16. 𝙿𝚊𝚛𝚝𝚘
-¡Mierda! -jadeo de inmediato-, ¡no, no puedo!
-Vamos futuro padre, es hora de pujar fuerte.
-Ya puje bastante y este niño no se mueve.
-Bueno, ha pujado tres veces. No es mucho.
Hay madres que pasan horas aquí.
-Doctor, deje de asustarlo -pide con histeria-. Se volverá loco.
-Puje de nuevo. Vamos.
-¡Aaaaah! -hecha la cabeza atrás-. ¡T-te mataré Thor Odinson, juro que...ngh!
-Lo siento, lo siento.
Comenzó a besarle la cabeza y acariciar su mano de manera insistente. Sabía que era básicamente su culpa, y que todo ese dolor jamás podría compensarlo con nada. Al menos quería estar ahí para su esposo.
-¡Puje!
Loki volvió a emitir un grito que le rompió el corazón. Jamás lo había visto sufriendo tanto. Era tan nuevo que literalmente se sentía tan culpable que deseaba desaparecer.
-Señor Odinson, le pediré un favor.
Necesito que se coloque tras su esposo, con las piernas abiertas y la espalda de este en su pecho.
-¿P-Por qué, pasa algo malo?
-¡Solo hazlo -chillo Loki-, deja de cuestionar y hazlo!
-Pero no me grites.
El doctor enderezó lo suficiente a Loki para que Thor pudiera ponerse tras él. El azabache sintió el firme pecho de su marido y se sintió con más confianza para continuar con aquello. En realidad había perdido la noción del tiempo, pero ya no parecía importante.
-Puje de nuevo.
Loki nuevamente pujo, tenía las mejillas rojas, lágrimas cayendo y el agarre casi le rompe los dedos al rubio. Nunca imagino tal fuerza en su marido.
-¡Veo la cabeza! -el médico parecía más emocionado que los propios padres-, puje de nuevo.
-No puedo....ya no puedo.
-Escucha amor, se que crees no poder, pero te he visto superar cosas peores.
Este bebé no te vencerá.
Esperaron unos segundos, el menor volvió a pujar con desesperación. Sentía que se desgarraba desde dentro y no podía hacer nada para evitarlo.
Inútilmente buscaba algún lugar feliz dentro de sus recuerdos para aminorar e dolor.
-Miren, podría ayudar a su esposo. Una carga de placer sustituirá el dolor.
-¡No convertiré mi parto en una noche llena de placer! -gruñó de inmediato.
-Solo era una sugerencia. Además, es de madrugada.
-¡Me importa un carajo, solo saque a ese bebé!
Cuando salió la cabeza Loki soltó un suspiro cansado. Le dolía la cabeza, pero ahí no acababa la cosa.
-Van los hombros.
-Oh Dios no...
¿Cuanto había pasado?, ni el lo sabía, pero su golpe de realidad fue cuando escucho el llanto de un bebé, tan fuerte y claro que una sonrisa se dibujo en su rostro.
-Felicidades, es un niño muy sano.
Loki estiro los brazos, de inmediato el doctor pasó al pequeño.
-Hola Theo -dejo que sj cabeza descansará en el pecho de su marido-, mirate, estas tan bello.
-Es pelirrojo.
-Lo heredó de tu familia. Tiene tus ojos Thor.
-Y tiene tu sonrisa.
Ambos padres rieron mientras lloraban.
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