los brazos de la señora, haciendo que esta se asustara pero lo apretara fuertemente entre sus brazos. Empezó a sollozar bastante alto, lo que fue escuchado por su padre a quien también casi se le sale el corazón de la impresión al verlo en su puerta, a esa hora y con ese aspecto.

─Susan, ¿qué pasó? ¿Por qué está llorando así? ─preguntó alarmado.

─No lo sé, él se apareció así sin más ─Acarició la espalda de su hijo al notar que se estaba tranquilizando─. Voy a sentarme con él en el sofá a ver si se calma y me dice algo, tú entra la maleta y déjala en su habitación ─Su esposo asintió y ella caminó suavemente hasta el sofá con Jimin aún pegado a ella.

El señor aún agobiado agarró la maleta, cerró la puerta y recorrió un largo pasillo hasta llegar a la última habitación que era la de su hijo, dejó ahí sus pertenencias y caminó veloz hasta la sala para ver qué le ocurría al joven.

─¿Aún no ha dicho nada? ─inquirió y se sentó al lado de su esposa, la cual estaba a punto de responderle cuando sintió que el joven trataba de decir algo.

─Esto no tenía que acabar así ─murmuró, y ahí sus padres comprendieron que las cosas con Jungkook no habían salido del todo bien.

─¿Quieres hablar de eso, cariño? ─Le preguntó su madre en voz baja pero el chico negó con la cabeza─. Bueno, no pasa nada.

─¿Te gustaría que te preparara un vaso de leche calientita? ─intervino esta vez su padre, a lo que él asintió levemente─. Vale, te lo traigo en un rato, y en cuanto te lo tomes te vas a la cama a descansar, ¿sí?

─Está bien.

Dicen que todo lo que se acaba es porque es mejor así, pero estoy en un nuevo infierno cada segundo.

Las primeras dos semanas Jimin las pasó fatal. No quería hablar, ni comer... Ni siquiera le interesaba ver su programa de televisión favorito junto a su madre, lo que la tenía a ella y a su padre muy tristes porque nunca habían visto a su niño así. Después de un mes el chico mejoró un poco, porque se abrió con sus padres y les contó todo lo ocurrido, lo que lo hizo sentirse libre de cierta manera. Aún lloraba por las noches mientras veía sus fotos con Jungkook, claro está, pero había empezado a alimentarse correctamente y a compartir con su familia y amistades otra vez. A los tres meses no estaba bien del todo, pero estaba volviendo a ser ese risueño chico que siempre había sido y que a tantas personas se había ganado, y volvió a tener ese apetito voraz de toda la vida. Sin embargo, lo seguía queriendo.

Una tarde se encontraba redecorando su habitación con unos afiches y pegatinas que uno de sus mejores amigos le había regalado, cuando su teléfono comenzó a sonar indicando la entrada de una llamada. Lo tomó para ver quién era y en cuanto vio aquel nombre brillando en la pantalla su estómago se hizo un nudo y comenzó a temblar. Era Jungkook, a quien no sabía si colgarle o contestar para saber qué quería, hasta que de forma inconsciente su dedo índice deslizó el botón verde y su otra mano llevó el celular hasta su oído para escuchar esa voz.

─¿Jimin? ¿Estás ahí?

─Sí, hola ─contestó a duras penas, sintiendo cómo los nervios se apoderaban de él─. ¿Deseas algo?

─Saber cómo estás.

Después de tres meses en la tumba.

─Bastante bien, gracias. ¿Y tú?

En su mente, Jimin rogaba porque la respuesta a eso fuera "Muy mal, no he dejado de sufrir desde que te fuiste y no sabes cuánto me arrepiento de la decisión que tomé". Pero obviamente eso no iba a ser así.

─Bien, nada nuevo.

─¿Algo más? Estoy un poco ocupado, Jeon ─dijo en tono de queja, pero en realidad lo estaba haciendo porque si seguía hablando con él los sentimientos que estaba aprendiendo a reprimir iban a salir a flote.

─Mira, sé que ya pasó un tiempo desde que nos separamos y no debería ni hablarte...

─Al grano, por favor.

─Te extraño, Jimin.

Y esas simples palabras provocaron un remolino de emociones en el pobre chico, quien al escucharlas cayó de rodillas en el suelo de su habitación y sus ojos se colmaron de lágrimas.

Ahora me llamas de nuevo, solo para romperme como una promesa... Con la excusa de ser honesto.

─Eso está muy bien, pero tú tomaste una decisión y no se puede revertir.

