-¿Sabes sobre eso? Han desaparecido algunos omegas últimamente, -habla una mujer mientras conversa con otra.

-Sí, en el otro pueblo vive mi familia y ya han raptado a dos primos, -dice la segunda preocupada.

Con los días, la gente había dejado de hablar del enlace entre Byun Baekhyun y Park Chanyeol; el tema de reemplazo era el de los continuos secuestros a pueblos vecinos. La gente tenía miedo.

El líder Choi Siwon había decretado un toque de queda así que desde el ocaso los omegas tenían que volver a sus hogares y no podían salir solos al bosque, de lo contrario, sus alfas responsables serían castigados.

En el hogar de los Park, Baekhyun se hallaba aprendiendo a tejer; su madre había venido de visita para enseñarle debido a que pronto de presentaría la nevada. Sin embargo, los hilos se enredaban entre los dedos largos del omega y eso hacía que se estrese.

-No puedo, mamá, es inútil, -resopla para luego cruzarse de brazos dejando los palillos a un lado.

-Tú nunca le das una oportunidad a nada y luego terminas frustrado, -ella niega con su cabeza y luego bebe un poco de su té.

-Es que simplemente no soy bueno y ya, -descansa su espalda contra la suavidad del sofá. -Además Chanyeol me dio dinero para comprar suficiente ropa cálida para el invierno, -se encoge de hombros.

-Igualmente deberías hacer tus prendas y ahorrarle dinero, él trabaja duro por ello, -le regaña su madre.

-Es mi alfa, que gaste, -rueda los ojos para luego levantarse; -ire a hacer algo, tengo hambre, -va hacia la cocina.

La señora Byun mordisquea su labio pensando en que parecía que había castigado al pobre alfa. Ella pensó que Baekhyun calmaría sus ínfulas de grandeza ya estando enlazado, pero con un suspiro piensa que habían empeorado.

-¿Harás la cena tan temprano? -pregunta extrañada mientras se sienta frente al mesón.

-No, es solo que últimamente me gusta comer alguna golosina en la media tarde, explica mientras baja la harina y toma algunos huevos.

—Oh vaya, —pestañea algunas veces y luego asiente.

La mujer mira alrededor dándose cuenta de lo grande que era la casa y los objetos adentro, todo se veía caro e incluso la misma ropa de Baekhyun parecía lujosa. Arquea una ceja y luego mira a su hijo, lo había hecho por él, se decía todos los días, que no debía sentirse culpable, pero el insomnio constante le recriminaba.

—¿Estás bien, mamá? —pregunta Baekhyun al ver cómo la mirada de la omega se había oscurecido.

—Sí, cariño, ¿Decías algo? —sonríe y acomoda su cabello.

—No estaba diciendo nada, solo que te ví extraña, —responde para luego freír sus golosinas.

🌧️

Chanyeol se encontraba puliendo un collar de zafiro; no era para nadie realmente, pero tuvo ganas de hacerlo. Detiene sus movimientos cuando vuelve a oler aquel aroma a menta.

—Pase, —dice antes de que la puerta sea tocada.

—Buenas tardes, —saluda el omega dando una leve reverencia para luego caminar hacia la mesa, —¿Cómo está? —sonríe levemente.

—Bien creo ¿Y tú? —ve que las mejillas del omega están un poco rojas, pero supuso que se había maquillado. —¿Qué necesitas? —pregunta de buen humor.

—Es que... —desvía la mirada y muerde su labio, —me gustaría pedirte una pulsera de plata, —mira de nuevo al alfa.

—Bien, —asiente y ladea la cabeza cuando se da cuenta de que el pequeño de ojos rasgados se encontraba un poco nervioso. —¿Te encuentras bien? ¿Quieres sentarte? —señala con su dedo una silla más allá.

El omega gira su cuello con fuerza provocando que sus hebras lilas se sacudan haciéndolo ver con un aura tierna; parecía un algodón de azúcar.

—Yo estoy bien, —él asiente para luego extenderle una hoja, —me gustaría este diseño, —cuando se da cuenta de que su dedo estaba temblando, lo esconde rápidamente.

—Bien, —asiente dándose cuenta de que en la hoja habían dos iniciales "CxM" —¿Es para tu alfa? —pregunta levantando su mirada y con su olfato se da cuenta de que el omega bajito no tenía una marca.

