26 de Julio, 2011.

Miro a todos lados, estoy sola en el pasillo, voy al entrenamiento.

La próxima semana tendremos el primer juego del campeonato y necesito estar concentrada, salgo al campo y me uno a las chicas a trotar.

—Muévanse, tienen que esforzarse chicas —el entrenador sigue dando una charla motivadora o eso intenta.

Nos mantiene haciendo ejercicios, hoy el entrenamiento es muy fuerte, siento el dolor en mis músculos, capaz de sudor cubren mi cuerpo y me siento realmente agotada.

Cuando todo termina, Ada y yo somos las ultimas en las duchas, ella no dice nada, está muy pensativa y Ada no es muy callada que digamos.

— ¿Qué pasa por esa cabecita? —sus ojos conectan con los míos a través del gran espejo frente a nosotras y hace una mueca.

—Creo que tengo una hermana —suelta de repente, se vuelve hacia mí para verme mejor.

— ¿Qué?

—Papá engaño a mamá hace un tiempo, hoy discutían por una niña —despeina su cabello rubio pareciendo frustrada—. Estoy confundida y molesta, no entiendo nada.

—Si no estás segura tal vez es mejor que esperes o hables con tus padres —bufa.

—No hablare con mis padres, nunca me tomaron en cuenta y ahora no lo harán, descubriré esto por mi cuenta —me acerco a ella y la abrazo.

—Cuentas conmigo para lo que necesites —asiente y luego intenta darme una sonrisa.

—Olvidemos esto por un momento, hoy iré a mis clases de baile y nos encontramos en donde Kiara para visitar a su padre —asiento, agarramos nuestras mochilas y salimos del vestuario.

***

Miro como Scott olfatea todo mientras regresamos a casa, Ada y Niall van a mi lado, hoy visitamos al padre de Kiara, es difícil mirarlo así, aunque él diga que está bien y que pronto estará mejor, con solo mirarlo sientes el miedo y el dolor de perder a alguien tan importante.

—Tenía que quedarme un rato con Kiara —dice Niall.

—No podían tener más visitas, ya escuchaste —murmura Ada.

Suspiro y miro hacia mi casa, los chicos están ahí jugando con un balón, apenas llegamos suelto a Scott y lo dejo dentro de la casa.

— ¿Qué tal les fue? —pregunta Matt, con nada más ver mi cara se acerca y me envuelve en sus brazos, si, a veces es un buen hermano.

—Habla con Ada —susurro y le doy un apretón fuerte antes de alejarme.

El señor Hill ha sido como un verdadero padre para ella y si a mí me afecto verlo sin energía, agotado por todo esto, no me imagino a ella.

Saludo sin ganas a Seth y a Max, antes de volver a entrar a la casa, esta vez para ir a la cocina donde choco contra un cuerpo duro debido a mi distracción, reconociéndolo inmediatamente, envuelvo mis brazos a su alrededor y respiro hondo, reconociendo su olor.

Cuando responde a mi abrazo, me siento un poco mejor, comienza a caminar sin soltarme, comenzamos a subir las escaleras y tropiezo, una risa se le escapa haciéndonos temblar y sonrió.

Llegamos a mi habitación, abre la puerta, nos adentra y la cierra, se aleja lo suficiente para verme.

— ¿Qué paso cariño? —me encojo de hombros.

—El papá de Kiara está muy mal —me separo de papá y me dejo caer en la cama.

—Te aseguro que mi colega está haciendo todo lo posible para ayudarlo, esto es muy difícil pequeña, pero Pablo es muy fuerte —me da un beso en la frente—. Hoy pasare a visitarlo para ver su avance.

Asiento, me levanto para darle un rápido abrazo.

—Nos vemos para la cena —se despide y sale de mi habitación, los descansos de papá no duran demasiado, pero es bueno pasar el mayor tiempo con él, aunque además de que trabaja mucho, no sé como pero siempre tiene tiempo para nosotros.

Me acuesto y miro el techo de mi habitación durante un rato hasta sentir como mis ojos se cierran solos

Rayos un cerdo que vuela, no puede ser, los cerdos no vuelan, frunzo el ceño y veo como el cerdo pasa frente a mí, un momento después se detiene y me sonríe.

Qué raro cerdo, tiene unos dientes muy blancos.

Tiene un cuchillo, mierda

Un ruido me despierta de golpe, joder, que sueño más estúpido, la puerta de mi habitación se abre y la cabeza de Andrew se asoma ¿Qué hace aquí?

Sonríe y termina de entrar, la última vez que hablamos como que quede un poco incomoda con las cosas, no le había vuelto a hablar después de eso, lo había visto por los pasillos de la preparatoria o en la cafetería, pero aparte de eso, nada de comunicación.

— ¿Mal momento para venir?

Respiro profundo, paso mis manos por mi cara y me pongo de pie.

—Algo —sonríe y termina de entrar.

—Llegue hace un rato, los chicos irán a comer algo ¿Vienes?

Busco en mi mesita de noche mis caramelos de menta, me meto uno a la boca y comienzo a empujarlo fuera de mi habitación, cierro la puerta detrás de mí y comienzo a bajar las escaleras, me volteo cuando no me sigue.

— ¿Qué? —sonríe y se acerca, poniéndome algo nerviosa, resbalo en un escalón y casi caigo.

—Te gusta huir —se para a mi lado y susurra—. Siempre.

Tuerzo los labios cuando pasa por mi lado y continua bajando las escaleras, que estúpido puede llegar a ser, sonrió antes de correr y saltar sobre él, tomándolo por sorpresa.

— ¡Joder! —sostiene mis piernas rápidamente y mantiene el equilibrio—. ¿Estás loca? Nos podías hacer caer.

Suelto una carcajada por la forma en la que lo dice de horrorizado.

—Arre caballo —digo golpeando su trasero con mi mano.

—Puedes usar este caballo de otra manera —murmura arrogantemente y frunzo el ceño, idiota, golpeo su cabeza y se queja.

—Calla, esclavo —vuelvo a golpear su trasero y se ríe.

Cuando nos encontramos con los demás afuera nos miran como raro, Ada enarca una ceja hacia mí y me encojo de hombros.

—No entiendo esta situación —miro como Matt fulmina a Andrew y bufo.

Ada le dice algo a Matt y este se olvida de la situación.

— ¡Amigos! Mi esclavo me comprara comida hoy, así que me voy con él —golpeo su trasero y comienza a caminar hacia su auto, Niall y Max nos siguen.

—Me debes una grande —lo escucho decir cuando me deja en el asiento del copiloto, me rio y lo empujo para cerrar la puerta.

Como si yo le fuera a pagar algo.

Bajo la ventanilla, cando Ada me toca.

—Me abandonas perra —se queja y mira a Matt de reojo.

—Serán unos minutos —le sonrió.

—Te odio —le lanzo un beso.

—Aquí entras, pero no te dejare subir —comienzo a subir la ventanilla mientras veo como me saca el dedo medio y se aleja hacia el auto de Matt.

Ella me ama.