Epílogo
Chicas y chicos, este capítulo va dedicado a tods vosotrs. GRACIAS por llegar hasta aquí, por haber aguatando las estúpideces de Lexy, los cabreos de Brian y mis boberías escribiendo... miles de gracias!
Gracias por todo, espero que disfruteís este último capitulo ^^
P.D: He intentado hacerlo lo mejor que he podido.. espero que lo disfruteís muchisimo y no, no habrá segunda parte, pero aquí os dejo lo mejor ^^
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EPÍLOGO
*5 AÑOS DESPUÉS*
Me senté en el parque mientras la observaba correr de allá para acá, algo en la manera en la que corría y sonreía me hizo recordarle y con ese gesto recordé la última vez que supe algo de él.
FLASHBACK
Estaba entre ansiosa y preocupada. Hoy era la primera visita después de la marcha de Brian y tenía un cumulo de emociones dentro de mi que no lograba descifrar con claridad.. ¿estaba preocupada o ansiosa?¿feliz o con miedo? realmente no podía decirlo, ya que desde que Brian se había marchado me pasaba todos los días así.
Tenía miedo de que no viniese,pero también tenía miedo de que viniese y viera la desepcion en sus ojos por las cosas que pude haber dicho y no dije. Las cosas que callé.
- ¿Estás bien? -Preguntó Mónica a mi lado mientras esperabamos.
- Estoy nerviosa -Dije con una pequeña sonrisa.
Brian había trastocado mi mundo por completo.. hacía tiempo que yo no me sentía así.. nerviosa y feliz debido al amor que sentía por ese estúpido chico de reformatorio.. es que.. ¿quien diría que la nueva e intrépida Lexy se iba a enamorar?.. nadie, nadie podría haberlo dicho.
- ¿Nerviosa por qué? vas a poder verlo después de una semana, seguramente terminareís haciendolo en medio de los árboles -Dijo Eric haciendo que riese.
- Eric tiene razón, los dos seguramente estareís cachondos como monos cuando os veaís de nuevo.. no va a durar mucho antes de que esteís por ahí haciendolo -Dijo Marcos con una gran sonrisa.
Tuve que volver a soltar una pequeña risita, mis amigos estaban haciendome reír y lo apreciaba.. les apreciaba muchisimo y tenía que aprovechar todo este tiempo con ellos ya que dentro de poco Marcos y Mónica se irían, quedandome yo sola con Eric y al final yo también me iría.. ¿quien diría si alguna vez volveríamos a encontrarnos? yo esperaba que si.. habían sido personas muy importantes para mi en estos meses y quería que lo siguieran siendo por el resto de mi vida.
- Ha llegado el momento -Dijo Mónica con una sonrisa mientras me apretaba la mano al ver que las puertas se abrían y los familiares empezaban a entrar.
Rápidamente me volví a poner nerviosa.. ¿Vendría?¿no vendría?
- Va a venir, quedate tranquila, a la noche nos reiremos de tus nervios -Dijo Mónica dandome un beso en la mejilla antes de irse junto a Marcos(que me dedicó una sonrisa) con su familia.
- No seas tonta y relajate bobilina -Me dijo Eric antes de irse con su familia también.
Entonces me quedé yo sola en la mesa mientras esperaba ver a un tío que impactaba por la cara de trabao que tenía siempre encima, a un tío con unos increíbles ojos azules y un culo exepcional.
- Cariño -Dijo la voz de mi madre sacándome de mi mundo.
Un momento.. ¿la voz de mi madre?
Levanté la vista y ahí estaba. Tan perfecta como siempre con una sonrisa avergonzada, justo al lado se encontraba mi padre con la misma sonrisa que tenía mi madre junto a mis hermanos.. Adrián tenía una gran sonrisa, pero Gaby.. Gaby estaba raro, tenía una sonrisa también, pero algo triste.
- Mamá -Susurré antes de verme sepultada por los brazos de mis padres.
- Lo siento cariño, siento que no hayamos venido antes -Me susurraba ella con la voz rota mientras intentaba no llorar.
Y me dio igual que no hubiesen venido en todos estos meses. Les perdoné. Les perdoné porque sabía que no había sido fácil para ellos el superar que tenían a una hija en un centro de menores. Les perdoné porque en ese momento si estaban ahí y como dice el dicho: "más vale tarde que nunca".
- Lexy, tengo que hablar contigo -Me dijo Gaby sacándome de los brazos de mis padres. Y entonces me percaté de que Brian no había venido.. de que no estaba allí. Un nudo se instaló en mi estómago y lo único que quería era irme a mi cueva y llorar.
- ¿Qué pasa? -Pregunté controlando las ganas que tenía de gritar y mandarlo todo a la mierda. Controlando las ganas que tenía de escaparme de allí e irme a buscarle y darle una buena hostia por no haber ido a visitarme.
- Tengo algo para ti -Dijo entregándome un sobre en el cuál por fuera decía: "Lexy". Era la letra de Brian.
Me volví a sentar de nuevo en la mesa y abrí el sobre con nervios.
Lexy:
Seguramente recibirás ésta carta varios días después de que la haya escrito.. en realidad, prácticamente una semana después. Estoy escribiendo esta carta un día antes de marcharme de aquí, de este reformatorio el cuál ha sido mi hogar durante 4 interminables años.. mañana por fin me voy, pero me voy sin ti y eso es lo que más me duele. Se que durante toda esta semana hemos hablado de las veces que te vendré a visitar.. pero no vendré a visitarte Lexy.. me duele decirte esto pero.. me voy a alistar.. si, como has leído, me voy al ejército.. las razones son que tengo ganas de hacer algo con mi vida.. seguramente sabrás que yo no soy de ir a universidades, por eso prefiero formarme y lárgarme a luchar batallas para salvar a la gente. Entiendo que ahora me odies y realmente no te voy a pedir que me esperes porque se que eso sería muy injusto.. pero quiero que sepas que durante los años que esté en el ejército, siempre y digo siempre, siempre pensaré en ti.. lo único que te voy a pedir es que no me olvides, porque yo no lo haré, no lo haré jamás.
Te amo.
Brian.
FIN DEL FLASHBACK.
A pesar de haber pasado cinco años.. la rabia todavía volvía a mi y sobre todo porque cuando salí de aquel maldito reformatorio en el que tan mal lo había pasado, me enteré de una noticia que venía sospechando un par de meses atrás. Estaba embarazada. Realmente fue terrible salir del reformatorio y enterarte de que estás esperando un bebé, un bebé que no tendrá padre y que será criado por una madre adolescente que no tenía dos dedos de frente. También fue muy difícil el combinar los estudios con la crianza, aunque siempre tuve la ayuda de mis padres, de mis hermanos y de mis amigos, yo siempre quería hacerme cargo de mi hija, ya que para eso era mia y solo yo tenía que hacerme cargo de ella.
Hacía tres años que me había mudado para ir a vivir con Marcos,Eric y Mónica.. si, como leeís, nosotros cuatro nos habíamos ido a vivir juntos.. y ¿a que no sabeís que? Marcos y Eric ... si, son gays.. ¡Mónica y yo jamás lo sospechamos! ahhh y ¿a que no sabe otra? Mónica y mi hermano terminaron juntos, y ahora prácticamente vive con nosotros.. pero claro, eso ya era de esperarse.. ¿mi hermano Adrián? pues es una bala perdida, no asienta la cabeza y él es feliz así. Desde que salí del reformatorio no he sabido nada de Iván, así que no os puedo comentar que tal le va la vida.. pero realmente espero que le vaya bien.
Y ahí estaba yo.. todo el mundo con pareja y yo sola como una perra con una hija de cinco años a la que adoraba infinitamente.. ¿por qué estaba sola? porque aunque me joda decirlo.. sigo esperando a Brian y realmente espero que haya sobrevivido a esa mierda del ejército y algun día vuelva a mi y conozca a esa preciosidad que tenemos en común.
- Maldita mosca de mierda -Dije mientras espantaba a una que no hacía nada más que zumbarme(o lo que coño sea que hagan las moscas) alrededor.
- Vaya, sigues con la misma mala hostia de siempre -Dijo alguien a mi lado.
Cuando me giré, todas los momentos que vivimos juntos empezaron a llegarme como flashes a la mente.
- Vaya, ahora eres rubia -Dijo antes de que mi mano impactase contra su mejilla izquierda haciendo que girase su cabeza- si, me lo merezco -le dio tiempo a decir antes de que le diera otra cachetada en la mejilla izquierda.
- ¿Qué coño haces aquí? -Pregunté de nuevo antes de volver a intentar pegarle, pero agarró mis manos a tiempo.
- Te echaba de menos -Susurró.
Le miré detenidamente. Hacía cinco años que no le veía y estaba igual o más guapo que antes.
- Vete a la mierda -Susurré con furia mientras intentaba soltar mis manos, pero las tenía bien agarradas.
- Suelta a mi mami -Dijo mi hija con su voz chillona. Los dos miramos rápidamente en su dirección, y luego, lentamente, Brian me miró a los ojos.
- ¿Te ha llamado mami? -Preguntó en un susurro extraño.
- Si -Dije soltándome finalmente de él- es mi hija.
Me levanté y la cogí.
- Adios Brian, espero no volver a verte nunca -Dije presa de la rabia, aunque la verdad es que me estaba muriendo verle, por plantarle un beso en toda la boca y hacerlo con él en cualquier lugar.
- ¿Quién es su padre? -Preguntó poniéndose de pie rápidamente.
- No tiene padre, yo soy su madre y su padre, yo soy la única que tiene derecho en ella, yo he hecho los dos papeles durante cinco malditos años -Prácticamente grité intentando controlar las lágrimas.
- Mami, tranquila -Me susurró aquella pequeña rubia rojiza de unos increíbles ojos azules. Como los de su padre.
- ¿Cinco años? -Preguntó mirándo fijamente a MI hija- ¿tienes cinco años, pequeña?
- No hablo con extraños -Susurró Dayana, mi pequeña.
- Bien cariño, se nota que has sido muy bien educada -Dijo Brian con una sonrisa.
- ¿Perdona? -Pregunté- ten cuidado con lo que dices.. ¿qué es eso de cariño?
Se quedó mirándome fijamente y luego la miró a ella.
- Dime la verdad.. por favor -Dijo casi suplicando.
- Dayi, cariño, vete a jugar un rato más -Dije dandole un beso en la frente antes de bajarla y que se fuese a jugar.
- ¿Cómo se llama?¿es mi hija?¿es todo esto una broma? -Preguntó casi en un grito, a lo que yo alzé una ceja.
- ¿Perdona? relajate..¿ok? primero, se llama Dayana, segundo, si,si es tu hija maldito imbécil.. ¿acaso nunca pensastes que si lo haciamos SIN condón, esto no pasaría? eres un inconsiente y no, no es una broma, estúpido, he tenido que pasar la crianza de NUESTRA hija yo sola mientras intentaba ir a la unviersidad, maldita sea... estúpido y ahora apareces, claro, cuando ya está criada, no me joda contigo -Dije presa de la rabia.
Vi como estaba totalmente pálido, lo que resaltaba sus increíbles ojos azules. Entonces se dejó caer sobre el banco y empezó a intentar respirar.
- ¿Estás bien? -Pregunté preocupada.
- ¿Qué si estoy bien? me acabo de enterar que tengo una hija -Dijo mientras se pasaba las manos por la cara.
- Te hubieras enterado hace cinco años si te hubieses quedado conmigo -Dije mientras me sentaba a su lado en el banco.
- Lexy, tenía que hacer algo con mi vida -Susurró- no podía ser una carga para mi tía.. queria sentirme realizado y es por eso que durante toda la semana pensé en alistarme en el ejército.. y al final.. al final lo hice... no te puedo decir que he pasado unos buenos cinco años, porque realmente no los he pasado.. han sido un auténtico infierno.. ¿la guerra? no se la deseo ni a mi peor enemigo, he visto cosas horribles, cosas con las que ahora no puedo dormir y debido a esas cosas es que ahora tengo que tomar pastillas para evitar las pesadillas.. ¿pero sabes qué? que no me arrepiento de haberlo hecho,no me arrepiento de haberme alistado porque he hecho buenas cosas, he salvado a gente y me siento bien con ello.. lo único que me arrepiento de todo esto es que te tuve que dejar.. pero estos años me he dado cuenta de que gracias a que nos alejamos es que me he dado cuenta de que realmente si te quiero, que no fue un simple amor en un reformatorio.. fue amor de verdad porque después de cinco años es lo que siento por ti.. y siento haberte dejado sola con el bebé, pero es que no lo sabía y tampoco lo supe hasta hace unos segundos.. estoy.. estoy en shock.. ¿tener un hijo? esas eran las preguntas que me hacia una semana cuando estaba destinado en Irak.. fue horrible, me preguntaba mil veces si llegaría a salir vivo de allí para poder buscarte y saber si podríamos ser capaces de tener un hijo.. me prometí que si salía vivo de alli vendría a buscarte y aqui estoy Lexy, estoy aquí por ti.. porque te amo, y quiero pasar todo el resto de mi puta vida junto a ti..
Llevaba cinco años odiandole y amandole a la vez, cinco años en el que había deseado que se plantase ante mi para poderle dar la buena hostia que se merecía y ahora que lo tenía delante.. solamente pude besarlo.
- ¿Esto es un sí? -Preguntó entre beso y beso.
- Es un para siempre -Susurré.
Nos abrazamos fuertemente y os puedo asegurar queridisimas lectoras, que este abrazo no lo olvidaré jamás, porque este abrazo vale más que cien y hasta mil besos.. era un abrazo de verdadero amor y jamás lo olvidaría..y también os puedo asegurar que aquel corazón que oí romperse hace cinco años, hoy podía oir como volvía a sanar.
- No quiero que te vuelvas a teñir de rubio -Dijo- amo tu color natural.
- Y yo no quiero que te vuelvas a rapar, amo tu pelo -Susurré todavía abrazada a él.
- ¿Crees que tu hermano me pegará? -Preguntó mirándome a los ojos.
- Sinceramente creo que toda mi familia y todos mis amigos te darán una buena hostia -Susurré- pero no te preocupes, yo luego te aliviaré.
- Te quiero -Dijo mientras me alzaba y empezaba a darme vueltas.
- Yo te amo -Susurré con una gran sonrisa.
FIN
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