08
🕺
Seokjin guardó su ropa dentro de su mochila y se miró en el espejo de su habitación. Era lo bastante temprano para salir pero necesitaba hacerlo, el ambiente en su casa no era el más alentador.
Su puerta se abrió y Mingyu asomó su cabeza.
—Mamá dice que vengas.
Seokjin tomó su mochila y apagó la luz. Caminó hasta el comedor donde estaban todos los Kim reunidos.
—Ya me voy —dijo mirando hacia un punto cercano, no quería cruzar miradas con ninguno de ellos, no quería que vieran a través de él.
—¿Te vas a quedar con tu amiguito el ricachón?
—Taehyung —murmuró Seokjin —si, ahí estaré.
—Que sea por toda la semana —dijo Hye Soo —van a venir a arreglar las ventanas y nosotros no estaremos aquí.
Seokjin asintió, no tenía idea porque le estaban informando, eso nunca pasaba pero le daba igual la verdad. Ellos nunca se habían preocupado realmente por él por lo que a él tampoco le debía importar que pasaba.
Se puso su mochila y tomó su chaqueta de la percha a un costado de la puerta, cerró detrás de él y achicó sus ojos cuando el sol de mediados de diciembre lo cegó por unos segundos. La casa en la que vivía era oscura por lo que siempre tenía que ajustarse a los potentes rayos del sol cuando salía.
Guardó su chaqueta dentro de la mochila y tomó el mismo recorrido de siempre y mientras caminaba pensó en las pocas ganas que tenía de asistir a la fiesta de Taehyung, aunque también era la suya ya que iban a celebrar sus cumpleaños aún si el suyo había pasado hace dos semanas y el de su amigo era finalizando el mes.
De todas formas eso no importaba, Taehyung había estado emocionado planeando todo y por supuesto que no podía decirle que no a ese entusiasmo.
El bus no demoró y él se subió, después de pagar tomó asiento al final y sacó su teléfono. Le envió un mensaje a Taehyung y lo volvió a guardar. El trayecto fue más rápido de lo normal y Seokjin suspiró al ver la hora, pero no quería caminar por allí para hacer hora. Ajustó su mochila en sus hombros y se dirigió al lugar donde se daría la fiesta.
Divisó la enorme casona apenas giró en la esquina, el lugar se veía enorme, gente entraba y salía mientras él se acercaba. Paró justo en la reja y miró hacia la entrada, no veía a nadie que conociera por lo que no estaba seguro si entrar o no.
—¿Que haces ahí?
Seokjin se giró ante esa voz y sonrió cuando vio a Namjoon sacando algunas cajas de su camioneta. Se acercó de inmediato para ayudarlo.
—Llegué muy temprano.
—Nah, estás justo a tiempo, Taehyung va a estar contento de verte.
—Si —Seokjin sintió sus mejillas ponerse calientes. El recuerdo del beso rechazado el dia de la graduación le hacía doler su estómago. —¿Dónde llevamos esto? —preguntó a cambio.
—Estas cajas tienen alcohol, no mucho porque claramente no queremos que las cosas se aloquen.
Jin se rio —suerte con eso.
Namjoon se encogió de hombros —sé de que se tratan estas fiestas pero espero el mejor comportamiento de ti... De Taehyung también pero ya sabemos como ese niño a veces hace las cosas difíciles.
—No es tan malo —Seokjin comenzó a caminar siguiendo al hermano de su amigo. —Está muy emocionado por hoy.
—¿Y tú?
Seokjin se encogió de hombros mientras entraban a la gran casona —no me emocionan las fiestas la verdad pero sí él es feliz entonces está bien para mí.
Namjoon lo miró de una manera extraña y para no ponerse nervioso Seokjin miró hacia otro sitio. No solía hablar de Taehyung con nadie por lo que se sentía un poco expuesto al hacerlo.
—¡Jinnie!
Taehyung lo llamó y él caminó de inmediato a su encuentro.
—¿Llegué muy temprano?
—No, bobo. Ven, trae esa caja.
Seokjin lo siguió y miró la decoración que no era mucha pero de todas formas habían algunos globos por aquí y por allá.
