-T3- Capítulo 64 Una familia muy parecida
🍁Capítulo 64 «Una familia muy parecida.»
El asunto de su tío fue llevado a cabo esa misma tarde, Hernán tuvo que dejar de forma obligada a Julia en el hospital y arreglar los asuntos pendientes de forma rápida y solo priorizando lo importante. En la noche del lunes, es cuando finalmente fue directo a ese lugar, para ver la condición de Julia con sus propios ojos. Meri se encontraba sentada en el pasillo blanco, fuera del cuarto de donde dormía Julia. Así que Hernán no tardó en acercarse a ella.
Tenía muchas esperanzas en su pregunta. Así que el tono que utilizó fue directo y desesperado.
—¿Qué te han dicho?
Meri suspiró un poco y se paró del asiento, para ponerse frente a él.
—¿Qué querías que pasara?
La voz de Meri sonó molesta, no podía evitarlo, teniendo al frente al responsable de la mayoría de lo sucedido. El rostro de Hernán mostró angustia y sintió desesperación.
Al verlo mostrar esa expresión.
Meri habló.
—El doctor me dijo que su útero ha pasado por un proceso extraño de fortalecimiento, no se sabe con exactitud qué causó eso. Tenía signos de tener las condiciones para que su embarazo no sea posible o simplemente lo pierda en poco tiempo. Pero aunque hubo sangrado, fue por el pequeño desgarre interno que tuvo.
—Eso quiere decir.
Meri lo miró de forma directa.
—El feto no lo llegó a perder, pero no puede hacer ningún movimiento brusco. Por lo menos en dos meses. Ella ya tiene más de tres semanas de gestación
No habrá una segunda oportunidad si se llega lastimar de esa forma otra vez.
Con la noticia dada, en gran peso que sentía Hernán en ese momento fue aliviado. Sintió por un momento que pudo volver a respirar.
Pero aquello le duró poco cuando Meri volvió hablar.
—Por favor. No le hagas más daño. No se lo merece.
Hernán mostró sorpresa en su mirada.
—¿Qué estás tratando de decirme?
—Sé por lo que pasaste y quién eres en realidad, pero todavía no confío en ti.–Suspiro.—Sabes...Cuando éramos pequeños, como Julio ni siquiera pudo disfrutar de su infancia. Se forzó a convertirse en un hermano mayor a temprana edad. Siempre llorando a escondidas; incluso ahora muy pocas veces a llorado frente mi, al menos que le hayan hecho mucho daño.
Y una de esa veces, fue cuando supe de la noticia. Estaba desesperada y asustada. Nunca pensé en verla de esa forma...
En ese momento tenía ganas de darte un buen golpe por haberla tocado de esa manera. Y aún la tengo.
Hernán la miró nervioso tratando de darle una explicación.
—Las circunstancias fueron algo...
—Las cosas ya están hechas y ni siquiera Julia te culpa completamente. Tampoco puedo actuar tan impulsivamente.–El rostro de Hernán mostró un poco de alivio.—Así que espero que cargues esa angustia con Julia. Sin en realidad la quieres. No la hagas infeliz.
—No soy alguien que tome las promesas a la ligera.
Así que no dudes que así será.
—Solo eso espero.–La mirada de Meri mostró ferocidad.—Y por cierto, no te la estoy dando.
Solo te estoy diciendo que te hagas responsable.
—De eso no lo dudes.–Sonrió un poco.—Escuché la explicación de Maicol del porqué sucedió su secuestro y también su regaño. Así te diré las mismas palabras que le dije a él. Me haré responsable de Julia.
No sé que sucederá en el futuro, tal vez ni me llegue a amar, pero protegeré la felicidad de ambos.
—Gracias por decirlo.
También mi hermana debería oír las mismas palabras.
Hernán movió su rostro ligeramente hacia el cuarto en donde dormía Julia.
—De hecho, ya tengo las palabras precisas.
(***)
El sonido de algo agudo, resonaba como zumbidos cerca de la oreja izquierda de Julia. En pequeños parpadeos, pudo mirar de forma borrosa lo que estaba frente de ella, al estar tan iluminado alrededor.
Cuando pudo ver mejor, lo primero que notó es la figura femenina de alguien muy hermosa, ojos esmeraldas, cabello castaño ondeado y largo, rostro pequeño y claro.
Era como ver a un ángel en vivo y directo
Solo fue una cosa que se le pasó en la mente de Julia en ese momento, con un claro susto.
¡¿He muerto?! ¿Es un ángel?
Al costado de aquella mujer, también había un niño de diez años muy parecido a ella. Con un rostro serio y mirada fría.
