Aquí esta mi participación en este gran fest, espero que les guste y disfruten la lectura. No se olviden de votar, comentar o dejar una reacción :D

Sigan al pendiente de las demás historias que serán publicadas, el otro día les compartí un enlace de un grupo de Facebook donde a diario se comparte el link correspondiente de cada publicación.

Y por último, gracias a @BBHPCY-6104 por permitirme ser parte de este bonito fest <3

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Chanyeol se encuentra sellando una caja más, pero aún tiene trapos que guardar. Está desesperado por terminar, quiere irse ya a su nuevo hogar y nunca regresar a la que fue su casa por muchos años. Entonces un intruso aparece en la puerta, ya no le sorprende que Sehun entre y salga como si nada, por algo es su mejor amigo.

—¿Vienes a ayudar?

—¿Tanta prisa tienes por mudarte?

—¿No es obvio?

Sehun se acuesta sobre el colchón desnudo y se dedica a observar a su amigo armar una caja nueva y comenzar a llenarla.

—Que lento eres —dice al levantarse y sacar los cajones de la cómoda. Los vacía sin cuidado, haciendo que su trabajo se duplique, esa ropa está doblada, sólo debía pasarla a una caja o maleta.

—Gracias Sehun.

—Cuando quieras.

Chanyeol aparta algunas prendas para terminar con la caja, los dos lo ven al mismo tiempo y luego se miran, Sehun intenta ser más rápido para tomar ese objeto olvidado y ocultarlo, pero Chanyeol ya lo vio. Así que Sehun no tiene otra opción más que volver a dejarla en la cama.

—Creí que habías devuelto todo

—Yo también —pero la verdad es que no recuerda si lo olvidó o dejó la bufanda a propósito para recordarlo.

El objeto olvidado en el cajón es una bufanda que le pertenece (o pertenecía) al ex novio de Chanyeol, Baekhyun, con quien salió alrededor de tres meses.

Mira la bufanda, los recuerdos comienzan a correr en su cabeza creando una avalancha.

—Deja eso, se supone que ya lo superaste —Sehun vuelve a tomarla para tirarla a algún rincón.

"—Si, se supone que lo hice", piensa Chanyeol. Un suspiro bastante profundo sale de su boca y se obliga a continuar con su labor.

—Es bueno que por fin estés saliendo de este lugar, la casa es muy grande para ti —su amigo actúa como si lo anterior no hubiese ocurrido, continúa ayudándolo doblando la ropa—. Estarás mejor en ese departamento donde pasarás el resto de tu solitaria vida a menos que decidas ir a un asilo, como consuelo piensa que te visitaré todos los días.

—Tenemos casi la misma edad, ten cuidado con tus bromas.

La tensión que surgió se pierde conforme la conversación sobre su trabajo y deportes avanza. Sehun se va dos horas después feliz por haber ayudado a su mejor amigo, se compromete a participar desempacando en el nuevo departamento y luego desaparece.

Una vez solo, Chanyeol se detiene a mirar su habitación que si no fuera por las cajas estaría completamente vacía. Su vista se detiene en la bufanda, camina hasta ella para recogerla, entonces se sienta en el suelo, recargando su espalda en la cama.

—¿Aún lo recuerdas Baekhyun? —pronuncia casi como un susurro.

. . .

—Entonces solo digo tu nombre y ya —repitió.

—Si, Chanyeol. El encargado ya sabe por qué vas, por favor.

—Ok, te llamaré cuando lo tenga.

Chanyeol cortó la llamada para entrar a la librería, fue al mostrador para pedir el encargo de su mejor amigo. Se acercó a unas mesas llenas de libros para aligerar la espera, consideró buena idea buscar algún nuevo libro para él, posiblemente encontraría nuevas cosas que agregar o modificar para sus clases, pues era maestro en una universidad (al igual que su amigo). Entonces, mientras leía los títulos alguien llegó a su lado, lo miró por inercia, era un estudiante universitario que buscaba ayuda para los exámenes.

Justo cuando planeaba moverse para dejarlo elegir a sus anchas, el empleado lo llamó y se dirigió a la pila de libros recientemente colocados en el mostrador.

