Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

| 47 |

Christopher


Parqueo el convertible en la mansión, quitándome las gafas de sol y saliendo del Porsche 718 Boxster, una de mis últimas adquisiciones. No tan lejos veo el Mazda MX-5 azul eléctrico de Erick, y sé que ya él se encuentra aquí. Al parecer solo faltaba yo. Las puertas metálicas que me reconocieron y me hicieron entrar hace unos segundos mantienen avisada a la ama de llaves, quien con una sonrisa pequeña en el rostro me dedica una leve reverencia en señal de respeto. Rompo todo símbolo de él, dándole un abrazo que le sorprende al principio pero me corresponde con una risa alegre.

—Es bueno verte, Susy. Te extrañé. —le di un largo beso en la arrugada frente que recordaba. Hacía muchos días no nos veíamos, ya empezaba a extrañar a mi nana.

—Oh, Chris. He estado ocupada, pero yo también te extraño mucho mi niño. —me aprieta la mejilla, trayéndome viejos recuerdos de como solía mimarme y hacerme el mismo gesto cuando lograba mi cometido. Aún así, le debo mucho de lo que soy a ella, en una época dónde mi madre estaba deprimida por la una vida al lado de un hombre que nunca la amó, no tuvo tiempo en ese entonces para cuidar a sus dos hijos varones y atender la carrera que cursaba a la vez.

Susy llegó a nuestra casa siendo apenas un poco más grande que mi madre, sirviendo primero en la cocina y la limpieza de la casa, pero al ver la deplorable situación de una mujer despechada y abandonada a su suerte en una jaula dorada y con dos hijos, fue suficiente para ayudar a criarme a mi, que apenas tenía cinco años, pues Erick estaba más grande.

—Siento no estar aquí cuando llegaste la última vez. —se disculpa, ofreciéndome el paso a la gran mansión de los Williams. Se refería al día en que enfrenté a mi pa.. joder, ya ni sabía cómo llamarle.

—No te preocupes, fue mejor así. No me hubiera gustado que me vieras en esa situación. —el esposo de Susy parece de un cáncer terminal, y a pesar de las múltiples ayudas económicas que yo mismo me he ofrecido a pagar, el señor parece no aceptar ninguna en su cuerpo, le queda muy poco tiempo de vida—. ¿Sabes si mi madre..

—Aquí estoy. —la voz nos interrumpe. Ella baja por las escaleras que conducen a las habitaciones tan impecable como estoy acostumbrado a verla, sin embargo, la he visto llorar tantas veces por ese canalla que puedo dislumbrar desde aquí el exceso de maquillaje que ha colocado en sus ojos, especialmente. Alice baja las escaleras unos pasos más atrás, sosteniéndose el abultado vientre—. Que bueno que llegaste, ya te extrañaba.

—Me alegra saber que se requería con tanto anhelo, de mi presencia en esta casa. —me burlo, recordando lo que hace unos segundos me repetía Susy, caminando hacia mi progenitora y dejando un beso sonoro en su mejilla. De cerca, se pueden apreciar con más sutileza sus ojos rojos—. Has estado llorando. —le digo en un susurro que me encargo que solo haya escuchado ella—. No te preocupes, estamos mejor sin él.

Me da una sonrisa triste que apacigua acariciando mi pecho.

—He pasado cosas peores, no quiero imaginar lo que tú y tu hermano..

—Somos fuertes, podemos con ello. Eso te lo aseguro.

Alice llega a su lado, dándonos una sonrisa de labios cerrados que muestra como disculpa por interrumpir. Le devuelvo el gesto, dándole un abrazo interrumpido por la gran barriga que se mete en medio.

—Cada días es más difícil saludarte. —me río, contagiando a los demás.

—Alguien parece estar ansiosa por salir. —se ríe, acariciándose el vientre.

—¿Ansiosa?. ¿Es una niña?.

—Una pequeña, en efecto. —siento una nueva voz hacer acto de presencia y es cuando veo a mi hermano salir de la cocina con una bandeja repleta de comida—. Y muy hambrienta, por lo que puedes ver.

El comentario nos hace sacar unas cuantas carcajadas a los presentes, incluso Susy se une, dándonos una reverencia por último antes de marcharse con la excusa de limpiar todo el desastre que de seguro Erick dejó en la cocina.

—Me ofendes, Susy. —hace un gesto demasiado dramático, antes de darle un beso dónde antes lo había colocado yo. El amor fraternal por esa mujer ha pasado por todos en esta casa, incluído mi hermano, a pesar de no ser directamente cuidado por ella en su niñez, le ha tomado un gran cariño y mi madre le tiene mucha consideración. Es la empleada que más años ha trabajado en esta casa y confiamos en ella totalmente.

—Y bien.. ¿a qué se debe esta reunión familiar?. —medito sentándome en el sofá con los pies sobre la mesa.

—Tus modales, Christopher.

—Estoy agotado mamá, me duele todo el cuerpo. —y no mentía, a pesar de estar acostumbrado a largas jornadas de sexo, he de admitir que la diosa se había puesto demasiado exigente y golosa estos días.

—Me pregunto que estarás haciendo que estás tan cansado. —degollé a Erick con la vista desde el otro lado del salón y, ocultando en la vaso que sostenía en la mano, la sonrisa burlona que escondía.

—¿De qué habla tu hermano?. —mamá se mostró confusa.

—No le hagas caso, solo intenta bromear. Como si no fuera lo suficiente sarcástico..

Erick parecía divertirse con la situación.

—Para nada, solo digo que..

—Ya basta, Erick. Déjalo en paz.

—Gracias a dios alguien en esta casa me defiende. —alzo los brazos al cielo con exageración, me da risa la cara que ha puesto cuando su esposa me ha defendido.

Parece cachorro regañado por su dueño cuando Alice le ordena seguir haciéndole masajes en los pies. Le da un beso en los labios gustoso, con una cara estúpida de enamorado y me pregunto si es el mismo gesto que cargo siempre cuando quiero satisfacer a la insaciable novia que tengo.

Y ahí lo recuerdo. Debo decírselo.

—Emm.. tengo algo que decirles. —enseguida su atención recae en mi, mamá sigue tomando de su té, Alice me mira mientras come y Erick hace lo mismo, sin dejar de masajear los pies de la pelirroja—. He terminado el compromiso con Ivanna.

El silencio sepulcral que se forma no me lo esperaba, y deduzco que ninguno parecía esperar este acontecimiento. Debo de admitir que la pelea con mi padre me ha impulsado a querer revelarme de todas las formas posibles contra él. El matrimonio con Ivanna fue solamente impuesto por él, acepté, por el bien de mi imagen y la empresa, pero llegando Anastasia a mi vida.. me di cuenta de que soy el propio precursor de esta, solo yo decido con quién quiero estar, a quien quiero convertir en mi esposa, e Ivanna estaba muy lejos de ser la esposa ideal para mí, de hecho, ni siquiera quería casarme siendo tan jóven.

—Vaya.. esto no me lo esperaba. —la mayor de los Williams pronuncia, dejando la tasa en la bandeja que Susy le ofrece—. ¿Patrick sabe?.

Que pronuncie su nombre después de todo, me incomoda, y noto como Erick parece sentir lo mismo, endureciendo la mandíbula mientras trata de seguir siendo gentil con Alice.

—No lo sé y no me importa. A estas alturas ya lo debe saber, yo mismo le puse fin en casa de los Miller con Edgar e Ivanna presentes.

—Fue una buena decisión. No merecías estar al lado de esa chica. —pronuncia Erick, sorprendiéndome por las palabras que deja salir de su boca—. Pensé que sería lo mejor para la empresa y la familia, no es un asombro saber que los Miller son nuestra competencia directa en los negocios, pero.. sin duda esa chiquilla no te merece, no se comporta como una mujer, y no tiene presencia para ser una Williams.

