- ¡Es inaudito ! Yo no soy sanguinario señor - exclamé molesto.

- Erick, lo eres y siempre lo has sido. El problema con eso es que si quieren joderte con esa excusa según las leyes pueden hacerlo- odiaba cuando tenían razón.

Bufé molesto. Mis garras salieron sin control.

- yo entrené al escuadrón que está actualmente a cargo. Son excepcionales y cumplen su labor al pie de la letra . Sin una falla- suspire - General Vistrolk , voy a serle muy sincero con lo que esta pasando por aquí y sé que su pareja , el alfa de la manada , también está escuchando - me sinceré. Escuchaba desde aquí su respiración a través del eco que hacía el teléfono

- y me parece de hecho algo muy bueno que sea así. Pues respeto a las tropas del alfa Cristofer. Su ejército es formidable y son todo un ejemplo. De esta forma he querido formar a la siguiente generación de guardias, tanto como la actual. Pero desde que esa orden llegó junto con ese alfa , el orden se está perdiendo. Mis dos vigías. Omegas mis chicas , las retiró de mi cargo que por ser ellas no podían asumir ese puesto ¡Ellas son mis mejores asesinas ! Nisiquiera comen la carne cocida. Y me asignó a dos pendejos que ni caminar saben. Para ajustar. Esos novatos están perdiendo la autoridad y han llegado a desafiar a mis hombres. Ninguno de ellos por obvias razones responde a nada. Pero la situación paso a qué ahora Krillan me ha desfiado por el cargo dos veces. Y eso es peligroso. No quiero matar al hijo de un alfa y no lo digo solo por orgullo , señor , mi lobo no desea solo muerte , he llegado a pensar en muchas formas de ...modificar su rostro ...y por eso he estado enviando advertencias. Ese hombre no toma enserio la condición de que hay tres deltas en este escuadrón de seguridad , incluyendo me y no respeta las leyes que hay dentro del subterráneo. No se habla con los presos y lo están haciendo. Los insultan y molestan-

- cree que es un juego - escuché que susurró al que reconocí como el compañero del general. Al alfa Cristofer.

- esto no me gusta , hicieron negocios bajo la mesa para asignar a krillan- hablo el general - Está bien, Erick ,me encargaré ,haré un par de llamadas y te mantendré informado . Tendrás mi respuesta pronto. Te ordenó que no ataques a krillan , no importa que haga. Mantén el orden de tus hombres. No quiero que ninguno pierda ni una pizca de control-

- como usted ordene señor- respondí con firmeza. Una orden de matthew era absoluta y mi lobo le era completamente fiel a él. Así hayan pasado años desde que lo ví en persona.

- hablamos pronto, ten cuidado - me recomendó matthew.

- gracias señor- respondí y colgué .

Pase mis manos por mi cabello con estrés . Odiaba está situación. Mi lugar había estado en silencio desde hace más de cinco años que asumí el puesto. Y solo ahora que estaba a punto de retirarme y entrenar a la nueva cohorte, se venía todo este lío encima.

Los deltas eramos muy pocos y para ajustar en esta generación no había nacido ni uno solo.

Me levanté de mi escritorio con paso hacia las cavernas , pues todo el lugar era subterráneo, a excepción del edificio de descanso , dos oficinas y las canchas de entrenamiento. De resto , todo estaba bajo tierra.

Al llegar a las cárceles, todo el pasadizo de rejas se abrió dandome paso , con las manos detrás de mí espalda y en completo silencio pase revisando la posición de mis hombres y de las celdas. Cada uno de los reclusos estaban confinados detrás de grandes y pesados vidrios ,diseñados para que nada ni nadie pudiera romperlos .

Habían muchos mitos acerca de las Calderas de hecho creo que demasiados. Pero lo que si era cierto era que el escuadrón de seguridad era muy eficiente y muy peligroso. Éramos un régimen especial , hombres reclutados por la torre y entrenados de forma diferente. Pues llegado un momento dejábamos lo convencional para aprender a matar sin importar la situación.

Suspiré. No es que hubiera soñado con eso para mi vida. Simplemente se dió. Era bueno en ello. Y decidí hacerlo.

Mis hombres , mi último escuadrón entrenado bajo mi mano era mi principal orgullo. Podía ver el miedo que generaban a los presos solo con la mirada. Y eso que esos hombres confinados eran lo peor de lo peor.

Pero cuando yo pasaba . Todos mis chicos, erguian espalda y juntaban pies . Secretamente me encantaba.

Mi cara jamás lo demostraba. Eso sí . Jamás mostrar una emoción era mi lema. Aunque mi mente máquinaba mucho.

Observe con detenimiento cada recluso. Oliendo y sintiendo sus emociones, era mi trabajo , gracias a que mis sentidos eran bastante agudos , y eso me ayudaba a saber si se sentían nerviosos, ansiosos, con rabia , resentimiento, cualquier emoción que me daba a saber qué tipo de actitud o acción era posible que ellos tomarán.

Con esta información , designaba más ojos para que estuvieran pendientes de algunos , siempre desde las sombras , acechando.

Todo estaba en orden hasta que ...

-¡Señor !- ví a uno de mis chicos llegar rápidamente a mí.

Fruncí el ceño .

-¿Qué ocurre?-

- el alfa está hablando con el recluso 298 , infringiendo las normas de la junta 2225-

Hasta que llegó este alfa con su maldita cartita de papá.

Solo asentí y me dirigí a esa celda . Podía sentir la ansiedad del soldado que me informó y que venía detrás de mí. Era aún muy joven ,pero muy valiente.

Cuando llegué ,quise golpearme la frente.

¡Maldito bastardo idiota !

- alfa Krillan - lo llamé al verlo apoyado sobre el vidrio.

-¡Ah ! Erick - respondió.

- Comandante para usted - dije en voz neutral.

Ví como rodo los ojos con fastidio y se dirigió hacia mi persona.

- soy un alfa ,no tengo porque llamarte por tu rango - contestó con burla . Solo me limité a mirarlo sin cambiar mi expresión.

-¿Qué hace aquí alfa Krillan?- pregunté en el mismo tono de voz. De reojo ví al recluso. Qué sonreía con malicia. El recluso 298 había sido un asesino que acabo con toda su manada. Dijo que los había odiado siempre y cuando creció juro acabarlos. Y así lo hizo. Entendía su forma de pensar ,pero no compartía sus acciones. Actuar en venganza acarrea consecuencias graves siempre. Y esta era la suya.

Volví mi mirada rápidamente al alfa novato frente a mi.

Con mi mano detrás de mí espalda levanté dos dedos. Y con eso mis hombres se formaron frente al recluso . Una pose de ataque que todos aquí reconocían, pues decía claramente que yo estaba a cargo aquí y que sí siquiera se movía lo iba a fusilar. Ví como el hombre se sentó en su cama en silencio.

¡Buena decisión!

- nada que le competa . Necesito que abra esa celda , quiero darle un buen castigo a este asesino , no ha dejado de mirarme de mala forma desde que pase por aquí y voy a quitarle esa risita. ¡Es una falta de respeto ! Usted no maneja esta cárcel como debe ser, es ineficiente... comandante - espetó con un claro tono de burla y hasta asco también .

No movi mi rostro nisiquiera para pestañear.

-¿Qué ? , ¡Ni responde ! ¡Otro mudo también !-

Ví como giro ,volviendo a la celda.

-¡Les ordenó que abran esto !-

Me crucé de brazos ,mirando su ridículo show .

Niño idiota .

- ¡Le ordenó Erick que abra esto o el consejo se enterará !- espetó furioso mirándome .

Mi mirada seguía fija en él, solo la desvíe un poco cuando note que el preso movió una mano. Alcé una ceja para indicar que no quería que siquiera se moviera.

-¡¿ME ESCUCHÓ?!- gritó el alfa con ira hacia mi persona. Ví como mis hombres se estremecieron levemente con el rugido. Una respuesta involuntaria a las órdenes de altos mandos. Una reacción demasiado imperceptible para la mayoría de lobos, pero yo la notaba enseguida. Aunque sobre mi no tenía ni una pizca de efecto.

Seguí en silencio mirando al alfa. Ví cuando pareció abalanzarse hacia mi. Pero antes incluso que diera un paso , lo di yo y quede a solo centímetros de su rostro.

- aquí no ordena ni una mierda. Aquí el consejo no funciona. Aquí se siguen las normas que creó la junta hace mil años. Aquí no se habla y no se toca a los presos ¿Entendió alfa Krillan?- susurré con una fuerza pesada en mi voz con el tono rasposo de la voz de mi lobo. Ese tono que había aprendido a usar en las cazas. Uno que ponía la piel de gallina. Porque sencillamente olía a muerte.

Ví como el alfa trago con fuerza.

- puede subir a su habitación, le aconsejo que tome esa decisión- le dije esta vez con la voz normal retirandome de su espacio personal y dando varios pasos al frente. Escuché como resopló y salió del lugar hecho una furia. Y una bola de miedo también.

Seguí caminando , sintiendo la diversión del preso detrás del vidrio. Mis hombres bajaron su guardia y se posicionaron detrás de mí.

Miré al recluso que tenía una sonrisa idiota en su rostro. Estos shows jamás debían verse aquí. No sé les alimentaba el alma a ningún confinado.

- y yo que creía que los rumores del comandante eran solo para infundir miedo , vaya forma de ahuyentar al niño . Es usted un hombre... excepcional- habló el recluso con bastante interés , mirándome desde mis pies hasta mis ojos.

¡Descarado idiota!

Apenas si lo miré , puse el dedo índice sobre mis labios y con un suave ...

-shhh- lo mandé a callar. Y seguí mi camino .

Apenas nos alejamos de ese piso , les di varias órdenes a mis hombres.

- que nadie pase de nuevo por esta celda. Solo la comida. El recluso no debe escuchar nada más en meses- ordené sin dejar de caminar.

- sí señor - respondió uno de mis soldados.

- da la orden de que habrá una reunión de emergencia con el escuadrón A , que el princesito no se entere- dije rápidamente siguiendo en silencio por las celdas con mi labor diaria ,mientras mis hombres se desplegaban.

¡Paz por fin !

¡Paz !