El regalo de los guardianes
Tras marcharse sus padres las tres chicas quedaron a solas con la gigantesca loba que olfateaba curiosa a Loan mientras esta se reía por las cosquillas de la respiración de Fenrir.
Fenrir: Es increíble, como un olor tan malo como el de tu madre, puede a su vez oler tan bien al mezclarse con el de tu padre...
Loan: !JAJAJAJA¡ Cosquillas... JAJAJA... para
Leia: Bueno, sabia que montaría un numerito en cuanto te viese pero no esperaba este.
Lizy (intentando sonreír): Bueno, por lo menos no esta gritando y llorando.
Leia (rodando los ojos): ¿Y tu a que esperas? Deja ya de contenerte que se que te mueres de ganas de estar allí con ellas.
Con una sonrisa la pequeña de gorra roja salió corriendo a apuntarse a la diversión de Loan y Fenrir. Tras un rato jugando y revolcándose por el suelo mientras Leia apilaba unas piedras en forma de circulo, las llamó para que la ayudasen a preparar las cosas.
Leia: Chicas, ya he preparado el cerco para la fogata. Loan, te toca ir a por ramas secas y Lizy, tu te encargas de ayudarme con la cena.
Loan (soltando el pelaje de Fenrir): ¿Cu-Cuantas necesitas, onee-san?
Leia: Tantas como te quepan en los brazos... ¿¿Y a que viene llamare así??
Loan (nerviosa): En... en mis dibujos... yo... ellos... hermana mayor... emmm...
Leia (enfadada): No me compares con unos tontos dibujos.
La joven despeinada salió corriendo al interior del bosque a obedecer la orden de su hermana mayor. Lizy y Fenrir se acercaron a Leia con mirada interrogativa, pero la joven de coletas rubias solo estaba tomando los bocadillos del interior de la mochila y sacó una bolsa de nubes de dulce para quemar cuando hiciesen el fuego.
Lizy: Leia... ¿no crees que Loan se puede perder yendo sola a buscar ramas?
Leia: No te preocupes, ya sabes que tal como nacimos tía Lisa nos implantó un chip de rastreo para que no nos pasase nada y en mi celular tengo la aplicación para saber donde estamos las tres en todo momento.
Fenrir: Y si eso no funciona, puedo seguir su olor hasta 50 kilómetros... siempre que su madre no este cerca.
Lizy (preocupada):¿ Y si le pasa algo? ¿Y si se cae en una madriguera? ¿O le cae una rama encima como a mamá Lola? ¿Y si...?
Leia( interrumpiendo): Lizy, Lizy para. ¿Que es lo que te pasa pequeñina?
Lizy: Es nuestra hermanita pequeña... deberíamos estar cuidándola.
Leia: Pero este es el único momento que teníamos para estar solas las dos y divertirnos como antes. ¿A caso no quieres que juguemos a nuestro juego solo para las dos?
Lizy (triste): Pero ahora somos tres. Leia... ¿a caso odias a Loan?
Fenrir movía sus orejas con curiosidad y como muchas veces dejaba que las pequeñas hablasen y arreglasen las cosas entre ellas pero sin quitarles el ojo de encima. Leia se acercó a su pequeña hermana de gorra roja y la abrazó con cara de pena.
Leia: Nooo, no es eso Lizy. Recuerda que cuando llegó eramos ambas las que jugábamos con ella y ayudábamos a distraerla mientras le cambiaban el pañal. Pero aun con eso, nosotras podiamos estar juntas.
Lizy se acariciaba su trenza mientras observaba como el rostro de Leia mostraba una expresión de cansancio como si no hubiese dormido en varios días.
Leia: Pero desde que se bebió aquel potingue que guardaba mamá... bueno, me toca estar siempre vigilandola y ayudándola. Paso casi mas tiempo con ella que contigo y no me gusta. También quiero poder disfrutar con mi hermanita. No la odio, de verdad, pero a veces me cansa. Es una pesada y una llorica.
Lizy: Pero Loan también es tu hermanita...
En aquel momento escucharon un ruido de cosas que caían, las niñas miraron en la dirección que Fenrir llevaba un rato mirando para ver como un montón de ramas y troncos habían quedado esparcidos por el suelo y la reconocible espalda de su hermana menor que se alejaba corriendo y sollozando.
Fenrir: Es mejor que vayáis a buscarla.
Las niñas salieron corriendo persiguiendo a su hermana pero sus cortas piernas no podían competir con las piernas de adulta de Loan, no tardaron en perderla de vista. Por suerte, Leia sacó su celular y siguieron la señal de su hermana huida hasta el río. La despeinada chica se encontraba en la orilla abrazando sus rodillas y llorando. Lizy se acercó cuidadosamente hasta ella.
Lizy: Loan, no llores por favor. Leia no lo decía a propósito.
Loan (llorando): S-Soy... un monstruo... *buaaaa* No... no se hacer nada bien... *sniff* y me he mojado los pantaloneeeeeees... *buaaaaaa*
Lizy miró como las zapatillas de deporte y el bajo de los pantalones de su hermana estaban chorreando, posiblemente se metió corriendo en el río sin ver que estaba ahí mientras lloraba. La pequeña de gorra roja no sabia que hacer o que decirle, simplemente se sentó a su lado y apoyó su cabeza contra la rodilla de la pobre llorona.
Loan: Leia se enfadó conmigo... *sniff* tiene razón... soy casi tan grande como mamá... *sniff* y siempre lloro.. *buaaaa* pero me da miedo... *sniff* y-yo quiero... quisiera... me gustaría ser tan guay y valiente como Leia... *sniff*
Cuando decía esas palabras notó como alguien le palmeaba tiernamente la cabeza como hacia papá, pero al girarse vio que se trataba de Leia, la cual miraba hacia otro lado mientras seguía palmeando con cuidado su cabeza para tranquilizarla.
Leia: Tranquila Loan, me acuerdo muy bien que aquel día te enseñé el frasco que escondía mamá y te dije expresamente que no debías tocarlo nunca. Por la tarde ya te habías vuelto como eres ahora. Por eso no me gusta que te dejen a mi cuidado, no me haces caso. Ahora, sécate esas lagrimas y volvamos al campamento. Fenrir nos estará esperando y aun tenemos que encender el fuego. Allí te cambiaremos de ropa o si quieres, te secas junto a la fogata.
Solo con el gesto de su hermana mayor, Loan ya se sentía algo mas consolada, pero a demás le habló sin gritos ni bufidos y aquello hizo muy feliz a la joven que se abrazó a la chica de coletas rubias. Lizy al verlo no tardó en unirse al abrazo.
Leia: Vale, vale, chicas. Regresemos o Fenrir empezará a avisar a los animales para que nos busquen.
Lizy (abrazando mas fuerte): Solo si nos dejas a Loan y a mi peinarte.
Loan: ¿Y-yo t-también puedo?
Leia (rodando los ojos): Ok, pero como me hagáis un destrozo tendréis que pagarme al mejor peluquero de la ciudad.
Las tres chicas se encaminaron de regreso al campamento donde Fenrir las esperaba sentada con el fuego encendido. Loan se acercó prudente al fuego para secar sus pantalones y zapatillas. Lizy y Leia se quedaron mirando a la gigantesca loba negra.
Fenrir: ¿Que os pasa?
Leia: El fuego, a caso... ¿a caso tu...?
Lizy: !!FENRIR PUEDE LANZAR FUEGOOOOO¡¡
Fenrir: Jajaja. No soy ningún dragón. Yo no hago esas cosas.
Leia: ¡¿Entonces como lo has hecho?!
Loan: Y-Yo creo... creo que ha llamado a algún animal... para que lo encienda... me contabais que los animales la obedecen... cuando me poníais a dormir.
Fenrir: La pequeña no va desencaminada, parece muy lista. Ahora es mejor que comáis y después me explicáis como es que la cachorra pequeña de todas parece alguien adulto de vuestra especie.
Haciendo caso a la guardiana, las dos se pusieron al lado de Loan y empezaron a comer sus bocadillos con unas frituras que había escondido Leia y unos zumos. Tras comer, le explicaron a Fenrir como la pequeña de dos años se había tomado la pócima que Lisa le había preparado a Lola y como había dejado de ser una tierna bebé de 2 años a una adulta de 20. Como desde entonces sus madres no la dejan pasar mucho tiempo con su padre y que estudia en casa.
Fenrir: ¿Cachorra adulta, tu recuerdas porque te bebiste aquel liquido?
Loan: Cu-Cuando Leia me lo mostró se pareció un liquido verde brillante muy apetecible... como el jugo de lima de mamá... pero cuando lo bebí sabia muy mal...
Lizy: Pues si te gustan las bebidas verdes, jamas pruebes uno de los batidos de tía Leni o los odiaras por siempre. Jejeje.
Leia: No se como puedes odiar esos batidos y en cambio comer lombrices. Ugh...
Loan: Fenrir... G-Gracias po- pooooo... por no mirarme, raro.
Fenrir: Tranquila cachorra, cosas mas raras he visto.
Lizy: ¿Como que?
Fenrir: Como un par que rechazó el pasar la prueba de una fuerte y atractiva guardiana del bosque y no obtener su regalo especial, solo porque Zeus había tenido una cachorra con otra hembra.
Leia: Espera, ¿Estas hablando de mi? No veo que papá y tía Lana rechazasen eso sea algo tan sorprendente.
Lizy: ¿Prueba? ¿Que prueba?
Loan: ¿Cu-Cual regalo era?
Fenrir: Jajaja. Dejad que os cuente un poco de la historia de los guardianes. Veréis, hace mucho, mucho tiempo. Antes de que...
Leia: Al grano, si nuestros padres lo rechazaron, ¿no podríamos nosotras tomar sus lugares?
Fenrir: ¿No queréis que cuente la historia?
Lizy: ¿De que trata la prueba?
Loan: ¿El regalo se puede comer?
Fenrir: Hoy estáis de los nervios cachorras. Bueno, dejad que os cuente la versión reducida y vuestras preguntas serán contestadaaaa... Aaaaaahhh... un poquito mas arriba....
Loan se había puesto a rascar la cabeza de Fenrir y había llegado al punto justo detrás de las orejas donde le era difícil alcanzarse.
Lizy la observaba maravillada, pues nunca habían llegado a ver aquella expresión en la loba, aunque a Leia le pareció mas impactante la siguiente que realizó la guardiana, pues aun siendo una loba gigante de pelaje negro, juraría que se había sonrojado al ver como ella y Lizy la miraban.
Fenrir: Ejem... Loan cachorrita, siéntate con tus hermanas. Bien, veréis los distintos guardianes protegemos los bosques que nos son asignados y...
Lizy: ¿Tu no eres la guardiana de todos los bosques?
Fenrir: Nooo, jejeje. Yo solo cuido de este bosque, hay otros bosques con otros guardianes, así como hay bosques que no los tienen pues no necesitan protección y lo peor de todo, hay algunos guardianes sin bosque que proteger, pues no consiguieron cumplir con su cometido.
Loan: E-Entonces... ¿e-esos perritos se quedaron sin casa?
Fenrir: No, no todos son lobos como yo. Es mas, yo soy la única guardiana loba, cada guardián recibió la forma de un animal diferente y cada uno tenemos un tesoro que guardamos y solo entregamos a aquellos que creemos dignos...
Leia: ¿¿DIJISTE TESORO??
Fenrir: Pero para que alguien sea realmente digno de dicho regalo, debe pasar por la prueba que el guardián tiene preparada y cada guardián tiene una diferente. Las hay peligrosas y que requieren mucha fuerza, las hay mortales con trampas que podrían terminar con la vida de los que no son dignos, las hay tranquilas pero que perder la concentración haría que jamas se pudiese pasar la prueba nuevamente, las hay que juegan con la...
Lizy: ¿Y cual es la tuya? ¿Es emocionante? ¿Es divertida?
Leia: ¿De cuanto estamos hablando? ¿Ese tesoro es muy caro?
Fenrir: Los tesoros de los guardianes fueron entregados voluntariamente por distintos animales de su zona...
Leia (llenando los cachetes de aire): Bffff... bellotas y esas cosas. Que royo.
Fenrir (ignorándola): ...y fueron imbuidos de la magia de los espíritus. Los dioses les dieron forma de capa y dicen que quien se las pone puede tomar la forma del animal que entregó su piel para el regalo.
Lizy: !GENIAL¡ YO QUIERO CONVERTIRME EN ANIMAL. ¿Cual es tu capa mamá Fenrir?
Leia (con los ojos como platos): ¿Capas de piel de animal? ¿SABES LO CARO QUE ES ESO?
Loan: A... a los animalitos... ¿No les dolió?
Fenrir: Jejeje, no, a los animales no les dolió. La magia hizo que pudiesen entregar su piel sin sufrir daño, peor te aseguro que el invierno que les tocó pasar muchos se arrepintieron. Ningún guardián va a deciros que capa protege, eso únicamente lo podrá descubrir quien pase la prueba.
Lizy: ¿Cuando podemos hacer tu prueba? ¿Podemos ir ahora?
Loan: No será peligroso.
Leia: ...podría comprarme una docena de vestidos, un nuevo iphone, un montón de pendientes y anillos...
Fenrir: Mi prueba no es de las que puedan ser mortales, pero en cambio sí que es posible que si os adentráis en ella jamas salgáis. Mi prueba es "El Laberinto de las Tentaciones".
Loan (bostezando): ...Aaaaahhh... suena... divertido...
Lizy (igual que Loan): Loan no hagas eso que... Aaaaahhhh... se me pega...
Fenrir: Por hoy es mejor que os vayáis a dormir cachorras, mañana ya hablaremos mas.
Leia aun distraída tomó a Lizy en brazos y tomó de la mano a Loan para dirigirlas al interior de la tienda. Fenrir se puso de pie y con sus patas traseras levanto un poco del terreno para apagar la fogata. Las pequeñas debían descansar, cerca del claro donde se encontraba la tienda de campaña una figura oscura esperaba paciente. Fenrir se acercó a ella.
Fenrir: Preparadlo todo, estoy segura de que intentarán pasar la prueba a toda costa y son los descendientes de Zeus, por lo que creo que alguna de las tres podría lograrlo.
La sombra se desvaneció en la oscuridad tras escuchar las ordenes de la guardiana. Un aullido en la noche fue lo que indicó que Fenrir empezaba su ronda comprobando que los animales y plantas estuviesen bien.
En la tienda de campaña las niñas duermen y cada una sueña con lo que les ha contado la guardiana del bosque de Royal Woods. Leia sueña alegre que subasta la capa de pieles para hacerse millonaria y poder permitirse comprar lo que quisiese. Lizy sueña en lograr la capa para correr como una loba por el bosque con Fenrir como hizo su mamá. Loan... ella solo sueña con que si logra la capa y se la regala a Leia esta puede que la aprecie mas.
Hasta aquí el capitulo de hoy. Las niñas por fin están en el bosque y parece que van a tener muchas aventuras que pasar, Fenrir parece que va a permitir que las niñas se adentren en su prueba. ¿Que misterios les deparará? La semana que viene lo descubriremos. Jejejee. Esperamos tanto LJ como yo, que nos dejéis algún comentario y vuestro preciado voto.
Un fuerte abrazo a todos queridos lectores.
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