Mamá asiente, de acuerdo con la crudeza de sus palabras.

—Nunca tuve buena espina con esa niña, siempre tratando de metérseme por los ojos, comprándome cosas que me gustaban y halagando mi forma de vestir.. no parecía real. Aún le falta mucho camino por recorrer en esta vida, todavía no se ha convertido en una mujer independiente, no era una esposa digna. Lamento la frialdad de mis palabras pero es la verdad.

—No tienes que ser meticulosa mamá, todos sabemos que no soportas a Ivanna, mucho menos a su madre. —Erick bromea con algo totalmente cierto, según mamá, Alaska es totalmente hipócrita y falsa, asegura tener sus razones para pensarlo, pero tampoco pienso discutirlo—. En cambio.. pareces amar a Anastasia.

—Oh, esa jovencita. Es tan inteligente, a tan solo veintitrés años es la directora ejecutiva de una de las mejores empresas de New York y el mundo. Es una de las pocas personas que merecen mi respeto, ya saben que no le doy el buen visto a todo el mundo.

La sonrisa que sueltan mis labios no es discimulada, tampoco la pienso esconder, me gusta que mi madre piense eso de mi novia, y es que hasta yo estoy orgulloso de la mujer que tengo al lado. No podía ser más digna de toda mi atención.

—Hmm.. ¿es una sonrisa eso que estoy viendo?.

Tengo que rodar los ojos ante la insistente burla de mi hermano.

—Tengo que admitir.. que tengo otra cosa que decirles.

—Lo espero con ansias. —Erick sonríe con una felicidad extrema que me hace preguntarme si en realidad sabe algo. Alice parece atenta y veo en sus ojos que espera que diga lo que tengo que decir, tanto o más, que Erick.

Mi madre me mira con una sonrisa, es la única que no veo ansiosa por una respuesta. No sospecha lo que tengo que decir.

—Anastasia y yo estamos saliendo.

—¡Lo sabía!. —Erick lanza un puño al aire que termina botando los cereales con leche encima de su esposa por la brutalidad de la acción—. Oh, lo siento amor, no fue mi intención, de verdad.

Alice rueda los ojos, dejándole un beso antes salir riéndose.

—Da igual, de todas formas tenía que bañarme. Hace mucho calor. Felicidades por tu relación, Chris. —me dice con sinceridad antes de abandonar la sala.

Le doy un asentimiento, antes de mirar a mi madre otra vez.

—En serio Christopher, cuando pienso que no podrías sorprenderme más.. —suelta una risa, como si no lo pudiera creer, mientras niega con la cabeza—. Sabía que esa chica y tú tenían algo, a pesar de que me lo negara ese día en el cumpleaños de.. de Patrick. —la sola mención hace que me tense un poco, pero agradezco cuando cambia el tema—. Me alegro mucho Christy, esa mujer es perfecta para ti. Me encantan.

La sonrisa que aparece en mis labios luego de esa confesión es tan sincera como el beso que deja en mi frente al levantarse y sentarse a mi lado.

»—Ven acá, grandulón. —llama a Erick, quien nos observa a unos metros de distancia.

—Ya me estaba empezando a poner celoso. —dramatiquea, para sentarse al otro lado de nuestra madre y abrazarla justo como estoy haciendo yo.

—Estoy orgullosa de los hombres en los que se han convertido. De las mujeres que tienen al lado y la vida que han seguido. No puedo estar más feliz. —dice para dejar un beso en la cima de nuestras cabezas, como solía hacer cuando éramos unos críos y sentíamos celos uno por otro por la demasiada atención que le daba mi madre a uno de nosotros.

Después de una vida miserable, con la cabeza en la empresa, siguiendo las órdenes de quién creía era mi máximo ejemplo, de una vida alocada llena de sexo y mujeres desconocidas que llegaban a mi cama cada noche, soy feliz. Por primera vez, estoy tranquilo entre los brazos de mamá después de haber crecido, hacia años que no tenía siquiera un descanso para visitarla y estoy seguro que Erick piensa igual. Nuestros trabajos nos han mantenido ocupado y no nos ha permitido pasar tiempo con la única mujer que siempre nos ha apoyado y acompañado en nuestras noches infernales y nuestras vidas de mujeriegos. Había disfrutado esas pequeñas migajas de afecto por años, ¿para qué?, no gané nada con ello. Lo único bueno que me sacó tener tantas aventuras fue conocer a Anastasia y puedo decir con certeza que volvería a pasar por lo mismo una y otra vez si eso me hacía conocerla en las siguientes vidas.

Se me metió en la cabeza y en la polla a la vez, llenándome sexualmente y satisfaciendo a ese pequeño Christopher que vivía aún dentro de mi y necesitaba el amor que pocas veces tuve de mi familia. Sofía Anderson, una simple chica que se enamoró del hombre incorrecto, mientras trataba de sacar adelante una carrera que todos la hacían plantearse por ser dominada mayormente por hombre, con dos hijos al lomo y una depresión constante por los engaños que sufría de quién más amaba, se pasaba horas y horas en su lecho llorando y a pesar de que Erick en varios ocasiones me sacó de su habitación cuando insistía en querer jugar con ella, pude escuchar sus sollozos y su voz rota al decirme que lo haría luego. Pero eso nunca pasó, o por lo menos no hasta luego de dos años cuando aún con la mirada baja y sin la sonrisa que me había acostumbrado a ver en ella, cumplió con su papel de madre, pero.. ¿cuando volvería su sonrisa?. ¿Cuando podría ver destellar la felicidad en sus ojos otra vez?.

Era lo que me preguntaba cada noche antes de dormir, por largos años en los que me he mantenido jugando a ser la familia feliz e ignorando la verdad. Había desistido de verla sonreír con tanta alegría otra vez, hasta que se enteró que sería abuela por los labios de Alice, y ahora, abrazándonos, pude ver una vez más la felicidad nacer otra vez en su interior.

No necesitaba nada más, mi vida estaba completa con una familia que adoraba, una mujer que amaba cada día más y un puesto importante, como siempre soñé.

Empezaba a pensar que tantas cosas buenas pasando una detrás de la otra no sería un buen augurio.

~°~°~°~°~°~°~°~°~

Bien, oficialmente AGRIDULCE ha entrado a su recta final. Eso no quiere decir que quedan pocos capítulos, sino que a partir de aquí, cada capítulo será esencial pues nos iremos acercando cada vez más a la verdadera trama, la verdadera razón por la que Anastasia entró en mi mente y empezó toda esta historia. No estoy preparada para todo lo que se avecina y aún me hallo dándole un principio y un final a todas las ideas que tengo para el libro, espero no agobiarme con esto.

Por otra parte, ver el apoyo de las nuevas lectoras es mi motor para seguir actualizando. Me he perdido mucho y espero compensar eso con cada pequeña porción de capitulo que dejo aquí. ;) Justo por eso me alegra anunciar que ya somos 3K leídas y hace poco llegamos a los 600 votos, aunque por lo que veo, también estamos cerca de los 700.

Es poco pero se agradece, y no puedo evitar estar feliz por ello, por el avance que ha tenido el libro en wattpad, gracias a lxs que se han tomado el tiempo en votar y comentar. 💗

Sin más, me gustaría saber qué tal ha sido para ustedes meterse un poquito más en la cabeza de Christopher. Lo he tenido un poco olvidado, y tal como protagonista al fin que también es, quise hacer un capítulo solo para él, con sus problemas, puntos de vista, opiniones.. me gustó mucho, a pesar de que lo haya dejado un poco corto, el siguiente será un poco más.. potente🔥. ¡Espero estén preparadxs para lo que se viene!.

Con esto me despido, no sin antes recordar para lxs que aún no se han enterado, que publiqué un capítulo extra, cosa que no había hecho desde el principio, con los personajes, según mi imaginación, por si a alguien le hacía falta.

Besos agridulces para todxs <3.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro