yo? subiendo? naaaaaaa

Entre a casa y cerré la puerta tras mi. Mientras subía las escaleras de dos en dos, le mande un mensaje a Mason junto la dirección de la casa.

En dos horas estaría aquí junto con Nico, Chase y creo que Dylan, por supuesto como olvidar a la pelirroja de Nat.

Llegue a mi cuarto, deje mi bolso que lleve a la playa en mi cama, sin cuidado alguno. Tome una toalla y tome una ducha.

El agua caía en mi piel, mientras yo, moría de la emoción. No voy a una fiesta hace como meses. La ultima vez, Scott nos insistió a mi y a Alex que salgamos y conozcamos a gente, eso hicimos, Alex termino borracha, yo maso menos, pero por lo menos podía pensar.

Scott nos vino a buscar y se prometió nunca mas dejarnos salir. Hasta hoy lo cumplía. Termine de lavarme el pelo, de enjuagarlo y salí del baño con una toalla envuelta.

Me puse ropa interior y me senté en un tocador donde ponía mi ropa sucia, hasta ahora, la hice a un lado. Luego caí en cuenta de una cosa. No tengo maquillaje.

Pero hay alguien que si.

En ropa interior me cole en la habitación de Leslie. Saque su bolsa que rebalsaba de cosméticos y volví a la mi cuarto. Maso menos sabia para que funcionaba cada cosa.

Un vez, tuvimos que ir al casamiento de mi prima Marie y me obligada a maquillarme y vestirme bien.

Demore una media hora maquillándome, toda una nueva experiencia. Ruego no haber terminado como un mapache. Cuando había terminado, elimine algunas imperfecciones. Bueno...hace mucho que no me pasaba pinceles por la cara.

Luego de eso, seleccione la ropa. Un vestido negro, que me llegaba hasta un poco mas arriba de la rodilla, no quiero parecer una cualquiera. Luego de eso, un blazer rosa fucsia. Me veía bien. Me puse unos tacones que traje con la excusa de "Por si acaso", claramente estaba en mis planes salir. O eso creo.

Eran negros y altos. Favorecian a mis piernas. Mi pelo, luego del maquillaje lo seque y lo termine de planchar. Ya es algo lacio pero me gustaba mas recto. Mire la hora. 5 minutos para que me vengan a buscar. Los chicos ya habian llegado, los escuche a hace media hora. Me tire en mi cama y tome mi celular. Dios mio.

Estoy muriendo de ganas de ir. Solo tengo instalado Whatsapp y el Candy Crush. Patetico lo se. Le mande un mensaje a Alex.

Para Alex Hoffmann:

¡Ire a una fiesta!

Como no me constesto, ni siquiera vio el mensaje, valla a saber que esta haciendo, entre al App Store, empece a buscar nuevas aplicaciones. Twitter, muy aburrido. ¿Algún juego? ¿Snapchat? ¿Ah? Dios mio, necesito actualizarme. Decidí instalar Instagram. Me la descargue y tuve que registrarme. Puse una contraseña que se que no me la voy a olvidar, luego de eso. Me puse una foto de perfil, una que Chris me tomo un dia de playa, luego de eso, busque a Alex. Ella me dijo que la aplicacion la tenia super enganchada, la segui a ella, a Scott y a mas personas que conocia. Decidi sacarme una foto. Puse de descripción: "Hoy salgo de fiesta" le di al tilde de la parte superior de la derecha y la foto se subio o eso parecia.

De repente, mi celular comenzo a sonar, un numero desconocido, lo atendi.

—¿Hola?

—Indy, ya estamos afuera, soy Dylan.

—¡Dyl! ¡Ya voy!—exclame tratando de que no se notara que estaba desesperada. No escuche nada, supongo que porque es sábado, todos están arreglándose para salir o eso se supone, digo, son ellos. Seguro tienen un plan.

Baje las escaleras con cuidado de no sacarme una pierna en el intento, hace años que no utilizaba zapatos altos. Termine de bajar y me encontré con Jace, Matt, West y Aaron estaban vestidos, con camisas y pantalones de salir, seguramente esperando a Leslie. Se me quedaron mirando sorprendidos.

—¿India..na?—tartamudeo Jace.

—La misma— le sonreí.—Me voy, vuelvo...mh, no lo se, adiós.—me despedí y salí de casa, con la mirada de los chicos tras mio. Esa no se la esperaban.

No hacia frio, al contrario, era una noche calurosa. Me arrepentí de haber traído un blazer. Vi un auto estacionado al frente, Mase estaba al volante, note que todos ya estaban dentro y me saludaban.

—Hola—dije entrando a la parte trasera del auto al lado de Natalie. Estaban, Nico al lado de Mase. Yo atrás, Natalie en el medio y Dylan al otro lado, falta uno...Chase si no fallo.

—¿Y Chase?—pregunte con temor a equivocarme de nombre.

