Natalia

Es la primera tarde en mucho tiempo que pasaré en compañía de alguien.

Siendo sincera, no sé si esto vaya a ser bueno o malo para mí. Frecuento este lugarcito hace meses, quería buscarme un sitio solitario y agradable, donde pudiera estar en paz y con la única compañía de la naturaleza y los pájaros. Un lugar donde nadie me molestase, ni me incomodase, donde pudiese ser yo misma en paz.

Aunque Tiago a primera impresión me parece un chico muy agradable y divertido, no sé cómo vaya a resultar esto. Desde que pasó aquello ya no me adapto muy bien a una compañía, no sé conservar amistades, no soporto ya tanto a la gente. Debo admitirlo: me volví una ermitaña, pero creo que también ya tengo que ir superándolo, no puedo vivir amargada por siempre y tampoco por culpa de ese malnacido puedo huirle a la demás gente.

Primero veré como es realmente Tiago, si me demuestra ser en esta semana un buen chico y cero latoso, voy a intentar forjar una amistad con él. Si demuestra lo contrario, tendré que buscarme otro rinconcito.

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¿Extrañaban estar en la mente de Nat?

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