Evan, una de las únicas jóvenes que eran parte de los últimos hombres. Su única y mejor amiga le apoyaba en todo, ambos de sus padres fueron asesinados de una manera tan sospechosa que ni ellas sabían, pero solo creían que no requerían de adultos para poder vivir.

- DeCarcci, García y Henderson. - ese que hablaba era el líder de su grupo, estaba compuesto por 6 personas, pero los mencionado eran los más fuertes. - Dicen que vieron un niño con cuernos cerca del tren, su misión es traer a esa peste humana viva o muerta.

- Cuernos... ¿Cómo los de un ciervo o un toro?

- No me preguntes cosas que no se, DeCarcci. - Respondió su líder con tal rudeza que le cerró la boca a Evan. - Prepárense, nos vamos en 5.

Evan miro de reojo a su amiga, su nombre era Valentina, Una chica que a pesar de todo, siempre estaba tan feliz como un conejo saltando por los alrededores de un patio. Sin miedo alguno.

Evan y Valentina tomaron sus cosas junto al otro chico, Steban Henderson. Corriendo hasta los autos, se tropezaron con otros últimos hombres entrenando a otros reclutas.

Pasaron minutos, largos minutos para los tres chicos del auto, Evan tenía su cabeza hacia atrás, Valentina miraba el paisaje con una gran sonrisa y Steban... Steban solo dormía con la boca abierta.

- ¡Despierta Henderson! - Exclamó en hombre que manejaba aquel auto. - No estamos en una maldita pijamada.

- ¡Nos atacan! - un hombre grito a los cuatro vientos, pero varios gritos de dolor se escucharon, cosa que los alertó a todos.

- ¡Es el ejército animal, acaben con estás abominaciones! - Musitó el hombre en el volante, apunto a el arma que tenía Evan en sus piernas recibiendo un rápido asentimiento de la chica.

La chica bajo del auto a toda prisa, justo al bajarse una persona le lanzó una piedra, un chico con plumas en todo su cuerpo. Evan ladeó su cabeza preguntandose si era halloween, o por qué todos usaban disfraces de animales.

Rápidamente alzó su arma y disparo, su mano tan siquiera tembló, la bala impacto el pecho del chico y cayó de espaldas soltando un grito agudo.

- ¡Alejandro! - Exclamó una chica corriendo hacia el chico... Tenía un traje de tigre, incluso una cadávera de tal animal. Volteo a mirar a Evan y su enojo amuento al ver su sonrisa burlesca.

- Ven gatito, gatito. - dijo Evan con tono de burla, la chica se abalanzó sobre Evan y comenzó a ahorcarla. - El gatito tiene garras...

Desde otro lado, Valentina y Steban peleaban con otros miembros del ejercito animal, la mayoría de los últimos hombres estaban en el suelo desagrados y muertos.

Pero desde lo lejos, observaron a Evan batallar por su vida, al levantarse, la chica con el disfraz de tigre golpeo la cabeza de Evan con el culo de una arma que había encontrado en el suelo.

DeCarcci al instante, cayó de espaldas desmayada, su cabeza sangraba a mares. Otra chica junto a otro chico llegaron, uno con el disfraz de un rinoceronte y la otra con el disfraz de un oso.

- Deberíamos de llevarla con nosotros. - dijo la chica de tigre. Recibió un asentamiento de la otra chica

La chica que tenía el disfraz de oso le miró con el ceño fruncido, el chico disfrazado de rinoceronte pateo su brazo y saco unas cuerdas de su bolso.

- Ayúdenme a amarrarla. - murmuró él chico mientras alzaba a la chica dese sus hombros, haciendo que está se quede sentada.

- No hay que ser delicados, Rino. - escupió la chica de tigre. - mato a Lion.

- ¿Eran amantes? - pregunto el chico burlesco. Soltó una risa y comenzó a amarrar las manos de Evan.

- Era mi primo, tarado...

- Basta. - la chica vestida de oso cerro sus ojos y los abrió al instante. - pelear no resolverá nada. Haremos lo de siempre, preguntamos por los híbridos que han desaparecido, luego la matamos.

- Deberíamos matarla ahora, osa. - la tal osa nego. - Bien. Cómo el osito ordene. - dijo Tigresa con tono burlesco.

Osa suspiro tomando las piernas de Evan y las amarro, Rino le cargo todo el camino hasta su hogar.

Al llegar, buscaron un lugar oscuro, agarraron una silla y sentaron a Evan, sus piernas ya amarradas, al igual que sus manos la cual tenia amarrada a las patas de la silla, su cintura estaba amarrada, casi todo su cuerpo. Incluso, tenían una cubeta llena de agua junto a un trapo cualquiera, junto a esto, colocaron una cuerda en el cuello de Evan, algo floja solo para usar en momentos como le diría rino, "especial".

- Despiertenela. - ordenó osa, Rino le lanzo un poco del agua que habían en el cubo, ocasionando que está se despertara de golpe.

Respiro agitada, intento sacar el agua de su rostro con sus manos, pero cayó en cuenta que estaba amarrada.

- Que rayos... - Evan abrió bien sus ojos y comenzó a reír. - Ay, ay, ay... Humanos disfrazados de animales... Un gatito, un cuernitos, un osito de peluche, y una cotorra humana.

- Cierra la boca.

- No eres nadie para callarme, gatito. - Evan soltó una risita burlesca y hecho toda su cabeza hacia atrás exhalando el aire que tenía retenido.

- Solo queremos una cosa de ti, luego, morirás.- hablo osa, comenzó asercarse a Evan, tomo un pequeño banco y lo coloco justo enfrente de DeCarcci. Al momento, todos los prensentes quitaron sus máscaras.

- Curioso, no todos los asesinos muestran sus caras antes de asesinar. - murmuró Evan y ladeó su cabeza con una pequeña sonrisa. Hasta este punto tal vez Evan sentía una pizca de miedo. - Eres algo linda sabes...

Evan miro a los ojos de osa durante unos largos y pesados segundos. Osa alzó una navaja y la coloco en la muñeca de Evan, justo sobre sus venas.

- Cuántos híbridos han matado...- murmuró Osa haciendo precion en su muñeca.

- No lo se, tal ves unos dos o tres. - respondió Evan fingiendo demencia.

- Respuesta equivocada. - Osa hizo un rápido corte en su muñeca. Evan soltó un pequeño gemido de dolor y bajo su cabeza mirando su recien herida.

- Auch... - se quejo la chica de pelo castaño. - Esa cosita si duele.

- Cierra la boca. - ordenó Osa, está vez colocando la navaja en su cuello. - Cuántos híbridos, han matado... En total.

- No lo se... Mi grupo no llega a matar hibridos, solo hemos capturado una chica cuervo y un chico gorila, pero no sabemos que hacen con ellos. - respondió Evan desviando su mirada.

Osa bajo su navaja más convencida de su respuesta, miro a rino, indicándole algo con la mirada, al acercarse a Evan, está le mordió su brazo por tres segundo.

Rino soltó un alto grito, Evan paso su lengua por sus afilados colmillos y le sonrió al chico.

- De nada... - susurro Evan en el odio del chico.

Varios en la habitación, notaron la lengua de Evan... No era una lengua normal, era delgada y estaba algo separada desde el medio.

- Es una híbrida. - Dijo osa al instante, se levantó del asiento que estaba y se acercó a rino. - Es una mordida de serpiente. Podría ser venenosa.

Osa miro a Evan con el ceño fruncido. - Danos la cura y te liberaremos.

- Liberenme y les doy la cura. - contradijo  Evan, Osa miro a rino con frutracion, luego volteo a mirar a Evan. 

- Amarren su cuello. - Rino se tiro en una esquina retorcido en dolor, tigresa se acerco a Evan y tomo su cuello con fuerza, otra persona abrió su boca de golpe tomando su mandíbula con fuerza.

Osa tenia un vaso con un plástico encima, se acercó a Evan observando la oscuridad de su boca, tenía manchas rojas, suponiendo que era la sangre de rino.

Coloco el vaso sobre uno de sus colmillos y al instante, Evan inconscientemente le mordió y escupió gran parte de su veneno.

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Ni yo sé cómo escribi esto, creo que salio del qlo pero x.

NUEVO FIC MY PEOPLE, DE NUESTRA MUJER BECKY

ATT: STARLINGZS.