"Que quiera revertirla, por favor", suplicaba Jimin en su mente una y otra vez.

─No quiero revertirla, de hecho ─Y su corazón se rompió aún más─. Pero solo quería ser honesto contigo porque si no iba a explotar. ¿Tú no me extrañas a mí?

El pobre Jimin no podía creer que le estuviera preguntando eso, ¿acaso no tenía vergüenza?

─Eso no te incumbe.

─Me lo tomaré como un sí.

Y al peli-naranja se le agotó la paciencia.

─¿La soledad te ha hecho perder la cabeza? ¿O por qué te estás comportando como un completo imbécil? ─interrogó con rabia.

─¿Ahora preocuparse por ti es ser un imbécil?

─¡Sí! Hace tres meses no te importó en lo absoluto cómo yo me sentía por culpa de tu comportamiento y simplemente me dejaste ir. ¡Y ahora te interesa saber cómo estoy y hasta me extrañas! ─Fingió reírse─. Imbécil te queda corto.

─Ya te expliqué que tomé aquella decisión porque teníamos problemas, no porque no me importaras.

─Problemas que no quisiste resolver y solo escapaste de ellos, y de mí. Eso significa que no te importaba tanto, no trates de verme la cara de estúpido ─Estaba a nada de colgar el teléfono porque el dolor y el genio se lo estaban comiendo vivo.

─Aún me importas, Jimin. Pero decidí dejarte libre porque conmigo ya no te sentías feliz y amado, solo te sentías agobiado y cansado ─confesó─. Además, te merecías a alguien que pudiera dedicarte todo su tiempo y te diera el amor que te merecías... Y tuviera tu edad también.

El joven no sabía cómo sentirse al escuchar eso.

─Y sigues con lo de la edad. Pero bueno, si tanto me merecía a alguien así, ¿por qué no cambiaste tú para serlo? ─Ni siquiera esperó una respuesta─. Cierto, era más fácil huir y dejarme con el amor en las manos que esforzarte un poco para ser una mejor persona.

─Sabes que siempre estoy muy ocupado, además, siendo sincero no me interesa cambiar porque así estoy bien.

Y ahí Jimin se rindió. Al final Jungkook tenía razón porque si alguien se siente bien con su forma de ser no tiene porqué cambiar por alguien más. Además, él se merecía algo mucho mejor y nunca lo había querido ver. Así que con sumo dolor en su alma pronunció lo siguiente:

─¿Sabes qué? Tienes razón, yo me merezco a alguien que se muera de amor por mí y no se canse de demostrarlo. Y tú no tienes que cambiar por nadie más que por ti mismo. Hasta aquí llegó nuestra conversación, cuídate.

─Qué bueno que entiendas, y tú...

No alcanzó a terminar la frase porque Jimin colgó en cuanto terminó de hablar. Lanzó su teléfono a una esquina de la cama y se levantó del suelo secando sus lágrimas de forma agresiva. Esa conversación con Jungkook había dolido un montón, pero lo había hecho darse cuenta de varias cosas, y una de ellas era que tal vez Jungkook no lo amaba o si quiera lo quería. Y es que durante el tiempo que estuvieron juntos nunca le dijo "te quiero" ni algo parecido, solo solía decir "yo también" o "y yo a ti" cuando Jimin se lo decía, como si solo estuviera de acuerdo con él o quisiera convencerlo. A lo mejor a Jungkook le gustaba pasar tiempo juntos y se sentía bien cuando se besaban o hacían el amor, pero ya. Solo le interesaban su compañía y atención, pero no su corazón.

Soy un pedazo de papel arrugado tirado aquí.

Cansado ya de esos pensamientos autodestructivos, Jimin decidió superar a Jungkook de una vez por todas, en vez de simplemente esconder sus sentimientos por él en el fondo de su corazón. Así que tomó nuevamente su celular y bloqueó y borró su número, junto con todas las fotos y videos que tenían juntos; y las cosas que le regaló las guardó en una caja que después escondió bajo su cama (para no tener que quemarlas). Luego terminó de decorar su habitación y se dio una larga ducha mientras recordaba su sueño de ser cineasta, algo en lo que no había pensado durante mucho tiempo y ahora que estaba solo podía enfocarse en ello.

