Capitulo 14
Por fin había llegado el momento de comenzar sus vacaciones de navidad en familia, ya los niños estaban listos y Gulf siendo el padre sobreprotector que era le había pedido a Mirian que abrigara lo mejor posible a Lamai, estaba haciendo frio y no quería que su pequeñita enfermara; para que no se sintiera distinta tambien le había pedido a la mujer que hiciera lo mismo con Alexander, asi que ahora tenia dos niños sentados en el sofá de la sala molestos por estar abrigados, alegando que no estaba haciendo tanto frio para ello.
Un rato después bajo la señorita Mirian con su maleta, lista para marcharse a visitar unos parientes y pasar las fiestas de ese año, Mew le había pedido un taxi para que la llevara al aeropuerto, pero al ver como los niños que hasta hace unos momentos estaban tranquilos en el sofá, ahora estaban en una lucha tirando de sus bufandas en el suelo de la sala, estuvo tentada en cambiar sus planes y preparar todo lo necesario para irse con ellos al rancho y ayudarlos a controlarlos, en ocasiones esos niños podían ser super adorables y en otras todos unos torbellinos traviesos.
-Tendremos todo controlado Mirian, no te preocupes - le dijo Mew al ver que sus hijos por fin se rendían y se quedaban tirados en el suelo respirando cansados - Vete tranquila te mereces unas vacaciones, cuidas muy bien de mis niños que te mereces un descanso.
-Ese es mi trabajo y hago todo lo necesario para que se encuentren bien.
-Yo diría que haces mas de lo necesario- le aseguro el castaño para luego girarse hacia sus pequeños y decirles: -Vengan a despedirse de la señorita Mirian, deseenle un buen viaje.
Ambos niños se pusieron de pie de un salto y fueron abrazar a la mujer, la iban a extrañar mientras estuvieran de vacaciones, después de que Mirian se fuera, ambos niños regresaron al sofá y se pusieron a ver caricaturas, estaban a punto de quedarse dormidos cuando él timbre de la casa sonó, Dave y Kulap habían llegado trayendo consigo sus maletas.
-¿Los dejaran dormir?- pregunto la mujer al ver el semblante cansado de sus nietos.
-No- dijo Mew - Preferimos que lo hagan durante el vuelo ¿Pueden tratar de mantenerlos despiertos?, Gulf ya casi termina de rehacer la última maleta, si hubieran visto las cosas que estos pequeños metieron en ellas- se rió el castaño acordándose de todas las cosas que encontraron en su inspección- Esperen aquí, no tardamos y aún estamos a buena hora para irnos al aeropuerto, pueden tomar algo de la cocina si gustan, aunque creo que solo tenemos bebidas y algunas galletas, no queremos dejar nada que se pueda echar a perder, solo no dejen dormir a los niños.
Lamai se sentia cansada y por eso estaba cruzada de brazos, ella quería tomar su siesta, aunque no contó con que su abuelito Dave les obligará a ir con el a la cocina para beber agua.
Kulap estaba sentada en su asiento de avión detrás de sus nietos, ellos estaban sentados con sus cinturones puestos y a punto de dormirse, tomar un vuelo de noche con los niños cansados y a punto de dormir fue una gran idea, en esos momentos estaban tan cansados y no tuvieron energías para pelear por el asiento de la ventana.
Su hijo estaba ocupado haciendo reír a Gulf, ignorando como siempre todo a su alrededor, eso era algo muy común en ellos, pero está vez se preocuparon primero por ver qué sus hijos estuvieran cómodos.
-Deja de pensar tanto y solo disfrútalo, no todos los días viajas en primera clase - le murmuró Dave acomodándose en su asiento, dispuesto a disfrutar de la experiencia.
-Es que aún no puedo creer que dejara que me convencieran de venir a este viaje, no tengo nada en común con ellos, solo conozco a Bass y realmente solo conversamos cuando nos vemos.
-Ya mujer solo te estás preocupando más de la cuenta, hace unos días pude hablar con Sunan el padre de Gulf y me pareció una buena persona.
-Sigo sin confiar en este viaje, pero creo que será más tolerable si te quedas siempre a mi lado, vamos a conocer a mucha gente nueva y ya sabes cómo me pongo cuando eso sucede.
-Ya veremos qué sucede cuando estemos allá, ahora solo relájate y disfruta del viaje, ya casi vamos a despegar.
Kulap bufo al ver a su marido ponerse cómodo, colocarse los auriculares e ignorarlas mientras usaba el nuevo iPhone que Mew le había regalado dos semanas atrás.
Cuando llegaron al rancho fueron recibidos por todos en la puerta de este y Sunan pudo observar por primera vez en persona al pequeño niño que tomaba la mano de su hijo y definitivamente ya no quedaba rastro de aquel risueño niño que era transportado por los brazos de Gulf y que reía cada vez que le hacian una muestras de cariño y le encantaba andar vestido con un disfraz de pinguino.
El hombre sintió un golpe de Sari en su estómago para que reaccionara y notará lo que estaba pasando a su alrededor, todos estaban abrazando a Mew, Gulf, Lamai y presentándose nuevamente ante Alexander que no soltaba las manos de sus dos padres.
-Se amable, ya sabes el trabajo que costó que los padres de Mew vinieran - le susurro su esposa antes de ella acercarse a saludar - Es bueno tenerlos en casa de nuevo, deben venir más seguido, no es bueno que sus niños crezcan lejos de sus primos, somos familia.
Sunan vio como Gulf rodaba los ojos no creyendo ninguna de las palabras de Sari, antes de pasar a presentarle a sus suegros, había tenido la oportunidad de hablar con Dave unas noches atrás, era gratificante encontrar a un compañero dispuesto a ir al río con el, libre de nietos, esposas e hijos, una tarde de hombres bebiendo cerveza y hablando de algún deporte.
-Muchas gracias por invitarnos- hablo Kulap - Tienen una casa muy hermosa.
-Ha sido residencia Kanawut por más de cien años, se le han hecho modificaciones a lo largo del tiempo, pero eso no es algo de lo que debamos hablar en este momento, mejor pasemos, mis hijos llevarán sus malestas a las habitaciones - hablo Sari entrelazando sus brazos con Dave y Kulap -Tenemos mucho de que hablar, adentro está Bass esperándonos con... Cosas.
El padre de Gulf se rió nuevamente, cuando vio el ceño fruncido de su hijo ante la evasión de información por parte de Sari, aunque lo dejo pasar cuando sintió que Alexander apretaba su mano, el niño era tan diferente a Lamai, que ya estaba siendo bombardeada con preguntas por parte de sus primas que querían saber todo lo que había hecho en Bangkok desde su última visita.
Ese era su momento, su hermano Bass le había dicho que le patearia el trasero sino se comportaba con Alex y debía haberlo ya para que Mew y Gulf se dieran cuenta que lo que decía en las videollamadas con su nietos era real, que aceptaba al pequeño en la familia.
-Es bueno tenerte en casa Gulf- por fin se acercó a saludar a su hijo -Tienes que aprender a visitarme más seguido, ya estoy viejo y tienes que traer a mis nietos para poder llevarlos a cabalgar cómo lo hacía contigo.
-Ya estamos aquí papá y tú no estás viejo- respondío el pelinegro separándose del abrazo y volteandose hacia Alexander que esperaba pacientemente junto a Mew -Ven cielo, ven para que conozcas formalmente a tu otro abuelo.
Sunan vio como el niño soltó la mano del castaño inseguro para acercarse hacia Gulf, al tenerlo más cerca y no a través de una cámara, se dio cuenta de lo equivocado que estaba, era muy parecido a Gulf con rasgos físicos que igualaban a los de Mew, tenía el mismo gesto desconfiado que hacia su hijo, la misma resistencia a aceptar su nuevo entorno, incluso la posesividad que demostraba en esos momentos abrazándose a la cintura de Gulf con una mano.
-Hola Alexander, es un placer volver a verte en persona y un gusto tenerte nuevamente en casa.
El hombre espero nerviosamente a qué el niño reaccionara, Bass le había contado lo inteligente que era y como a pesar de que aquel entonces era un bebé podía recordar algunas cosas de lo que había sucedido, solo esperaba que no recordara nada de lo que había pasado allí en el rancho.
-¿Una serpiente puede meterse a la casa?... a Lamai no le gustan y yo ya aprendí mi lección con ellas - fue lo primero que dijo mirando a su alrededor.
-No pueden hacerlo - le aseguro -Y si alguna está cerca los trabajadores del rancho o tus tíos saben que hacer, no hay nada de que preocuparse- termino de decirle pasando por alto lo de la lección aprendida, por supuesto que sabía todo de ese incidente y le llenaba de satisfacción que esa familia ya no estaba cerca de su hijo y nieto el se había encargado de eso.
-Esta bien- asintió pensativo para después voltear a ver a Gulf -¿Puedo ir con el abue Bass?, Hace mucho tiempo que no lo veo.
-Solo han sido dos semanas, no seas exagerado que de todos modos hablas con el por video llamada- le dijo el pelinegro con una sonrisa.
-Es es mucho tiempo Gulf, tú hablas con el todos los días, incluso Mew habla con el acerca de...
-¿De que?- pregunto curioso Gulf levantando una ceja mirando directamente a su marido.
-Porque mejor no entramos - hablo Mew jalando a su hijo hacia él -No le hemos puesto bloqueador solar a Lamai y ya sabes lo delicada que es su piel.
-Si es hora de entrar - estuvo de acuerdo Sunan antes de voltear y ver a sus otros hijos batallando con las maletas -Que vergüenza, pueden cargar cerdos dentro de un camión, pero no pueden con unas maletas, al parecer he criado a unos debiluchos.
-Las cosas de Gulf pesan más que un cerdo gordo - protesto Daniels -¿Traes un cadáver aquí o que?- le pregunto ahora a su hermano.
-Lo que pasa es que eres un debilucho o los años ya te están pasando factura - respondió Gulf burlándose de él.
Sunan le señaló a su yerno la puerta de la casa, para escapar de otra disputa entre sus hijos, Mew y Alexander lo siguieron sin ningún problema, Lamai ya había entrado en algún momento con las otras niñas.
Dos días después de haber llegado a Provincia Gulf se estaba lamentando por haberle dado vacaciones a Mirian, la necesitaba en todo momento, ahora se daba cuenta de cuanto lo ayudaba cuando estaba en casa,aparte que le hacia falta la seguridad de que ella estaba con sus niños, le preocupaba la posibilidad de que a Lamai o Alexander les pasará algo y el no estuviera presente para ayudarlos.
Pero después de que unas de sus sobrinas tropezara en el patio y todos los demás niños fueran ayudarla para llevarla adentro y se hicieran cargado de curarla se quedó tranquilo, Gulf dejo que sus pequeños jugarán libremente, lo cual causo que tuviera más tiempo libre paga estar con Mew y disfrutar de los días navideños antes de que el estress de la Nochebuena llegara.
Mew y Gulf deseaban que la primera Navidad de Alexander despues de su regreso a casa fuera perfecta, ya los regalos estaban envueltos y guardados en el ático de la casa Kanawut hasta que Santa llegara, el pelinegro se había sorprendido al notar que cada uno de sus hermanos habían pensado en sus hijos, había visto al menos dos presentes de cada uno de ellos , incluso Sari había derrochado un poco de fortuna familiar para conseguir un regalo perfecto para Alexander, todos querían que tuviera una Navidad perfecta.
Pero a pesar de que estaba pasando más tiempo con su esposo, se había dado cuenta que algo sucedía, su padre se pasaba horas saliendo a pescar con Dave al río, Kulap había hecho buenas migas con Sari e iban mucho al pueblo, ambas siempre regresaban con bolsas misteriosas, primero pensó que se trataba de cosas para la cena de Navidad, pero al ver lo mucho que se esmeraba en esconder sea lo que fuera de él, comenzó a sospechar que se trataba de algo más, aunque todavía no había descubierto de que se trataba, detestaba no saber las cosas.
-Yo cuento, ustedes se esconden- dijo uno de los niños mayores dándoles la espalda y recostandose en un árbol para no ver.
Todos los niños asintieron y en cuanto escucharon que el chico comenzó a contar salieron corriendo a esconderse, la mayoría lo hizo en los arbustos cercanos, otros en la cochera, unos en los juegos infantiles que tenían en el patio, pero no Alex que decidió hacerlo detrás de un frondoso árbol pequeño que estaba cerca de la valla que rodeaba el área, estaba seguro que nadie lo encontraria allí?
Escucho que su primo terminaba de contar y gritaba que los buscaría, espero pacientemente escuchando cómo el chico iba consiguiendo a los otros niños, solo faltaban los que se habían ido al garaje y él, pero el niño frunció el ceño al escuchar que las hojas que estaban cerca de él se movían, pensó que tal vez se trataba de una serpiente y está no sería inofensiva como la de su escuela.
No quería tener ninguna mordía de serpiente, aún era pequeño para morir envenenado, se pego al tronco del árbol, esperando que la serpiente apareciera, definitivamente era muy joven para morir, aún tenía que esperar la llegada de Santa y que le cumpliera con su regalo, las hojas se movieron nuevamente y Alexander grito asustado cuando un animal salió de su escondite.
Gulf se vio invadido de repente por un grupo de niños que ahora se amontonaba a su alrededor, su tiempo divertido con Mew había terminado oficialmente, había demasiada calma para ser verdad hace unos instantes.
-Tio Gulf, dile a Alex que me deje cargarlo.
-No que me deje hacerlo a mi.
-No a mi.
-Yo soy su hermana así que lo tengo que cargar yo primero.
El pelinegro observó a su esposo, que igual estaba viendo desconcertado a los niños sin entender nada, hasta que vieron a su pingüinito aparecer con una bolita en sus manos llena de lodo, con hojas y ramitas pegadas en su camisa que estaba manchada por completo, pudiendo entender lo que sucedía.
-Miren lo que encontré... Aunque necesita un baño.
Gulf ahogo un grito cuando Alexander puso lo que se suponía era un gatito sobre sus piernas, sus pantalones habían quedado arruinados.
-Mew...
Su servicial esposo le quitó el gatito de encima y lo dejo levantarse para intentar limpiar la enorme mancha que había quedado en sus pantalones de color beige, ahora sabía que había sido una pésima idea usarlos ese día.
-Este pequeño está maullando muy bajo- hablo el castaño revisando el gatito -No creo que este muy sano.
El chillido de angustia de los niños fue suficiente para saber que tenían que salvar al minino o todos los pequeños necesitarían ayuda psicológica por su muerte.
-Lisa, cariño -hablo Gulf llamando a una de sus sobrinas -Ve con tu madre y pídele que llame al veterinario, Mew y yo le daremos un baño al gatito.
-Si tío Gulf - ella acepto fácilmente y salió corriendo seguida de cuatro niños más que gritaban el nombre de su cuñada Jenni.
-Vamos Mew, acompáñame al baño de la planta baja, hay que limpiar a ese pequeño - hablo Gulf señalando la dirección en la que debían ir -Tambien necesito limpiar mis pantalones.
-Lo siento - le dijo Alexander bajando la cabeza.