—No, es solo de alguien a quien quiero mucho, —susurra mirando al suelo.

—Ya veo, —asiente para luego guardar la hoja en un pequeño cajón.

—Disculpe, —susurra con nerviosismo, —¿Puedo preguntarle algo personal? —su mirada tímida a duras penas podía ver el rostro cincelado y masculino del alfa.

—Depende ¿Sobre qué? —arquea su ceja y entrecierra su ojo.

—Es, —juguetea con el filo de su velo, —¿Usted está enlazado? —dice algo rápido y termina mirando al suelo.

—¿Uh? —abre su ojo de sobremanera no habiendo esperado esa pregunta, —Bien... ¿A qué se debe tu curiosidad? —sonríe un poco y su lobo se ríe por la ternura del pequeño omega tembloroso y sonrojado.

—Es que... Es que... —aprieta sus dedos mientras cierra sus ojos con fuerza. —No, nada, -sacude su cabeza para luego darse la vuelta casi huyendo.

Chanyeol se quedó un poco descolocado por la reacción del otro, pero algo en su pecho se removió por lo tan pequeñito y nervioso que estaba. Incluso su lobo tuvo una reacción aunque haya sido una simple risa... Se preguntaba que le sucedía a aquel omega.

🌧️

Pasaron unos días y en una tarde Chanyeol se encontraba golpeando con fuerza una espada para amoldarla. Las gotas de sudor bajaban por su piel, deslizándose por sus músculos gruesos que se movían cada vez que alzaba el mazo. Con su brazo limpia su frente y acomoda su camiseta sin mangas ya que se le había pegado incomodamente al torso.

Después escuchó un golpe ruidoso en la puerta, le dijo que pase y continuo golpeando el metal.

—Hermanito, ¿No vas a darme una abrazo? —habla el recién llegado y suelta una carcajada.

—¿Uh? —gira su cuello sorprendido por la voz y deja el mazo en la mesa para luego apresurarse lo más que sus piernas le permitían, —Chen... —dice feliz para luego abrazar al alfa más bajo. —¿Cómo así te apareces? —pregunta sorprendido una vez se aleja.

—Como no te ví en casa de papá y mamá entonces vine a verte aquí, —se encoge de hombros y sonríe como usualmente lo hacía.

—Oh, sí, yo ya no vivo con ellos, —sacude su cabeza. —Nadie me dijo que vendrías.

—Ya me dijo Minseok que sentaste cabeza, —asiente con su cabeza. —Yo le había dicho a mamá, me parece extraño que no te haya dicho que iba a venir, —rasca su cabeza frunciendo su ceño.

—Como no puedo estar yendo siempre allá entonces ya casi no visito a nuestros padres, —hace una mueca y luego rodea su mesa para sentarse en su silla. —Y sí, —sonríe sin mostrar sus dientes, —ya me enlace, —desvía la mirada recordando al pequeño demonio en su casa.

—No pareces feliz, —se cruza de brazos mientras se sienta al frente de la mesa. —¿Por qué? Te enlazaste con el omega más bonito de los lares. ¿Es por su fama? —Levanta sus cejas.

—Es cierto que tú te fuiste hace muchos meses, —baja la mirada al collar de zafiro. —Mi relación con él no es buena... No nos enlazamos por amor, él entro en celo y lo mordí, —mira hacia arriba intentando olvidar esa tarde.

—Ya veo... —susurra y mira el collar, Chen trato una vez hacer joyería y casi quema el taller. —Me han dicho que lo han visto siendo... —mira a los lados.

—Creo que estoy seguro de lo que te dijeron, —levanta sus cejas sin alzar la mirada, —sigue siendo igual.

—¿Dejas que te monte los cuernos? Si Minseok me hiciera eso probablemente estaría sin poder caminar por el castigo que le daría, —dice impresionado negando con su cabeza para luego suspirar.

—Como no siento nada por él entonces me da bastante igual, pero un día me ha coger de mala gana, —tuerce la boca en una mueca mientras lima la superficie.

—Hazte respetar, hermano, —aprieta sus labios algo enojado. —¿Y si te sale con una panza ajena? —levanta la barbilla interrogante.

—Ese día lo echo a la calle con su barriga, —inserta un hilo de plata por unos agujeros del collar.