Esa noche, después de cenar y compartir un rato con sus padres, decidió sentarse frente a la computadora para comenzar a escribir el libreto de la que sería su primera película (o así lo soñaba él). Miles de ideas surcaron su mente, pero la que más lo convencía y la que pensaba que podría desarrollar mejor era la de escribir una historia inspirada en lo sucedido entre él y Jungkook. Para Jimin, esa era la mejor manera de deshacerse de los sentimientos: escribiéndolos sin dejar escapar ningún detalle. Así que ahí estuvo sentado toda la noche, y no se fue a dormir hasta que no tuvo la trama bien desarrollada.

Un mes más tarde llegó el cumpleaños número 21 de Jimin, del cual él mismo no se acordaba debido a todo lo que había pasado en los meses previos. Pero su familia y sus amigos no lo pasaron por alto, así que entre todos le organizaron una pequeña fiesta como todos los años, con su pastel favorito, decoraciones sumamente coloridas, música a todo volumen... Todo lo que el chico adora. Sin embargo, él no se sentía del todo feliz, porque durante toda la tarde estuvo mirando la puerta principal, esperando a que Jungkook llegara con algún regalo. Sabía que eso era hacerse ilusiones en vano, e incluso ya se había adaptado a la idea de que ese hombre no iba a volver a ser parte de su vida y estaba empezando a avanzar de verdad sin él. Pero en el fondo lo esperaba, y nada ni nadie iba a poder cambiar eso.

Su papá notó su aire de tristeza, así que se acercó a él y dejó suaves caricias en su cabeza.

─Cambia esa cara, hijo. Se supone que debe ser divertido cumplir 21, ¿no? ─comentó con una sonrisa.

─Lo es, papá.

─Buenoooo, ya abrimos todos los presentes ─expresó con alegría la mamá del chico─. Pero tú, querida Yunjin, no has traído ninguno ─Señaló a una linda chica cuyo cabello estaba teñido de azul oscuro─. No puedo creer que le hagas eso a tu mejor amigo.

─Ay, Susan, ¿cómo podría hacerle eso a mi niño? ─Pellizcó una de las mejillas de Jimin─. Mi regalo es el mejor de todos.

─¿Y qué es? ─preguntó otro amigo.

─Dejaré que lo averigüe él mismo ─Sacó de su bolso un pequeño sobre que parecía ser una invitación─. Léelo, Mimi.

El chico tomó el sobre en su manos mientras miraba incrédulo a su amiga, lo abrió y leyó en voz alta lo que decía el papel que este contenía.

─"Usted está invitado al festival anual La Mirada del Director, que tendrá lugar el próximo sábado a las 8:00 PM, en el Centro Cultural de Corea. Lo esperamos, saludos cordiales."

Se quedó procesando unos instantes siendo observado por los invitados, hasta que soltó un chillido que por poco deja sordos a todos.

─¡No puede ser! Voy a ir al evento de cine más importante del país ─Se levantó muy emocionado y corrió a abrazar a su amiga─. ¿Cómo conseguiste estas invitaciones?

─Mi querida tía. Se las dieron a ella, pero como no es muy fan del cine me las regaló a mí y me dijo que te llevara. Ella sabía que tú ibas a disfrutar de ese evento más que ella.

─Dios, no me lo puedo creer ─Abrazó ahora a sus padres─. Dile a tu tía que cuando quiera mi mamá le hace un corte de cabello espectacular, ¿cierto, mami? ─La señora asintió.

─Ella sabe, justamente me dijo que ese era el pago por su regalo ─Todos los presentes rieron.

Jimin, por su parte, sintió que uno de sus mayores sueños se estaba haciendo realidad.

Llegó el día del evento, y Jimin se vistió con sus mejores galas y hasta se retocó el color del cabello. Cuando llegaron al lugar los de seguridad se preocuparon por sus rostros poco conocidos, pero al llevar invitaciones no pudieron hacer más que dejarlos pasar sin poner peros, y al entrar los chicos (y sobretodo Jimin) se sintieron en un paraíso. Habían luces led de color amarillo y naranja por todo el lugar, pósters de películas famosas, buena música y hasta una mesa buffet de la cual podías tomar desde bocadillos salados hasta dulces delicados y champaña. Realmente valía la pena estar ahí.

De repente, la amiga de Jimin desapareció. Había reconocido a su actor favorito en el evento y decidió correr a pedirle una foto, dejando al pobre chico solo en una esquina. Él no le dio mucha importancia y siguió contemplando el lugar, hasta que por estar distraído mirando los pósters chocó con un señor que reconoció al instante.

─Disculpe, Yoongi.

