Normalmente, muchos siempre usan la frase; El tiempo se va volando, cuando uno más se divierte. En el caso de Dream y Cros, su salida y diversión era un claro ejemplo de esa dichosa frase, tan popular. Sin darse cuenta la hora del almuerzo les llego de golpe, y apenas si se subieron a los autitos chocones, fueron a la casa de los espejos y pudieron ver un hermosos desfile, pero un rugir del "inexistente" estomago de Cross, alarmo a Dream, dando a entender de que ya era hora del almuerzo, por lo que fueron a un sector del parque en donde podían hacer un picnic sin preocupación de si se puede o no pisar el césped.

El soñador, solo coloco el mantel en el suave césped, para después sentarse y depositar ambos almuerzo y la bebida, todo siendo observado por el monocromático, algo apenado.

— Dream. ¿De verdad que no quieres aprovechar la comida de este lugar? —pregunto Cross, al ver que en las entradas incluía la comida y almuerzo gratis. —Bueno, creo que es un bufet, de todo lo que puedas comer y más.

— Vamos Cross. Esta lindo aquí afuera. —menciono, de muy buen humor. Asiendo señas de que se sentara el contrario. Pero al ver que este mismo desvió la mirada se deprimió solo un poco. — Acaso... ¿No quieres comer lo que te prepare?

Cross, ante aquella revelación se sonrojo en un tono morado. Desgraciadamente, no duro mucho ya que recordó el día, en que el mismo soñador le preparo el almuerzo la primera vez, cuando todavía no sabía sobre la apuesta.

Suspiro, sabía que de una u otra manera, tenía la de perder. Se sentó en frente del soñador, a la vez que le regalaba una cálida sonrisa.

— Me encantaría comer de nuevo de tu almuerzo. — se sincero ante aquellas palabras.

— Te va a encantar, Cross. Hice, sándwiches de atún, mayonesa y tomate. —al mostrarle los simples almuerzo, se apeno. No eran nada a comparación de un bufet. — Perdón, son simples, pero... No sé qué es lo que te gusta y no Cross... Pero si quieres podemos ir a...

— A decir verdad no tengo una comida favorita, así como una que me desagrade. —dijo Cross, agarrando uno de los sándwiches que preparo Dream. — Así que. Comamos esto que se ve delicioso.

La expresión del soñador, cambio a una de alegre al ver como Cross comida su comida, simple, pero deliciosa. Opto por imitar al monocromático, ahora él se dispuso a comer.

Estaba delicioso, ninguno podía negra tal cosa, pero el ambiente era otro tema. Nadie decía nada u opinaba nada, hasta que Dream se armo de valor y pregunto algo que, desde muy temprano, le picaba su curiosidad.

— Cross... ¿Puedo hacerte una pregunta? —al ver que el mencionado lo miraba directo a las cuencas y asentía con la cabeza, ya que tenia comida aun por masticar, prosiguió con su incógnita— Lo de tu grupo. ¿Qué harán con sus entradas?

Trago lo que estaba masticando, se sirvió un vaso de jugo, para así poder responder.

— Bueno... Tengo entendido que Nightmare y Killer vendieron sus entradas.

— Creo que es muy obvio tratándose de mi hermano. —menciono Dream, entre risas.

— Si. Es verdad —sonrió de igual forma. — Error, le dará las entradas a Geno, para que pueda llevar a Fresh.

— Es verdad. Error tiene un hermano menor. —comento. — Ya el próximo año estaría en primero de nuestro instituto.

— Sí, pero nosotros estaríamos en segundo año. Pero bueno, Horror, menciono algo similar, solo que le dará a su prima Aliza, para que lleve a su hermano menor.

— ¿Y por qué no lo lleva Horror?

Cross, miro fijo un punto, dio un sorbo largo de jugo, suspiro y prosiguió.

— Él no es bienvenido a este tipo de atracciones, ya sabes. Muchos le temen por el cráneo roto. A demás, él no es muy fanático de las multitudes que digamos. —al ver que Dream no decía nada, prosiguió. — Por otra parte, Dust... No estoy tan seguro de que hará con sus entradas. — a decir verdad, estaba consciente de que aria con ella, pero por ahora era mejor no decir nada. — Y Reaper, bueno él dijo que se lo regalaría a su tutor, para que invite a su actual pareja de ahí en mas no sé nada más.

— Oh... ¿Cómo un cita? Qué lindo.

Ante la palabra "Cita" Dream, se puso tono dorado. No pudo evitar el imaginarse a Cross y él en una autentica cita. Porque...Claro, ahora no se consideraba como tal, solo una salida de amigos. ¡Pero soñar es cien por ciento gratis! ¡¿Verdad?!

