Al oír tal pregunta, Albina se guardó un silencio suspensivo para reflexionar, en sus pensamientos imaginando la última vez que vio a su hermano Ángel en la estación de tren, hasta aquella vez que se enteró de que tenían una enfermedad mortal.

Albina: Ustedes saben de ángel ¿enserio?

Marshall: ¿Quién es Ángel?

Princesa: Es el hermano mayor de Albina

Albina: Y no lo veo en mucho tiempo

Princesa: Mi pequeña, ven conmigo

Narra la princesa

Desde que Albina se fue me decidí a estar al día con el estado de Ángel en el hospital de la ciudad en la que se encontraba, con la intención de asegurarme que estuviera bien cuando Albina decida verlo. Hace casi 3 años desde que Ángel lucha con la influenza canina, llegó a contraer neumonía por aspiración grave, así que lo trajimos al hospital de Ladriburgo, para que sea atendido de una mejor manera.

Princesa: ¿Entendiste?

Albina: Creo que sí, pero ¿a dónde me llevas?

Princesa: ¿A dónde más? Vamos a ver a tu hermano, por suerte me llevo muy bien con las veterinarias de este hospital animal

Albina: Ah entiendo, ok no entiendo

Una vez en el hospital del que la princesa hablaba, ella llevó a Albina a conocer a la veterinaria que trataba a Ángel.

Dra Amy: Oh buenas noches su majestad, ¿cómo está?

Princesa: Muy bien Amy, hoy quisiera presentarte a Albina, es prima de la cachorra real

Dra Amy: Hola Albina

Albina: Mucho gusto doctora, soy técnica adiestradora veterinaria, de Bahía Aventura, mi nombre es Albina

Dra Amy: (Confundida) Ehh...

Princesa: Ella trabaja en un santuario animal de Bahía Aventura

Dra Amy: Ah ok jeje, Mucho gusto, ¿qué necesitan?

Princesa: Albina es la hermana menor de uno de sus pacientes, un cachorro westy, 10 años de edad...

Dra Amy: ¿Se refieren a Ángel

Albina: Sí es él ¿dónde está?

Dra Amy: Él tiene influenza canina, llegó hace un año con una neumonía grave, pero parece que ya lo estamos venciendo, los cachorros de su edad se recuperan rápido

Albina: ¿Puedo verlo?

La Dra Amy lleva a Albina a una sala de recuperación, ahí mira por la puerta de la habitación a su hermano dormido con algunos aparatos conectados a él.

Narra Albina

En todos mis años de vida nunca imaginé que vería a mi querido hermano en ese estado, si no supiera que ya se está recuperando, pensaría que está agonizando, fue una experiencia devastadora visualmente.

Albina: (Casi llorando) ¿Puedo entrar con él? Por favor

Dra Amy: La cosa es que la influenza canina es muy contagiosa, así que no puedes entrar a la habitación

Albina: ¿Al menos puedo dejarle algo?

Dra Amy: Claro, adelante

Albina fue a una pequeña mesa y tomó una hoja y le escribió en ella las siguientes palabras:

Querido hermano Ángel

Si lees esto es porque tengo las esperanzas de estar contigo nuevamente, como en los viejos tiempos

Fue por ti que aprendí a conocer el mundo, y nunca dejaré ese conocimiento, tú me enseñaste a madurar

Prometo que en cuanto te recuperes estarás conmigo, y nunca jamás te dejaré de nuevo

Con mucho cariño, tu hermana Albina

La Dra Amy dejó la hoja al lado de Ángel en su cama, junto con la cajita musical que Ryder y los cachorros le regalaron a Albina. La cuál se la puso para mantenerlo feliz en sus sueños y para generar esperanza de que pronto superaría la influenza canina por completo.

Continuará....................................