Al darse cuenta con más claridad, ¡aquellas dos personas era la versión femenina e infantil de Hernán!
Los ojos de Julia se abrieron de manera completa y trató de levantar medio cuerpo, siendo detenida por una mano masculina que tocó su hombros con suavidad. Al girar su cabeza, por fin pudo notar con claridad que era Hernán, que había estado a su lado todo este tiempo.
—Yo...¿Qué me pasó? ¿Me desmayé y después qué pasó?
—Estás estable ahora, dormiste por un día entero. Es de mañana.
¡¿Ya es martes?!
Un poco más exaltada, Julia movió sus brazos hacia su vientre. Sintiendo dolor en su mano izquierda, el cual estaba vendado
—Yo me caí...¡Es cierto, yo me caí del asiento...!
Hernán la calmó.
—Está bien Julia, sigue ahí.
Dicen que tu útero es fuerte y no pasó a mayores casi como un milagro.
¿Mi útero no era débil?
Es cierto, lo que me dio el anciano es la única respuesta.
Los ojos de Julia se notaron sorprendidos al voltear a mirarlo, la expresión de Hernán aún mostraba angustia en su rostro.
—Ya lo sabes, ¿verdad?
—Meri y Maicol ya me explicaron la situación y también me regañaron. Fue muy repentino asimilarlo y luego verte en ese estado.
Es difícil explicarte ahora en como me siento, pero hablaremos después de que te sientas mejor.
Julia movió su rostro intranquilo.
—Te entiendo, yo también pienso lo mismo...
Al mirar al frente suyo de nuevo, se exaltó por haber olvidado por segundos a los dos invitados que veían la escena en silencio.
—Lo siento, ustedes acaso son...
—Mi hijo me explicó quién eres y vine de paso a visitarte, mi esposo está también en este hospital recibiendo su tratamiento.
Yo soy su madre, Irina y él es su hermano. Emilio.
Julia por dentro estaba aún procesando lo que veía.
¿Cómo puede ser su madre? ¡Se ve demasiado joven y hermosa! ¿Acaso tomó el elixir de la juventud?
Y su hermano, es demasiado idéntico a Hernán ¡Los genes de su mamá son poderosos!
—Yo... Bueno, no sé qué decir por esto, ni es el momento apropiado. Pero es un gusto conocerla y a su hermano.
El joven hermano volteó su cabeza con un rostro serio, en forma de ignorar su saludo.
Tiene un mal carácter al parecer... Creo que solo heredó lo físico de su madre...
—Disculpa, él solo está nervioso. Es algo tímido, no ha interactuado mucho con los demás por mucho tiempo y...
—Mamá, no le des explicaciones a una desconocida.
Hernán le interrumpió.
—Emilo, no seas descortés.
Julia ha sufrido también las consecuencias del acto de ese hombre. Ella va tener un hijo mío, sé considerado.
Esta última oración, hizo que cuerpo de Julia temblara y sus orejas se enrojecieran de un rojo vivo. Esa forma tan íntima de nombrarla, fue demasiado para ella. Así que cubrió sus orejas de inmediato
Estoy muy avergonzado maldita sea.
—¿Julia?–Hernán la llamó.
—Yo... No lo obligues a ser amable conmigo. Recién me conoce. Ya habrá tiempo de que podamos tener una plática adecuada. Al igual que tu madre.
Después de ver la sonrisa de Irina al sentir alivio. Julia pudo captar bien lo que dijo.
Eso sonó como si quisiera integrarme a la familia... ¡Que imprudente que soy! Ni siquiera he tenido una plática adecuada con Hernán.
—Yo estoy feliz por la noticia, aunque también estuve asustada al igual que Hernán al oír lo que te había pasado. Es una fortuna que no pasó nada grave que pudiéramos lamentar.
Hernán de inmediato se acercó a Irina.
—Madre, ya todo terminó. Te juro que ese hombre jamás volverá a lastimarlos.–Volteó su rostro hacia su izquierda, notando sorpresa en la expresión de su hermano.—Emilio, tú también has sido valiente. Nuestros padres y tu ahora estarán en un lugar seguro y podrán vivir libremente. Con lo que siempre les perteneció.
Irina mostró alivio al oírlo.
—Hernán, nunca pensé en ti como un mal hijo. Así que no te sigas culpando por lo que pasó. Tu padre solo es obstinado, pero jamás te odió.
—Lo sé madre, sé lo inmaduro que fui. Y ahora me toca recompensarlo.
Su madre asintió y sonrió un poco.