Sí, era el mismo hombre que se había mostrado muy preocupado por la orientación sexual de Jungkook aquella noche.

─No te preocupes, muchacho ─Lo miró de arriba a abajo─. Espera, tú eres el chico con el que cenamos en casa de Jungkook hace unos meses, ¿verdad? ─Jimin asintió apenado─. ¿Cómo has estado?

─Bien, muchas gracias por preguntar.

─Qué bueno, Jungkook estuvo un poco mal después de que rompieron ─Escuchar eso lo hizo sentir un poco bien, pero mal a la vez─. Pero bueno, ya hasta se consiguió una nueva novia, así que no fue tan grave.

Y ese simple comentario le echó a perder la noche.

─Ah... No sabía, pero qué bueno ─dijo tratando de disimular su dolor.

─Pues sí. Es una chica muy bonita y agradable, pero tiene como unos 19 años ─Rió levemente─. Es una bebé para Jeon.

Yo envejeceré, pero tus amantes serán siempre de mi edad.

─Eh, fue un gusto verte de nuevo, Yoongi. Pero debo ir a buscar a mi amiga ─espetó con rapidez y salió corriendo en dirección al baño.

Una vez ahí se encerró, y por más que trató de que las lágrimas no salieran fue en vano. No conseguía entender cómo, si Jungkook se había quejado tanto de la diferencia de edad entre ambos y decía que era la razón principal de la ruptura, ahora estaba saliendo con una chica hasta más joven que él. Saber eso lo desestabilizó por completo, y se permitió llorar durante un rato sentado en el piso del baño. Y hubiera seguido más tiempo ahí de no ser porque comenzaron a tocar la puerta con desesperación, así que se paró y se miró al espejo para secar sus lágrimas y acomodar su traje, respiró profundamente y abrió la puerta, encontrándose con una actriz desesperada.

─¡Dios! Pensé que nunca abrirían, permiso ─Entró al baño empujando un poco a Jimin y cerrando la puerta con fuerza.

El joven se quedó pensativo porque el rostro de la mujer se le hacía familiar, pero no pudo reconocerla bien porque ella fue demasiado rápida. Dos minutos después salió, y fue ahí donde la identificó.

─¿Park Min-young? ─dijo atónito.

─La misma, ¿por qué?

─Nada, simplemente es impresionante. Usted es de mis actrices favoritas.

─¿Qué te puedo decir? Siempre es bueno conocer un fan ─Le sonrió ampliamente al chico y le ofreció la mano─. ¿Tu nombre es...?

─Oh, Park Jimin ─Aceptó la mano con una reverencia─. Estoy encantado de conocerla.

─Igualmente, cariño. ¿Puedo preguntarte algo?

─Claro, dígame.

─Cuando abriste la puerta del baño alcancé a ver tu rostro y... No sé si lo imaginé pero, ¿estabas llorando?

La pregunta alarmó a Jimin, porque él no detalló en su rostro cuando ella entró al baño y pensaba que al revés había sido igual.

─Sí... ─murmuró.

─Ah, qué mal. Un chico tan bonito como tú no debería de arruinar su rostro llorando ─Ese comentario logró que Jimin soltara una pequeña carcajada─. ¿Te pasó algo?

Tú, eso es lo que pasó.

El chico permaneció en silencio durante unos segundos, así que al ver esto la mujer decidió cambiar de tema para no incomodarlo.

─Bueno dime, ¿qué haces en un evento como este? Nunca te había visto.

─Vine con una amiga que me consiguió la invitación, la verdad me encanta todo lo que tenga que ver con el mundo del cine ─comentó emocionado, aún no podía creer que estaba hablando con la mismísima Park Min-young.

─Interesante... Entonces, ¿te gustaría hacer tus propias películas y así? ─preguntó, y a Jimin se le iluminaron los ojos.

─¡Por supuesto! ─chilló, haciendo que la mujer abriera sus ojos un montón─. Disculpe, es que me emociona mucho hablar del tema porque ese es mi mayor sueño.

La mujer se quedó pensativa unos segundos mientras recorría al chico con la mirada, poniéndolo muy nervioso.

─¿Sabes qué? Estás de suerte, porque un buen amigo mío estará impartiendo un curso de producción cinematográfica dentro de poco, así que hablaré con él para que puedas participar. Acompáñame.

Aunque pareciera increíble, Jimin estaba siendo prácticamente arrastrado por una de las actrices más populares del momento hasta un hombre que podría ayudarlo a realizar su mayor sueño. Llegaron al otro lado del salón donde se encontraban conversando unos señores muy bien vestidos y todos bebiendo champaña, la mujer llamó la atención de uno de ellos y lo apartó para poder hablar con él.

─Mira, Jimin. ¿Ese era tu nombre, no? ─susurró ella a lo que Jimin asintió─. Él es el señor Thompson, de quien te hablé.

─Mucho gusto, señor ─Estrecharon las manos y el hombre miró a Min-young atentamente.

─Él es un joven como alguna vez lo fuiste tú, que sueña con hacer sus propias películas y ser reconocido por ello. Así que pensé que tal vez podría inscribirse en el curso que vas a dar el mes que viene, para que aprenda todas las herramientas necesarias.

─Sabes que no cualquiera toma ese curso, y muy pocos lo aprueban. ¿Hace cuánto conoces a este joven?

─Hace unos diez minutos, cuando por poco me orino encima por su culpa ─soltó de momento, haciendo que el señor riera y Jimin se sonrojara─. Pero bueno, estuve hablando con él un rato y pude notar la pasión en sus ojos así que creo que será un buen estudiante.

El hombre observó a Jimin por última vez y le dio un sorbo largo a su copa para finalmente decir:

─Está bien, le daré una oportunidad al chico. Pero solo porque tú me lo pides y porque se ve un buen muchacho, no más.

Al escuchar esto el chico casi salta de la emoción, pero tuvo que contenerse para no pasar una vergüenza enfrente de gente tan importante, así que se limitó a agradecerles a ambos y corrió en busca de su amiga para contarle. Estuvo buscándola como por cinco minutos, hasta que la encontró coqueteando con un joven que parecía latino.

─Yunieee, no sabes lo que pasó ─comentó el joven aún aguantando las ganas de brincar.

─Mimi, estoy en medio de algo importante con Julio ─El otro muchacho la miró ofendido.

─Me llamo Jorge, pero da igual ─Se marchó a pasos apresurados de ahí dejando a Yunjin enfadada.

─¡Eso mismo! ¿Viste lo que hiciste? ─regañó a Jimin─. Espero que lo que tengas que decirme sea importante porque si yo perdí mi cita por una tontería me las vas a pagar.

─Tranquila, fiera. La culpa es tuya por decir el nombre que no era ─La chica le dedicó una mirada amenazante─. Pero bueno, lo que te iba a contar es que...

─¿Qué cosa? Ay, no me dejes con la intriga.

─¡Voy a asistir a un prestigioso curso de producción cinematográfica! ─gritó casi más alto que la música, y se ganó un par de miradas curiosas.

─Nah, tú debes estar jugando.

─Pues fíjate que no, el mes próximo empiezo ─afirmó y su amiga se abalanzó sobre él.

─¡Woah, Mimi! ¿Cómo lo conseguiste? ─Jimin fue a responder, pero ella continuó hablando─. Bueno, me dices después. Lo importante es que pronto vas a poder hacer tu propia película ─chilló.

─Si logro pasar todo el curso, así será ─Y ambos amigos comenzaron a saltar de la alegría, esta vez sin importarles quiénes estuvieran mirando.

Y así fue. Jimin logró graduarse con excelentes calificaciones y al año siguiente comenzó la producción de su primera película titulada "All too well", la cual estaba inspirada en su historia con Jungkook y su principal objetivo era ayudar a todos aquellos jóvenes que hubieran pasado por una situación parecida a superar el trauma y a avanzar en la vida, para que así no se pierdan de todo lo hermoso que esta les tiene preparado por estar sufriendo por alguien que no los merece.

El fin.

La ola de aplausos y ovaciones no se hizo esperar, la película había sido todo un éxito. Los cientos de personas que habían asistido al cine para el estreno se pusieron de pie ante aquella obra de arte, muchos con lágrimas en sus ojos... Como Jeon Jungkook, quien durante toda la película sintió un torbellino de emociones en su interior, porque estaba viendo su propia historia de amor en la pantalla grande. Salió de aquel lugar con el corazón en la mano y una lágrima resbalando por su mejilla derecha, preguntándose por qué había dejado ir a aquel muchacho tan valioso y que tanto lo quería. Investigó en lo más profundo de su mente, y lo único que encontró fueron razones superficiales como la diferencia de edad y el criterio de sus amistades, quienes colaboraron en la toma de la decisión. Para ellos, Jimin eran demasiado joven para Jungkook y podía cambiarlo por alguien de su edad en cualquier momento, además de que esa misma diferencia de edad generaba problemas en la pareja, porque Jungkook pensaba en cosas más serias como trabajar y ganarse la vida, y Jimin solo quería hablar de moda, música, películas y cosas de adolescentes. Y aunque ellos tenían un poco de razón en todo eso, no era suficiente para dejarlo ir así como así; sin embargo, él se convenció a sí mismo de que separarse era lo correcto y en su mente no contempló otra solución o si quiera una reconciliación cuando las aguas se calmaran. Se comportó como un verdadero imbécil y ahora, dos años después de todo lo sucedido, se encontraba realmente arrepentido y los sentimientos que creyó muertos y enterrados salieron a la luz al ver esa película tan maravillosa.

