Escena XXV La mañana de Ajio Lonte Bunte y su ira constante de repente

Fecha 9 de abril de 2024 (Día)

Personajes

· Ajio Lonte Bunte

· El maestro del ajedrez

· El padre de Ajio

· Runtelo Mentiro

· La madre de Ajio

Lugar La sala del ajedrez San Miguel

(Descripción del lugar En el lado izquierdo, se ubica un tablero de ajedrez que se ubica rodeado de una mesa redonda. En el lado derecho, se encuentran otras mesas que se ubican en el lado izquierdo. En el centro, se halla una luz urbana de la calle que se encuentra amarrada en el centro del escenario.)

(Se abre el telón) (Ingresa Ajio Lonte Bunte caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Ingresa el maestro del ajedrez caminando al escenario por el pasillo derecho)

Ajio cordial Maestro, me siento tan mal, aunque creo que yo necesito ponerme de acuerdo contigo, aunque creo que nadie me combate totalmente y creo que eres una persona bien mala que me autosugestiona totalmente. Ahora creo que debo intentar descolocarme de repente, aunque creo que necesito ponerme de acuerdo con todo lo que hay detrás.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial. Yo deseo suicidarme porque digamos que quiere acabar con su ciclo de maltrato. Ha habido momentos en los que ha tenido que soportar el machismo de las demás personas y eso le ha resultado incómodo. Digamos que el odia el machismo, porque piensa que ha sido responsable de que las personas me contagien totalmente y eres bien malo.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Maestro, me siento tan mal, aunque creo que necesito ponerme en forma para que no haya problemas con nadie de todo lo que me provoca totalmente. Ahora creo que necesito volver a ajustarme totalmente y creo que nadie me provoca tener miedo de ti y creo que nadie me desajuste totalmente y me siento mejor a tu lado todavía ahora.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando era niño, aprendí que el amor era una enfermedad incurable que absorbía mi corazón con dolor y pena. En aquellos días de mi juventud, conocí a varios chicos, pero ninguno de ellos quiso estar conmigo, porque pensaban que era una chica por mi voz aguda y se reían de mí por tener una actitud femenina que no era compatible conmigo, porque pensaban que era una persona dañina para nada. Me siento mejor ahora.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando era niño, me sentía tan deprimido, porque en mi casa me sentía como un esclavo que solo tenía una vida mediocre. Odio que la gente me obligue a sonreír, porque yo prefiero llorar antes que pensar en fingir o tener una vida donde yo me deba enamorar de alguien a quien no quiero amar. Odio la heterosexualidad, porque eso me parece algo mundano y me gustan los chicos, porque le gusta que los niños le protejan.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía seis aos, yo ilusionaba tener un hombre en mi vida, porque digamos que me sentía solo e incomprendido por mi actitud que todos pensaban que era femenina. Siempre he pensado que la sociedad es una institución que siempre juzga a la gente como yo como si eso fuera bueno para mí cuando eso solo me da rabia e ira. Me molesta que todos me critiquen. Me inquietas totalmente, aunque creo que todo sale mal.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía doce años, me gustaba jugar con muñecas, aunque yo prefería jugar con varios muñecos guapos, porque les chupaba la cara. Desde muy niño, me gustaba el maquillaje y el diseño, pero eso no lo iba a permitir nadie de mi familia. Eso siempre me frenaba, porque yo siempre quise tener un novio, porque nadie me quería protegerte a ti.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía trece años, yo siempre me mordía las uñas, porque esa era mi forma de mostrarme nervioso. A mí nunca me gustó ser un chico normal, porque desde siempre me vi atraído por usar vestidos y maquillajes, ya que eso me gustaba hacer. Digamos que eso siempre me llamaba la atención y se encuentra harto de que quieran reprimir su orientación sexual de alguna manera y eso no le gusta demasiado.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía catorce aos, recuerda que un chico le insulto diciéndole que era un chico sin futuro, porque no tenía la vida de un chico promedio que hace deporte y que tiene amigos. Tandio odia ser ese tipo de persona, porque prefiere entrar al mundo del maquillaje y los vestidos antes que probar cosas mundanas o desagradables para él. Siempre ha querido independizarse de su casa, pero siente que no se encuentra preparado.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando era adolescente, nunca le gustó ir a las fiestas, porque prefería escribir antes que perder el tiempo yendo a celebraciones de gente homofóbica y transfobica que simplemente quería hacerle daño. Tandio soñaba con tener un príncipe azul, porque es incapaz de amarse a sí mismo. No se ama a sí mismo, porque no le gusta su aspecto.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía siete aos, odiaba vestirme con camisa, porque pensaba que me ahorcaba. Además, siempre quise experimentar vestirme con un vestido, porque me identificaba más con las mujeres. Digamos que yo nunca tuve algo de interés por ser masculino, porque eso no me gustaba a mí. Además, siempre yo desobedecía a mis padres.

Ajio cordial Cuando tenía ocho aos, me gustaba jugar con varios peluches, porque sonaba con tener mi propio teatro donde yo pueda montar las obras que voy a estar escribiendo. Digamos que yo siempre he querido que mis obras de teatro sean conocidas, porque a veces dudo de mi talento por alcanzar mi propio potencial. Desde niño, sonó con ser un gran dramaturgo, porque tengo muchas ganas de poder compartirme totalmente ahora.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía siete aos, participaba en un coro de ninos y gracias a ello pude darme cuenta que el canto siempre me ha gustado, porque me gustaba utilizar mi voz. Además, siempre pensé que las personas me tratarían mal, porque pensaban que era una mujer disfrazada de un hombre, pero eso no me pasaba a mí para nada. Me gustaba.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía catorce aos, me gusto un chico, pero me puse nervioso al momento de confesar el amor que sentía por él. Todos me decían que no lo hiciera. Yo soñaba que era mi príncipe azul, pero al parecer las personas siempre se burlaban de mí por decir que él iba a solucionar todos los problemas de mi vida. Desde ese momento, yo me di cuenta que el chico no me amaba y eso hizo que odiara el amor para nada ahora.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía quince aos, yo pensaba que la vida no valía la pena, porque mis padres me pegaban con correas y digamos que sufrí tanto que ni siquiera tenía ganas de vivir. Mis motivos para morir eran los siguientes. El primero eran los insultos cotidianos de mis padres diciéndome que era un fracasado y que se iban a encargar de que toda mi vida fuera infeliz o una persona que sufriría por el resto todavía y creo que me fascinas.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía dieciséis aos, recuerdo que yo me hice un tatuaje y tuve que ocultarlo a todo mi entorno, porque si no me iban a quemar el brazo. Cuando tenía seis aos, me quemaron la pierna y luego me pegaron con la correa. Siempre se encargaron de hacerme la vida infeliz, porque no permitían que viviera feliz con lo que quiera.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía catorce aos, yo me dedicaba escribir todos los días, porque era la única forma en la que no me podía fijar que vivía un infierno donde yo era infeliz. Mi vida siempre ha sido mala, porque nadie me permitía realizar mi talento. Siempre me hacían demasiada bulla que ni siquiera me permitían vivir de alguna forma. Me acostumbras tanto

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía seis aos, yo tenía suenos donde yo terminaba ahorcado con una soga, porque yo pensaba en que la única solución era la muerte. Pensaba que mi amor iba a ser la única salvación para que me saque de la casa, porque creo que esa persona amada iba a estar de acuerdo en que debio huir del maltrato ahora mismo y creo que eres malo.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio Lonte Bunte se acerca al maestro de ajedrez de Ajio Lonte Bunte y lo cachetea

Ajio cordial Maestro, me siento tan mal que nadie me genere cobardía y creo que necesito intentar convivir con todas las personas que me juzgas totalmente. Ahora creo que necesito intentar sentirme mejor conmigo mismo. Ahora creo que nadie me limita totalmente y creo que me conquistas totalmente y creo que me fastidias totalmente.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Maestro, me siento un poco mal, aunque creo que eres un tipo que me consta de alguna manera. Ahora creo que necesito intentar sentirme mejor y creo que necesito poder averiguar de todas las formas y creo que me desabres totalmente y dudo de que me avergüenzas totalmente y ahora creo que me fascinas totalmente ahora mismo.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Maestro, me tengo que cambiar totalmente y creo que eres una persona bien mala que me desarrolla totalmente. Ahora creo que yo necesito poder sentirme mejor en todo momento y creo que eres una persona bien mala que me desarrolla totalmente. Ahora creo que necesito poder manifestarlo totalmente y creo que eres una persona mala.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio cordial Cuando tenía ocho años, yo sonreía con irme de mi casa, porque pensaba que mi entorno era violento y que estaba harto de poder sentirme como un esclavo que solamente me torturaba demasiado. Los golpes que recibía eran algo poco digno que me hacía sentir como alguien que no merecía ser feliz. Cada golpe era duro y eres hombre.

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio se acerca al maestro de Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Maestro de ajedrez se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio se acerca al maestro de Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ingreso El padre de Ajio caminando al escenario por el pasillo izquierdo

Ingresa Runtelo Mentiro caminando al escenario por el pasillo derecho

Entrada La madre de Ajio caminando al escenario por el pasillo izquierdo

El padre de Ajio se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Runtelo Mentiro se acerca a Ajio Lonte Bunte y le da una cachetada bien fuerte

Ajio Lonte Bunte se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo

El maestro de ajedrez se retira caminando del escenario por el pasillo derecho

El padre de Ajio se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo

Runtelo Mentiro se retira caminando del escenario por el pasillo derecho

La madre de Ajio se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo

Cierre del telón Fin de la escena XXV