La cocina era grande y había mucha comida, paquetes de papas fritas cerrados y muchos otros aperitivos. Varias botellas de vodka, cerveza y hasta un whisky pudo apreciar mientras dejaba la caja sobre la encimera de madera oscura.
—Mis papás se fueron hace media hora y estamos sacando el licor. A mamá le iba a dar un infarto si veía todo.
—¿Crees que ella no sabe que habrá alcohol?
—Obvio si, pero es diferente a que lo vea, ¿no? —Taehyung le pegó un suave codazo antes de girarse hacia Namjoon que estaba sacando las botellas de la caja. —¿Vas a traer a tu novia?
—No es mi novia.
—Es tu amiga, cierto.
—Nos estamos conociendo —Namjoon dejó una última botella y los miró.
—¿Y la otra chica?
Jin miró a Namjoon con curiosidad, el mayor nunca hablaba de su vida privada, de hecho, nunca hablaba demasiado, no con él al menos por lo que era un poco divertido ver cómo Taehyung trataba de sacarle información de alguna manera.
—Es complicado y no quiero hablar de eso. Guarda el alcohol, no queremos que los hormonales de tus amigos se lo tomen todo.
—No son mis amigos.
—Lo que sea, recuerda que vienen mis compañeros de Rugby.
Seokjin miró a Taehyung y luego a Namjoon. —¿Todos ellos?
—¿Interesado? —Namjoon le sonrió —eres mayor de edad pero no lo suficiente, te mantendré vigilado.
Seokjin sonrió negando con su cabeza —no preguntaba por nada en especial, solo curiosidad.
—Si, claro. —Namjoon volvió a sonreír —hay un par que tienen veinte, si te interesa te los puedo presentar.
—De ninguna manera —Taehyung miró a su hermano con su ceño fruncido —tus amigos son unos idiotas.
—Deja que Seokjin lo decida —Nam lo miró de nuevo, diversión en todo su rostro —¿que te parece Seokjinnie?
—Podría resultar —Jin miró a Taehyung de reojo no tan seguro de haber dado la respuesta correcta y es que Taehyung suspiró fuerte y salió de la cocina.
Namjoon se echó a reír y también se alejó por lo que Seokjin miró a su alrededor y queriendo ayudar en algo buscó una de las cajas vacías y guardó todos los aperitivos. Los ordenó por tamaño para que fuera más fácil de sacar cuando se necesitaran. Y mientras hacia eso alguien comenzaba con la prueba de sonido, el volumen era lo suficientemente alto para molestar.
—Jinnie.
Seokjin dejó de hacer lo que estaba haciendo y se giró. Taehyung estaba cerca de la puerta. Se acercó lo suficiente para escucharlo y es que el ruido del lugar era ensordecedor.
—¿Pasó algo?
—No, pero quiero mostrarte algo antes que lleguen los demás.
—¿Que es?
—Ven.
Entonces Seokjin lo hizo, siguió a su amigo por un pasillo amplio e iluminado, habían cuadros de animales en las paredes pero no podía distinguir muy bien de que se trataba ya que Taehyung caminaba demasiado rápido.
Habían varias puertas cerradas, Seokjin no sabía que había detrás de ellas pero asumió que serían los baños.
—¿Dónde vamos?
—Aquí.
Se detuvieron frente a una de las puertas y Taehyung lo miró para luego sacar una llave y meterla en la cerradura. La puerta se abrió a los segundos después. Era una habitación y su decoración era muy diferente al resto de la casona que se veía más como una antigüedad.
Entraron a la habitación y Taehyung cerró la puerta detrás de él. Seokjin se adelantó a él mirando todo con detalle, desde las cortinas color crema, la mullida alfombra gris en medio de la habitación hasta la enorme cama en medio de esta.
—Hay tres habitaciones pero no sé van a abrir... Solo pedí la llave de esta, por seguridad ya sabes. Puedes dejar tu mochila aquí.
—¿Seguridad? —Jin se quitó su mochila y la dejó a un costado de la cama.
—Si, en caso de que uno de los dos se sienta mal o lo que sea.
—O lo que sea —repitió Seokjin sin dejar de mirar la cama. De pronto a su mente llegaron muchas imágenes de Taehyung llevando a cualquier chico a esa habitación para disfrutar del lugar.
—Namjoon dijo que estaba bien si la usamos para descansar en caso de que la necesitemos.
—No creo que vaya a resultar... No si traes a algún chico para pasar las horas.
—No haré eso.
—Nunca se sabe.
—No lo haré, es lo que estoy diciendo. Además, no soy yo quien está interesado en deportistas universitarios.
Seokjin lo miró de inmediato, había algo en ese tono que le molestó un poco. —¿Estás celoso?
—No, solo que me parece raro.
—¿Que te parece raro? —Jin se giró hacia su amigo.
—Déjalo, ¿si?
—No, no lo voy a dejar porque siempre tienes este tipo de comentarios y ya no los quiero escuchar.
—Los amigos de Nam son unos imbéciles.
Seokjin alzó una de sus cejas y dio un paso más adelante. Taehyung desvió su mirada hacia la pared mordiendo su labio.
—Bueno si eso es así o no lo averiguaré en la noche.
Taehyung suspiró y se encogió de hombros, dijo algo entre dientes pero Seokjin ya había tenido suficiente y salió de la habitación. Se dirigió a la entrada de la casona y salió de esta, se sentó en la banca de madera que estaba a un costado y se quedó allí mientras a lo lejos escuchaba como se hacían los últimos arreglos.
No supo cuanto rato estuvo allí mirando hacia la nada con su cerebro apagado y sin ganas de hacer nada. Unos pasos sonaron cerca de él y luego alguien se sentó a su lado.
—¿Quieres uno?
Seokjin miró al recién llegado y negó —no fumo.
—La fiesta ya empezó y estás aquí.
—No tengo ganas de entrar.
—Yo tampoco la verdad, solo vine porque Taehyung me cae bien y por el alcohol, por cierto, te traje esto.
Seokjin recibió una lata de cerveza y se sintió más relajado que minutos antes. Metió una de sus manos en el bolsillo de su chaqueta y miró a su ex compañero de instituto.
—¿Y tu novia?
Mark hizo una mueca con sus labios —discutimos ayer y se enojó por algo en lo que no tuve culpa.
—Lo lamento.
—Es celosa, me cela con todo el mundo, cualquier chica que conozca, mis compañeras de trabajo —Mark suspiró fuerte —es una chica linda pero ya no aguanto sus escenas.
Jin asintió lentamente, él había tenido un par de novios en los últimos meses, ninguno tan importante como Felix pero sí había conocido a un par de tipos y todos al menos una vez lo habían celado con Taehyung.
—¿Vas a romper con ella?
—Puede ser, quizá conozca hoy a alguna que quiera acompañarme en mi sufrimiento.
—Si se entera habrá escándalo.
—Puede ser, de todos modos habrá aunque sea uno.
—¿Por qué?
—Siempre hay.
Seokjin tomó de su cerveza y mucho más tranquilo miró por el jardín, la noche estaba llegando así como los invitados a la fiesta.
Con su molestia olvidada se puso de pie y caminó de vuelta a la fiesta dejando a Mark solo. El ruido era bastante fuerte y todo el mundo gritaba, habían varios chicos bailando y otros tanto bebiendo mientras parecían hacer algún tipo de reto. Seokjin pasó por el lado sin reconocer a casi nadie.
Vio a Taehyung conversando con unas chicas que se le hicieron conocidas por lo que se acercó y grande fue su sorpresa cuando las vio de cerca.
—¡Seokjin! —Samantha y Linda lo abrazaron de inmediato y ambas sacaron un obsequio cada una. —¡Feliz cumpleaños! Gracias por invitarnos.
Sin palabras él recibió los regalos y miró a Taehyung, las chicas se alejaron a buscar algo para beber pero Seokjin realmente no estaba tomando atención a su alrededor.
—¿Las invitaste?
—Si... Sabía que no estabas muy emocionado por la fiesta, pensé que si veías al menos caras conocidas entonces no estarías tan desanimado.
—No estoy desanimado, Tae.
—Pero no quieres estar aquí.
Jin negó con su cabeza y se acercó un poco más para no gritar —no es mi lugar favorito, ya sabes que me gusta la tranquilidad pero no es como si fuera un suplicio estar aquí.
—Eso es bueno, al menos.
