En los vestuarios, un silencio para nada agradable envolvían a Cross y Dream. El ultimo le acaba de revelar un secreto, que solo él y su hermano Nightmare conocían, uno en el que el soñador rogaba olvidad o mínimo tenerlo en su pasado, pero al parecer el culpable de ese mal rato que vivió, lo seguiría hasta sus últimas de existencia, al parecer.

— ¿Qué me acabas de decir? — pregunto Cross, estando en shock, rogaba internamente que lo que acababa de escuchar, solo allá sido un juego de su mente.

— Como escuchaste, Cross. Hate, cuando íbamos a la preparatoria juntos, me obligo a que lo besara, además de otras que por cierto Nightmare pudo evitar.

El monocromático estaba como ido, acaso ese maldito se atrevió a profanar al ser más inocente y puro de este retorcido mundo, o simplemente interpreto mal las cosas, rogaba a todos los dioses que fuera así.

— Dream.... ¿Te molesta si me lo explicas mejor?

— Es algo duro de recordad, Cross. Pero supongo que te la diré para que me comprendas y no me odies.

— ¡Yo jamás podría odiarte! —grito, pero se tranquilizo a los escasos segundo. — Lo siento, pero de verdad jamás podría odiarte, por algo que tu no hiciste.

— Gracias. — susurró, regalándole una tierna sonrisa, suspiro y busco la fuerza para contarle desde el principio. — Veras, antes del instituto, Nightmare y yo íbamos a una escuela hermana del instituto Jaguar, la preparatoria Matsura...

Hace un par de años atrás. 

Dream, se dirigía a su salón, al ser tímido y algo temerario le costaba hacer amigo, en cambio su hermano tenía un amigo de nombre Hate, a pesar de ser dos personas algo opuestas, tenían la misma retorcida mente, aun así Dream lo trataba solo por su hermano, e incluso lo veía seguido en su hogar, hasta el punto de verlo en la sopa.

— Oye, enano. — justo, de quien pensaba. Hate hace acto de presencia frente al soñador. — Necesito que vengas, Nightmare te está buscando.

— ¿Mi hermano me busca? — para su el soñador, era raro que su hermano lo buscara, e incluso muy rara vez lo hablaba en la preparatoria, con gente a la viste. — Después lo buscare, Hate. Debó de ir a mi clase.

— ¡Te digo que ahora! — le tomo del brazo para jalarlo y así llevarlo con él —Sabes que a tu hermano, no le gusta esperar.

Bueno, eso que dijo era verdad, bien sabía que Nightmare odiaba esperar y no le importaba si se trataba de un conocido o su propio hermano. Así que no tubo de otra que dejarse guiar el contrario.

No tardaron más de un par de minutos, cuando llegaron a la bodega de equipos deportivo, normalmente Hate y Nightmare siempre que saltaban se escondían en ese desolado y apartado lugar, pero al entrar Dream no diviso a Nightmare, como que lo confundió un poco.

— Hate, dijiste que mi hermano me estaba esperado aquí. Pero yo no lo ve...— no pudo terminar de hablar, ya que otra boca ajena se lo impido con un brusco beso.

Dream, estaba asustado. Todo, parresia ir rápido y lento a la vez, quería zafarse del beso forzado, pero Hate era más fuerte que él e incluso sintió como el contrario le mordía solo para que abriera su boca y así poder dar paso a su lengua. En teoría sentía como su boca era usurpada por la lengua ajena, asustado y llorando quería que eso se detuviera, pero no pudo hacer nada más que rogar a que se detenga y como un pequeño milagro, Hate se separo de él, al parecer lo hizo por falta de aire.

Con la respiración entre cortada, llorando y asustado, muy asustado. Dream, apenas podía asimilar lo que ocurría, estaba tan fuera de sí que ni se percato que Hate lo despojaba de sus prendas, al sentir como este le acariciaba sus costillas despertó, de ese transe.

— ¡No! ¡Suelta! — grito desesperado, pero bien sabía que era inútil. Hate no daba pie a la cordura y solo seguir sus instintos de proseguir con lo cometido. — ¡Por favor déjame!

— Oh, vamos niño. Se bien que también lo deseas. — le susurró, logrando temblar de miedo al soñador, al momento que después lamia su cuello. — Solo tranquilízate. Te gustara, pero si pones resistencia, peor para ti, pero será todo un placer para mí.

Eso fue todo, aquellas palabras lo asustaron aun más, ahora temía lo peor y lo peor estaba por pasar, al momento de sentir como Hate trata de despojarlo de sus prendas de abajo. Tenía miedo, mucho miedo. ¿Pero qué podía hacer? No era fuerte como su hermano ni valiente, nada. Lo único que podía hacer era llorar, cerrar sus cuencas y rezar que todo eso acabara lo más rápido posible.

Cerro sus cuenca, pero un ruido ensordecedor y al sentir su cuerpo liviano, como si ahora ya nadie lo agarraba abrió lentamente una de su cuenca, pero al ver a Hate en el suelo y con una pequeña herida en su quijada, no pudo evitar el abrir más sus cuencas confundido.

— ¡Maldito! ¡¿Qué se supone que haces con Dream?! — Nightmare, avía entrado y al ver aquella escena no dudo en proporcionarle un fuerte puñetazo a Hate en su cara, logrando así que se separaran.

— ¿Hermano? — confundido, miro al príncipe de la pesadilla, jamás creo que este bien lo defendería, siempre dejaba que sus amigo lo molestaran o insultara hasta que lo golpear.

— ¿Se supone que estaba en tu patética clase de literatura? —le cuestiono Hate, jamás pensó que arruinaría su plan de poseer a Dream

— Estaba, pero se me hacia raro no ver al idiota de mi hermano en el salón. — le respondió, quitándose la chaqueta y tirándoselo al soñador para que este se cubierta sus costillas. — Pase por aquí, escuche los gritos de niña del idiota de mi hermano.

— Ja, no me hagas reír. ¿Ahora resulta que si quieres a este idiota que tienes de hermano? — rio ante su pregunta, bien sabia la relación que esos dos hermanos llevaban.

— Escúchame Hate. — se le paro en frente, estaba muy enojado, tanto que no le molestaba para nada ensuciarse las mano con el contrario. — Puedes insultarlo, molestarlo e incluso golpearlo. Me da lo mismo. Pero... ¡Lo que le ibas hacer no lo puedo dejarlo pasar maldito enfermo!

Fin del recuerdo...

—Nightmare impidió que Hate fuera más allá, los dos se pelearon hasta el punto de lastimarse gravemente los dos, el director de esa preparatoria se entero y expulso a los dos. Mi madre se entero y no le regaño a Nightmare por ser expulsado, a decir verdad estaba orgullosa, igual que yo... —aguardo unos segundo, no pudo más y se quebró comenzando a llorar con más intensidad. — ¡Tenía mucho miedo Cross! Si no fuera por Nightmare, él...

Cross, no pudo aguantar más, le dolía en el alma el ver como el soñador se rompía en pedazo frente a él, ahora tenía ganas de matar a Hate, por atreverse a dañar a un ser inocente cono Dream.

— Ya no llores... — lo abrazo con delicadeza, sentía que era lo correcto. — Lo pasado, en el pasado. No pienses en el "¿qué hubiera pasado?" Lo importante es que no paso a mayores.

— Cross... —sentía el latir del alma de Cross, el abrazo era cálido, hasta diría que brindaba seguridad y alegría.

Dream se cuestionaba, que sería lindo abrazarlo así todos los días, pero tuvo que salirse su ensoñación, ya que la puerta del vestuario se abrió, por fortuna solo se trataba de Error.

— Con que aquí estabas maldita Cruz.... ¿Qué le sucede al soñador? — cuestiono la falla al ver que Dream lloraba, claro que no llego al instante que estos de abrazaban.

— No es nada Error, yo ya me iba... — se limpio sus cuencas y se marcho, pero no antes de agradecerle a Cross por apoyarlo. — Gracias Cross, eres un gran amigo.

El monocromático y la falla miraron por donde Dream se fue, Error dudaba de si preguntar lo que paso o no, pero Cross se le adelanto.

— Oye Error, ¿Qué paso con el partido? — interrogó Cross, recordando que avía un partido que ganar, pero se quedo mas impresionado al ver como Error traía todo su uniforme roto y alguno que otro moretón.

— Como veras, nos hemos peleado, fue brutal. Por lo que el árbitro decidió cancelar el partido hasta nuevo aviso. Por cierto. ¿Qué paso? ¿Interrumpí algo?

— ¡Claro que no idiota! — le grito apenado, pero muy a su pesar sentí aun el calor del soñador cundo correspondió a su abrazo.

— Como sea, por cierto no sabes que paso en la cancha.

— ¿Qué paso? — cuestiono Cross, confundido.

— Al parecer, Dust sale con el amigo azulado, de tu amiguito. — respondió Error entre risa.

— ¡Ya basta de....! Espera... ¡¿Dust sale con Blue?! — grito impresionado, jamás pensó que algo así fuera a pasar, a si que su teoría de que Blue está enamorado secretamente de Dream quedo descartada.

— Como lo escuchas, durante la pelea los otros idiotas, que al parecer eran nuestras malditas porristas, estaban muy cerca de la cancha y Blue también está ahí...

Hace un par de horas atrás...

Una batalla campal se asía acto de presencia en la cancha de básquet bol, todos miraban atentos y los que estaban muy en frente de la tribuna intentaban no meterse en ese lugar ya que era prácticamente un suicidio, por desgracia para; "las porristas" estaban muy cerca de la cancha, por lo que coriana mas el riesgo de salir lastimadas. Las porrista del instituto Jaguar pudieron salir ilesas, pero la del instituto Halcón no tuvo esa suerte, apenas si podían hacerse paso a los vestuarios.

— Sera mejor, tomarnos de las manos para no perdernos. — sugirió Ink, tomando la mano de Lust y este intentando tomar la mano de Blue, pero fue tarde ya que alguien jalo a Blue, en medio de la disturbio. — ¡Blue!

— ¡Blue! — grito Lust, igual de preocupado que Ink.

— Pero mira que hermosa eres... — al parecer, un alumno del otro instituto avía jalado a Blue, pensando que era mujer. — serás perfecta para mi novia.

Asustado, el arándano cero sus cuencas temiendo lo peor, algo o alguien lo impidió, sintiendo como su cadera era presa por manos ajenas, al abrir sus cuencas vio a Dust que lo abrazaba de forma protectora.

— ¡¿Pero qué te pasa idiota?! — le grito el otro sujeto, con un color morado en la cara producto de aquella fuerte golpiza. — ¡Esa es mi chica!

Dust miro con rabia y celos al idiota que se atrevió a tocar a su arándano, eso fue suficiente para infligir miedo al sujeto. Como reclamando por su posesión, solo apretó mas a Blue, con recelos para no dejarlo ir. Respiro hondo y grito.

— ¡Tocas de nuevo a mi novio y te mato! — grito a viva voz, dejando aun mas confundido a Blue, ahora rogaba que solo allá sido un mal sueño

Fin del recuerdo.

— Después, el árbitro pudo parar la pelea y anunció que el torneo se suspendía. — termino de contar todo lo que paso al monocromático. — Por cierto, ahora todos están interrogando al polvito, pero el idiota de Nightmare me mando a ver por ti.

— ¿Fell está con ellos?

— No, por extraño que parece. Cuando Dust grito eso Fell se echo a correr quien sabe dónde. — respondió indiferente ante sus palabras. — Ahí llegaron.

— ¡¿Cruz, donde andabas?! — le grito Dust, entrando al vestuario seguido por los demás.

— Ah no, tú no te escapas. — le dijo Horror, siguiendo de cerca a Dust.

— El caníbal tiene razón. ¿Desde cuándo sales con ese niño? — pregunto Killer, amaba el cotilleo.

— Enserio Dust. ¿Sales con ese niño de mami? — secundo Nightmare, amaba molestar los suyos y eso era una oportunidad que no desaprovecharía

Ahí estaban todos, rodeando e interrogando a Dust para que hablara, estos no dejarían ir al psicópata hasta que no hablara y tirara lo que sabe.

Fell, por otra parte. Lo que escuchó en la cancha lo dejo con el corazón roto. Amaba a Blue más que nada en su vida, pero por desgracia él ya tenía a otra persona a quien amar.

Quería gritar, buscar una maldita razón de por qué ese idiota y no él. Lo peor de todo que ni siquiera se pudo acercar al arándano ni como su amigo, por lo menos para pedir una solida explicación.

Cegado por la ira, los celos y el desamor no dudo en golpear piña a la tronco de un árbol próximo a él. Necesitaba cambiar el dolor que tenia por un dolor más físico.

Ahora se maldecía por no tener el suficiente valor de confesarse ante Blue. Quizás, solo quizás, si abría luchado por su amor desde un principio, a lo mejor las cosa abrían sido distintas para él.