—Los dejaremos solos para que puedan conversar, me alegra saber que mi hijo a encontrado a quien entregar su corazón de manera honesta. Sin embargo, yo también respetaré la decisión que tomes con mi hijo. Espero que pronto recuperes tu salud.
—Gracias señora por tomarse la molestia de visitarme. Y comprenderme.
Espero también la salud de su esposo se mejore.
Asintiendo, madre e hijo salieron del cuarto. Dejando el lugar en silencio por segundos.
Julia no pudo evitar echarse de nuevo, ya que aún no podía hablar de forma calmada con Hernán, menos mirarlo a los ojos. Así que Hernán la dejó descansar al verla actuar de esa forma. Y salió por un momento fuera.
(***)
El día miércoles en la tarde, por fin Julia pudo salir del hospital con la ayuda de Meri y Hernán, quienes la llevaron a su casa con mucho cuidado.
Aunque Maicol no pudo ir, fue él quien envió un auto grande para que la llevaran de forma cómoda.
Por la sugerencia de Julia, Meri se fue poco después para dejarlos solos. Sin antes agradecer su ayuda.
Lo primero que hizo Hernán es explicar la situación de su familia de forma más detallada, debido a la curiosidad de Julia.
Tal vez sea por el shock del momento, pero Julia recién entró en cuenta que Hernán era increíblemente adinerado.
Ni siquiera en sus pesadillas podía pensar en esa posibilidad, siendo Hernán alguien algo descuidado con su vida y aspecto.
Disculpándose muchas veces por haberla arrastrado hasta ese punto. Julia no pudo culparlo demasiado, además de que no llegarían a nada con hacer eso.
Hernán se agachó de rodillas al estar Julia sentada en el mueble.
El rostro de seriedad y esperanza que mostró, solo le hizo pensar que era demasiado importante lo que diría ahora.
—Julia solo te pido tener una oportunidad, para demostrarte que yo también puedo ser una persona importante en tu vida. Esto es algo que quise decirte desde antes, después de terminar este asunto. Y ahora, no hay duda en mi determinación.
Julia movió su mano derecha de forma nerviosa.
—Sabes que soy una persona terca y que no retrocedo cuando decido algo.
—Puedo aceptarlo, lo que deseas, lo aceptaré.
Julia apretó su boca y suspiró.
No era tan fácil para ella decir las cosas de forma sincera.
—No soy una persona tan dura de corazón y he visto demasiadas cosas de ti de forma cercana. No puedo juzgarte por tu pasado, cuando sé las razones de tus acciones. Si tus palabras son ciertas, entonces permitiré que esa línea que he trazado en ti sea más accesible.
Hernán no pudo contener reaccionar con alegría en ese momento.
—Entonces...
—Hernán, sabes que una vez entregué mi corazón a una persona. Y me negué a enamorarme de nuevo. Sin embargo, no puedo ser tan duro conmigo mismo. Menos en esta situación, así que... no negaré tu petición.
—Yo te ju-
Julia interrumpió.
—Antes que lo digas primero, yo lo diré.
Con un rostro serio y dejándose llevar por su interna consciencia masculina. Julia exclamó en voz alta.
—Yo, ¡asumiré la responsabilidad!
Tal nunca esperó oírlo por parte de Julia, así que Hernán se quedó estático al escucharla decir aquello.
No pudo comprender en ese momento, quién embarazó a quién.
—Eso es un poco... ¿No sería al revés?
Julia mostró un rostro malicioso.
—Hernán, ni creas que yo seré el único que sufra en este proceso.–Lo señaló con su mano derecha.—Ya que estamos en esta situación ahora, eres la única persona que puede cuidarme.
Si quieres hacerte también responsable.
Hernán la miró fijamente sorprendido.
—¿Me estás diciendo que quieres que viva contigo?
Julia tomó en cuenta lo que acababa de decir y meditó un poco nerviosa.
—Ah... ¿Vivir juntos? Bueno, creo que sí. No creo que haya otra manera...
De repente ella sintió ser su mano derecha tomada por la de Hernán, viendo el rostro decidido y coqueto de él.
—Por supuesto que no rechazaré esta oferta.
En ese momento, Julia pasó un poco de saliva.
Siento que me acabo de meter en la boca del lobo.
Nota de Aru.
Fin de la tercera temporada.
¿Por fin ya vemos un progreso?
Algo es algo 😂
Aún queda dos temporadas, hay demasiado por delante todavía.~
Espero sus estrellas, me motivan bastante. Gracias por leerme y pasen una buena navidad y año nuevo❤
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro