Minji corrió por el amplio pasillo donde estaban todas las aulas, era la tercera vez que lo hacía y varias personas dentro de éstos se giraban a verla. La chica no sólo era una amante de la Biología, sino de toda la ciencia en general y su grupo había tenido un examen de Física. Fue la primera en terminarlo. Y como no podía quedarse quieta, la maestra le dijo que se saliera del aula. Eso no la había detenido, pues había pasado por el salón varias veces, revisando que Tae y Kook siguieran ahí.

Tenía algo que decirles.

Todos los grupos tenían exámenes a esa hora, varios ya habían terminado y estaban igual que Minji, vagando por la escuela. La castaña se topó con varios conocidos y todos tenían como tema de conversación la fiesta del fin de semana.

No podía creer lo que estaban diciendo.

— ¿De nuevo, Kwon?— La maestra preguntó irritada al ver su gran cabeza en la puerta.

— Sí, holaaa.— Saludó, miró a todo el salón y ya había poca gente, sin embargo, sus amigos seguían haciendo el examen y ahora la estaban viendo también; Jungkook la miró con el entrecejo fruncido, Taehyung susurró un "dime cuál es la trece".

— ¡Kim Taehyung!— Regañó la maestra, él sonrió y siguió en lo suyo.— Minji, retírate.

— Okay.— Finalmente cedió.— Chicos, estaré en la cafetería.

— ¡Niña descarada, vete!— La maestra gritó y las pocas personas que estaban en el aula rieron, Minji sacudió la mano y se fue de ahí.

Jungkoook la vio hasta que pasó por la última ventana y desapareció del perímetro. Después miró a la maestra, ella sonreía derrotada y negaba con la cabeza mientras tomaba asiento. Kook sonrió ladino, todos la aman.

Sólo le faltaba el último problema del examen y en ese momento envidiaba a Minji por ser tan buena en las ciencias. Era increíble; la peor en conducta, la mejor en inteligencia. La campana sonó dando por terminada la hora justo cuando Jungkook escribió el último número de su respuesta. Que se joda la densidad. Se puso de pie y junto a Taehyung, quien tenía cara de espanto, entregó su examen.

Era hora del almuerzo.

— ¿Qué crees que quiso Minji todo este tiempo?— Jungkook le preguntó a Tae mientras iban en camino a la cafetería.

— No lo sé, Kook. En este momento sólo estoy pensando en el regaño de mi madre, me fue pésimo. 

— Bueno yo estoy seguro de cinco reactivos solamente.

— Yo de dos, y no, no estoy seguro, además, ¡eran quince!

Entraron a la cafetería, la hora del almuerzo estaba a minutos de empezar y como los de 2do habían tenido examen, la mayoría ya se encontraba ahí. Jungkook y Taehyung se quedaron de pie en la puerta, buscando a Minji con la mirada entre todas las personas, Tae señaló una mesa del centro, ella estaba sentada y un chico la acompañaba, pero él estaba de pie, sólo le estaba diciendo algo, Minji parecía estar sufriendo que incluso se desplomó en la mesa. Obviamente de manera dramática.

— Tú adelántate.— Taehyung le dijo a Kook.— Aprovecharé que no hay tanta gente en la línea de comida.

— De acuerdo.

Separaron sus caminos, Jungkook cada vez más cerca de la mesa y ya podía escuchar a Minji chillar. Cuando llegó a ésta, ella y el chico lo vieron, ambos se callaron de golpe. Entonces pasó algo que Jungkook no hacía en mucho tiempo: saludar.

— Hola.

— Hola.— Saludó el chico, Minji sólo miró a Jungkook.— Bueno, mejor me voy. Piensa en lo que te dije, Mimi.

— No prometo nada, Donghyuck. Bye~

Él sonrió, después asintió en dirección a Kook y se retiró para ir a sentarse con sus amigos.

— ¿Quién es él?— Preguntó Jungkook, sentándose a su lado.

— Un amigo, pero, también es uno de los mejores amigos de mi ex.— Suspiró cansada, Kook la miró confundido.— ¿Qué? Sí, Kook, aunque no lo creas, alguien pudo soportarme.

El pelinegro sonrió.

— ¿Y quién es?

— No quiero hablar de él.— Dejó caer su cabeza en la mesa.— De hecho no quiero hablar de la fiesta, maldición, ¿por qué fui?

— ¿Pasó algo malo?— Preguntó disimuladamente, la verdad es que le había dolido en poco el saber que ella se arrepentía de esa noche. En mucho tiempo, Kook la había pasado genial y fue gracias a ella y Taehyung.

Quien justo aparecía en ese momento.

