Gabriela llevaba un rato en la celda y en todo ese tiempo no había  podía dejar de mirar a una morena, le encantaba como la blusa que tenía puesta hacia que los senos se vieran más firmes y grandes, también le llamaba la atención como el color de la blusa contrataba con la piel negra, Gabi estaba tan embobada  mirando a la chica mientras pensaba en como sus gustos habían cambiado tan rápido, hace unos meses sólo se fijaba en hombres y ahora estaba en una celda desvistiendo con la mirará a una mujer que podía ser una delincuente  peligrosa que se sobresalto cuando la muchacha se acercó de una forma un amenazante después empezó hablar. Gabi no le prestó atención a lo decía por mirarle los labios no se aguanto y le dio un beso, eso tomo por sorpresa a Salomé no supo cómo reaccionar por unos minutos hasta que correspondió el beso.

Salomé.

Llevaba un rato en la celda después de ser arrestada por robo cuando una policía llevo a una chica, después de que entró en la celda me empezó a mirar intenté inmolarla pero llegó un punto en el que cansé de su actitud y le pregunté porque me miraba tanto, al no responderme me enoje más fue donde estaba me pare frente a ella para volverle a preguntar y en vez de responder me beso, por un momento no sabía como reaccionar y ahora me estoy besando con una extraña en una estación de policía mientras las demás compañeras nos miran con la boca abierta, talvez este loca pero no quiero que el beso termine pero me estoy quedando sin aire Salomé se separa de Gabriela para recuperar el aliento mientras comenzaba a dudar sobre sus preferencias sexuales, Salomé siempre había pensado que seguía soltera a los 26 años era porque no había encontrado a su alma gemela pero sólo había salido con chicos que de alguna manera siempre la lastimaban talvez su alma gemela fuera otra mujer.