—No pudo venir—me respondió Nico con una mirada desinteresada—Tiene que cuidar a su hermana menor.

Me limite a asentir.

—Estas preciosa—Natalie me hizo un cumplido.

—Gracias—sonreí—Pero chica, tu no te quedas atrás—bromee.

Todos reímos. Ella tenia puesto un vestido azul marino hasta un poco mas arriba que las rodillas, un collar muy hermoso color celeste que era lo que mas resaltaba. En los pies, llevaba unos zapatos de tacón blancos. Tenia su pelo rojo en ondas, o eso es lo que pude identificar en la tenue luz que nos brindaba la calle.

—Indy ¿Con quien te estas quedando?—me pregunto Dylan.

—Oh, en la casa de mis tíos, pero ahora no están así que estoy con mi hermana, mi primo y sus amigos.

—¿Son de la misma edad?—interrogo Natalie.

Asentí.

—Debe ser divertido—comento Mase.

—Lo es...—dije con una sonrisa en mi cara. ¡Alto! ¡No puedes decir que ellos te caen bien luego de todo lo que hicieron! En parte miento, pero...¿Que les voy a decir? ¿Que los odio y paso mayor parte del tiempo en mi cuarto leyendo? No, por favor.

Después de lo que calculaba cinco minutos de charla, risas y de mas, Mason estaciono su auto en una esquina, todos nos bajamos, el club del que tanto hablaban estaba mas adelante. Nico me dijo que no podíamos entrar por nuestra edad, Nico, Mase y Dylan tienen 18. Natalie y yo 17. A este club solo podían entrar gente desde los 19 a los 25. Ademas de ser super exclusivo y solo entras por lista y no todos.

Pero nosotros teníamos una ventaja, los padres de Dylan son los dueños.

Dylan el multimillonario.

Llegamos, vimos que había una fila de la impresionante. Dos hombres se encontraban en la entrada, muy corpulentos en la entrada.

Dylan saludo a los dos hombres se hicieron un par de bromas y uno nos dejo pasar, escuche como bufaron los demás al vernos entrar así de simple. Entramos y me mente se tuvo que acostumbrar, había luces por todas partes, flashes y humo, un Dj que estaba en la cima de todo, tenia tatuajes por todos lados y se movía al ritmo de la música, debe tener unos 20 años, puros universitarios. Gente bailando, pero aun se podía caminar. Divise una barra, ahora infestada de gente. La música sonaba a mas no poder.

Me metí el celular en el bolsillo del blazer y lo cerré, no quiero llamadas hoy. Solo diversión. Lo mismo hice con el dinero. Natalie —que al parecer ya conocía el club— me sentó en uno de los lugares de la barra, estaba algo alejada. En la entrada, uno de los hombres esos que te daban miedo, nos puso una pulsera amarilla que brillaba en la oscuridad.

Nos dijo que con esto eramos "exclusivos" por lo que vi, casi nadie tenia la pulsera, solo vi a unas chicas pasando que las tenían. Natalie pidió dos tragos preparados que no escuche bien por el ruido de la música, le mostramos la pulsera amarilla. El barman asintió y se fue a buscar la bebida. Al cabo de unos minutos, nos trajo dos vasos con algo rosa adentro.

Agradecimos y empezamos a beberlo, aun sin saber que rayos me estaba dando Nat. Al principio me resulto asqueroso, luego de un rato, el gusto feo se paso y me pareció la cosa mas sabrosa del mundo. Al ver mi expresión, Natalie hablo:

—Sabia que te iba a gustar—señalo la bebida y luego me guiño un ojo, haciéndome reir.

—¿Vamos a bailar?—le pregunte.

Natalie asintió con una sonrisa y con toda la adrenalina que corría en mis venas, casi corrí hacia la pista de baile. Estaba sonando algo de electrónica. Empece a saltar y moverme al ritmo de la música.

Cada tanto, Nat hacia alguna tontera y yo reía. ¿Donde estaban los chicos? Ni la mas pálida idea.

Luego de una hora de baile , fuimos a la barra otra vez, exhaustas.

Ahí estaban Nico, Dylan y Mase charlando animadamente.

—¡Hola!—grite mientras tomaba asiento.

—¡Rubia!—saludo Nico que, apuesto que esta demasiado borracho.

Natalie le pidió otra bebida rosa al barman, que gustosamente la trajo.

Me entrego un vaso. Los demás tenían el suyo.

—¡Un brindis, por la nueva integrante del grupo!—grito Natalie y chocamos vasos con una sonrisa de borrachees claramente. Menos Mason que era el conductor designado de la noche. Solo tomaba un refresco de cola. Luego de terminar este vaso, me sentí mas mareada y ligera.

Puedo jurar que no estoy borracha todavía, o eso creo. El alcohol me pega muy fuerte ¿Nunca se los dije?

—¡Vaamos a la pista!—exclamo Nico y todos muy contentos asentimos.

Empezamos a bailar un tema de Martin Garrix. Mase le tiro del pelo a una rubia que bailaba cerca nuestro, no pudimos evitar reírnos a carcajadas.

—¡Martin Garrix te hago de todo!—grito Natalie mientras bailaba con Dy.

Me reí, claramente algo mareada y confundida. Luego de una media hora, me canse, y les dije que estaría en la barra, solo para descansar.

Me sente, estaba vacia a excepcion por dos chicos alejados.ç

—Hey amigo, ¿Me traes de esas bebidas rosas? ¡Son geniales!

El chico, al parecer ya estaba acostumbrado a reacciones como estas y me hizo caso.

Ya iba por la mitad cuando una persona se sento al lado mio.

No le preste atención, iba pensando en que sucedería si un elefante se tirara por un avión justo cuando una iguana pasara por el lugar de aterrizaje ¿Se moriría verdad? Los dos...aplastados...es que la gravedad... y..

—Indiana—dijo una voz a mi derecha. Gire mi cabeza asustada ¿Cuantas personas en este lugar saben mi nombre?

Ahí estaba Aaron. Si...Johnson.

—¿Que haces aquí?—alce una ceja.

—Lo mismo pregunto. Y que haces con una de esas pulseras—me la señalo— ¿Acaso pagaste doscientos dolares?

—Vine con.., Dylan...Natalie...Mase....y el otro que nose como se llama—dije.— Y gratish.

Aaron le dijo algo al barman y el se fue a preparar su bebida.

—Bueno... por si preguntas me dijeron que este club estaba muy bueno, así que con los chicos vinimos a ver que tal.

—Ah. —me limite a decir— Pero si eres menor de...

—Shhh—antes de que pudiera terminar mi frase sus manos se encontraban tapando mi boca.—Identificaciones falsas—susurro el a mi oído.

Y asentí solamente para que me soltara.

—A pues, el hijo del dueño es Dylan y es mi amigo.

—Pues suerte la tuya.— el barman le entrego un vaso a Aaron.

Tomo un sorbo.

[...]

—¿¿RECUEERDAS ESOO??—pregunto Aaron riendo a carcajadas. El había tomado ...hm... ya no se cuantos vasos de vodka y yo... esa bebida rosa me volvió adicta. Estábamos mas borrachos que la mierda.

—Siiiii—dije riendo—Luego te hiciste pis en los pantalones.

—¡No me hice pis! ¡Era agua!— Aaron rió.

Ya habían pasado 2 horas, son las 2 de la mañana, el club esta igual que antes, no volví a ver a ninguno de los chicos, cosa que actualmente no me preocupaba.

—Vamos afuera—propuso el y yo asentí. A los tambaleos, salimos del club. Nos sentamos en una esquina, en la calle, si en el piso. Como dos verdaderos borrachos.

Al fin aire fresco.

—No tenia pensado tomar esta noche—dijo Aaron mirando a la nada.

—Créeme, yo no tenia planeado ni venir—largue una carcajada y el me la siguió.

—¿Recuerdas cuando pasábamos nuestro tiempo juntos?—pregunto el.

—Que desperdicio de tiempo fue ese—reí. Pero Aaron no lo hizo.

Giro su cabeza para mirarme.

—A mi me gustaba-dijo encogiéndose de hombros. Así parecía tan inocente. Pero de inocencia no le queda nada.

—Eh...pensándolo bien...fueron buenos tiempos, y luego llego ¡ESA...! Y me arrebato todo—reí secamente—La odio, me quito todo lo que quería en este mundo. Termine siendo una estúpida...Traga libros cuando realmente no soy así. ¡Me gusta el arte!

—Es una puta—concordó Aaron—A mi me gustaba actuar, sin embargo lo deje todo.

Puse una mueca, sin saber como responder a eso.

—Una puta con suerte—dije luego de un tiempo y reímos.

—Aun no puedo creerlo—dijo negando con la cabeza.

—¿Que?—pregunte.

—Que hayamos terminado así.

—¿Así como? ¿Tirados en la calle o así en relación?

—Las dos cosas —dijo y volvimos a reír. Ya me dolía la el estomago de tanto reír. Extrañaba pasar tiempo con Aaron.

—Se me rompió el corazón—murmure de la nada.

—El mio no se rompió, un camión lo paso por encima—dijo Aaron.

—Estamos...¿iguales?—pregunte.

—Iguales—respondió el—Rotos y lastimados.

Asentí con la cabeza.

Luego de unos minutos, Johnson volvió a hablar.

—¿Puedo besarte?—se giro a verme.

¿Como?

¿Alguien se acuerda? ¿Se besan o no? (ni yo me acuerdo, ahora voy a ver ajajaj)

¿Quieren que se bbbbesen?

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