Al dormir se encontraban. Sueños lucidos que ningún entendía, para Alone y Tenma que no se conocían en la realidad, verse en esos sueños era una experiencia mágica y agradable.

Al dormir nos encontramos, donde esos ojos rojizos llenos de valentía me atrapan. Era los pensamientos de Alone desde la primera que lo vio, siempre Tenma llegada a el de la misma manera, con el cabello ondulado muy revuelto, como si estuviera agitado o acabare de correr, y solo en pantalones, suponía que se veían de la manera en la que se dormían.

Al dormirme me encuentro con este muchacho casi de mi edad, con rostro que parece lleno de tranquilidad, casi angelical. Lo primero que me pregunte era que si era un ángel de verdad que me visitada. Esos eran los pensamientos de Tenma al despertar de sus sueños.

En los días más atareados, más estresantes, donde solo la cómoda cama era su consuelo, dormir tranquilos y verse otra vez.

Querían verse en la vida real, comprobar que el otro no era un delirio de sus sueños. Verse en ese espacio tan raro, donde las constelaciones su entorno, y su suelo parecía un espejo de agua cristalina.

- Alone... - Susurro Tenma al verlo otra vez, a diferencia de Tenma que dormía casi sin ropa, Alone usada siempre cierta ropa holgada.

Alone se acerco, mirando con cierto aire de nostalgia a Tenma, las palabras sobraban en este momento, ambos sabían lo que querían, verse en la vida real.

- ¿Qué pasa Tenma?

- Nada solo... Jeje, no sé qué pensar de esto, llevamos 5 meses encontrándonos en sueños.

- Yo no sé si esto es real, estoy igual que tu.

- He preguntado por ti, y ya me creen loco. No sé si lo estoy, pero...

- A mi pasa similar, te he dibujado tanto que ya me preguntan si me enamore.

- Quisiera verte y cerciorarme que eres tan hermoso en la realidad como en mis sueños... - Apenas cayó en cuenta de lo dicho sus cara se puso muy roja de la vergüenza. - No quise decir eso.

- Jaja, yo siento lo mismo. Si existes ¿Me dejas dibujarte al despertar?

Ambos se sonríen, Tenma levanta la cara de Alone para que lo mire a los ojos, pensando en lo que haría en ese momento.

- Claro que quiero que me dibujes.

Frente a ellos la sombra de un hermoso Pegaso blanco paso, acompañado de una doncella de gran elegancia y ser oscuro, aunque ellos no lo supieran eran las representaciones de sus vivas pasadas.

Ambos se miran a los ojos atreves, sin poder evitarlo las ganas de probar los labios del otro eran fuertes, y así paso. Se besaron con amor y cariño, los músculos de Tenma eran suaves y agradables a su tacto, mientras Tenma disfrutada el calor del cuerpo del rubio entre sus brazos.

Ambos despertaron luego de eso, con una felicidad que llenada el alma. Al dormir tuvieron sueños normales otra vez, y así con el paso de los días, ese beso fue el último momento de su conexión. Solo el tiempo los reuniría en la vida real.