—Sehun me dijo que solo venía a recogerlos.

—Así es, ya están pagados.

El hombre los metió en una caja y una vez sellada, Chanyeol agradeció para irse. Después volvería a buscar algunos libros para él.

Justo cuando salió del establecimiento alguien lo detuvo agarrándolo del brazo. Era el mismo chico con el que coincidió antes.

—¿Si?

Lo vio titubear hasta que terminó de reunir toda su valentía.

—Me llamo Baekhyun —dijo con la cabeza agachada, soltó su brazo y por fin se atrevió a mirarlo—. Me preguntaba si... ¿podría obtener su número?

Chanyeol pudo mirarlo mejor, antes solo fue capaz de ver su perfil, ahora ya estaba seguro de que el chico era realmente hermoso con sus rasgos finos y su piel blanca. Una sonrisa apareció entonces.

—¿Quieres mi numero?

—Si.

Tuvo intenciones de hacer más preguntas, pero estaba seguro que posiblemente lo avergonzaría y se marcharía, así que no esperó más y le pidió su celular para poder escribirlo.

—Gracias —dijo Baekhyun. Se fue demasiado rápido y con las mejillas rojas, estaba seguro de que no lograría obtener ese teléfono pero lo hizo.

—Esperaré tu mensaje —Chanyeol elevó un poco el volumen de su voz para asegurarse de que lo escuchara. Se fue contento a su auto.

Había algo en ese chico que lo logró cautivar y esperaba tener la oportunidad de volver a verlo por lo menos una vez más.

El dichoso mensaje llegó horas después, cuando se preparaba para dormir. Baekhyun intentó jugarle una broma escribiendo "Felicidades, ha ganado la lotería", pero enseguida se arrepintió y mandó un "Lo siento, soy Baekhyun. Nos vimos en la librería". A lo que Chanyeol respondió "Realmente he ganado la lotería, eres tú". Hablaron por varias horas, algunas preguntas tontas y sin importancia para al final agendar una cita tres días después.

Se encontraron en un restaurante, ambos estaban emocionados, la atracción había surgido con su encuentro en la librería y se enamoraron un poco ese día, Chanyeol se comportó de tal manera que Baekhyun se convenció de que había hecho lo correcto días atrás.

—¿Cuántos años tienes, Baekhyun?

—21, ¿y usted? quiero decir, ¿y tú?

—Cumpliré 33 en noviembre.

—Ohh.

Ciertamente, Chanyeol no parecía mayor, su apariencia lo hacía pasar como alguien un poco más joven, quizá 30 o hasta 29 años, pero a lado de Baekhyun, esos 12 años eran evidentes y muy difíciles de ignorar.

Pero no le importó a ninguno de los dos. Baekhyun dijo "si" cuando Chanyeol sugirió ir al cine el fin de semana. Continuaron saliendo casi a diario a partir de entonces y poco después comenzaron oficialmente una relación.

A veces solo subían al auto de Chanyeol y él conducía por horas, sin un destino aparente, su único propósito era alejarse de todo y todos para encerrarse en su propia burbuja donde la magia de su amor los rodeaba. Baekhyun estaba tan ilusionado que intentaba comportarse lo más maduro posible para no ocasionar problemas, así como Chanyeol buscaba ser paciente con su novio para que las cosas funcionaran.

El día que lo llevó a su casa por primera vez hacía mucho frío, por eso Chanyeol no encontró ningún otro lugar mejor que su propio hogar. A Baekhyun le gustó mucho el lugar antes de haberlo recorrido por completo, la calidez del lugar lo contagió. Su abrigo lo dejó en el sillón y su bufanda en una silla. Chanyeol le mostró el resto de su casa.

—Es como la casa de mis sueños —comentó el menor, logrando agitar aún más el corazón de su novio.

—Las puertas están siempre abiertas para ti, puedes venir cuando quieras.

Ese día hicieron el amor por primera vez, Baekhyun dejó lo único que le quedaba de su inocencia en la cama de Chanyeol y se entregó a él sin dudarlo. Hicieron tantas promesas ese día y a partir de ello sus citas comenzaron a realizarse ahí.

Baekhyun empezó a quedarse algunas noches, diciéndole a sus padres que estudiaría con sus amigos. Ellos no tenían idea de que sus estudios habían pasado a segundo plano porque Chanyeol era el centro de su universo.

Hasta que un examen muy importante estaba por ser aplicado y Baekhyun no tuvo más opción que encerrarse en su habitación para estudiar, no le había puesto tanta atención a sus clases que no encontraba la manera de comprender el temario.

Entonces recordó que su novio era maestro y lo llamó para pedirle ayuda.

—Hola amor, creí que estabas ocupado —dijo Chanyeol al atender.

—Si, sigo estudiando pero no entiendo. ¿Crees que el grandioso profesor Park podría explicarme algunas cosas?

—No tengo tiempo, mis compañeros me esperan.

—Ahh, entiendo es que tengo dudas con un par de temas y se me ocurrió que tal vez podrías ayudarme con eso y después podríamos hacer algo más, estos días casi no nos hemos visto.

—Lo siento, pero no puedo, de hecho estoy manejando en este momento.

—Está bien, no te preocupes. Lo entiendo, pero, ¿crees que podrías pasarme el número de alguno de tus amigos maestros para que les haga un par de preguntas? No les molestaría mucho, con una pequeña explicación me basta.

Estaba tan preocupado y ansioso por resolver sus dudas, él solo buscaba una salida. No imaginó que estaba por ocasionar una pelea. Chanyeol frenó de repente, pudo escucharlo perfectamente, antes de que pudiera preguntar si había ocurrido algo el mayor habló.

—¿Por qué quieres hablar con mis amigos? —de por sí su tono expresaba un poco de molestia, pero al realizar esa pregunta demostró estar muy enojado.

—Yo solo quiero que alguien me explique un par de cosas, se me ocurrió que posiblemente alguno de ellos que a veces mencionas podría ser tan amable conmigo, quizá no hoy, pero si mañana temprano. Tú estás ocupado, pero si crees que es mala idea molestarlos a ellos lo acepto y ya —suspiró—. Fue una imprudencia de mi parte, discúlpame. No te enojes, yo so-

Le colgó, no lo dejó terminar. Así que Baekhyun pasó las siguientes horas preguntándose cómo podría solucionar lo que hizo, antes de eso habían discutido ya algunas veces por diferencias de opinión, cosas que solucionaban en un rato, nada a ese nivel.

Chanyeol no lo llamó ni buscó, lo ignoró un día completo, ocasionando que Baekhyun enloqueciera porque no estaba seguro de qué había hecho mal o qué límites había cruzado accidentalmente.

A la mañana siguiente Chanyeol le envió un mensaje de buenos días demasiado dulce donde también le avisaba que esa tarde visitarían a sus padres. Pasó a recogerlo puntualmente, Baekhyun salió vistiendo lo mejor que encontró en su armario, pero a los ojos de Chanyeol no era adecuado, así que lo mandó a buscar algo mejor o en otras palabras, algo que lo hiciera ver más maduro.

—Tomé algunas cosas de mi hermano, creo que está bien.

—Si, te ves mejor —fue lo único que dijo al respecto.

La madre de Chanyeol los recibió con un abrazo, Baekhyun estaba nervioso por lo que representaba conocer a los padres de su novio, sentía que estaban dando otro paso más en el desarrollo de su relación. Aunque la preocupación por su discusión del otro día lo mantenía distraído.

Mientras esperaban a la hermana de Chanyeol para cenar, su madre aprovechó para mostrarle a Baekhyun el álbum de fotos ignorando las súplicas de su hijo.

Las mejillas de Chanyeol se tornaban rojas conforme avanzaban con el álbum, al final no le importó avergonzarse con tal de mantener distraído al chico y al mismo tiempo acercarse a él, pero algunas de las fotos eran realmente vergonzosas como aquella donde estaba sentando en el baño entrenador. Se rindió porque en el fondo le gustaba que Baekhyun conociera parte de su pasado porque estaba seguro de que él era su futuro.

La cena pudo resumirse como un éxito, todos la pasaron bien. De camino a la casa de Baekhyun, él intentó sacar su llamada del otro día, cuando se dio cuenta que solo lo haría enojar y no resolverían nada cambió el tema.

—¿Quieres conocer a mi familia la próxima semana? —lo dijo casi sin pensar que cuando cayó en cuenta de sus palabras comenzó a temblar.

—Claro que sí, estoy ansioso por hacerlo.

—¿En serio?

—Por supuesto, tu dime cuando y yo estaré aquí.

Chanyeol comió con los Byun un miércoles varios días después de haberse realizado la invitación, el día que el horario de Baekhyun terminaba temprano. Se ganó a toda la familia, así como Baek había hecho con su familia. Aunque en un principio se sintió muy nervioso por lo que podría ocurrir, iba a presentarse con los padres de un chico de veintiún años cuando él era incluso más grande que su hijo mayor, porque si, el hermano de Baekhyun apenas se acercaba a los treinta. Les aseguró que cuidaría bien de su hijo y jamás le haría daño, podían estar seguros de que Baekhyun con él estaba en buenas manos.

El viernes de esa misma semana acordaron visitar un parque que Baekhyun estaba ansioso por visitar ya que lo consideraba una joya escondida en la ciudad donde podrían encontrar cosas bonitas y deliciosas. Chanyeol llegó puntualmente al lugar, por cuestiones de distancia y tiempo era más conveniente verse ahí. Esperó un rato antes de llamarlo y escribirle mensajes, se preocupó un poco porque no había forma de comunicarse con él. Las horas siguieron pasando y el sentimiento se fue transformando hasta enfurecerse por completo, la luna brillaba en el cielo ya, subió a su auto para ir a su casa, se estacionó algunos metros lejos para poder analizar primero la situación.

Entonces lo vio bajar de un taxi completamente ileso, antes de que Baekhyun pudiera entrar a su casa, Chanyeol bajó de su auto y lo detuvo agarrándolo del brazo.

—¡Chanyeol! Me asustaste.

—¿Dónde estabas? ¿Por qué no respondiste mis llamadas?

—Salí con mis amigos, lo siento pero cuando intenté avisarte no me respondiste y después me quedé sin batería.

—Sin batería, que conveniente. Así que tú estabas "divirtiéndote con tus amigos" mientras que yo pasé horas en un estacionamiento esperándote. Dime con quién estabas.

—¿Esperándome? Pero si yo... teníamos una cita, cierto. Lo olvidé.

—Ya me di cuenta, no tienes que decir lo obvio.

Su discusión fue tan fuerte que lograron avisar a algunos vecinos y a los padres de Baekhyun, en el momento en que Chanyeol vio que iban a salir de su casa gritó por última vez que no le creía la historia que le había inventado, subió a su auto dispuesto a irse. Baekhyun, preocupado por lo pudiera ocurrir, subió al asiento del acompañante.

—Escúchame.

—No tienes que continuar con esto si ya no quieres, déjame, estoy seguro que es lo que deseas hacer.

—No Chanyeol, no. Solo me equivoqué esta vez, no lo volveré a hacer.

—Bájate.

—Escúchame primero, si viniste hasta aquí fue por una explicación, permíteme que te la dé. ¿Dónde está esa promesa de siempre escucharnos para arreglar malentendidos? Chanyeol, te juro que intenté avisarte.

No le respondió, simplemente puso el auto en marcha y condujo a su casa. Una vez allá Baekhyun bajó al mismo tiempo, atrapó en el aire las llaves del carro que Chanyeol aventó en su dirección y entró a su casa sin darle oportunidad de seguirlo.

Chanyeol escuchó los golpes de su novio en la puerta, esperando que le abriera. No se movió de su habitación, pasó una hora para que se rindiera, entonces se asomó por la ventana y lo vio alejarse de la casa hasta detenerse frente a su auto, Baekhyun miró algo en su celular hasta que por fin desactivo la alarma y entró al vehículo.

Esa noche durmió ahí, Chanyeol lo comprobó a la mañana siguiente cuando salió para irse a trabajar. Hizo una excepción en su rutina y fue a la universidad en taxi. No tenía ánimos de lidiar con su novio tan temprano.

