Llego a casa de la señora Yellow a las siete de la mañana.

Ella me presenta a sus dos caninos: Lucy es una chow chow muy cariñosa y Tinny, un enérgico labrador de pelaje blanco.

La mujer se despide de sus amados perros y me ofrece algunas indicaciones.

¡Manos a la obra!

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Hasta el momento todo marcha bien.

A pesar del frío, es un día precioso para pasear. El cielo azul, desprovisto de nubes, y los débiles rayos de Sol que comienzan a aparecer me transmiten mucha calma.

Lucy está muy inquieta, pero he podido controlar la situación.

Yellow me advirtió que sus perros se comportarían de esta forma, puesto que para ellos soy una completa extraña; no obstante, afirmó que con los días terminarían adaptándose.

Tinny me sorprende, pues se ha comportado de manera tranquila.

Según entendí, no es propio de él...

—¡Tinny! —Le acaricio la cabeza—. ¡Buen chico! ¡Así se hace!

El perro mueve la cola y me mira con una carita que ablanda mi corazón.

Sonrío, complacida.

Quizás, después de todo, no me vaya tan mal con ellos...

Tinny está feliz. Está tan feliz que levanta la pata y me orina justo encima del pie.

—¡Maldición! —exclamo.

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☕ N/A:

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Si hicieran un concurso de mala suerte, Aylin obtendría el primer lugar. ¡Ese Tinny es un pillo! xD UnU

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Nos vemos en la próxima actualización. <3

Abrazos virtuales,

L. P. L. 🖤✨