—Mejor ponlo en su lugar antes de que pase, a veces eres muy noble, —niega con su cabeza levemente.

Chanyeol suspira sabiendo que podría tener razón, pero no podía hacer nada realmente así que trataba de llevar su vida tan bien como podía.

—Trato de mantenerme alejado de él, —cepilla la pieza. —Pasando a otra cosa ¿Cómo vas con Min?

—Anda molestando con todo como siempre, creo que cada vez que me voy de viaje es un alivio —toma un pequeño pedazo de metal para juguetear con el. —Pero en fin, a veces la pasamos bien y él me espera en casa, —se encoge de hombros.

—Por lo menor tú te enlazaste planeandolo, en cambio yo no y no soporto hacerme cargo de Baekhyun, —suspira, —supongo que es porque no nos amamos, —mordisquea su lengua mientras coloca un pequeño diamante. —Por cierto, felicidades por el cumpleaños de sus cachorros.

—Gracias, —asiente. —¿No sientes nada por él?

—Aburrimiento y decepción, —lo mira sin brillo en su mirada.

🌧️

Baekhyun ese día salió a visitar a su amigo Junmyeon, sin embargo cuando entró a la casa luego de tocar la puerta, se encontró con otro omega sentado en la sala de su amigo.

—Hola, —dice dudoso mientras Junmyeon le hace sentar.

—Hola, soy Mackenyu, —dice contento el chico de cabello lila. —Tú debes ser Park Baekhyun ¿No? —sonríe.

—¿Park? —frunce el ceño y luego recuerda que ese es el apellido de su alfa. —Oh sí, soy yo, —asiente sintiéndose extraño.

Baekhyun percibe un aroma extraño en el ambiente y la dirección venía desde el cuerpo del omega Mackenyu; era el mismo aroma de Chanyeol y su lobo gruño por eso.

—Que bueno que ya se conozcan, —dice Junmyeon mientras coloca una bandeja con tazas de té y galletas de miel sobre la mesita de centro. —Mackenyu acaba de llegar hace unos días del pueblo vecino, —explica Junmyeon mientras toma una cucharilla.

—¿Eres extranjero? —levanta sus cejas.

—No, vivía aquí cuando era niño, pero luego mi padre consiguió empleo en el pueblo vecino así que me fui hace unos cinco años, —le cuenta para luego morder una galleta. —Volví porque mi prima Yoona se va a enlazar pronto.

—Entiendo, —asiente y luego ve una pulsera en la mano del omega con unas iniciales. —¿Tú estás comprometido? ¿Te están cortejando? —pregunta curioso mientras ve el objeto de plata.

—Oh no, —toca su muñeca mientras apega su brazo a su pecho y sonríe, —solo que hay alguien que me gusta mucho, —se sonroja y mordisquea su labio inferior.

—¿Ah sí? ¿Quién? —pregunta Baekhyun interesado.

—Uhm... Me da un poco de vergüenza decirlo, —mueve sus pies mientras juguetea con sus dedos.

—No tienes que decirlo si no quieres, —dice Junmyeon. —¿Pero él sabe?

—No creo, —sacude su cabeza, —pero es muy lindo y guapo, además trabaja muy duro, -sus mejillas se vuelven rojas.

—¿No será Sehun? —arquea una ceja Baekhyun.

—¿Ah? No, Sehun es mi primo, —frunce el ceño y hace una mueca de asco.

—Oh, lo siento, —susurra avergonzado mientras oculta parte de su cara detrás de su taza al beber. —¿Qué sientes cuando lo ves? —pregunta curioso al sentir las feromonas de Mackenyu.

—Me pongo un poco nervioso, mi corazón se acelera y me siento no sé, —mordisquea su labio inferior, —como frágil, —baja la mirada sonriente. —¿Me entienden? Él tiene los brazos muy gruesos y me dan ganas de acurrucarme en ellos, —chilla contento mientras da saltitos en su propio asiento.

—Cálmate, un poco más y haces un charco en tu sofá, —Baekhyun se ríe a lo que el otro se avergüenza un poco.

—No le hagas caso, —dice Junmyeon a Mackenyu quien asiente levemente. —Pero ¿Él ha hecho algo por ti?

—No, aunque es muy amable cuando lo voy a ver y tiene una sonrisa preciosa, —suspira y toca su pulsera. —Quizás hoy lo vaya a ver de nuevo.

—¿Él te dió esa pulsera? —pregunta Baekhyun.

—Algo así, —mordisquea su labio inferior. —Él la hizo, —susurra.

—¿La hizo? —frunce el ceño Junmyeon, —¿Te refieres a que la fabricó? —levanta sus cejas y el otro asiente. —¿Estás hablando de Park Chanyeol?

Mackenyu se sonrojo y luego asintió con la cabeza. Baekhyun se atoró con su galleta así que Junmyeon fue hacia él para golpear su espalda.

Mackenyu no podía percibir el aroma de Baekhyun ya que estaba en la esquina apartada del sofá y las ventanas se encontraban cerradas, apenas le venía el aroma a cerezas, pero era débil.

—¿Dije algo malo? —pregunta un poco temoroso Mackenyu.

Baekhyun niega con la cabeza mientras toma un poco de té para que la galleta resbale y empieza a respirar profundo ya que su cara estaba roja por falta de oxígeno.

—Es que me tomaste por sorpresa, —susurra con la voz rota mientras tose.

—Lo que pasa es que Chanyeol-

—Chanyeol es un amigo de nosotros, —interrumpe Baekhyun dándole una mirada rápida a Junmyeon. —Dijiste hace rato que te daba vergüenza ¿Es por su problema en las piernas? —levanta sus cejas.

—¿Ah? No, -sacude su cabeza, —eso no me importa, dije que me daba vergüenza porque Chanyeol es algo mayor que yo, -su sonrisa decae mientras forma un puchero, —yo tengo dieciocho y él casi treinta, —baja la mirada.

—Oh ya entiendo, —Baekhyun asiente curioso y siente como su lobo quiere arrancar la cabeza de Mackenyu, —¿Desde cuándo te gusta?

—Oh, no sé, desde la primera vez que lo ví cuando llegue, él estaba caminando con Sehun hacia alguna parte, —agarra una galleta mordisqueandola, —tan alto, varonil y ese parche en su ojo lo hace ver... —se sonroja fuerte mientras se abraza a sí mismo, —me dan ganas de acurrucarme en su pecho.

—Ya veo, —Baekhyun levanta sus cejas.

Junmyeon no dijo nada más y solo miro por un momento largo a Baekhyun; no entendía porque el omega no había aclarado que Chanyeol era su alfa, luego ve a Mackenyu pareciendo un adolescente.

Después de una hora más o menos, Mackenyu se tuvo que ir ya que tenía que ayudar a su madre. Tanto Baekhyun como Junmyeon se quedaron sentados mirándose entre ellos mientras beben su té.

—¿Por qué no le dijiste? —pregunta su amigo.

—Quería saber porque alguien podría estar interesado en Chanyeol, —con una pequeña cuchara revuelve la bebida.

—Ya ves que no para todos es un inútil, —lo mira fijamente mientras alza las cejas, -ten cuidado, —sonríe de medio lado, —un día podrías amanecer sin marca y en la calle, —saborea su bebida mientras ve como el rostro de Baekhyun se transforma.

—Ay por favor, —se ríe y rueda los ojos, -seguro solo es algo pasajero, —se encoge de hombros.

—Si tú lo dices... —susurra mirándolo de reojo.

.

Baekhyun se fue de la casa en la tarde debido a que pronto sería el toque de queda y ya estaba oscureciendo. Mientras camina por las calles de tierra, siente el viento frío así que se envuelve en su velo.

—No me van a quitar mi marca por tu culpa, —gruñe derepente su lobo así que se detuvo.

A pesar de que quiso preguntarle porque amaba tanto al alfa, su lobo simplemente no le respondió y se pasó resoplando y gruñendo el resto del tiempo.

Coloca sus manos detrás de su espalda caminando pensativo hasta su casa; no tenía intención de quedarse en la calle, pero no sabía si quizá está sería su oportunidad para romper el lazo.

Sin embargo, algo interrumpió sus pensamientos; una rama se había atorado en la falda de su túnica. Hace una mueca para luego darse la vuelta acomodándose ya que algunas ramas estaban pinchando la tela.

—Mierda, —se arrodilla intentando jalar la falda sin romperla.

Sin embargo, se detuvo cuando escuchó como unas ramas se rompían así que levanta la mirada observando a todos lados, pero solo vio a unas ardillas corriendo por lo que simplemente se encogió de hombros.

Deja de ejercer fuerza y decide deslizar sus dedos con suavidad para quitar su falda y en ese momento su nariz pudo percibir algo como a cítricos, pero nuevamente no pudo ver nada. De repente se puso nervioso así que siguió intentando.

—¡¿Quién está ahí?! —grita sintiendo el viento frío golpear su ropa y escucha el crujido suave sobre las hojas secas del suelo.

De pronto unas pisadas empezaron a sonar haciendo que Baekhyun comenzara a sudar por lo que jalo y finalmente pudo quitar la tela así que con una última mirada nerviosa al bosque, empezó a correr para su casa.

Incluso cuando estaba huyendo varias pisadas se escucharon y el aroma a cítricos se volvió más fuerte, volvió su cabeza hacia atrás dándose cuenta de que efectivamente un hombre con la mitad inferior del rostro tapado estaba persiguiendolo.

Cuando quiso gritar por ayuda, pudo ver a lo lejos a un alfa que conocía por lo que a pesar de sus pensamientos, corrió hacia él para terminar lanzandose a sus brazos respirando agitado.

—Gracias, gracias, —solloza apretando su agarre.

—¿Qué ocurre, Baekhyun? —frunce el ceño viendo tan indefenso al omega.

—Alguien me estaba siguiendo, no sé quién era, —dice entre llanto e hipidos.

—¿Qué? ¿Dónde? —pregunta visiblemente preocupado.

Baekhyun se aparta un poco para señalar con su dedo a la parte de atrás, por dónde había corrido recién y no había nadie; al parecer el otro se había ido.

—Tenía mucho miedo, pensé que me iba a atrapar en cualquier momento, —sigue llorando y el otro lo abraza al verlo tan mal.

—Tranquilo, no pasa nada, ven, vamos a casa, —con su pulgar limpia las mejillas húmedas. —Luego iré a comunicarle al líder ¿De acuerdo? —el otro asiente aún tembloroso.

—Tengo miedo, Chanyeol, —camina despacio al paso de su alfa mientras piensa en lo que pudo haber ocurrido si su alfa no aparecía ahí. —Pensé que en cualquier momento él iba a... a, —no pudo terminar ya que un nudo se formó en su garganta.

El alfa coloca un brazo alrededor de la cintura de Baekhyun mientras caminan a la casa; desde que conoce a Baekhyun jamás lo había visto así y solamente quería llegar a casa para que el otro se calme.

En cuanto llegaron, Baekhyun se negó a ir a su habitación por lo que Chanyeol suspiro dejando que se quede en su propia cama dónde el pequeño se acurrucó en posición fetal.

—Te traeré un poco de té, —dice al ver cómo Baekhyun seguía temblando.

—No, no, -se sienta y jala el brazo del alfa, —tengo miedo ¿Y si vuelve? No quiero quedarme solo, —solloza otra vez mirando a los lados.

Chanyeol se sienta a su lado para abrazarlo, en realidad se veía que Baekhyun estaba completamente aterrado; aún no perdonaba al omega por su comportamiento, pero tampoco se veía capaz de dejarlo solo en ese estado.

—Ya, estás a salvó, tengo que decirle al líder para que pueda mandar a guardias allá, —soba su espalda mientras el otro tiembla.

—No te vayas, tengo miedo, —gime mientras sus lágrimas mojan la camisa de Chanyeol.

—Bien, bien, -acuesta a Baekhyun sobre la cama para él poder acomodarse a un lado mientras acaricia su cabello, —estás seguro, no pasará nada, —susurra.

Poco a poco Baekhyun fue quedándose dormido y cuando su respiración se volvió profunda Chanyeol supo que ya se había quedado dormido. Se levantó con cuidado para luego taparlo y finalmente coge sus llaves, necesitaba hablar con Siwon.

Su lobo estaba furioso, quería arrancar la cabeza de quien quiso llevarse al omega.

***
Cuenten sus teorías.

Lo siento, no me di cuenta que yo ya había mencionado antes al Chenmin así que tuve que editarlo... Cómo disculpa por mi error solo les diré que Luhan aparecerá más adelante.

Si no ven sus comentarios es porque al editar se borran. 😔😢