Los 6 hermanos junto a la komori menor estaban reunidos en la sala de estar.

En la madrugada yui al parecer fue al jardín y las personas que provocaron el accidente la habían secuestrado.

-tch, esos malditos declararon la guerra.

Hotaru miro de reojo al trillizo menor, no entendia al vampiro. No sabía si estaba enojado porque veía a yui como su ganado o la veía como algo más. Aunque una corazonada le decía que ese pelirrojo no tenía sentimientos románticos por su melliza.

Que solo actuaba así porque habían pisoteado su orgullo al arrebatarle algo que proclama como suyo.

Miro hacia el suelo con preocupación, ella estaba segura que yui iba a volver a la mansión no importaba si ella quería quedarse con los otros vampiros. El rey iba a ordenar que ella vuelva cuando se dé cuenta que los otros vampiros no podían cumplir con el plan.

Pero estaba preocupada, no sabía qué clase de vampiros eran y qué le podían hacer a su hermana. A pesar de saber lo que iba a pasar se le estrujaba el pecho al pensar en su hermana.

-por lo menos tenemos a hotaru San.

Se exaltó ante lo dicho por kanato, que estaba abrazando a Teddy y la miraba fijamente.

-nfu~ es cierto, ella es la cuidadora de bitch chan pero aún queda taru chan~.

-preparate melón, ore sama está vez sí probará tu sangre.

-"maldición, ahora cómo safo de esto?".

Fruncio el ceño ante los ojos brillantes de los trillizos los cuales tenían una sonrisa de lado.

-tch, ese hombre ordenó que nadie puede beber de su sangre, lo olvidaron?.

Miraron a Subaru el cual estaba de brazos cruzados apoyado en la pared y miraba a los trillizos con seriedad.

-ara~ Subaru Kun está protegiendo a taru chan?.

-a Teddy no le gusta la forma en que Subaru nos mira.

-espero que no estés interesado en melón!, ella es de ore sama!.

El Albino miró con fastidio al pelirrojo que se paró de su sillón y lo miraba desafiante.

-todos calmense, saben las órdenes de ese hombre no podemos ir en contra de su orden, esperaremos a ver qué sucede con la humana y con esos...vampiros -el ojo fucsia dijo lo último con desprecio para luego mirar a la melliza menor -aunque...el hambre puede superar cualquier orden.

Ante lo que dijo los trillizos volvieron a sonreír y miraron a hotaru.

Todos los hermanos tenían curiosidad por probar su sangre, su olor era normal pero la actitud de fiera que tenía, aumentaba el interés en ellos por verla suplicar al sentir sus colmillos clavarse en su piel.

-vamos melón, ore sama será el primero en probarte -ella lo miro con enojo al ver que se acercaba.

Reiji ignoro el aviso que shu le había dado hace mucho y miro con atención la escena. Si no era verdad sobre ese extraño campo que ese hombre le puso a hotaru, ignoraria por completo su orden y beberia de ella.

-oe alejate! -el quinto hermano ignoró el desafío del Albino que se puso en su camino y apareció tras la humana.

Le sonrio con sadismo y ella retrocedió.

-es hora de que sepas quién es el mejor.

Acerco su mano hacia ella, haciendo que trague saliva lista para que su secreto salga a la luz.

!!!!.

Quedaron tiesos al sentir el ambiente pesado y un gran poder aprisionar sus pechos sin dejarlos respirar.

-ayato.

El nombrado miro al primogénito que estaba parado viéndolo con seriedad, sus ojos brillaban y el menor solo pudo tragar saliva pero su orgullo fue mayor y le mostró los colmillos.

Shu apareció ante hotaru y la agarro de la cintura volviendo al lugar en donde estaba antes.

-no quiero que nadie la toque, como te lo dije anteriormente, ella es mía, no solo será una orden de ese hombre sino que ahora yo les doy la orden de que ninguno la toque o trate de beber de su sangre.

Los demás lo miraron curiosos para luego ponerse serios, menos Subaru que miraba todo un tanto nervioso. Él sabía que shu era poderoso, no por todo es el primogénito, puede ser un perezoso pero lo prefería así antes de que se ponga serio y el infierno se desate.

-no me digas que volviste a caer ante un humano?, patético, típico del holgazán.

El azabache lo miro con desdén haciendo que el mayor frunciera el ceño y lo mire con frialdad.

-silencio.

El segundo por un momento abrió sus ojos sorprendido pero luego volvió a su rostro neutral mirando a su hermano atento.

Qué le sucedía?, por qué tanta protección con la humana?.

-tch...lo lamento hotaru -la menor miro confusa al rubio que apartó la mirada de sus ojos y se enfocó en mirar su vientre.

Ella al entender abrio sus ojos sorprendida y estuvo apunto de negarse pero el vampiro la miro con suavidad y ella apreto sus labios bajando la cabeza. No les quedaba de otra.

-Subaru ya lo sabe -los dos miraron al nombrado que parpadeo para luego cerrar los ojos -se que todos tienen curiosidad por mi comportamiento con hotaru y eso es porque...-el rubio se quedo callado mirando a sus hermanos menores para luego mirar a su "pareja" y posar su mano en su vientre.

Al tener una leve idea los vampiros se quedaron mudos.

-e-ella?, m-melón está?.

-si, hotaru está embarazada y es mi hijo -los miro con seriedad y los demás solo pudieron abrir la boca sin poder articular nada.

Nadie podía creerlo, si bien sabían que había algo extraño en el comportamiento de esos dos no se esperaban eso. Pensaba que shu solo estaba interesado en ella y era por su sangre pero jamás se les pasó por la cabeza que fueran a ser padres.

-de cuántos meses esta? -el segundo hermano al reaccionar miro a la oji zafiro que apretó sus manos nerviosa.

-esta en el tercer mes -hotaru lo miro sorprendida y los demás curiosos -hace 3 meses recuerdan que vine con un extraño aroma?, fue porque me crucé con ella y una cosa llevo a la otra y bueno...ella termino embarazada, aunque jamás pensé que ella seria la hermana menor del sacrifico que vendría a la mansión.

Los hermanos entendieron todo. Hace 3 meses shu se había ido y vuelto al otro día en la noche con un extrano aroma. El tercer hermano dio la idea de que el primogénito salió a divertirse con alguien por ahí, estaba equivocado ya que shu salió a reunirse con axel y caramia para saber sobre caesar y ser informado sobre la destinada del rey. Pero el rubio aprovechó lo que dijo su hermano menor y lo uso para su beneficio.

-parece que yo tenía razón, que pequeño es el mundo -sonrio burlón el tercer hermano viendo a la pareja.

-pero por qué hotaru San no tiene el aroma de shu si esta embarazada de él?.

La pregunta de kanato volvió a poner nerviosa a la humana que miro de reojo al "padre" de su bebé.

-luego de que traté de beber de ella en la academia y me di cuenta que estaba esperando un hijo mío, puse un hechizo en ella para que nadie sintiera mi olor en su cuerpo ni la presencia del bebé, le dije a reiji que ese hombre había puesto un campo alrededor de hotaru para que nadie bebiera de ella pero fui yo el que lo hizo, ya que si bien ella no quería decirme sobre el bebé yo me di cuenta y decidimos ocultarlo para que ese hombre no supiera nada.

-asi que por eso melón se escapó cuando supo que éramos vampiros.

Ahora todos miraban a hotaru que decidió tragar sus nervios y hablar.

-si, primero sospeché que había algo mal en esta mansión, además de que debía de cuidarme ya que al segundo mes descubrí que estaba embarazada, cuando supe que eran vampiros no me había dado cuenta que shu era el hombre con quien...me acosté -se sonrojo levemente ante la diversión de los demás -me di cuenta de quien era cuando su padre me encontró y me trajo a la mansión.

-...ahora todo concuerda, aunque fue algo irresponsable...holgazán, ese bebé no será un vampiro completo y lo sabes, no hay registro de que hayan híbridos en esta época todos ellos han muerto por ser débiles.

El rubio cerró los ojos y suspiró.

-lo sé, pero al parecer nuestro hijo será poderoso, ya que actúa a través de hotaru y por momentos la convierte en vampiresa hasta saciar su hambre y luego ella vuelve a ser humana.

-en serio?!, es un mutante?! -miraron con una gotita al pelirrojo que estaba emocionado por tener un sobrino mutante, por unos momentos olvido su shock y su enojo.

-lo que dice shu es cierto, hace unos días hotaru ...bebió de mi sangre y luego volvió a la normalidad.

La confesión de Subaru hizo que todos volvieran a mirar a la futura madre.

-...por el momento mantendremos el secreto -lo que dijo reiji los sorprendió -qué?, que no me agrade el holgazán no quiere decir no me agrade tener un sobrino, solo espero que salga a la madre y no a ti, inútil.

Se cruzó de brazos y cerró los ojos ignorando la mirada de sorpresa del rubio que luego sonrió divertido.

-...gracias por guardar el secreto y...no se cuándo pero sé que yui volverá a la mansión y por favor no le cuenten nada sobre el bebé, ella no lo sabe, lo mantuve en secreto desde que supe de su existencia.

Ella los miro con serenidad y les hablo en un tono amable, era la primera vez que ella los trataba así.

-...hn!, ore sama aún no se rinde contigo melón, pero ten por seguro que ore sama mantendrá el secreto y será mejor tío que todos ustedes!.

Hotaru sonrio feliz y miro a los trillizos pelear por quién sería mejor tío para el bebé. Luego de sumo Subaru y al final reiji que quiso callarlos pero no pudo contra ellos y se unió a la pelea.

-lo ves? -miro de reojo a shu que le susurró al oído -no tienes que preocuparte, todo está de nuestro lado, me prometí protegerlos y eso haré -le sonrio de lado haciéndola sonrojar.

-s-si.

Susurro apenada bajando la cabeza ante la diversión del rubio. El cual la abrazó por detrás y posó sus manos encima de las de hotaru, la cual estaba cubriendo su vientre desde hace rato. Cubrir su vientre con sus manos se convirtió en un hábito desde que estaba en la mansión.

*ba-thum* *ba-thum*

Los ojos de los dos brillaron al oír los latidos fuertes del pequeño, era fuerte y parecía estar alegre.

-eres un ruidoso -el rubio miró el vientre levemente abultado de la menor y sintió una gran felicidad en su pecho.

Eso era malo, sabía la realidad pero con todo lo que estaba pasando cada vez sentía más y más como si ese bebé fuera su hijo. Además, de que estaba sintiendo algo muy especial por hotaru.

-...fueron los latidos de baby chan? -miraron a los demás que habían dejado de pelear y estaban mirando el vientre de hotaru.

Los dos se miraron curiosos y luego entendieron.

Ellos podían acercarse a ella ya que el bebé había aceptado que ninguno era un peligro para su madre y que shu siempre estaría ahí para protegerla sin la necesidad de que él la proteja.

Ni siquiera había nacido y ya tenía noción de quién era peligroso para su madre y para él.

See you...