Ya estaba algo cansada de cómo estaba transcurriendo el día, y nisiquiera eran las 12 PM, casi todos han tenido una crisis, nunca había pasado antes, es un nuevo récord, aunque no significa nada bueno.

Llegamos y solo tiré mi cuerpo en un pequeño sofá del lugar, me gustaría dar un paseo, pero siento que si lo hago, al volver solo habrá más caos.

-Darcy, ¿estás bien?, te noto algo distraída -me preguntó la pequeña sin ojos, es demasiado sensitiva.

-Si si, solo creo que necesito algo de aire -solté un suspiro.

-Ah, me imagino que debes estar cansada de nosotros, lo entiendo, está bien después de todo, si quieres puedes contarme como te sientes, escucharé atenta, seré te terapeuta -hizo ese ofrecimiento y se sentó con una pierna sobre la otra, su postura me daba algo de risa, pero se me hacía tierna por intentar ayudar.

-No estoy cansada de ustedes, estoy algo deprimida porque no sé que hacer, gracias por tu oferta, pero no es muy profesional ser paciente de un conocido con el cuál mantienes una relación de amistad.

-Supongo que tienes razón, si no puedo hacer esto, déjame compensarlo de otra manera.

-¿De que hablas? -ladee mi cabeza, aún así sé que no puede verme.

-Podemos hacer alguna actividad relajante, que te parece... ¡bizcochos!-dió un pequeño salto en su lugar, estos niños realmente son unos amantes del azúcar, pero que puedo decir, yo también lo soy.

-Me parece una idea brillante, vayamos a la cocina, pero por favor, no intentes nada extraño, te lo suplico.

-Ya... no haré nada, lo juro -su tono sonó como si hubiera sido derrotada, reí un poco y tome su brazo para llevarla a la cocina, el camino sería más fácil así- ¿cómo va el tratamiento?

-¿De todos? -pregunté.

-Ajá.

-Bueno, sigo intentando encontrar algo útil, pero debo decir que han mejorado bastante desde que están aquí, tus deseos disminuyeron, no has intentado extirparte nada más -giró la cabeza haciendose la loca.

-Obvio -era evidente que no hemos avanzado mucho.

-Lo de Bishop será permanente, aunque ahora es más soportable para él, para lo de Venus aún no encuentro una solución, solo puedo lograr calmarla, Hollie no está muy bien, aún quiere llamar la atención, y las siamesas, bueno, creo que están bien, mientras Georgia no deje que se separen, Nell no podrá hacer nada.

-Bueno, sé cuánto te esfuerzas en esto, así que pronto lo lograrás.

-Gracias -me dió una linda sonrisa.

Llegamos a la cocina y saqué todos los ingredientes que eran necesarios, cómo azúcar, harina y huevos.

Pasamos una buena tarde preparándolas, yo ponía la medida necesaria en los medidores y ella las vertía sobre la mezcla, así evitabamos accidentes.

En poco tiempo estuvieron listos aquellos esponjosos bizcochos, los puse sobre una bandeja y preparé un té negro para llevarles a todos de merienda.

Lamentablemente cuándo llegué no pude hacer nada más que asustarme y entrar en pánico, cómo pude dejé a Blair en su cama, aunque ella no comprendía que estaba pasando.

-Um, Darcy, ¿está todo bien? -su voz sonaba quebrada.

-No te preocupes, solo quédate ahí.

Ambas, Nell y Georgia, de alguna forma estaban cubiertas de una sustancia carmesí conocida como "sangre", creí que estaban bien, y otra vez me equivoqué.

-Chicas, ¿qué están haciendo? -traté de sonar calmada.

-Vaya, de verdad quería poder moverme sola sin estar con un parásito -se quejó Nell y me miró.

-¿Porque hablas así de Georgia?

-Ella también lo sabe, no es necesario esconderlo -Nell mantenía una sonrisa en su rostro, al contrario de su gemela que parecía disociar y querer llorar.

-Sabes que no es cierto.

-Porque mejor no nos dejas seguir con esto, a ella ya no le importa estar lejos de mi, dejó de ser tan egoísta.

-También lo estás siendo, sabes perfectamente que si hacen esto probablemente ambas mueran, y aún peor, ni siquiera estás tomando en cuenta sus sentimientos.

-Es mejor que murieramos en vez de seguir viviendo como dos personas en un mismo cuerpo.

-Déjame encontrar una solución, ya estoy cerca.

-No es cierto, ya hemos esperado lo suficiente, lo siento Darcy, pero ya no más -pude sentir como su fe en mi desaparecía, estaba tan cerca.

-Damé ese bisturí -demandé.

-No lo haré.

-No era una pregunta.

-No me importa.

Sé que no era buena idea acercarme siendo que ella no quiere seder, pero por suerte lo hice, puesto que la perdida de sangre ya era algo grande y la discusión hizo que perdiera el conocimiento.

-Georgia, responde -estaba moviendo lentamente su cabeza con mi mano, ella seguía despierta, al contrario de su gemela.

Parpadeó un poco y me miró, necesitaba ayuda para poder curarlas, así que como pudo se levantó con ayuda, noté que no podía ver bien ya que no traía puestos sus lentes, estaban en el piso, luego tendré que conseguirle unos nuevos.

Con mucho esfuerzo logré acostarlas en una camilla y las llevé al baño, es el lugar más limpió y esterilizado, como pude traté de coser la herida, que al menos era superficial, désinfecte la herida y cubrí la piel con gasas al terminar.

-Si pasa algo toca la campana, no quiero que vuelva a haber un accidente -solo asintió en silencio.

Las dejé descansar ahí, volveré en un rato, mientras iré a ver si los demás están bien, espero que así sea, no aguantaría otro colapso más.

Nombre: Nell & Georgia Jenkins

Edad: 16 años

F. de nacimiento: 15.06.1887

Condición: Siameses onfalópagos

(Los siameses onfalópagos son gemelos unidos por la zona del abdomen, este tipo de gemelos comparten estructuras del sistema digestivo y, en algunos casos, pueden compartir otros órganos vitales.)