SAWAMURA...

-Estas tomándolo muy bien Eijun-me felicitaba Haruichii después de contarle lo que había sucedido hace unos días con Miyuki.

-Si bueno... recuerdas cuando se lastimó en un partido?-pregunte algo avergonzado.

-Si...

-Fue algo que me hizo pensar las cosas. Miyuki decidió que daría todo por el béisbol, aguanto una lesión para ganar y se que a mi me falta esa determinacion.

-Eijun... sabes que es diferente, los alfas buscan ganar ante todo, llámalo orgullo o como quieras pero ellos siempre se sobrepasaran, no puedes compararte.

-Lo se... lo sé Haruichii y por eso acepte su peticion- empezaba a reducir el sonido de mi voz.

-Que quieres decir?- se veía sorprendió ante mi cambio de humor.

-No quiero separarme de el... pero... tampoco quiero oponerme a su deseo- deje salir el primer sollozo.

-No es para siempre...-me trato de tranquilizar con unas palmadas en la espalda.

-Rayos... odio ser tan sensible cuando se trata de el, cada vez es más difícil controlar mis estados emocionales...

-Eso significa que lo lograron-me sonrió.

-Lograr?-pregunte dudoso

-Se dice que los destinados no lograr conectarse hasta que el sentimiento es mutuo, aunque sus instintos los unieron desde antes, su cuerpo no reaccionará hasta que sus sentimientos lo hagan... es un cuento viejo pero contigo parece que se hace realidad cualquier cosa- su mirada brillaba de manera que me hacia sentir incómodo.

-Quieres decir que... estamos llegando a querernos?

-Claro que si, todos nos damos cuenta con solo verlos... tu estas totalmente marcado por Miyuki-sempai y el esta al tanto de cualquier acción tuya, deberías verlo cuando Furuya se te acerca- se burlaba y yo solo atinaba a sonrojarme.

-Eso no dice nada...-me estaba poniendo nervioso.

-Ustedes cambiaron y recientemente se nota más, tu desprendes un aura más atrayente que si no fuera por Miyuki ya se te habrían lanzado varios alfas encima- me dieron escalofríos de solo pensarlo- además Miyuki se convierto en alguien mas dominante, más cuando estas cerca, marca muy bien los límites tratándose de ti.

Nunca lo había pensado, de hecho me acababa de dar cuenta, me avergonzaba que todos lo supieran menos yo... como era posible que me viera tan débil y sumiso ante los demás? No quería que me vieran de vi esa manera pero si Miyuki estaba cerca... lo primero que haría seria... ir junto el, maldición... estaba totalmente dominado.

-Esto es recientemente?- pregunte apenado.

-Si, hace poco fue que me di cuenta que te veías más sumiso de lo normal, tu vista solo se fijaba en sempai y empiezas a desprender un olor muy atrayente cuando estas cerca de él...-se veía pensativo mientras relataba los hechos.

-Eso es normal?

-No podría contestar a ciencia cierta... los destinados son algo fuera de mis conocimientos pero pocos dicen que hay veces que tu cuerpo se rinde a su alfa por reconocimiento, esto podría ser más fuerte tratándose de destinados... es raro que pase a decir verdad.

-Como puedo saber que tengo algo de eso?

-Pues... lo más notable son los cambios drásticos hormonales... cuando pase eso no habrá forma de detenerlo y el alfa...

-Atacará por instinto- acomplete la frase.

-Si...-Nos quedamos viendo segundos a los ojos pero baje inmediatamente la mirada.

-Tengo que preocuparme?

-No lo creo, o por lo menos no todavía...

-Aaah... no puedo creerlo- suspiré resignado.

Pasaron unos minutos mientras se generaba un silencio incómodo, pero no podía dejarme abatir por algo así, como dijo Haruichii, todavía no debo de preocuparme.

-Por cierto...-interrumpio mis pensamientos- antes de que se valla Miyuki-sempai, tendremos un partido contra el equipo de Mei-san.

Me estremecí al escuchar ese nombre, sabia del percance que tuvo con Miyuki y de lo que causaba el verse pero era un hecho que también le afectaba al saber que es un omega que a cumplido lo que el aun no.

-Se hará como partido oficial solo por petición de si entrenador, nos prestarán una cancha e iran espectadores...-se veía emocionado.

-Genial...-trataba de fingir la misma emoción.

-Todo saldrá bien...-me sonrió y seguridad retiró.

Pasaron las seguridad as más rápido de lo que hubiera querido, todos nos esforzabamos por mejorar, algo que me sofocaba era sentir cambios bruscos en mis hormonas... derrepente me sentia caliente y al siguiente minuto ya no, el problema era que sabía la causa... mis cambios dependía de Miyuki por alguna razón.

No quería darle importancia pero el día del partido empeoró, lo oculte de todos, yo tenía que terminar el partido y no podía convertirme en una carga. Tuve que tomar inhibidores antes del partido porque parecía como si fuera a entrar entrar celo, la realidad es que estaba muy lejos de el, a casi un mes en realidad...

El partido dio inicio y sentía el dominio de testosterona en el lugar, mi cuerpo daba pequeños temblores que trataba de tranquilizar abrazándome a mi mismo, tantos olores me alteraban, lo único que podía hacer era concentrarme en Miyuki para apaciguar mis ansias pero no podía, el estaba centrado en  el partido... no sentía nada a lo que me pudiera aferrar.

-Sawamura estas bien?- me pregunto Kuramochi-sempai algo angustiado.

-Si... son los nervios- saque un poco la cabeza de la zona de las bancas, mi cabeza empezaba a dar vueltas.

Aunque fue débil y por un instante pude coincidir con dos olores que dominaban el lugar, los busque con la vista y me lleve una sorpresa al encontrar los ojos de dos chicos en direcciones opuestas.

Al primero que voltee a ver porque su olor dominaba por un poco fue estas loco de Furuya, sus pupilas me observaban peligrosamente, quito la mirada y regreso al juego, distraído voltee hacia las gradas al otro olor, Okumura era la segunda persona que me veía determinadamente.

Esos dos lo hicieron a propósito, el porque no era relevante pero me terminaron ayudando, mi nerviosismo se calmo y pude volver la vista al juego mas tranquilo.

Algo no estaba bien...