Aliados
Kakuzu guardó silencio pensando que tanto le convenía aquella oferta. Por un lado no quería involucrarse con ningún tipo de mutante, pero por el otro lado, si se quedaba solo estaría expuesto a constantes peligros.
Miró al jashinista que ya comenzaba a desesperarse, era obvio que necesitaba una respuesta inmediata.
"Supongo que será conveniente tener a un bastardo inmortal" pensó el moreno convencido de que en algún momento ese chico podría cubrir su espalda.
El mayor asintió con la cabeza, dándole la señal a Hidan de que tenían un trato.
Complacido con esa decisión, el jashinista arrastró al castaño hasta donde estaba su pequeño grupo de criminales.
-¿¡Cómo están, bola de fracasados!?- gritó Hidan a modo de saludo.
-Llegas tarde tarado, ¿qué demonios estabas haciendo?, hm- preguntó Deidara un poco molesto, ya que el joven religioso le había prometido que iban a entrenar juntos.
Kakuzu se puso al lado del jashinista llamando la atención de todos los presentes.
-¿Quién eres tú?- preguntó Sasori colocándose frente a sus estudiantes.
-¡Wow!, tranquilo muñequito, este apestoso vejestorio es mi nuevo compañero de celda- contestó Hidan, dejando a sus amigos realmente confundidos.
-¿Cómo es que sigue vivo?- preguntó Itachi algo intrigado.
-Este anciano me gano en una pelea, les juro que por un momento creí que me estaba enfrentando a un gorila de mal carácter-
Ofendido por aquel comentario, Kakuzu apretó su puño para después darle un fuerte golpe a Hidan directo en la cabeza, haciendo que el pobre chico cayera de cara contra el piso.
Poco a poco el menor levantó su rostro, notando que de su nariz salía un hilo de sangre. Cómo pudo se puso de pie para empezar a maldecir a todo pulmón.
-¿¡CUÁL ES TU MALDITO PROBLEMA, ESTÚPIDO HIJO DE PERRA!?, ¡JURO POR JASHIN-SAMA QUE TE VOY A SACRIFICAR!-
Sin ningún tipo de temor, Kakuzu lo tomó del uniforme para acercarlo a él.
-¡TUS PATÉTICOS LLORIQUEOS ME ESTÁN PROVOCANDO MIGRAÑA, SI SIGUES ASÍ TE ARRANCARÉ LA CABEZA!, ¿¡TE QUEDO CLARO, MOCOSO INÚTIL!?-
Ambos estaban tan hundidos en su mundo, que olvidaron por completo que los miembros de Akatsuki estaban justo delante de ellos.
-Ohhh~ esto si que es interesante, parece que nuestro pequeño masoquista ha encontrado un nuevo amigo- dijo el tiburón con una enorme sonrisa.
-Debe gustarle mucho, es la primera vez que Hidan nos presenta a alguien- señaló Konan.
-Genial, lo que nos hacía falta, otro gritón amargado, hm- comentó el rubio, notando que el enmascarado se aferraba a él por la espalda, tanta violencia había logrado alterarlo.
Yahiko soltó un suspiro cansado de tanto alboroto.
-Itachi, por favor detenlos, a este paso llamaremos la atención de los guardias- pidió el líder.
El Uchiha asintió para después estirar sus brazos hacia los criminales.
De golpe ambos salieron volando a diferentes direcciones, dejando al mayor realmente sorprendido.
-¿¡Qué fue eso!?- Kakuzu se tocó el pecho sintiendo una extraña presión.
-Jajajajaja Itachi-san tiene una extraña habilidad psíquica, conocida como telequinesis, puede mover cosas o personas sin necesidad de tocarlas- explicó el hombre de piel azúl.
El artista de ojos azules soltó un bufido para después cruzarse de brazos.
-Como siempre todos alabando al chico perfecto, hm-
-Deidara basta, ya tenemos suficientes problemas aquí, no necesito que tú también actúes de forma infantil- lo regaño su maestro.
***************************************
Tuvieron que pasar algunos minutos, para que el grupo recuperará algo de su seriedad y así el jashinista pudiera presentar su propuesta a los líderes.
-Quiero que Kakuzu se parte de Akatsuki-
Los presos intercambiaron miradas, no muy convencidos de eso, ya que desde hace un tiempo no habían tenido la necesidad de reclutar gente.
-Antes de aceptar algo así, debemos ver las habilidades de nuestro invitado, Hidan nos comentó que tienes una increíble fuerza- se atrevió a hablar Nagato.
-Es correcto- dijo el moreno con mucha confianza.
-Pruébalo, vence a nuestro tiburón- el pelirrojo se hizo a un lado para dejar pasar al hombre de gran altura.
-Hoshigaki Kisame, es un placer conocerlo- se presentó con mucha formalidad aquel fenómeno.
-Lo mismo digo- dijo Kakuzu esperando a que su oponente diera el primer movimiento.
-Me encantaría tener una lucha de cuerpo a cuerpo contigo pero debo guardar energía para la gran presentación, así que se me ocurrió una forma divertida de enfrentarnos, sígueme- Kisame avanzó hasta llegar a unas mesas de concreto y claro que el moreno fue detrás de él.
-¿Qué se supone que haremos?- el castaño no comprendía las intenciones del más alto.
El tiburón se sentó para luego apoyar su brazo contra la fría estructura.
-Tendremos una competencia de pulsos, si ganas serás parte de Akatsuki y tendrás todos los privilegios que eso conlleva-
Kakuzu miró al criminal preguntándose si de verdad sería capaz de vencerlo, fue entonces cuando Hidan llegó, dándole un golpecito en la espalda.
-¡Vamos vejestorio, derrota a ese sushi parlante!-
A pesar de que parecía un gesto sin importancia, logró darle confianza al moreno, que no dudo en tomar su posición en el juego.
-¿Listos?....... ¡luchen!- gritó Tobi mientras alzaba la mano.
La fuerza que ambos desprendían era monumental, parecían dos animales chocando cabezas, tratando de establecer un claro dominio.
Sabían que el primero en desconcentrarse perdería, así que trataban de solo enfocarse en sus brazos.
Al pasar los segundos los criminales comenzaron a desesperarse, a este paso sería empaté y dado sus complicadas circunstancias no tendrían tiempo para otro combate.
-¿¡Qué demonios estás haciendo Kisame no Danna!?, ¡demuéstrale quien manda, hm!- gritó Deidara.
-Es imposible que ese tipo lo logré- Sonrió Sasori al notar como su amigo ganaba algo de terreno.
-El resultado era demasiado obvio- Itachi no lo demostraba en el exterior pero sentía un gran orgullo por su compañero.
Por otro lado, el jashinista estaba más que furioso, no podía aceptar que aquel hombre que tanto llamó su atención fuera simplemente despechado.
-¿¡CÓMO PUDE SER TAN TONTO!?, ¡SABÍA QUE ERAS UN PERDEDOR!- gritó con mucha irá Hidan haciendo que todos lo mirarán.
Incluso Kakuzu, que debía estar enfocado en el tiburón.
-¡ERES PATÉTICO, DEBÍ CORTARTE EL MALDITO CUELLO CUANDO TUVE LA JODIDA OPORTUNIDAD, NO VALES LA PENA!-
Kisame se exaltó un poco al percibir que el moreno estaba siendo rodeado por un aura asesina.
"Oh, esto no puede ser bueno" pensó el tiburón mostrando una sonrisa incomoda.
-¡JURO POR JASHIN-SAMA QUE TE VOY A PATEAR EL TRASERO POR HACERME PERDED MI TIEMPO, ESTÚPIDO, CABRON, ESPERO QUE TE VAYAS AL JODIDO INFIERNO!-
Y así, el avaro había encontrado la fuerza suficiente para ponerle un fin a todo.
-¡CIERRA TÚ PUTA BOCA!- y de un solo movimiento el moreno logró vencer al más alto, pero su poder fue tal extremo que provocó que Kisame saliera disparado contra el suelo, aterrizando de espalda.
Los presentes estaban en shock, ese giro tan inesperado los había dejado sin palabras.
-No puedo creerlo- comentó la marioneta.
-Fue increíble- comentó la única chica del grupo.
De forma rápida, Kakuzu se le fue encima a Hidan provocando que ambos cayeran. El moreno rodeo el cuello del más bajo cortándole el oxígeno.
-¿¡QUIÉN ES PATÉTICO AHORA!?-
El jashinista agitaba todo su ser tratando de quitarse a ese monstruo de encima.
Y claro que toda la organización tuvo que intervenir ya que el chico de los rituales había pasado de color rojo a morado.
****************************************
-Kakuzu, te damos la bienvenida a nuestro grupo, a partir de hoy ya no tendras que afrontar nada solo- dijo Yahiko haciendo que el resto de los miembros hiciera una señal con las manos.
El moreno se sintió raro por la repentina cortesía pero estaba demasiado cansado como para protestar.
Una vez más se escuchó un extraño sonido por toda la prisión, lo que provocó que varios de los criminales comenzarán a avanzar.
-¡Es hora de comer, siiiiii, Tobi se muere de hambre!- gritó el enmascarado para tomar de la mano al rubio.
-¡No me jales idiota, puedo ir por mi cuenta, hm!-
-Vamos, avancen, que también quiero comer- dijo Sasori empujando a sus pupilos.
Hidan que seguía un poco mareado por el sofocante ataque, apoyo una de sus manos sobre el hombro de Kakuzu.
-Mueve el trasero, nos espera un gran buffet- comentó el jashinista.
"Apuesto que la comida debe ser tan desagradable como este sitio" pensó el moreno para seguir al resto de las personas.
Al llegar al comedor, Kakuzu no podía creer lo que sus ojos estaban presenciando, los prisioneros cargaban charolas repletas de inquisita comida, casi parecían sacadas de un restaurante de cinco estrellas.
El avaro se apresuró a tomar su turno pero entonces un enorme guardia que traía en sus manos un arma, saco al moreno de la fila y lo juntó con los nuevos.
-Ustedes ya pueden ir tomando asiento- dijo aquel hombre con una sonrisa burlona.
Sin más remedio, Kakuzu se sentó y casi de inmediato fue rodeado por el resto de Akatsuki.
La comida de cada uno era personalizada, a su derecha tenía al jashinista que disfrutaba de unas deliciosas brochetas de res y puré de papá, mientras que en frente suyo Itachi devoraba unos dangos acompañado por un taza de té.
-Una pregunta, ¿por qué a los nuevos no se nos permite comer?- preguntó Kakuzu haciendo que los presentes dejarán sus alimentos para dedicarle una feroz mirada al religioso.
-Hidan, ¿no sé lo has dicho?- preguntaron al mismo tiempo los chicos sacándole un buen susto al inmortal que casi se atragantaba con su pedazo de carne.
-Es-Estaba a punto de decirselo-
-¿Cuándo?-
-¿A-Ahora?-
Deidara que se encontraba a su lado le dió un fuerte zape, por ser tan irresponsable.
-Vera Kakuzu-san todo lo que hay en este lugar uno se lo debe de ganar- dijo Konan confundiendo un poco al mayor.
-Ya se habrá dado cuenta de que esta carcel no es como ninguna otra, es especial, diseñada para alojar a los seres más peligrosos del mundo, y por eso mismo somos muy populares entre los ricos y degenerados- soltó Nagato para luego darle un sorbo a su bebida.
-Pense que nadie sabía de nosotros o de este sitio- señaló el castaño.
-Las personas normales no saben nada de esto, pero hay una pequeña fracción en el mundo que se interesa por este tipo de casos y Tetsu se le ocurrió una interesante forma de lucrar con nuestra existencia- dijo Sasori.
-¿Y esa sería?-
-Una vez a la semana, nos obligan a luchar, algunos vienen a vernos en vivo otros pueden vernos en un sitio prohibido de la red, y el equipo que gane obtiene lo que quiera de los "patrocinadores", hm- comentó el artista de ojos azules.
-Esos cerdos, con tal de que sigamos vivos y podamos entreternos nos mandan rica comida, cosas para el baño o entretenimiento para nuestras habitaciones- habló Hidan devorando su segunda brocheta.
-Mañana pelearemos, si logras ganar el encuentro y llamas la atención de alguno de esos tipos adinerados, podrás tener acceso a las comodidades- concluyó Kisame.
Kakuzu se agarró con fuerza el puente de la nariz, sintiendo una gran frustración, ahora que sabía de lo que era capaz aquel policía, tenía que tener más cuidado con sus planes, pues ahora escapar era una tarea demasiado complicada.
"Cómo sea, no pasa nada, puedo soportar el hambre y la sed unos días" pensó el avaro con el propósito de regresar a su celda pero entonces vio como Hidan deslizaba su charola hacia él.
-No existe regla que nos prohíba compartirte comida, estúpido anciano- dijo el jashinista para después guiñarle un ojo.
-¿De verdad pensaste que te dejaríamos morir de hambre?- preguntó el tiburón divertido mientras colocaba en el recipiente un pescado frito.
-Tambien puedes probar mis dulces- dijo el Uchiha.
-Toma una botella de refresco, tengo varias, hm- Deidara le pasó al mayor el envase.
-¡Kakuzu-sempai coma de mis onigiria con atún, están súper sabrosos!- gritó Tobi con estusiasmo.
Sin poder evitarlo Kakuzu sonrió, ahora entendía lo que era realmente pertenecer a un equipo.
"Creo que no será tan malo tenerlos como aliados"
Aquí les traigo el capítulo nwn ✨❤️✨❤️✨❤️✨❤️✨❤️✨❤️✨❤️✨❤️✨❤️✨❤️✨❤️✨❤️✨❤️espero les guste.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro