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Capítulo Diecisiete

Un mes había pasado desde la última vez que vio a ChanYeol. El gigante había salido esa última noche en Buenos Aires y había regresado a la tarde siguiente para tomar su maleta y regresar a Seúl, manteniéndose indiferente al rubio durante todo el camino, siendo sus últimas palabras un seco "Adiós y gracias" que dejó una incómoda sensación en lo profundo de BaekHyun.

¿Qué había esperado? ¿Que el peligrís aceptara seguir siendo su amigo después de lastimarlo de esa manera? Era obvio que iba a evitarlo, y el rubio decidió respetar su decisión. El Compositor necesitaba espacio para sanar y olvidarse de su llamado ángel; de esta forma podría seguir adelante y no terminar en un maldito auto sin frenos como él.

Odiaba el ser superficial y estúpido en el que se había convertido, pero lo prefería a regresar a ser el tonto de antes.

Pasando la mano por su cabello, intentó centrarse en el hombre alto y fibroso que se encontraba a su lado, su nueva presa, alguien que lo dejara hecho polvo para poder dormir tranquilo y dejar de pensar en sandeces; necesitaba enfocarse en su trabajo.

—Hay un parque a cinco cuadras que casi siempre está vacío —mencionó al pelinegro que estaba conduciendo—; vamos allá y follamos sobre tu auto, ¿qué dices?

El hombre rió y asintió obedeciendo las instrucciones del delicioso rubio a quien había conocido esa tarde, ansioso por probar si era tan picante como parecía.

—¡Aquí! —Exclamó el más bajo señalando la sombra de un árbol grande que les daría mayor privacidad.— Perfecto —dijo quitándose el cinturón y lanzándose a besar al más alto.

Pero su teléfono lo interrumpió antes de que pudiera llegar a saborearlo.

—Aishhh —se quejó buscando el aparato en el bolsillo de su pantalón, decidido a apagarlo para que no volvieran a interrumpirlos; pero al ver que se trataba de KyungSoo, su amigo y además estrella en ascenso, tuvo que contestar.

—¿Sabes dónde vive SeHun? —Preguntó el fotógrafo apenas atendió. Byun rodó los ojos y bufó.

—¿Para eso me llamas? ¡Estoy ocupado! —Espetó con enojo, pero el gruñido de su amigo al otro lado de la línea evitó que colgara.

—Yo también lo estaba, pero el idiota de Kim me interrumpió —renegó con voz oscura y tenebrosa.

—¿Hablas de Jun? —Preguntó el rubio mostrándose interesado.

Sin importar el tiempo que pasaran separados o las peleas que pudieran tener, BaekHyun siempre iba a preocuparse por Kim JunMyeon.

—Sí, está desesperado buscando a SeHun —chasqueó la lengua—; ¿sabes dónde vive?

—Sí —declaró recordando el departamento que había visitado antes de salir de viaje.

—Bien, encárgate —ordenó KyungSoo antes de colgar sin siquiera despedirse.

El rubio suspiró y volvió a pasar la mano por su cabello, pensando en lo que debería hacer.

—¿Todo bien? —Preguntó el hombre pelinegro que lo observaba con curiosidad.

—Mmm, no —respondió honesto—; ¿crees que podrías llevarme a un lugar antes de que tengamos sexo? Es urgente.

El chico sonrió divertido y asintió antes de encender el auto y seguir las indicaciones del más bajo.











🐶.🚘.🦒














JunMyeon se veía desolado, con el ceño fruncido y ojeras marcadas que expresaban clara preocupación. BaekHyun caminó hacia él sintiéndose nervioso y por un momento extrañó los días en los que corría y se lanzaba contra él a modo de saludo, cayendo ambos al pasto y revolcándose entre risas como los muchachos que eran, sin preocuparse de nada más que el día a día.

Pero lamentablemente no podía estar cerca de él o siquiera mirarlo sin que sus heridas sangraran abiertas de par en par, mostrando lo poco o nada que habían cerrado en todo el tiempo que llevaban separados. Lo único que le quedaba ahora era hacer uso de su armadura y acercarse para hablar del tema más importante para el castaño: SeHun.

—Sí, sí, ya sé; no debo acercarme a tu precioso Hunnie —dijo rodando los ojos y pasando una mano por su cabello—; pero ya que tuviste las agallas de interrumpir a Kyung durante una sesión de salsa dura y picante para preguntar por tu hombre —alzó ambas cejas con picardía—, decidí arriesgarme a perder el ojo y venir a ayudar —se encogió de hombros.

JunMyeon sonrió ante las exageradas palabras del que antes fue su mejor amigo y aceptó, mostrando con una cálida mirada lo mucho que aún lo extrañaba.

—Entonces, ¿me dirás dónde vive SeHun? —Cuestionó fijando su mirada en la del rubio, intentando dar un mensaje que el manager de Cromo entendió a la perfección.

Pero no estaba preparado para responder.

—Si quieres... Pero no creo que sirva de mucho, no está ahí.

BaekHyun se encogió de hombros y le contó su travesía yendo a buscar al menor para traerlo de las orejas frente a Jun; sin embargo, el menor llevaba días sin llegar a su departamento.

—¿Quieres que llame a un investigador privado para que lo busque? —El castaño negó y resopló decaído, casi a punto de llorar.

Byun odiaba ver al mayor en ese estado.

—Puedo reportarlo a la policía como persona desaparecida, si quieres —ofreció el rubio sacando su teléfono—; incluso puedo pedir ayuda a los fans de Cromo, lo buscarán por cielo y tierra si ofrezco dar una serie autografiada a quien lo encuentre.

JunMyeon levantó la mirada hacia el rostro preocupado del menor y lo observó detalladamente.

—¿O prefieres que llame a su familia? Puedo hacerme pasar por un prestamista y amenazarlos para que me digan dónde está —sugirió el manager de Cromo abriendo los ojos con emoción—; puedo incluso modular mi voz para que no me reconozcan, escucha.

Se aclaró la garganta y sacudió su cabello.

—Annyeonghaseyo —dijo con voz aguda muy parecida a la de una señora mayor—, soy la prestamista... Kwon. ¿Está Oh SeHun? ¡Ese mocoso me debe mucho dinero! ¡Mucho! ¡Mi espalda me duele de tanto buscarlo! ¡Auch!

Kim rió y se lanzó a abrazar a quien aún quería como un hermano, sintiendo sus ojos humedecerse cuando los brazos contrarios rodearon su cintura y le dieron suaves palmadas en la espalda a modo de consuelo.

—Baek... —Sollozó Jun en el hombro del rubio— Lo siento tanto, yo no...

—Shhh, tranquilo —pronunció BaekHyun mientras acariciaba el cabello de su antiguo amigo—. Si es por el puñetazo, no te preocupes; quizá hasta me lo merecía —rió.

El castaño se apartó levemente para mirar al menor, quien lo observaba con los ojos vidriosos.

—Y si es por lo otro... —suspiró— Tú no tienes culpa de nada, Myeonnie —le sonrió—; solo fuiste un daño colateral que no supe remediar —mordió su labio y bajó la mirada.

—Aún no sanas, ¿o sí? —Preguntó Kim con temor.

Baek sonrió débilmente y negó.

—No creo que llegue a hacerlo jamás —murmuró recordando el tiempo que pasó a lado de ChanYeol, todos los gestos hermosos que había tenido el gigante hacia él; pero ni aquello había sido suficiente para curarlo.

El castaño abrió la boca molesto, queriendo reclamar algo que el menor no quería oír, por lo que sacudió su cabello recuperando su ánimo y le regaló una sonrisa brillante y fresca que opacara el momento de ruptura que había dejado ver.

—Bueno, debo regresar con mi cita —dijo pasando la mano por su rubio cabello—; me demoré tanto que quizá hasta me castigue —le guiñó con coquetería—. Nos vemos.

BaekHyun se dio la vuelta y caminó en dirección al auto deportivo amarillo donde lo esperaba el hombre apuesto y bien construido con el que había decidido pasar la noche.

—¿Todo bien? —Preguntó el sujeto apenas el rubio ingresó al asiento del copiloto.

—Mmm, no realmente, pero no importa —le sonrió—; ¿vamos?

El hombre asintió y arrancó en dirección al hotel que le había sugerido el más bajo; sorprendiéndose de inmediato ante la grandeza y elegancia del sitio. ¿De verdad ese lugar ofrecía habitaciones por noche? Lo dudaba.

—¿Eres millonario? —Le preguntó al rubio mientras ingresaban al vestíbulo, Baek negó.

—No, trabajo con ellos —respondió tranquilamente camino al ascensor.

—¿En qué? —Consultó curioso.— Aún no me dices a lo que te dedicas.

—Y tú aún no me has dicho tu nombre; pero no importa, dulzura, solo será una noche —se encogió de hombros quitándole importancia.

El más alto asintió y lo siguió hasta la costosa habitación, dispuesto a disfrutar de todo lo que aquel candente rubio estuviera dispuesto a darle.














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