-No importa cielo - le aseguro deteniendo a los niños que quedaban seguir a su esposo -Tengo una misión para ustedes, vayan y traiganme una toalla, champu y un secador de cabello... No el que está en mi habitación, alguna de sus madres también deben de tener uno, traigan uno de los de ellas.
Los pequeños corrieron hacer lo que le decía quedando solo Lamai y Alexander frente a él.
-Es mio, asi que yo tengo que ver qué pasa con el- se cruzó de brazos Alexander.
-Y yo soy su hermana y tengo que acompañarlo.
-Por supuesto que iban a decir algo parecido, si hicieran lo contrario definitivamente ya no sería hijos míos, son tan parecidos a mi que me asustan - respondio abrazándolos por los hombros para ir por el mismo camino que se había ido Mew, siempre se sorprendía porque la personalidad de sus pequeños fueran muy parecidas a la suya.
Llegaron al baño y encontraron al castaño tratando de quitar las ramitas del pelaje del gatito con mucho cuidado para no lastimarlo, aunque los maullidos lastimeros le indicaba que no estaba haciendo un gran trabajo con ello.
-¿Le duele mucho? - pregunto Alex mordiéndose las uñas.
-Es solo que es muy pequeño y no sabemos por cuanto tiempo ha tenido todo esto pegado a él- respondió Mew sin dejar de atenderlo.
-¿Se va a salvar papá?
-Esperemos que si hermosa.
-Ya he llamado al veterinario -hablo Jenni haciendo acto de presencia detrás de ella estaban todos los niños y los hermanos del pelinegro que habían ido a ver qué sucedía -Dijo que llegaría en unos minutos.
-Esto me recuerda cuando Gulf encontró uno de los puerquitos a punto de morir cerca de la zona por dónde cabalgaba en las tardes -hablo Daniels cruzándose de brazos en el marco de la puerta del baño -En aquel momento llegó con toda la ropa sucia, pero eso no importaba tenía un cerdo como mascota y después tomo un vestido de mamá y lo vistió con el.
-¡Cállate!- pretesto el pelinegro arrojandole agua a su hermano un poco sonrrojado por lo bochornoso de ese recuerdo -Dejame ayudarte Mew, mi pantalón ya está arruinado, no pasará nada si lo mancho un poco más.
El castaño sostuvo al pequeño animal, mientras que el le iba quitando las ramitas y hojas, Deina su otra cuñada le entrego unas tijeras para que cortará si lo creía necesario algo del pelaje del mínino, debían limpiarlo por completo.
-Le tejere un sweater- dijo otra de las mujeres al ver qué iban a tener que sacrificar párte de su pelaje-Asi se mantendrá calentito.
En media hora el gatito por fin ya estaba casi limpio dejando ver su pelaje blanco, aunque estaba quejándose por lo empapado que estaba y maullando por el frío, Mew ya había perdido la cuenta de las veces que habia recibido arañazos y mordidas de su parte.
-Pasenme la secadora - pidió Gulf haciendo que su hermano James que había estado jugando con ella durante todo el proceso, la soltara asustado -Definitivamente sigues siendo infantil -rodo los ojos mientras recibía el artefacto.
-Callate y mejor seca ese gata que parece una rata mojada - replicó el hombre indignado.
-Te comunico que es un gato tonto- replico el pelinegro mientras media la temperatura del secador buscando la más adecuada -Alguien pensaría que al vivir en un rancho podrías diferenciar a un macho de una hembra.
-¿Alguna vez les he dicho lo frustrante que es tener un hermano sabelotodo?, En serio Mew eres una maravilla por mantenerlo alejado de nosotros.
Gulf volvió a rodar los ojos y se dedicó a secar al gato, que no dejaba de soltar maullidos lastimeros, el veterinario llegó cinco minutos después de que lo tuvieron completamente limpio, lo llevaron al granero en donde el médico tenía un área acondicionada para hacer las revisiones de los animales del rancho, el pelinegro se disculpo diciendo lo mucho que detestaba el olor a granero y que iba a cambiarse el pantalón, pues segun el sentía que las moscas estaban encima suyo.
-Este gato está muy pequeño, posiblemente fue el más debil de la camada y su madre lo abandono, sus patas tienen heridas que estan infectadas, le pondré algo de antibiótico para combatirlo, mantengan sus patitas cubiertas como las voy a dejar, mantenganlo en casa preferiblemente, aún tiene muchos pegostes de fango, no deberíamos cortarle más el pelo porque después va a ser muy rebelde en su crecimiento, recomiendo que lo sigan bañando hasta que pierda por completo toda la suciedad, sequenlo muy bien, en especial en el área de sus heridas.
-¿Pero se va a poner bien? -Pregunto Alex mordiéndose las uñas y viendo al gatito en la mesa.
-Con los cuidadoa necesarios, será un gato muy saludable, aún es muy pequeño, si ven que no que no puedo tomar su leche directamente de un recipiente, intenten dársela con un tetero, tal cual fuera un bebé humano.
-No se preocupe haremos todo lo necesario para que el gatito mejore- dijo Mew para tranquilizar a su hijo.
El veterinario se fue después de que les diera las últimas indicaciones y les dijera que debían llevar al gatito a en dos días a su consulta para ver cómo había evolucionado.
-¿No los podemos quedar?- pregunto nuevamente Alexander sosteniendo al minino contra su pecho.
-Claro campeón, pero tienes que ser muy responsable, ya escuchaste al médico tienes que tener muchos cuidados con él.
-Lo se Mew, te prometo que lo cuidare bien.
-Confio en ti, ¿Cómo lo llamaras?
-Podemos llamarlo... -intervino ahora Lamai dando saltitos emocionada.
-No, ¡es mío!, asi que yo sere el que le ponga su nombre.
-Pero, Alex...- suplico con un puchero la niña.
-Se va a llamar.... Hazard... Si ese es su nombre- hablo confiado el pequeño.
-¿Cómo el jugador de fútbol?, No me gusta ese nombre mejor deberíamos ponerle copo de nieve, cuando esté todo limpio será tan blanco que se parecerá a la nieve- argumento nuevamente Lamai queriendo convencerlo.
-No se si es un jugador de fútbol o no, solo se que me gusta ese nombre y lo escuché en algún lugar, ahora me voy a mi habitación, Hazard necesita descansar- salió el niño del granero en dirección a la casa.
-Definitivamente es igualito a ti, dice algo y se tiene que hacer lo que el diga- le dijo Mew a su esposo que había regresado ahora usando un pantalón de color oscuro.
-¡Con que soy un mandon!, Me ofendes Mew, yo no les digo a todos lo que tienen que hacer... Por haber dicho eso, ahora te toca a ti convencer a nuestro hijo que Hazard no puede dormir en la cama con él.
-Si algo he aprendido de ti y de Alex... Es que cuando se les mete algo en la cabeza, no le harán caso a nadie y harán lo que se les de la gana, así que es caso perdido tratar de convencerlo que deje al felino en alguna otra parte que no sea su cama- le respondió Mew dándole un beso en la mejilla a su esposo.
-Eso es cierto Alexander es igualito a ti en personalidad, es todo un Kanawut- estuvo de acuerdo Jenni con la declaración del castaño.
El solo rodo los ojos y se fue a la casa a ver qué estaban haciendo sus niños traviesos, a ellos no se les podía quitar el ojo de encima siempre se andaban metiendo en problemas y ahora tenían una nueva mascota para llevar a casa.
Ya tenemos nuevo miembro en la familia 🤭🤭🤭
Por cierto si ven algún error me avisan porque wattpad no me guardo los cambios que hice y tuve que revisar rápidamente hoy antes de publicar.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro