Solté un suspiro y dejé el teléfono al lado de mi botella de agua, me miré el espejo un momento mientras acomodaba mis guantes.

— No eres Jay Lee... — susurré tomando las mancuernas a mis costados, me senté y comencé con mi siguiente rutina.

Ya voy a cumplir casi 5 años en el gimnasio, otros 5 en boxeo, realmente luego de haber acabado la secundaria y de un intento de suicidio fallido es que decidí finalmente tomar atención a mis necesidades y priorizarme a mi por sobre todas las cosas, fue un largo camino y fue una decisión muy fuerte para mi, especialmente porque solo contaba con el apoyo de Dami, mi mejor y única amiga.

Mientras terminaba mis repeticiones de Press Militar, observé por el espejo una figura particular; bajé las mancuernas y tomé mi toalla para secarme el sudor, decidí acercarme y ayudarla con sus repeticiones.

Me puse detrás suya y tomé su cintura apoyándola con sus sentadillas — Despacio, te tengo.

Conté el número de repeticiones que hizo con mi ayuda y la ayudé a mantener la barra en su lugar, miré los discos y me sorprendí un poco.

— Gracias — dijo con un suspiro tomando botella de agua para beber un poco, cuando se giró a verme, me quedé en silencio tratando de regular un poco la respiración — ¿Jay? — preguntó yo solo asentí.

— 80k, es un buen peso — dije nerviosa señalando la barra con los discos, reí levemente para luego acomodarme el pelo.

— ¿Lo crees? gracias es bueno para empezar de nuevo — rió, era increíble la sensación de nostalgia que me daba su risa.

— Siempre ve a tu ritmo, lo que menos quieres es una lesión — le guiñé un ojo y me despedí con la mano volviendo a mi lugar para sentarme y continuar con mi rutina.

Puse mi celular en posición lista para tomar una foto disimulada de Jay que estaba parada frente a una máquina esperando su turno, cuando finalmente se giró tomé la foto rápidamente sin darme cuenta de que el flash de mi cámara estaba encendido. M-I-E-R-D-A.

La vi acercarse a mi y quise golpear mi cabeza contra la pared una y otra vez a causa de mi estupidez.

— ¿Me tomaste fotos? — preguntó amablemente.

Asentí un poco avergonzada y le entregué mi celular esperando que me dejara explicar la situación embarazosa.

— Iba a enviársela a una amiga, es que eres su tipo y tal vez... podrían llevarse bien — dije nerviosa manteniendo la cabeza gacha ocultando mis mejillas sonrojadas.

La escuché reír, ella realmente era impredecible, lo que captaba mi atención de alguna manera, la seguí riendo también, después de todo no había necesidad de molestarse.

— Si querías una foto mía, solo tenias que pedirlo — dijo, volviendo a guiñarme el ojo. Maldita descarada.

— S-seguro, por favor ¿podría? — solté nerviosa.

Ella asintió y posó, luego de acomodarse el pelo; tomé la foto y le agradecí, ella sonrió y volvió a seguir con su rutina.

[Ya sé que la de la foto no es Chaer pero no anden jodiendo, aquí Chaer es masc y está mamada, al que no le guste q se joda por fis <3]

Vi cuando Jay se acercaba a los casilleros, me armé de valor y me acerqué a ella nuevamente, le sonreí y le extendí mi teléfono en el buscador de ig.

— Jay, ¿me darías tu instagram por favor? — pregunté nerviosa haciendo una leve reverencia.

Ella rió levemente pero aun así tomó mi teléfono y puso su user, me devolvió el teléfono para luego tomar sus cosas.

— No soy muy activa en redes pero si quieres que te pase rutinas escríbeme por ahí — se despidió de mi con la mano y salio del gimnasio, yo me quedé helada mirando su cuenta.

CR>DM

Cap 4: sab. 27/04