Hoseok.

Llevaba inquieto todo el día y el dolor de cabeza no me abandono durante este tiempo. Me había arreglado para ir a la junta de finanzas y mi guardaespaldas estaba detrás de mí. Suho por su lado miraba su celular y pude notar como algunos subordinados me miraban.

Al terminar la junta Yuta el hijo de un general de la provincia de ... se me acercó con entusiasmó. No éramos cercanos y solo aveces lo veía. El iba a ser dado en matrimonio a Taehyung. Pero aparecí yo.

Era hermoso, cuerpo delgado, no muy alto y una piel de porcelana. Un omega digno.

Aparentemente a él no le molestaba pero su progenitor y progenitora me lanzaban miradas de desagrado que eran corregidas cuando les regresaba la misma.

Los tenía en la lista de posibles personas que traicionarian. Yuta me tomo de las manos ante la mirada expectante de todos. Me regalo una sonrisa sincera y yo se la regrese.

-Es bueno verte, me alegra saber que te veré más a menudo.

-¡Yuta, habla con más respeto al esposo del capo!.- su madre corrio en nuestra dirección y me hizo una inclinación.

-Le pido una disculpa, mi hijo suele ser alguien despistado con sus modales.- el hombre gordo de su padre miraba con el ceño fruncido a Yuta. Y por su temblor sabía que no le iba a ir bien cuando llegara a su hogar. Estúpidos mafiosos.

-No está bien, Yuta es amigo mío.

Los ojos de todos en la sala me me miraron como si tuviera un tercer ojos.

Después de despedirme y advertir a pocas voces a los padres de Yuta me fui directo al carro que me llevaría a casa. Me detuve cuando Jae se detuvo enfrente de mí.

-Señor... Si señor, ¿algo más?.-

Cuando su mirada fue hasta mí, supe que lo que me iba a decir no iba a gustarme.

-El jefe no estará disponible durante esta semana. Usted tendrá que ir nuevamente a las juntas con la sala. Ahora tengo que llevarlo a casa.

-¿Donde esta Taehyung?.- pregunte cuando comencé avanzar.

Me miro algunos segundos procesando probablemente la forma en la que me refería a mi esposo y su jefe... mi jefe.

-No tengo permiso para darle más información.

-Donde esta mi esposo.- esta vez ya no pregunte con voz dulce. Esta vez mire fijamente a Jae.

-El capo solo quiere protegerlo.-

-Llevame con él.

Baje del carro con prisa mirando la camioneta negra. Era una zona a partarda pero en definitiva sabía que si alguien pisaba y no era conocido su cuerpo estaría en el río Han.

La mano de Jae me detuvo cuando un estruendo provino de la cabaña. -De verdad señor Hoseok, podría ser peligroso. Un alfa de alto rango aveces suele ser agresivo.

Lo mire y entonces comprendí mis síntomas. Mis ojos se llenaron de lágrimas y entonces susurre: El no me va a lastimar.

Sabia con claridad que no lo iba hacer, me soltó la muñeca y entonces volví a encontrar mi voz: Hasta que regresemos SeokJin y Yoongi a cargo.-

Entonces entre.

Las fermonas abundaron con todo su esplendor, mis piernas se debilitaron mientras más caminaba y entonces vi la gran espalda de mi marido.

-¿Taehyung?.- susurre. Su mirada se clavó en mi pecho como si fuera un golpee, le faltaba algo, necesitaba algo y yo quería ser eso que le faltaba.

-Lárgate.-

-No quiero.

-¡Te dije que te largues!.- chille y caí de rodillas, mi cuerpo entero se entrego a la sumisión. Quería poder darle eso que le hacía falta a Taehyung. Había aceptado que estaba enamorado. Como un idiota.

Nunca habíamos hablado de ello y no me moleste en ser el primero. Pero yo era su omega, su esposo y aunque no me amara yo quería dárselo. Sus manos me tomaron mis mejillas ya mojadas por mis lágrimas. Beso mis labios, mi frente y mi nariz y agregó; -Voy a ser gentil, voy hacerte el amor.

Mi corazón exploto, me quito el saco que llevaba, me alzó en brazos poniendo sus manos en mi trasero. Y atacó mi cuello. -Ah~ Taehyung~.-

Mordisqueo mi cuello y chupo, camino conmigo en brazos. Me dejó en la cama mientras se acomoda entre mis piernas. Se quito su camisa de vestir mientras me miraba. Tenía entre mis piernas a semejante dios griego.

-Bebé, quitatate la ropa.- la dulzura en su voz me hizo sonrojarme.

-Estás... prácticamente... arriba de mí.- mi gemido salió en un susurro mientras lamia su marca. Un escalofríos me recorrió cuando saco mi camisa de vestir y su manos tomaron mi cintura.

-Entonces necesito ayudarte.- se alejo algunos centímetros de mí y comenzó a desabotonar mi camisa. - Arriba bebé.- me dejo en su regazo cuando su boca estuvo en la mía, rodee mis brazos por su cuello profundizando nuestro beso, nuestros olores se combinaron muy bien junto con el olor de nuestra exitación.

Sí era Taehyung todo es totalmente fantástico.

Uno de sus brazos envolvió mi cintura y el otro fue a la cremallera de mi pantalón. Solte su labios con un suspiro cuando poso su mano en toda mi longitud. La mirada que me daba era hambrienta, sus ojos habían cambiado a un morado fuerte. Yo mismo me terminé de quitar la camisa, pero el hombre fue menos elegante. Rasgo su camisa y bajo hasta mis rodillas el estorbo de pantalón y ropa interior que llevaba.

Mi entrada ya estaba llena de lubricante natural, Taehyung me volvió a poner sobre la cama y aun mirandome se puso entre mis piernas llevándose con ello lo último de mi ropa. -Eres realmente hermoso bebé.- susurro mientras ponía una de mis piernas en su hombro y besaba mi tobillo. Solte un sonoro gemido cuando beso el interior de mi mulso y su mano aspera la dejo en mi pene erecto. Comenzo a bombear de una manera lenta, como hace al menos un mes y medio. Era en realidad un mojo de gemidos y exitación en mi cabeza no había nada más que la gran mano de mi esposo en mi pene.

Me queje en bajo cuando solto mi pene para esta ver besarme con lentitud mientras a movia sus manos por todo mi trasero, piernas y cintura. Mi cuerpo estaba caliente, cada toque que Taehyung me daba tenía la necesidad de pedir más.

¿Eso era amor?¿La manera en que me tocaba?¿Me hacía sentir era eso?

- Bebé, mírame.- le di la mirada un poco ida a mi esposo. Tenia una sonrisa de diversión -Eres más dócil de esta forma.- beso mi frente -Estas lo suficientemente excitado y lleno de lubricante natural.- me dio un picó en los labios -Voy a introducir algunos dedos dentro de ti para no lastimarte.- susurro con un poco de fuerza.

Sabia que Taehyung estaba en celo, pero su lobo y el no me iban a ser daño.

Tenía confianza en él.

Asentí lentamente entonces me beso, frunci me ceño por que esperaba que introdujera uno de su dedos. Pero se dedico a besarme con fervor restregando su erección en mi trasero. Su pantalón me empezaba a molestar. Pero abrí los ojos de golpe aun con el besándome cuando uno de sus dedos me penetro. Se sentía extraño en realidad. La facilidad en la que se movió. Sin embargo la extrañes se fue cuando mi cuerpo me pido más de ello.

Le regrese el beso mientras trataba de moverme más cerca de su dedo. Cuando entró el segundo. Si quería distraerme el hombre lo estaba haciendo realmente muy bien.

Cuando el cuarto dedo entró me encontraba gimiendo ruidosamente mientras Taehyung se encontraba succionado uno de mis pezones.

Me encontraba llorando del placer.

Tenía a semejante dios griego entre las piernas era imposible no gemir. De la misma forma en que sentía el placer un eje de nerviosismo me envolvía, quería con todas mis ganas tener a Taehyung dentro de mí. Pero aún tenía ese chip de que iba a doler y que todo el placer que estaba sintiendo se iba a esfumar.

-No. Solo. Soy yo.- la fuerte voz de Taehyung me hizo mirar directo a sus ojos. -Voy a entrar bebé, voy a cuidar de ti.-

Aun con ese sentimiento de duda Asentí lentamente tratando con fuerza. Me dejó jadeando en la cama para quitarse lo último de su ropa. Se volvió a posicionar entre mis piernas poniendo a cada costado de mi cabeza sus brazos. Me beso lento y con ternura.

Realmente iba a ponerme a llorar. Mi corazón estaba bombeando realmente con entusiasmó mientras estaba de estaba forma, abierto de piernas y con semejante hombre entre ellas.

Estúpido alfa.

Aun mirandome empezó a introducir su longitud, un pequeño ardor se expandió por mi cuerpo y por inercia mis piernas se contrajeron, cerre los ojos esperando cualquier cosa, tome con fuerza las sabanas, esto no me estaba gustando como lo anterior -Hoseok. Mírame. A mí.- con dureza en su voz me obligue a mirar a  los ojos de mi esposo y lo que me encontré me pillo de sorpresa.

En los ojos de Taehyung habia amor. Ternura y determinación, mi omega brinco y yo suspire dejándome dominar. Relaje mis piernas y las abrí más.

Mi esposo gruño en aprobación y una vez me lleno con su longitud los dos estábamos jadeando. Ya no había ardor, era una sensación extraña -¿Como vas corazón?.

Y-yo... voy bien.- atine a comentarle.

-¿Que sientes?.

-Extraño.

-¿Ya no duele?.

-No.- susurre mirando su rostro a sentimientos del mío.

-Voy a moverme.-

Asentí. Suspire cuando salió y volvió a entrar, era lento y dulce. Había algo de desesperación en su rostro cuando me besaba el rostro o succionaba mi cuello. Pero necesitaba algo más. Yo realmente necesitaba más.

Entonces gemí con más fuerza y clave mis uñas en la espalda ancha de Taehyung cuando arremetió mi entrada y dio en un punto. -Ah~ ¡Taehyung!.- se trago mis gemidos mientras me besaba. Los gruñidos de Taehyung no hacían más que aumentar mi exitación y el sus estocadas.

Sin embargo, Taehyung se aparto de encima mío y tomo mis manos, con una las sostuvo y la otra fue a mi cadera. Sus ojos brillaban en un intenso violeta y su agarre se hizo más fuerte. Más posesivo.

Me penetro con más fuerza miradome retorcer abajo de él. Mi vientre comenzó a burbujear con un calor sorprendente y si era más posible sus ojos aumentaron de intensidad.

-Tae~.- el placer que estaba sintiendo me estaba haciendo llorar y podría jurar que esto solo era el principio.

-Agunta un poco bebé.-

Negue con la cabeza mientras me mordía el labio, me tomo de la cintura y nos dio vuelta. El abajo de mí y yo en su regazo.

-Montame bebé, voy a besarte.- atacó con entusiasmó mis labios y por supesto que comencé a saltar en su pene.

Aprete sus hombros cuando explote y solte un grito cuando reabrió la mordida. Me ayudo aseguirme penetrando mi entrada cuando el se corrio dentro de mí dándome su nudo.

Dolia, realmente dolia, si ya en realidad era grande, el se estaba volviendo más grande. Solte quejidos por lo abajo y quise moverme pero sus manos en mi cadera me detuvieron.

-¿Duele?.- dijo lamiendo la marca.

-Sí.- dije entre cortado. Y dejé caer mi cabeza en su hombro desnudo.

-Tu querías mi nudo, bebé.-

-Callate Taehyung.-

Y la inconsciencia llego a mí.

♡♡♡

Bro, esto fue lo que me salió, espero y les guste xd. Bye.