Hoy era el día en el que los hermanos Potter y los dos Weasley menores iba a salir al callejón diagon para comprar sus útiles escolares por primera vez.

— ¿Como nos vamos a organizar para ir al callejón? — pregunto Rabastan saliendo de la cocina y comiendo una manzana 

— Por nosotros no te preocupes tío, Charlie y yo vamos a acompañar a los gemelos y a Percy, nosotros compraremos nuestros útiles aparte — los ojos de Bella y Barty casi se salen de sus cuencas al escuchar a Bill decirle "tío" a Rabastan

Rabastan y Alexandra se sonrojaron, todavía no les habían dicho nada a sus amigos respecto a su relación, posiblemente se los dirían esta noche.

— Solo les encargamos a los mellizos, tío — pidió Percy siendo secundado por sus hermanos 

— Nosotros llevamos a los mellizos a comprar sus cosas — Bella iba a aprovechar cada momento que pudiera para dejar a sus amigos convivir con los niños Potter — Y claro que todos los gastos de ustedes corren por cuenta nuestra 

Los Weasley se opusieron inmediatamente.

— No te preocupes tía, nuestros padres nos dejaron dinero para los gastos de los siete — desde hace meses la situación económica de los Weasley había mejorado considerablemente dado que el patriarca comenzó a hacer inversiones con Rabastan y Barty 

— No aceptamos un no por respuesta, mejor guarden ese dinero y repartanlo entre los siete para que puedan comprar cualquier cosa que se les antoje en el tren o en Hogsmade — no les quedo de otra que aceptar la propuesta de Barty

— Muy bien entonces ustedes tres diablillos se van con nosotros — Alexandra discretamente tomo la mano de Rabastan 

(...)

Alexandra iba caminando de la mano con Rabastan siguiendo a los tres niños por el callejón, cuando él le dio un apretón en el trasero.

(Supongamos que ya pasaron algunos meses desde que se confesaron)

— ¡Rabastan!, estamos en publico — regaño ella dándole un leve manotazo

— Y que tiene, no por estar en publico deja de gustarme cada parte de tu cuerpo — le susurro en el oído haciendo que tuviera un escalofrió

— Compórtate por favor — respondió en un susurro

— Lo que mi linda novia diga — los niños y algunas personas a su alrededor los miraron divertidos y enternecidos por los gestos del mago

— ¡Mamá, apresúrense tenemos que llegar con Madame Malkin, nos faltan túnicas para el diario! — Neville grito haciendo que más personas los voltearan a ver

Ella asintió con una sonrisa ante la emoción de su hijo, Harry y Dudley también se detuvieron.

— ¡Papá!, ¡Tú también apresúrate! — las palabras de Dudley congelaron a la pareja, una cosa era que los niños Weasley le dijeran tío y otra muy diferente era escuchar la palabra Papá de parte de los hijos de su ahora novia

— ¡Sí Papá, corre, queremos tu opinión acerca de unas camisas y otras cosas que pensamos comprar! — la gente a su alrededor pudo observar la alegría en el rostro de la pareja y que los ojos de Rabastan se cristalizaron, cosa que pudo disimular muy bien como cualquier sangre pura 

— Por supuesto, vamos...hijos — volvió a tomar la mano de Alexandra y la familia entro en Madame Malkin, túnicas para todas las ocasiones

Cuando se adentraron se encontraron con los Malfoy.

— Alexandra querida que gusto volver a verte — Narcissa Malfoy se acerco a ellos — Hace mucho tiempo que no nos veíamos, la ultima vez que nos vimos creo recordar que tenias otra pareja muy...diferente

Se notaba que Narcissa no se encontraba muy feliz viendo al Lestrenge con la castaña.

— Papá, ven con nosotros — los niños lo tomaron de las manos tratando de evitar un enfrentamiento — Vimos unos trajes fantásticos

— Yo me adelanto con los niños, mi amor — se fue dejando un casto beso en los labios de la Potter — Buenos días Narcissa, creo que se te estan olvidando los modales

La matriarca Malfoy le dio una mirada de desagrado.

— ¿Rabastan Lestrenge? ¿Es enserio Alexandra? pensé que te ibas a tomar más tiempo después de tu relación con mi primo — los ojos de Alex centellearon en furia contenida — ¿Y que es eso de cuidar y criar niños ajenos? Esos niños no....

— Te exijo respeto para mi pareja y mis hijos, no te confundas Narcissa, no recuerdo haberte dado el derecho a poder opinar acerca de mi vida privada — la voz de la joven madre era calmada pero a la vez llena de peligro — Ni mi relación con Rabastan ni el tema de MIS hijos debe ser un asunto de tu importancia

— Lo digo porque somos amigas — refuto aun en su plan necio la rubia

— Pues si quieres que esa antigua amistad continué como hasta ahora, te pido que te abstengas de opinar acerca de algo que no te concierne — la conversación entre ambas mujeres estaba subiendo de nivel 

— Él no te conviene como pareja, acepto lo de los niños, pero francamente...

— Ninguno de ellos necesita tu aceptación, respecto a si me conviene como pareja o no, creo que es algo que solo debo decidir yo, mis hijos lo aceptan y lo ven como una figura paterna...algo que ni siquiera tu primo pudo conseguir — Narcissa torció la boca ante esa información — Tú y yo tenemos una definición muy diferente de un buen partido Narcissa...por algo estas casada con Lucius

Rabastan y Lucius se mantenían distantes de la conversación de sus respectivas parejas pero sin dejar de prestar atención a ellas.

— Con mi marido no — pidió enojada la ahora Malfoy

— Con el mio tampoco — Alexandra no se detuvo a pensar en lo que dijo pero la rubia si que lo hizo — Admito que en su momento llegue a querer mucho a tu primo, pero ya no lo hago, a Regulus le guarde más luto incluso que a mi madre, tengo todo el derecho del mundo de rehacer mi vida con quien yo decida y si es cierto lo que dices de que en verdad eres mi amiga, entonces vas a respetar mis decisiones y eso implica que respetes a la pareja que yo elija tener

— Alex, si crees que él te va a hacer feliz, entonces estás más equivocada de lo que pensaba — Narcissa era la más terca de sus hermanas y la defensora número uno de Regulus Black

— De mi felicidad solo me puedo hacer cargo yo, él solo la termina de complementar, pasaron muchos años para que yo finalmente lo pudiera entender — la mirada de la mujer no perdía la ferocidad — No puedes permitir que tu estabilidad emocional dependa de alguien más

— De cualquier forma él no es Regulus — Lucius no sabía que hacer si su mujer se descontrolada

— Precisamente Narcissa, esa es una de las cosas que más me gusta de Rabastan...que él nunca va a ser igual que tu primo, espero que en algún momento logres comprender que Regulus Black es mi pasado y que justamente ahí es donde se va a quedar — Alexandra se acerco más a la hermana menor de su mejor amiga — Yo ya logre superar esa etapa de mi vida...ojala tú también puedas hacerlo, adiós Narcissa

La castaña con toda la elegancia del mundo se alejo de ella y se reunió con su novio.

— ¿Que cosas te dijo? — ella miro a los ojos a su ahora novio y todo el enojo que traía se esfumo por completo — ¿Pasa algo bonita?

— No nada, te lo cuento en la casa — él con una sonrisa la abrazo — Vamos amor, los niños nos esperan 

Bajo la atenta mirada del matrimonio Malfoy salieron de la tienda con los tres niños.

Los niños siguieron a los adultos hasta el callejón knockturn.

— Es momento de ir por las varitas — informo su madre con mucha ilusión — No hay nada mejor que les hagan una varita desde cero

— ¿Enserió? — su padre asintió ante la pregunta de Harry

— Sí, las varitas que vende Ollivander solo son entre un 75 y un 80% compatibles, funcionan bien pero no lo suficiente — los menores procesaron la información dada por el pelinegro

Todos los magos que iban por el callejón se apartaban del camino de la familia, no por miedo sino por precaución...nadie quería estar del lado malo de Rabastan Lestrenge ni del de Alexandra Potter, mucho menos si estos dos estaban juntos.

— En cambio cuando tu varita es fabricada desde cero, es mil veces mejor — les guiñó el ojo como si les hubiera revelado un secreto muy importante

— Su magia va a elegir el material y el o los núcleos que se adapten mejor a ella — llegaron al final del callejón — Solo los magos y brujas de casas importantes saben esta información, además un beneficio extra es que estas varitas no contienen el rastreador del ministerio

— Excelente — la sonrisa traviesa de los tres niños le sacó otra a su padre

— Escuchen muy bien pequeños diablillos, lo que sea que piensen hacer, na...

— "Nadie debe enterarse y por lo tanto nunca debe haber testigos, siempre desaparece la evidencia y en caso de que alguien te llegue a culpar, haz que ellos sean los que lo parezcan" — repitieron como si de un mantra se tratara

— Me siento tan orgullosa de ustedes — los ojos de los pequeños brillaron al escuchar esas palabras

Entraron a la tienda y se tardaron al rededor de entre tres y cuatro horas, cada minuto valió completamente la pena.

(Los detalles sobre las varitas se verán en el tercer capítulo)

— ¿Que otra cosa nos hace falta, enano? — pregunto el Lestrange observando a Neville que era el que traía la lista en sus manos   

El niño leyó con atención la lista.

— Ya tenemos todos lo materiales, también los uniformes y las varitas...solo nos hacen falta las mascotas — informo guardando el pergamino en su túnica azul marino 

— Muy bien mis niños, vamos al Emporio de las Lechuzas, mmm ¿que les parece si saliendo vamos a La Heladería de Florean Fortescue? — ellos asintieron con emoción siendo secundados por Rabastan 

(...) 

Neville escogió un Búho Real (Balthazar), Dudley un Mochuelo Europeo (Corvus) y Harry una Lechuza Nevada (Hedwig).

— Fue buena idea que Tulip viniera por todas las cosas para que podamos pasear con más libertad — comento Harry caminando junto a su madre

— Claro, las ideas de su madre siempre son las mejores — concordó el Lestrange haciendo sonreír a los niños y sonrojando a la castaña — Ella simplemente es perfecta

— Amor, tú bien sabes que yo no creó que exista la perfección — respondió frunciendo el ceño aún un poco sonrojada

— Para mi si existe bonita, cuando buscan en el diccionario esa palabra tu nombre aparece como la definición correcta — infló las mejillas como cuando era niña y perdía una discusión o se quedaba sin palabras

Lo más irónico del asunto es que ninguno de los dos eran "melosos" como lo estaban demostrando desde que empezaron a salir, esta noche iban a "formalizar" su relación, lo único que podian entender aquellos que los rodeaban era que cuando se trataba el uno del otro todo cambiaba y eso era algo increíble de presenciar.

— Muy romántico y todo pero...el helado ahorita ocupa el número uno en mis prioridades, dejemos de hablar y vamos por esos deliciosos helados — dijeron Neville y Dudley corriendo hacia el interior de la heladería 

— ¡Yo también voy!— grito Harry corriendo detrás de sus hermanos 

— ¡Con cuidado! — el ojiazul puso una mano sobre el hombro de la mujer 

— Tranquila cariño, son niños, esta en su naturaleza comportarse como animalitos salvajes a esa edad — dijo ganándose un golpe de Alexandra — ¿Que? solo digo la verdad, ¡ay Alexandra de la oreja no!

Ambos entraron entre risas a la heladería, todo se detuvo cuando se encontraron con los hermanos Black en compañía de Remus Lupin.

— Parece que hoy es el día de encontrarse a los Black, solo falta Andromeda y su familia — murmuro el pelinegro — Simplemente genial

Segundos después entraron los Tonks.

— Lo dicho — volvió a decir poniendo los ojos en blanco y haciendo una mueca ganándose un pequeño pellizco en el brazo

— Auch eso dolió — murmuro sobando su brazo

— ¡Hola tíos! — grito la joven metamorfomaga corriendo 

Los hermanos pensaron que la chica se dirigía a ellos pero sus sonrisas se borraron cuando ella paso de largo y se aferro a los brazos de Alexandra y Rabastan.

— ¡YA MIS PRIMOS ME CONTARON LA BUENA NOTICIA ! — grito otra vez volviéndolos a abrazar — Que bien escondidito se lo tenían he, estoy tan feliz por ustedes 

Esto ultimo lo susurro solo para que escucharan ellos dos.

— Gracias Dora, nosotros también estamos muy contentos — respondió agradecida revolviendo el cabello de la menor que cambiaba de color como si de un arcoiris se tratara, un indicativo de que se encontraba muy emocionada

— Pero te pedimos que no se lo digas a alguien más, nadie de nuestros amigos lo sabe todavía, al rato en la cena lo vamos a formalizar — pidió también entre susurros Rabastan abrazándola con cariño — Es una sorpresa

— Por supuesto tío, yo no voy a decir nada, espero que mi tía vaya a hacer el postre que tanto me gusta — respondió moviendo las cejas de arriba a abajo — Ese sería un gran pago por mi silencio

— Claro que si pequeña Tonks — al sentir la mirada pesada que Regulus le daba a Rabastan el cuál cabe aclarar ni caso le hacía, prefirió mandar a la niña con sus hijos — Tus primos están allá en el mostrador, ve con ellos querida y diles que solo tienen permitido pedir cinco cajas de helado para la casa y es para todos

— Okey — se quedó mirando a Regulus y a Rabastan de arriba abajo — Francamente no la culpó, pero a ti sí tío revivido, la tenias y la dejaste ir ¿Quién con un poco de inteligencia haría eso?

Andromeda y Edward Tonks quienes hasta el momento se habían mantenido callados vieron a su hija irse y ambos negaron apenados.

— Por favor disculpen a mi atolondrada hija — el matrimonio Tonks se acercó — Buenas tardes a todos

— Buenas tardes Andy, Ted, Remus, Blacks — Alexandra miro hacía el mostrador — Lamentamos dejarlos pero, con esos niños y su adicción al helado hay que tener cuidado, no creo que Dora los pueda controlar al 100%...al rato los esperamos en la cena

— Ojalá si puedan asistir, es muy importante para nosotros que estén ahí — Rabastan les dio una sonrisa ladeada

Con esa breve despedida se fueron. Regulus trato de seguirlos pero fue detenido por Andromeda.

— No, déjalos en paz — no le quedo de otra más que asentir con ira — Ya no la molestes, comprende que ya no formas parte de su vida, tú y sólo tú eres responsable de ello

— Acepta de una buena vez que la perdiste para siempre — el comentario de Ted hizo enojar a Sirius — Y que no eres el último hombre sobre la tierra, sino rehace su vida con Rabastan lo va a hacer con cualquier otro...tiene toda una vida por delante y lo más importante es que es soltera

Regulus se marchó cabizbajo por medio de aparición, sin imaginar el problema que dejó atrás.

— ¡Tú no te metas, esos son asuntos de mi hermano! — el grito de Sirius justo fue cuando la familia Potter y Dora salían de la Heladería con seis cajas grandes

— Mi marido no dijo ninguna mentira ni mucho lo insulto — refuto Andromeda con el ceño fruncido

Pero el Black mayor dejo de escuchar cuando vio a Harry.

— Harry, ahijado ¿Cómo estás? — pregunto tratando de agarrarlo pero el niño se aparto junto a sus hermanos — ¿Qué pasa?

— Señor Black, le pido que mantenga su distancia — la dureza en la voz del niño no se la esperaban los Tonks — A mi no se me ha olvidado lo que sucedió la última vez, usted para mi ya no es nadie

— Pero...fue ella verdad, ella te medio sucias ideas de mi en la cabeza — el niño se refugio detrás de Rabastan

— Harry tiene criterio propio, no necesita que otros le impongan ideas — Sirius otra vez se vio alterado — Ya deja de hacer berrinches

— ¡Que cosas le metiste en la cabeza a Harry! — su furia se dirigió a Alexandra — ¡Eres una perra desgraciada! ¡Pero te juro que te lo voy a quitar! ¡Él es mi ahijado, James así lo quiso!

Todo paso tan rápido que en unos instantes el Black se encontraba frente a la castaña y probablemente hubiera golpeado su mejilla sino hubiera sido por lo rápido que Alexandra detuvo el brazo, pero ella no fue la única que lo hizo, otra mano también lo detuvo.

Una persona se le adelanto a Rabastan y sorprendentemente incluso a sus hijos, nadie daba crédito de lo que estaba pasando.

¿Que les pareció?

¿Les gustó?

¿Qué opinan del encuentro que tuvo Alexandra con Narcissa?

Pobre Sirius...siempre está regandola

¿Que piensan que va a pasar ahora?

¿De quien es la mano que detuvo a Sirius?

Búho Real (Balthazar)

Mochuelo Europeo (Corvus)

Lechuza Nevada (Hedwig)

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