A diferencia de la última vez que discutieron casi a ese nivel, Chanyeol no lo buscó días después y actuó como si nada hubiese ocurrido, al contrario, se mantuvo firme con su molestia. Baekhyun se saltó algunas clases para ir a la universidad donde trabajaba, pero solo pudo hablar con uno de sus amigos.

—Eres Baekhyun, ¿cierto?

—Eh, sí. Estoy buscando a Chanyeol pero no lo encuentro.

—Fue a buscar nuestra comida, es el más tonto de todos y siempre le toca ir. Soy Sehun, no se si te haya contado de mí.

En realidad no, pero en ocasiones lo escuchaba mencionar su nombre.

—¿Van a salir o algo? Encuentro raro que estés aquí, me sorprende un poco de Chanyeol.

—Él no sabe que vine, quise sorprenderlo.

Se fue antes de que Chanyeol regresara y Sehun le comunicó a su amigo que su novio estuvo ahí. De primera impresión quiso llamarlo, pero al recordar lo que hizo se calmó. Más tarde lo encontró frente a su casa y ya sin ánimos de pelear lo dejó entrar para que se disculpara.

Lo perdonó con la condición de que no volviera a ocurrir un incidente así. Después ya estaban acostados en un sillón tapados con una manta, abrazados para no sentir frío.

—Tu cumpleaños es este fin de semana —comentó de repente Baek—. ¿Tienes planes para ese día? Pensaba que podríamos hacer algo especial, en realidad estoy preparando algo, pero quiero saber si estás libre.

—No estoy seguro, normalmente ceno con mis padres o salgo con mis amigos. Te aviso, ¿estás de acuerdo?

—Por supuesto. En caso de que no puedas verme ese día podemos salir al siguiente, cuando sea.

Aunque no lo demostró, Chanyeol estaba emocionado con la simple idea de pasar su cumpleaños con Baekhyun, todo un día a su lado era lo mejor que podía obtener ese día. Desafortunadamente las cosas no resultaron como quiso, sus amigos exigieron que estuviera presente ya que contarían con la presencia de un viejo amigo que vivía en el extranjero y venía de visita exclusivamente para celebrar su cumpleaños. Así que su agenda para ese día se resumió en tres actividades principales, por la mañana reunirse con sus amigos y después ir a comer en casa de sus padres, pasaría por Baekhyun para que estuviera presente y más tarde pudieran irse para celebrar solo los dos.

Sin embargo sus amigos y el alcohol lo consumieron, cuando se despidieron ninguno era capaz de manejar su propio vehículo y contratando un conductor llegó a casa de sus padres, donde apenas tocó el sillón se quedó dormido y despertó horas después, ya de noche.

Cenó con sus padres y hermana, estuvo con ellos hasta muy tarde y al final se fue a su casa, donde se llevó la gran sorpresa de que Sehun preparó algo más. Ninguno estaba completamente recuperado de su hazaña de la mañana pero aprovecharon esa oportunidad que muy pocas veces se daba.

Chanyeol se olvidó por completo de Baekhyun, quien puntualmente se preparó y se sentó en las escaleras que conducían a la segunda planta de su casa donde tenía de frente la puerta y era capaz de ver si alguien se acercaba. Las horas pasaron y él en ningún momento se movió de ahí, por lo menos no por voluntad propia.

—Que bueno que no era tu cumpleaños —le dijo su papá en una de las tantas veces que pasó junto a él.

Cerca de la medianoche terminó con su espera y fue al refrigerador donde estaba listo el pastel que había comprado para Chanyeol. La casa estaba en completa oscuridad, la única iluminación que tenía era la del refrigerador al tener la puerta abierta. La dejó así y se sentó ahí, sin importarle el frío que podría sentir. Comió parte del pastel mientras lloraba.

Su padre tenía razón, qué bueno que no era su cumpleaños sino hubiera muerto en ese mismo instante.

Al encontrarse de esa manera, sintiéndose tan miserable, Baekhyun pudo terminar de entender cómo funcionaba su relación con Chanyeol. Él podía desaparecer y olvidarse de sus compromisos, pero Baekhyun no, si continuaba tolerando esos tratos algún día podría terminar aun mas roto de lo que ya estaba, pero no fue capaz de tomar la decisión de romper con él, lo amaba tanto que le dolía más eso.

Chanyeol despertó al día siguiente de su cumpleaños sintiéndose fatal, había ingerido en un día más alcohol del que había bebido en años. Al revisar su celular lo primero que encontró fue el típico mensaje de buenos días de Baekhyun. Recordó entonces que lo había dejado plantado ayer. Abandonó rápidamente su cama para darse una ducha rápida y salir a buscarlo. Intentó llamarlo en el camino, pero el menor jamás le respondió.

Se sentía muy mal por haber hecho lo que hizo, ya tenían un plan y lo arruinó. Al llegar a la casa de los Byun fue su padre quien abrió.

—Mi hijo está durmiendo.

—Lo imaginé, es que ayer no pude venir y...

—Y él te estuvo esperando hasta muy tarde, jamás apareciste y por lo visto ni siquiera avisaste.

—No tengo excusa, lo que hice no tiene perdón, no tengo idea de cómo se sintió y...

—Yo sí y por eso te pido que te retires de mi casa, le diré a Baekhyun que estuviste aquí para que te llame o busque si quiere, por mi parte y de mi esposa estamos molestos porque aunque entendemos que en una relación hay altibajos, esto ha pasado el límite. Tú nos juraste que jamás veríamos llorar a nuestro hijo por tu culpa y no lo cumpliste.

Ahora fue el turno de Baekhyun de evitarlo y a Chanyeol le tocó esperarlo fuera de su universidad y seguirlo a los lugares que visitaba frecuentemente, menos en su casa, su padre le había dejado claro que no lo quería ver por ahí por un tiempo.

Una semana después tuvo la oportunidad de hablar con él, estuvo a punto de arrodillarse para implorar su perdón, pero Baekhyun solo le dijo que para la próxima le avisara si no podía verlo. Terminaron el día en la casa de Chanyeol donde hicieron el amor para simbolizar su reconciliación, pero Baekhyun no fue el mismo después de todo, su comportamiento cambió y Chanyeol lo aceptó porque se sentía culpable. Intentó todo lo que estuvo en sus manos para conseguir su perdón verdadero, no soportaba la forma en que lo miraba, y es que Baekhyun aún no podía superar lo que había pasado, pero luchaba por hacerlo para poder continuar casi como si nada hubiese pasado y así poder amarse por mucho tiempo más.

Y cuando se sintió capaz de ver a Chanyeol sin tener que llorar apenas llegara a su casa, Chanyeol llegó a su límite, ya no se sentía a gusto con él ni soportaba implorar por un perdón como si hubiera cometido un crimen, por eso lo citó en su casa para romper.

—¿Por qué? —preguntó Baekhyun al terminar de escucharlo.

—Deberías vivir libremente, eres joven y tienes mucho qué hacer. No pienso entrometerme más en tu vida.

—No quiero, realmente no entiendo tu decisión, si, últimamente no he estado bien pero ya me siento mejor, nuestra relación aún tiene futuro, podemos superar esta crisis.

—Esto ya no es lo mismo, puedo ver en tu cara que ya no estás bien conmigo y yo... yo ya me cansé de ti y tu inmadurez. Tal vez si fueras mayor, si tuviéramos la misma edad las cosas serían diferentes.

—Lo nuestro era como una obra de arte hasta que lo arruinaste, tu acabaste con esto y ahora me estás culpando. ¿Por qué, Chanyeol? Te amo, te amo Chanyeol, no me hagas esto. ¿Estoy pidiendo demasiado?

—Yo no Baekhyun, ni siquiera llevamos tres meses juntos, no puedes amarme en tan poco tiempo.

—Pero lo hago, ¿no son claras mis palabras? Escúchame y créeme. Te amo.

—Lo siento mucho, esto es lo mejor, tanto para ti como para mi.

—Lo mejor para mi eres tú.

—No es así Baekhyun, no te engañes.

—¡Te odio! Eres tan cruel conmigo. Me arrepiento de haberte detenido aquel día.

Lo dejó irse y se arrepintió en seguida, quiso correr detrás de él y bajo la nieve decirle que también lo amaba, pero no fue capaz de moverse ni un centímetro. Se obligó a creer que esa relación era un error y había sido correcto terminarla antes de que fuera aún más difícil.

Sin embargo, por varios días intentó comunicarse con él, lo llamó infinidad de veces pero él jamás respondió, Baekhyun estaba tan destrozado que ni siquiera era capaz de dejar de llorar.

Aceptó eso como el fin, Chanyeol reunió todas las cosas de Baekhyun que encontró en su casa de todas esas ocasiones que se quedó o pasaba de visita, las metió en una caja para poder mandárselas, pero cuando encontró su bufanda, aquella que dejó olvidada la primera vez que estuvo allí y que muchas veces se olvidó llevar, no fue capaz de ponerla con las demás, aun tenia su aroma impregnado y le hacia recordar con más intensidad aquellos días ahí, en especial el primero donde lo hizo suyo por primera vez. La conservó como un recuerdo de lo que tuvieron, como si no tuviera todos los recuerdos frescos en su mente.

Y así fue como todo terminó... aparentemente.

. . .

—Chanyeol olvidé que... ¿Chanyeol?

Sehun aparece nuevamente y cuando ve a su amigo en el suelo no duda en acercarse. Lo mira llorar y abrazar la bufanda.

—¿Qué pasó ahora?

—Aún lo extraño, ver esta bufanda me recordó todo lo que vivimos, todo lo que fuimos. Baekhyun sigue en mi mente y en mi corazón, estoy seguro que lo estará hasta el día que muera.

—No Chanyeol, no. Ya estabas bien, rayos, todo por esa cosa. Debí haber buscado bien cuando me dijiste que habías devuelto todas las cosas que dejó aquí.

—¿Lo dañe tanto? ¿Qué fue lo que le hice? Yo creí que dejarlo ir era lo mejor que podía hacer, me precipité tanto al tomar esa decisión.

—Fue hace más de cuatro años, ya supéralo.

—Es que siento que perdí lo mejor que había tenido en toda mi vida. Él era perfecto, era tan bueno y luego cambió, yo lo cambié ¿verdad? Fui yo quien lo dañó y lo intenté solucionar demasiado tarde. Este es mi castigo por no valorar a quien me amó y por jamás haberle dicho eso, Baekhyun nunca escuchó de mi boca un te amo, al contrario, casi me reí de él cuando me lo dijo.

Escuchar por primera vez todo lo que había guardado durante ese tiempo es un tanto tranquilizador para Sehun, él ha estado acompañándolo de cerca esos años, lo ha visto sonreír como si nada hubiera pasado y llorar como si lo estuvieran matando, pero jamás lo había escuchado hablar, expresar con palabras su sentir. Espera que eso sea suficiente para cerrar el capítulo de su vida llamado Baekhyun, pero en el fondo sabe que no es así.

—Debes dejarlo ir, tu fuiste el tonto que lo terminó y te digo tonto porque, pues, no tomaste a decisión correcta.

—Y no dejo de arrepentirme, jamás se podrá llenar el vacío que Baekhyun dejó en mi.

En esos cuatro años que pasaron, por un tiempo Chanyeol no supo nada de Baekhyun, fue como si hubiera desaparecido o como si jamás hubiera existido. Luego de un tiempo lo vio por casualidad en la calle, pero no fue capaz de aparecer frente a él porque lo vio bien, feliz, como si su historia jamás hubiese ocurrido.

Chanyeol si tiene razón en una cosa, él rompió a Baekhyun, lo destruyó a tal punto que ya no pudo volver a ser él de antes y después de todos esos años también recuerda muy bien lo que vivió y sintió con Chanyeol, pero a diferencia de él, ya está un paso más cerca de superarlo pues está convencido de que hizo todo lo que pudo y dio todo de él. No como el loco que aún llora al ver una prenda que jamás devolvió.