— Ahora. Yo te tengo una pregunta. —hablo Cross, despertando al más bajo de sus trance.

— ¡¿Qué?! Oh, Cross, seguro.

— ¿Por qué te enamoraste de mí? —pregunto sin rodeo, solo yendo al punto.

— Creí... —murmuro, estaba apenado. — Creí que eso ya te respondí Cross.

— Eso creo, pero fue algo ambiguo. —dijo, miro directo a sus cuencas. — Yo busco algo más concreto.

Ahora, Dream suspiro, pero no aparto la mirada de Cross, solo respondió con sinceridad.

— ¿Por qué? —se pregunto en susurro— Porque; Eres valiente, audaz, lleno de energía, un gran amigo o eso se ve cuando estas con tu grupo. Lo que me enamoro de ti Cross, fue tu osadía de nunca rendirte.

— ¿Cuándo viste eso de mí?

— Bueno, durante las práctica de básquetbol. No te salía un tiro libre y te quedaste más tiempo, incluso después de las prácticas. Estabas tan decidido a encestar aunque sea una sola vez.

— Tú... —Cross, estaba sin habla, tenía fresca ese día en sus pensamientos, ya que le salió su primer tiro libre. — ¡¿Estabas ahí mirando?!

— Lo siento, ese día buscaba a Nightmare y te vi practicando solo que... No pude evitarlo.

De nuevo, el incomodo silencio, envolvió a los dos, pero al ver que ya comieron sus almuerzo, decidieron que era hora de levantarse y seguir con sus atracciones. Cross se incorporo, algo incomodo pero se enredo con el mantel logrando caer encima del soñador, logrando una posición algo "comprometedora" No hubo choque de diente, ya que el monocromático, al tener buenos reflejos coloco ambos brazos para evitar tal acción, lo malo que estaba a centímetro de la respiración de contrario.

— Lo siento... —se disculpo, levantándose de aquella vergonzosa caída.

— No... No te preocupes, solo fue un accidente... —estaba apenado, por poco probaba algo, que ni en sus mas locos sueños se cuestionada dicho sabor prohibido.

Levantaron todo, pero estando, apropiadamente apartado el uno con el otro. No se atrevían ni a mirarse a las cuencas, estaban muy apenados el uno con el otro.

— ¡Buenas tardes! —saludo una chica energética, quien aparecía de la nada, logrando asustar a los dos individuos. — Me presento, soy Fanny y ella mi amiga Leila, y somos las organizadoras de un concurso de baile y disfraz. ¿Les gustaría participar?

— Hay muchos premios. — prosiguió la otra joven, igual de emocionada, entregando unos folletos. — El concursó es dentro de media hora, si les interesa. Nuestra otra compañera; Rachel, se encarga de anotar a todos los que quieran postularse. ¡Vallan ahora! Y elijan sus disfraces.

Las chicas se fueron tan rápido como vieron más personas a la cercanía, diciendo el mismo discurso, que escucharon Dream y Cross.

El monocromático miro atentamente el folleto, no era de bailar mucho, pero de igual manera debía de preguntarle a Dream si este quería o no.

— ¿Tú que di...?

— ¡¿Nos anotamos Cross!? —pregunto emocionado— Sera muy divertido.

— ... —quedo sin habla ante la emoción que reflejaba Dream. Solo logro asentir repetidas veces.

— ¡Qué bien! Vamos, Cross o los mejores disfraces se agotaran. —como criatura dentro de una juguetería, Dream se adelanto corriendo a donde las chicas señalaron, donde podían inscribirse.

El monocromático, se limito a seguirlo desde atrás, jamás se imagino una salida de tal magnitud. Pero, si Dream se divertía, él también.

Llegaron al puesto de inscripción donde ya se anotaron, Rachel resulto ser una chica muy simpática e incluso guio a los dos donde podía encontrar una gran variedad de disfraces.

— Oh... —se entristeció el soñador. El lugar, donde debían de estar los disfraces estaba vacío. Solo quedaban dos trapos en pésimos estados.

— Creo que fuimos los últimos en anotarnos. Todos los trajes, "buenos" ya no están en sus perchas.

— ¿Sucede algo? Solo faltan ustedes. — pregunto Rachel, entrando por la ultima pareja que faltaba para dar inicio al juego. —Veo, que les dejaron los dos peores disfraces.

— ¿Qué aremos Cross? No podemos usar esos.

— Ni modo, perdimos antes de comenzar.

Los dos estaban por irse del concursó, siendo Dream el mas desanimado. A mitad del camino, Rachel los detuvo, interviniendo su salida.

— ¡Esperen! Si aun quieren participar, queda otro juego de disfraces, solo que estos no están para el concurso ya que son disfraces que yo creer, pero nadie se lo, a probado. Hasta ahora. Claro, si ustedes quieres.

Los dos amigos se miraron entre sí, Dream quería intentar y Cross... Bueno, él tampoco era de renunciar así, como así. Tal como lo describió Dream, hace unos minutos atrás. Asintieron a la vez, afirmando que seguían en el concursó, aquello emociono por demás a la joven.

Rachel, fue corriendo en donde estaba Fanny, quien se encargaba de presentar todo el evento.

— Ya puedes llamar a las parejas finales. —murmuro Rachel, al oído de Fanny. La cual ase señas da Leila, quien se encargaba de la música, la cual se puso a escuchar un hermoso vals.

— Muy bien... ¡Que salgan las parejas! — anuncio Fanny, asiendo que un grupo de parejas con elegantes disfraces, se postraran sobre la pista de baile.

Cada pareja que hiso acto de presencia, se subió al escenario, los caballero tomaron su posición sosteniendo las cinturas de sus compañeras. Sin embargo, Cross estaba nervioso con su traje de costura interna negra, con una camisa blanca por debajo, la cinta blanca por encima y una corbata negra con estampado de cruces. Estaba nervioso, le tocaba ahora a él subir al escenario pero todavía no avía visto como iba vestido Dream, y eso lo dejaba confundido.

— Cross... Nos toca a nosotros subir al escenario. —murmuro el soñador, logrando que el mencionado volteara a verlo.

— Por fin llegas Dream, yo creí que.... — quedo sin hablas, aquel ser portaba un elegante vestido corte princesa, degradado en un tono amarillo y una falda con capas muy voluminosa. Estaba sin hablas en pocas palabras. — ¿Dream?

— ¿Me veo mal, Cross?

— ¡¿Qué?! No, bueno te ves bien. Digo, para ser un chico, y el usar vestido te favorece bastante... Digo... yo...

El soñador, le dio algo de vergüenza escuchar aquello, pero le alegro el que su compañero le fuera sincero, le tomo de la mano ahora guiándolo al escenario, cosa que Cross entendió a la perfección.

— ¡Que comienza el baile! —gritaron a la par las tres jóvenes encargadas de esa atracción.

El baile, un exquisito vals se escucho sonar en el escenario, las parejas comenzaron a bailar al ritmo de la melodía, cada pareja se envolvía en su propio mundo. Incluyendo al monocromático y al soñador.

La pareja de amigo, se olvidaron por unos escasos segundo de donde estaban, ambos se perdieron a la vez en las cuencas del otro esqueleto.

Dream, estaba como en un sueño del que jamás quisiera despertar; estaba con el esqueleto de sus sueños, en una "cita de amigo" bailando una elegante pieza, en donde su elegante guardia real, lo guiaba sosteniéndolo desde la cintura.

Cross; por otra parte, jamás imagino aquella situación hecho realidad. No negaba el hecho de que Dream se veía hermoso en ese traje, todo aquello parecía irreal, además de que no podía dejar de mirar aquellas brillantes cuencas. Se sentía en las nuevas, estaba más que a gusto cerca del soñador.

— ¡Los ganadores son la pareja numero 5! —gritaron las tres chicas a la vez, emocionada al ver como los dos esqueletos estaban a centímetro de un choque de dientes, claro que al gritar aquello estos se separaron, ambos igual de ruborizados.

Dejando aquel concurso, donde resultaron ser los ganadores. Subieron a la rueda de la fortuna, ambos estaban sentados en una góndola encima de todo el parque. Dream no podía dejar de contemplar un dije a juego de una manzana cortado a la mitad.

— Es muy bonito. —murmuro, sin poder dejar de mirar ambos dije.

— Un collar a juego y una foto, como premio. —dijo, Cross mirando con detalle la foto donde ambos aun portaban sus trajes. — Supongo que no está mal.

— Vamos Cross, fue divertido. Además, pudimos ser los primero en esta atracción, eso también conto como premio.

— Bueno, la vista es hermoso. —fue sincero Cross, a decir verdad, la vista era más que preciosa.

La vista era magnifica, los dos estaban cómodos con el uno y el otro. Dream, tenía la mirada perdida en la ventana, mirando el hermoso paisaje. Sin embargo, Cross miraba al soñador de reojo, aun tenía en mente aquel fragmento en donde por un segundo quería probar los inexistente lesbios del soñador. Pero... ¿Por qué tenía esos prohibidos deseos? Deseaba una señal, un inicio, algo para saber qué es lo que realmente pensaba del soñador.

Lo que sea, le serviría. Y con aquella idea en mente, siguió mirando el paisaje esplendido.