El hombre de ahora 35 años decidió dejar de lado todos esos pensamientos y caminó un par de cuadras rumbo a una cafetería, pero se detuvo cuando al mirar a través de los cristales de un local se encontró con el hermoso rostro de Park Jimin. Su corazón dio un salto y su estómago se revolvió, así que se acercó a la puerta para poder escuchar algo de lo que el joven hablaba.

─¿Cómo se siente al saber que su película fue tan aclamada en todos los cines del país? ─le preguntó un reportero.

─Feliz, como nunca en mi vida. Estrenar mi propia película era mi mayor sueño desde muy pequeño, y ahora que lo estoy cumpliendo y estoy llegando tan lejos solo me quedan deseos de seguir creando para seguir cautivando a la gente ─Jungkook sintió escalofríos al escuchar esa voz después de tanto tiempo, y quedó encantado con lo bien que lucía el muchacho.

─Sabemos que la película es basada en tu historia de amor con un hombre un tanto mayor. Podrías decirnos, ¿qué sientes actualmente por ese hombre? ¿Lo amas o lo odias por hacerte sentir tan mal? ─cuestionó esta vez una chica, y Jungkook tuvo miedo de la respuesta.

─No puedo decir que lo amo porque lo nuestro fue hace mucho y él me lastimó demasiado. Sin embargo, aún lo llevo en mi corazón y nunca podría odiarlo, porque fue el primero que me hizo sentir realmente especial y fue el primero que quise más que a mí mismo ─Suspiró─. Espero que eso responda a tu pregunta, linda.

En cuanto escuchó esto una sensación de alivio recorrió todo el cuerpo de Jungkook, quien sonrió inconscientemente y se alejó de aquel local para seguir su camino a la cafetería. En ese instante comenzó a caer la primera nevada del año, así que agradeció haberse puesto aquella bufanda roja que Jimin le había dejado en el estante de la sala.

Porque él también lo recuerda todo muy bien.

Ahora sí, fin :D

Me gustó muchísimo escribir esta historia porque debido a una situación que estoy viviendo actualmente pude desahogarme a través de Jimin y liberarme un poco. Además, la canción terminó gustándome más de lo que imaginaba y si algun@ de ustedes no la ha escuchado se la recomiendo, de verdad (aunque a mí a veces me da ganas de llorar 😔).

Y waos, nunca había escrito un capítulo tan largo, ni siquiera un One shot. Toy orgullosa de mí jeje 💃

Ahora, siendo sincera con ustedes, no estoy muy segura de la historia en sí. Me gustó mucho la trama que le hice y siento que le saqué bastante provecho a la canción y al vídeo de esta incluso... Pero la forma en que la narré, no sé 😔. Es que la escribí tan pero tan rápido que apenas pude revisarla para ver si tenía algún error ortográfico, un diálogo mal escrito, unos párrafos mal separados... No pude pensar mucho en cómo desarrollé las cosas y los personajes.

Pero igual me gustó participar, y aunque no obtenga premio ninguno la historia va a seguir aquí para quien desee leerla. Tal vez de aquí a un tiempito logré corregirla completamente :)

Tonces me despido, desde el fondo de mi corazón espero que este shot les guste y tod@ el que se sienta identificad@ con Jimin pueda avanzar y quererse más a sí mismo 😔🤍

PD: Estoy pensando en hacer un extra cuando termine el concurso, pero es una idea muy remota. Así que si a alguien le gustó lo suficiente como para querer un capítulo extra (un epílogo o la historia de cómo se conocieron Jungkook y Jimin) pueden decirlo en los comentarios sin problemas. De todas maneras iré pensando en alguna que otra idea para que no pase como en Heartbreak 😭🤌

Cuídense mucho y disfruten la lectura. L@s amo! ❤️

Emy ✨️