— Toma.— Le pasó un caramelo a Minji.— Desde allá vi tu cara de desgracia.

— Gracias, Tae.— Sonrió tomándolo, posteriormente abriéndolo y metiéndolo a su boca.— Esto era lo que necesitaba.

— ¡Eres una bipolar!— Espetó Jungkook, ya molesto, Minji rió.

— Lo siento.

Se disculpó ella sonriente, Jungkook rodó los ojos y ese sentimiento de tristeza de hace un segundo, desapareció. No puedo con esta chica.

— Y bien...— Taehyung revolvía sus fideos negros.— ¿Cuál es el chisme?

— Hay varios.— Minji pasó de estar sentada bien, a cruzar sus piernas y poner su mochila sobre estas para cubrirlas.

— Siéntate bien.— Regañó Kook.— Pueden verte.

— Para eso es la mochila, pervertido.— Lo fulminó con la mirada.— Taehyung, descubrí que Kook es un pervertido de closet.

— ¡Yah!— Probablemente el grito de Jungkook se escuchó por toda la cafetería, pero fue opacado por la fuerte risa de Taehyung y las expresiones risueñas de Minji. Todos miraban en dirección a esa mesa. Kook ahora tratando de evitar toda esa atención.

Bastante había tenido desde que comenzó el día; cuando estaba a una calle del instituto, se topó como de costumbre, personas que caminaban en dirección a su escuela, todos ellos lo miraban. Cuando dio el primer paso dentro, los chicos y las chicas en sus casilleros o que andaban por los pasillos, se giraban para verlo, hasta se decían cosas al oído y lo señalaban sin descaro. Fue en su salón de clases cuando pudo descansar un poco, el acoso de miradas ahí no era tan intenso como el que estaba recibiendo por los pasillos de la escuela.

— Volviendo al chisme...— Taehyung insistió.

— Uhm, sí.— Minji le robó algo de su comida, masticó, tragó y después habló.— Hay cosas buenas y cosas no tan buenas.

— ¡Espera!

— ¡¿Ahora qué?!— Taehyung y Minji le preguntaron a Jungkook. Kook los miró irónico como si ellos nunca interrumpieran.

— Tengo hambre.— Sonrió.— Iré a comprar algo antes de que se llene el lugar.— Se puso de pie.— Minji, ¿quieres algo?

— ¡Sí!— Rebuscó en la pequeña bolsa de su mochila algo de dinero.— Una ensalada de pollo con mucho aderezo.— Sonrió, aseguró del dinero y se lo tendió a Jungkook. Él la miró como si fuera tonta.— ¿Qué?

— Yo pagaré.

— Kook, ya sé que parezco vagabundo, ¡pero no lo soy!

Jungkook y Taehyung rieron, el pelinegro sin decir más se retiró. Minji guardó el dinero y mentalmente se dijo que le compraría algunas frituras a Kook para pagarle ese dinero y el favor. Ella y Tae se quedaron hablando del almuerzo de él, llegaron a la conclusión que las cocineras se habían lucido ese día y habían hecho la comida deliciosa. Minutos después, Jungkook volvió con la charola de su comida en una mano y la ensalada de Minji. Justo en el momento que él se sentó, la campana que anunciaba el almuerzo sonó y avalanchas de personas entraron por las puertas.

— Gracias.— Minji sonrió tomando la ensalada.

— Toma esto también.— Le pasó una Vitamin Water, había notado que ella siempre las bebía.— Ahora sí, el chisme.

— ¡Por fin!— Exclamó Taehyung.

— Okay. Empezaré con lo bueno...— Picoteó la ensalada y los miró seria, después sonrió.— Felicidades chicos, fueron la sensación de la noche.

— ¿Uh?

— Ambos fueron reconocidos como los chicos más guapos de la fiesta, bueno, eso es lo que están diciendo por los pasillos.

Los dos se miraron entre sí, Taehyung sonrió, Jungkook hizo una mueca.

— Hola, Minji.— Mina pasó por ahí, saludó y siguió caminando.

— Como decía, Taehyung, todos dicen que ahora eres más guapo que en primer año y que tu estilo es muy fashionista, además de que eres muy agradable. La gente te ama más de lo que ya lo hacía antes.— Le sonrió al castaño y le dio un golpe en el hombro, Tae le guiñó el ojo.— Y bueno, Jungkook, ¡el chico salió de la cueva! No entiendo porqué dicen eso, sinceramente, pero tu comeback fue un shock para todos, además tu imagen de chico guapo, cuerpo grande y que se viste genial, deslumbró a todos.

— ¿Oíste eso Jungkook? Somos populares de nuevo.

