13.-Ya no estaras solo
Ya habían pasado varias horas desde que Sasuke se encontraba en el cuarto de Naruto, los dos seguían abrazados y ninguno tenía la intención de separarse. El azabache esperaba pacientemente, no quería que el rubio se sintiera presionado, por lo que opto quedarse callado y esperar.
Sasuke empezó a acariciar la espalda del rubio, para poder tranquilizarlo y hacerlo sentir que estaba a su lado, que no iría a ninguna parte, ya le daba igual si la anciana lo corriera del trabajo, en realidad ya le daba igual lo que sucediera en el futuro, mientras Naruto no resultara herido.
Sintió al rubio temblar entre sus brazos, así que empezó a besar su cabeza, algo que su madre solía hacer cuando era niño, sintió como dejo de temblar y escucho un suspiro.
.-Tranquilo, puedes tomarte tu tiempo.- Sintió como Naruto se acomodaba entre sus brazos, a pesar de que él era menor, se dio cuenta que era más alto que el, ya que encajaba perfectamente en sus brazos.
Naruto suspiro una vez más, se debatía entre si era buena idea contarlo o no, ya que como había dicho el azabache no se conocían, pero ahora que se encontraba en sus brazos y había sentido sus labios en su cabeza, se dio cuenta que podía decir sus secretos y si fuera posible hasta gritarlos.
Cerro sus ojos, ya que las caricias que le otorgaban lo tranquilizaban de una gran manera.- Yo no solía ser así antes.... Era alguien muy normal, me encantaba salir a jugar con mis amigos y gracias a eso llegaba muy tarde a casa, algo que molestaba mucho a mi padre. Mi madre no estaba con nosotros, ella se encontraba en un internado psiquiátrico, tenía una extraña enfermedad en la cabeza que la hacia delirar, era una enfermedad diferente a la mía.-
Sasuke frunció el ceño.-Lo que tú tienes no es una enfermedad.-
.-Lo es, es algo que esta en mi cabeza, aunque claro es algo diferente a lo que suelen curar los doctores.-
Sasuke no respondió.
Naruto sonrió y empezó a jugar con los botones de la camisa.- Solía visitar a mi madre todos los viernes, iba yo solo, ya que papá siempre estaba ocupado con su trabajo, recuerdo que ese día era un viernes, ya que siempre miraba el reloj cuando se trataba de esa fecha. Ese día estaba en la escuela, la maestra explicaba algún tema de matemáticas, un tema que no preste nada de atención.- rio.- Cuando escuche el timbre para salir, tome mis cosas y corrí a la puerta de salida, me tope con mis amigos, confiaba mucho en ellos, aunque no sabían lo de mi madre.-
.-¿Por qué?.-
.-No lo sé, creo que me daba miedo de que lo supieran y se alejaran de mi.-
Sasuke acaricio el cabello del rubio.- Los verdaderos amigos no se alejan aunque supieran tus más oscuros secretos.-
.- No creo que ellos se merecen él nombre de "verdaderos amigos".-
Sasuke sintió que su camisa era apretada, pero hizo caso omiso, solo continuo en acariciar y besar la cabeza de Naruto.
.-Ese día ellos me invitaron a la sala de juegos, sabía que tenía un compromiso, siempre me lo repetía mi mente, pero no hice caso, obedecí más a mí corazón que quería divertirse y me fui con ellos. Recuerdo que fuimos a otro camino a la que solíamos tomar antes, en ese camino había un extraño hombre, ese hombre vestia con una extraña vestimenta negra y su rostro estaba cubierto con un sombrero, pensaba en darme la vuelta y salir corriendo... pero mis amigos tenian otros pensamientos-
Naruto sintió como las lagrimas resbalaban en su mejilla, escondió su rostro en el pecho del azabache.- Ellos.. ellos me empujaron hacia ese hombre, creí que era uno de sus juegos, pero me equivoqué, porque ese hombre cubrió mi rostro con una toalla que hizo que perdiera el conocimiento; recuerdo a la perfección sus brazos y el sonido del auto.-
Sasuke lo abrazo con más fuerza, pensando en el relato, sus amigos como los solía llamar Naruto, ellos lo habían vendido, aunque no entendía el por qué lo hicieron, ¿Qué era lo que unos niños deseaban a esa edad?
.-Cuando desperté, me encontraba en una habitación oscura, la única luz que había allí, era la luz que entraba debajo de la puerta, tenia mucho miedo, así que empecé a gritar y golpear. Ese mismo hombre entro y empezó a golpearme para que guardara silencio, empezó a decirme en cada golpe, que esperaban que mi padre diera el dinero para mi rescate.-
.-¿Cuánto tiempo estuviste ahí?.-
Naruto negó.- No lo sé, semanas o meses, pero ese hombre siempre buscaba una excusa para golpearme, hasta que se cansó.-
Sasuke esperaba lo peor, sintió su camisa mojada por las lagrimas del rubio, pero cuando Naruto empezó a hablar de nuevo, se escuchaba el miedo en sus palabras.
.- Esa noche... el.. el entro en la habitación, apestaba mucho a alcohol....- Empezó a temblar.- Yo... yo solo era un niño, no pude defenderme.- sollozo.- no pude hacer nada, solo tratar de luchar, algo que no servia.-
Sasuke no sabia que hacer, solo repetir las mismas acciones.
.-Solo ahí entendí las palabras de mi madre, que las personas de afuera eran malas, que solo adentro en una habitación segura, no me pasaría nada.-
.-Naruto.-
.-Se lo prometí, ella quería lo mejor para mi y es lo que voy hacer.-Naruto se aparto del azabache y limpio sus lágrimas.- No puedo romper esa promesa.-
Sasuke suspiro y puso ambas manos en los hombros del rubio.- Entiendo, pero quiero que tú también entiendas que hay personas buenas allí afuera, personas que no le harían daño a alguien como tú, mírame ahora, yo provengo de afuera y ahora estoy aquí a tu lado.-
.-Sasuke.-
.-Naruto dale una oportunidad al mundo otra vez, no vivas encerrado para siempre, date la libertad de volar y explorar el mundo, todo lo que viviste en el pasado fue una dura prueba y lo sé, sé que es difícil.- aparto su mano y acaricio las cicatrices del rubio, "Supongo que estas cicatrices se los hizo aquel hombre".-pero esta vez no estarás solo.-
Naruto trato de sonreír, algo que no logro hacer, ya que su cuerpo no respondía y sus parpados se sintieron pesados.
.-¡Naruto!.-
Escucho el grito del Uchiha y se dejo caer en sus brazos.- Solo estoy cansado.- susurro.
Sasuke asintió, sabía que todavía existía ese trauma, ya que el cuerpo de Naruto lo recordaba perfectamente, "Hare todo lo posible para que lo olvides", acomodo el cuerpo del rubio entre sus brazos y lo levanto.
Dejo el cuerpo sobre la cama con cuidado, quito sus zapatos y lo cubrió con la sabana.- Ahora estoy aquí, ya no estas solo.- inclino la cabeza y beso su frente.- Te lo prometo.-
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