—No tienes que hacer cosas por mi, Tae.
—¿Por qué no? Quiero que estés cómodo. La idea de la fiesta era disfrutar y todo eso, despedir nuestro último año antes de dar esa bendita prueba... Y estás preocupado por eso, quería que tuvieras una distracción.
—Gracias —Seokjin tuvo que hacer un esfuerzo por sobre la música y es que todo el mundo ahora estaba yendo hacia la pista de baile.
—¿Quieres bailar?
—Uh, no... No es lo mío pero ve tú.
Su amigo se fue de su lado de inmediato y Seokjin observó como todo el mundo parecía apreciarlo y su pecho se calentó por el cariño que sentía por él. Taehyung había tenido un inicio difícil en el instituto y ver como se había hecho tan popular en el último año le hizo sonreír.
Taehyung era genial y él amaba que la gente también lo viera de ese modo.
Desde donde estaba podía verlo son problema y su amplia sonrisa se fue desvaneciendo lentamente mientras veía a uno de los tipos que estaba cerca de Taehyung. Su corazón comenzó a latir un poco más rápido mientras veía al tipo sonreírle a Taehyung de una manera sugerente y que él no quería ver. Se dio la vuelta para no verlos porque sabía lo que pasaría.
Se acercó a la barra y dejó sus dos regalos sobre la superficie. Sacó una cerveza, había una chica detrás del mesón pero ella no le dijo nada mientras abría la lata y se la llevaba a los labios. Se tomó la mitad haciendo una mueca mientras tragaba el amargo liquido.
—¿Mucha sed?
La chica le sonrió y él le devolvió la sonrisa —un poco.
—Soy Rachel.
—Seokjin.
Ella le dio una mirada apreciativa y él luchó contra las ganas de reír. Las mujeres siempre eran muy obvias cuando les interesaba un tipo y últimamente Seokjin recibía muchas miradas de esas.
—¿Eres el otro cumpleañero?
Jin miró sus dos obsequios y asintió —si. —Abrió su lata de cerveza y se la tomó hasta la mitad arrugando su ceño por el amargor.
La chica le sonrió de nuevo y cuando se iba a ir del lugar apareció su amigo Mark nuevamente.
—¿Había que traer obsequios?
Jin se rio y se encogió de hombros —no tengo idea, ese me lo trajeron mis compañeras de trabajo. Tae las invitó para que yo estuviera más cómodo. —Jin se rio —ellas me caen bien y Tae me tomó por sorpresa.
Nuevamente tomó otro sorbo largo y aunque era su segunda cerveza sintió calor en su estómago, miró la lata y asintió ante la agradable sensación.
—Deberían salir.
Seokjin se echó a reír —es mi amigo. Mi mejor amigo —corrigió.
—Yo también tengo un mejor amigo y me importa una mierda si en una fiesta se siente excluido o lo que sea, si vamos a una fiesta es a beber y pasarla bien.
—Eres un amigo de mierda entonces —Jin se burló —Tae es... —Seokjin miró hacia donde estaba bailando a los saltos su amigo y sonrió mientras lo veía moverse.
—¿Es que?
—Es especial y por eso es mi mejor amigo. Está preocupado por mi y yo de él. Eso es todo.
—Ajá.
—Estoy hablando en serio.
—Yo también, pero si no lo quieres ver como yo lo veo está bien... Ahora, —Mark se acercó —lo que me gustaría saber es como haces para que las mujeres te miren de esa manera.
—¿Eh?
—La chica que está aquí detrás de la barra no te quita los ojos de encima, ¿viste lo buena que está?
—De hecho no —Jin se terminó su cerveza y sacó otra —no es lo mío —tomó sus dos regalos y se alejó, necesitaba un lugar para dejar sus obsequios, no quería perderlos o que alguien se los llevara.
Caminó hasta la habitación que Taehyung le había mostrado y abrió la puerta. No había nadie dentro de esta y Seokjin suspiró aliviado.
Entró y dejó sus dos obsequios sobre una cómoda y estando allí abrió la lata de cerveza y se la tomó de nuevo hasta la mitad. Sintió ganas de orinar por lo que se tambaleó hasta el baño sonriendo como un tonto al darse cuenta que se había emborrachado con tres cervezas. No estaba sorprendido al respecto, no solía beber alcohol con frecuencia por lo que solo se dejó llevar por su nuevo estado.
Después de usar el baño volvió a la habitación pero ya no estaba solo. Taehyung estaba parado justo al lado de la cama.
—Te estaba buscando.
—¿Pasó algo? —Jin caminó hasta él pero el piso se movió ligeramente.
—¿Estás borracho? —Taehyung se rio —son recién las doce.
—Un poquito, son las cervezas... ¿De dónde salieron?
—Son importadas, ¿te gustaron?
—La verde —Seokjin se quitó el cabello de su rostro —tomé tres.
—¿Quieres un café?
—Nah, estoy bien, ¿por qué me estabas buscando?
—Apareció Jung.
—¿Está aquí? —Seokjin se tambaleó hasta la puerta pero Taehyung no lo dejó salir.
—Ya se fue, no te preocupes.
—¿Te dijo algo? —Jin miró el rostro de su amigo buscando alguna marca o lo que sea ya que Hoseok seguía acosando y molestando a Taehyung, incluso el día de la graduación había tenido un problema con el matón.
—Estoy bien.
Seokjin alzó sus manos y tomó el rostro de Taehyung para poder verlo de mejor manera, no quería que le volviera a ocultar algo tan delicado como una golpiza.
—¿Pelearon?
—No, quería entrar y no lo dejé. Fue buena idea contratar los guardias de seguridad.
—Si —Seokjin acarició con sus dedos la suave piel y cuando se dio cuenta de lo que estaba haciendo bajó sus manos y miró hacia la ventana de la habitación. —Entonces...
—No te escondas aquí, vamos a bailar.
—¿Que? —Seokjin fue prácticamente arrastrado fuera de la habitación. Taehyung cerró la puerta con llave y se la guardó en el bolsillo.
—Así no te vuelves a escapar.
Seokjin no discutió y cuando llegaron al salón se dio cuenta que la fiesta estaba en su máximo apogeo. Varios grupos bailaban en un rincón y muchas parejas juntas, algunas, haciendo más que solo bailar.
—Fue un alivio que haya cerrado las puertas de las habitaciones.
Taehyung gritó en su oído haciendo que su piel se erizara. —Si —murmuró viendo a dos hombres jóvenes besarse cerca de ellos.
—Baila conmigo.
Seokjin era torpe en sus movimientos, nunca fue un gran bailarín, más tímido de lo normal comenzó con pequeños movimientos que Taehyung seguía. No se burló de él, ni siquiera cuando su ritmo distaba mucho de la música que estaba sonando. Todo eso acompañado con una sonrisa y su corazón estaba a punto de explotar por todos los sentimientos ocultos que tenía por él y que no debía tener.
Tomando confianza se movió un poco más ligero, la tensión en sus hombros disminuyendo mientras todos bailaban a su alrededor una canción que no reconoció.
Después de muchas canciones se sentía lo bastante sobrio y sediento por lo que salió de la pista de baile llevándose a Taehyung con él.
—¿Que quieres tomar? —le preguntó mientras se acercaban a la barra.
—Lo que sea, menos cerveza.
—No es tan mala.
En la barra ya no estaba la chica de antes sino que un hombre joven de ojos claros, su cabello era rubio y le recordó levemente a Felix.
—¡Mi pareja favorita! —Namjoon se tambaleó hacia ellos —aunque no son pareja.
Él se puso a reír y Seokjin y Taehyung se miraron sorprendidos por ver al mayor en ese estado.
—¿Está ebrio? —Seokjin preguntó bajito.
—Creo que sí.
—¿Dónde estaban? —Namjoon los abrazó sin darles opción de alejarse.
—Bailando.
—Son lindos —Namjoon canturreó feliz —quiero ser el padrino de sus hijos.
Seokjin abrió sus ojos grandes y miró al hermano de su amigo. —No debería beber más.
—No, definitivamente no más alcohol. —Taehyung se rio —¿quien quiere tener hijos? Son puro gasto, yo no los quiero.
—¿Por qué estamos hablando de eso? —Seokjin le dio la vuelta a la barra y tomó dos vasos.
—La idea de contratar a un coctelero es que nos sirva.
Seokjin negó —no sé tú pero yo he visto demasiadas noticias últimamente y no quiero ser drogado.
El coctelero en cuestión se paró a su lado con sus brazos cruzados pero Seokjin ni siquiera lo miró mientras servía un poco de vodka en cada vaso.
Taehyung pegó una carcajada y cuando Seokjin le entregó su vaso lo abrazó por el hombro todavía riendo.
—No tienes vergüenza, el tipo quería sacarte la cabeza.
—No me importa —Jin tomó un sorbo haciendo una mueca de desagrado ante el sabor —que es malo esto.
—A mí me gusta.
Namjoon se acercó de nuevo a ellos pero no venía solo, una chica bajita y delgada lo tenía abrazado por la cintura.
—Voy a estar fuera por un rato...
—¿Vas a manejar?
—Nah, solo caminar por ahí, ya sabes... Me llamas si es urgente —Namjoon tomó a la chica de la cintura y se alejaron ambos tambaleándose mientras pasaban por entre las personas que bailaban.
—¿Eso es seguro?
—Ya es grande, supongo que sabe lo que hace.
—No tonto, si es seguro que él no esté aquí, podría pasar algo.
—Así cómo está no es de ayuda, Jinnie.
Seokjin asintió lentamente y volvió a tomar un sorbo de su vodka, ya no hizo más gestos y es que su garganta ya se estaba acostumbrando a la quemadura.
Después de varios vasos ambos comenzaron a sentirse borrachos. Taehyung no podía mantenerse de pie y Seokjin solo se reía por aquello.
—¡Buena fiesta, Kim! —gritó alguien al pasar.
Seokjin había tenido demasiado. Cansado se sentó en el sofá, pocas personas estaban allí por lo que la fiesta estaba oficialmente finalizada.
Taehyung aterrizó sobre él, torpe y pesado pero Seokjin no dijo nada disfrutando de tenerlo aunque pesara como un elefante bebé.
—Quiero comer papas.
Seokjin estiró su mano y la dejó sobre el muslo de su amigo, sus ojos se sentían pesados y calientes cuando los cerraba. Necesitaba dormir.
—Cama —balbuceó.
Taehyung a su lado se puso de pie, atravesaron la vacía pista de baile y se pararon fuera de la puerta cuando llegaron a ella. Taehyung sacó la llave de su bolsillo y erró en meterla en la cerradura.
Seokjin se rio y se la quitó, se tambaleó ligeramente mientras trataba de introducirla y se echó a reír cuando falló.
—Te juro que no tengo problemas para meterla.
—Lo sé —Tae se apoyó en la puerta —recuerdo todo lo contrario.
Sonriendo Seokjin logró meter la llave y abrió la puerta, Taehyung no alcanzó a quitarse y cayó al piso riéndose mientras se llevaba a Seokjin con él.
—Mierda —Seokjin cayó con su hombro y el dolor fue instantáneo. Miró a Taehyung que estaba riendo, su cabello negro se movía y el dolor que pido sentir quedó en un segundo plano mientras lo miraba.
Se sentía tan borracho como los pensamientos que pasaban por su cabeza y que lo empujaban a hacer algo que quizá no debía. Pero Taehyung estaba alli, tan cerca como para besarlo y esa confusión se hizo más grande a medida que pasaban los segundos y ellos seguían tirados en el piso de la habitación.
¿Taehyung lo rechazaría de nuevo?
Tragando saliva él tomó una respiración para calmarse. Miró hacia el techo tratando de luchar contra sus deseos pero Taehyung se acercó a él, su rostro a pocos centímetros.
—Creo que me hice algo en la cara.
Seokjin giró su cabeza lentamente y miró la cara en cuestión, deslizó sus ojos por todo ese rostro menos aniñado pero igual de atractivo que cuando lo vio por primera vez.
Taehyung tenía un pequeño rasguño sobre su mejilla que él delineó con sus dedos suavemente. Ante el acto, los ojos de su amigo se cerraron y sus labios se abrieron. Quizá no era una invitación, en ningún momento Taehyung le dio la mínima esperanza de que pudieran hacer algo más pero Seokjin tomó ese pequeño gesto y se acercó lo suficiente para que sus labios se rozaran.
Rogó en silencio que Taehyung no lo rechazara esta vez, que tomaran este momento como un paréntesis y que pudieran disfrutarlo sin pensar en las consecuencias.
Seokjin tomó el labio inferior de su amigo y Taehyung abrió sus ojos de inmediato pero no se quitó. Había una pequeña advertencia en su mirada que Seokjin pasó por alto y se sumergió en esa boca que anhelaba día con día.
Taehyung suspiró y sus ojos se volvieron a cerrar. Su lengua encontró la otra y sus manos vagaron por el delegado cuerpo sin obtener algún tipo de resistencia.
—Cama —susurró Taehyung sobre sus labios pero ninguno se movió y siguieron besandose en un enredo de lenguas y gemidos desesperados.
Seokjin lo apretó contra su pecho, sus manos apretando sus glúteos creando una pequeña fricción que lo tenía gruñendo entre beso y beso.
En la casona ya no quedaba tanta gente pero hasta en su estado de ebriedad sabía que no debían exponerse a que alguien los pudiera ver por lo que muy despacio despegó sus labios de los de su amigo y sonrió al ver el enfado en Taehyung.
—Voy a cerrar la puerta.
Ambos se sentaron sobre la alfombra y Seokjin se puso de pie, un poco mareado aún quitó la llave de la cerradura y cerró la puerta después de que Taehyung se quitó del medio.
Tomó una inestable respiración y puso la llave nuevamente en la cerradura esta vez para cerrarla por dentro.
Justo al lado de la puerta estaba el interruptor de luz que tenía un regulador de la misma. Bajó la intensidad y cuando se giró buscó a Taehyung que ya estaba sentado sobre la cama. Sus mejillas estaban sonrojadas y su cabello un poco desordenado. Sus ojos parecían asustados y Seokjin caminó hacia él mientras se quitaba la camiseta.
—No deberías ser tan sexy, ¿sabes?
—No lo soy.
Taehyung bufó —lo eres, no eres consciente de como te ves.
Seokjin se subió a la cama haciendo que Taehyung cayera sobre esta y se cernió sobre él besándolo de inmediato, no quería que nadie se arrepintiera tan pronto de lo que estaban por hacer.
Su cuerpo fue tocado también pero con menos entusiasmo, Seokjin se detuvo y miró a su amigo, sus mejillas seguían sonrojadas y parecía sin aliento mientras se miraban.
—¿Quieres que me detenga?
—No, no quiero eso. Solo que...
—¿Que?
Taehyung lamió su labio inferior y Seokjin quería que terminaran de hablar para poder seguir con lo que estaban haciendo, pero si Taehyung no se sentía cómodo él no lo forzaría a hacer algo que no quisiera.
—¿Que estamos haciendo, Jinnie?
Esa era una pregunta que Seokjin no quería responder, no quería que la voz de la razón se apoderara de él.
—No pensar —Seokjin dijo sincero mirándolo a los ojos.
Taehyung volvió a lamer sus labios y asintió levemente mientras sonreía y esa fue todo lo que Seokjin esperó antes de volver a besarlo y no soltarlo más por esa noche.
♥️
Hola! Después de varios meses he vuelto y pido perdón por no ser constante, ahora tengo un poco más de tiempo para escribir y lentes nuevos 🤓.
Quiero aclarar un par de cositas a raíz de algunos comentarios en los últimos capítulos.
1. Hay 10 años entre este Seokjin y el que inicia en Nadie como tú. Son 10 años de experiencias, de aventuras, tristezas etc. Hay personas que no entienden como el Jin de nadie como tú es tan diferente al de alguien como tú. Bueno eso se llama crecer y desarrollo de personaje xd.
2. Sé que puede ser frustrante que ninguno de los dos se declare pero eso no puede pasar, no puedo modificar la historia central y espero que lo respeten ♥️.
3. Hay un mundo completo que ellos van a empezar a conocer y lo harán por separado.
4. Este capítulo lo dividí en 2 para que no quedara tan largo y será desde la perspectiva de Tae 🔥.
Eso es todo por ahora, no prometo venir pronto pero espero hacerlo la próxima semana para que la historia fluya de mejor manera.
Lxs amo mucho y gracias x seguir aquí ♥️
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