— Tú nunca dejaste de serlo, Tae.— Señaló Kook.— Y yo no lo soy, tampoco quiero hacerlo.

— Sí, ajá.

— Es verdad.— Corrobó el pelinegro, sus ojos cayeron en la curiosa Minji que lo miraba.— ¿Qué?

— ¿Eras popular?

— ¡Minji!— Taehyung la regañó.— ¿Dónde estuviste todo primer año? Te perdiste de todo el drama.

— Tuve varias distracciones. Además, no soy del tipo se chica que es fanática de los populares. Qué flojera.

— Es que tú eres popular.— Tae se encogió de hombros.

— Nop, no lo soy. Mi hermana y su novio lo son.

— Lo eres.— Jungkook apoyó a Taehyung.— Incluso eres popular con los maestros. Lo eres pero no lo quieres aceptar.

— Qué flojeraaa~

— ¡Okay!— Tae alzó la voz.— ¿En verdad no conocías a Jungkook?

— Mmh, sabía que era amigo de Jimin.

Jungkook se puso rígido. ¿Conoce a Jimin? La miró, ella ni siquiera le dio importancia a Jimin. ¿Pero por qué me enoja? Taehyung miró a su amigo y negó con la cabeza al ver que no era muy bueno en notar sus emociones.

— Continúa, Mimi.— Alentó Tae.— ¿Cuáles son las malas noticias?

— Cierto, uhm...— Suspiró.— ¿Recuerdas a Taeyong?— La pregunta fue a Tae.

— ¿Lee Taeyong?— Preguntó él, captando todo al instante.— ¿Te hizo algo?

Kook se confundió más.

— Nada, Tae. Tranquilo. Ni siquiera lo vi esa noche.

— ¿Entonces?

— Él sí me vio a mí.

Taehyung apretó sus palillos y frunció los labios. ¿Por qué se molesta? Pensó Jungkook, ¿quién diablos es Lee Taeyong? La conversación se volvió solamente de los castaños, Jungkook no entendía nada y no estaba ni cerca de tener una pista.

Carraspeó su garganta para llamar la atención.

— También existo, baboso y babosa. ¿Quién es ese chico?

— Taeyong...— Minji suspiró, se giró y empezó a buscar entre todas las mesas a su ex. Por el lado derecho, ahí estaba él, sentado con todos sus amigos.— Es él. El que está en el centro.

Jungkook miró en aquella dirección y centró su mirada en el chico serio que estaba sentado en medio. Segundos después sonrió y se unió a la plática. Lo había visto antes, pero nunca se interesó en él. Además, en primer año tenían deporte juntos. Sin embargo, Jungkook nunca le habló. Era guapo, las chicas lo amaban, pero él no era muy fan de estar tras de ellas o conquistarlas. O eso recordaba.

— ¿Qué tiene?

— Es su ex.— Taehyung soltó la sopa, Minji le dio un golpe.

— ¡¿Qué?!— Una vez más, el grito de Jungkook llamaba la atención de alrededor.

— Síp, él es mi ex.— Minji suspiró.— Es el único chico que en verdad me ha gustado, lo quería mucho.— Confesó.— Peeero, me utilizó para darle celos a la chica que él realmente quiere.

— ¡¿Qué?!

— Deja de gritar, Kook.— Minji lo regañó.— Se supone que tú eres el serio aquí.

— Es que...— Jungkook frunció los labios, su sangre sintiéndose caliente de repente y él apretando sus empuñadas manos.

— Y ahora está con ella, muy feliz de la vida. No sé qué quiere, tal vez sólo joder.— Bufó.— Como decía, me vio en la fiesta y como yo estaba con alguien...— ¿Alguien? Pensó Kook, ella sólo estaba con Tae y con él esa noche, y fue más tiempo con Kook, de hecho.— Creo que el remordimiento lo está consumiendo o le molestó verme pasándola bien, no sé, pero está enviando a sus amigos para que hable con él.

— No lo hagas.— Taehyung y Jungkook dijeron al mismo tiempo.

Minji sonrió y negó con la cabeza.

— No lo haré.

— Es un idiota.— Taehyung espetó.— Solía caerme bien.

— A mí igual, Tae.— Minji sonrió burlona.— Bueno esa era la primera mala noticia, la segunda está ligada...

— ¿Y la segunda es?— Taehyung fue insistente.

Minji suspiró, se cruzó de brazos, miró a Jungkook, después a Tae y por último al techo.

— La gente dice que Jungkook y yo somos novios.

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HOLA HOLAAAAAAAA cuánto tiempooooo ahre

espero esta cochinada se suba porque wattpad siempre me pone trabas): ¿cómo han estado?

les dejo una fotinga: