Jungkook está confundido.

Afirmarle a Taehyung que no siente nada por Jimin es mentir, pero debe hacerlo.

El Omega despierta una curiosidad extraña en él, que no desea experimentar bajo ninguna circunstancia.

Se suponía que los Omegas no le generaban ningún tipo de atracción, Taehyung, por la marca, era el único hombre por el que se sentía atraído y no tenía la intención de hacerlo por alguien más.

Pero Park Jimin estaba ahí.

Sus mejillas sonrojadas por cualquier acción que hiciera le incitaban a hacer cualquier cosa para recibir atención suya y que sus mejillas se llenaran de un fuerte rosa. Sus ojos azules, finos e imponentes le recordaban a los zafiros y su aroma era demasiado para él.

No deja de fijarse en su cuerpo, del que jura no sentir atracción por él, en la seguridad que el Omega parece sentir al permitirle compartir espacio y mostrar confianza en cosas que sabía, no lo haría con nadie más que él, le inflaban el pecho y el corazón. No porque era un bastardo que disfrutaba jugar con él y se sentía orgulloso porque Jimin no sentía ciertas cosas o estaba seguro con nadie más que él, era más allá de eso, era algo que nacía desde el fondo de su corazón. Su instinto le hacía sentir orgulloso del hecho de que su esposo confiaba en él.

Por otro lado, cada vez lo notaba más y no encontraba ninguna salida para liberar los sentimientos que comenzaban a florecer.

Y eso le asustaba.

Porque la atracción que sentía por su esposo, estaba aumentando y no era el propósito.

Su lugar pertenecía junto a Kim Taehyung, realmente lo amaba, pero no podía deshacerse de los sentimientos que comenzaba a tener por Jimin.

Después de haber dormido con Taehyung en su habitación, decidió volver hacia Jimin y rápidamente se acostó en la cama, ignorando lo cercano que estaba a él.

Estaba agotado por esperar a recibir un llamado de su padre para volver al palacio. No soportaba estar en un lugar ajeno, teniendo que convivir con su primo y estar cerca del Omega que le hacía las cosas más difíciles con su presencia, cada vez que estaba cerca, tenía impulsos que en una situación aislada, no cruzarían por su mente.

Estaba confundido y eso le frustraba.

Notó el aroma de la habitación y el camino de tristeza, pero lo omitió por el cansancio, finalmente cayó dormido mientras esperaba que Jimin no hubiera escuchado lo sucedido al otro lado de la puerta unas horas atrás.

Durmió un par de horas más, hasta que despertó, notó que el aroma de su esposo se había disipado y prácticamente había desaparecido de la habitación.

Con rapidez salió de la cama y comenzó a desesperarse al no encontrar nada que pudiera darle alguna pista sobre su paradero.

Se golpea la frente con la palma de su mano y luego nota que el anillo de matrimonio se encuentra sobre una mesa.

Es imposible que Jimin se la hubiera quitado, a menos que algo malo sucediera.

No puede imaginarse a su esposo siendo torturado por su falta de conciencia en la situación en que estaban, cualquier cosa que le sucediera, Jungkook tenía la culpa absoluta.

Inhala y exhala un par de veces, lava su rostro e intenta pensar en frío.

No hay seguridad con su primo alrededor, con su padre alejándolos del reino porque está sospechando, sus pensamientos negativos se agravian cuando le llaman por el almuerzo y en la mesa no se encuentra ni su esposo, ni su primo.

Durante la comida, no puede dejar de pensar en métodos para encontrarlo y juega con el anillo de compromiso del rubio.

Su plan es seguir con las formalidades y pedir a Taehyung que le ayude a buscar a Jimin dónde sea que se encuentre. Sabe que su pareja no está a favor de cualquier cosa que se relacione con Jimin, pero al fin y al cabo, sigue sirviendole a él y a su pareja aunque no lo desee.

Aunque los reyes le preguntan sobre su actitud y niega cualquier acusación, ellos siguen preocupados por él.

Cuando la comida finaliza, Jungkook agradece y deja la sala lo que más pueda.

Y se cruza con un Jimin soltando una carcajada, agarrando el brazo de su primo.

La cólera y la preocupación llenan su cabeza, se acerca a Jaehyun y le empuja contra la pared más cercana. "¿Qué le estabas haciendo?"

Su primo sonríe de lado y Jimin agarra su hombro. Sus ojos azules están horrorizados y el cuerpo del Delta retrocede. Breves recuerdos llegan a su mente y de repente se siente acorralado por Jimin.

"No le estaba haciendo nada más que feliz, primo. Cosa que no debes hacerlo tú, por acostarte con tu amante".

El alfa cierra las manos en un puño y levanta la mirada en busca de Jimin, quien ahora pregunta a su primo por su bienestar. Jungkook ignora el comentario de Jaehyun y se dirige hacia Jimin.

"Tu anillo...Lo dejaste y pensé que algo malo te había sucedido". Pasa saliva y Jimin frunce el ceño.

"Dame un momento". Se dirige a Jaehyun y él asiente.

"Si me necesitas, estaré aquí en un momento". Jimin agradece y se dirige hacia Jungkook.

"Con mucho respeto... Príncipe, no creo que deba usarlo cuando a usted ni siquiera debería importarle. Nadie nos está viendo, además yo..."

"¿Tú..?" Su corazón se acelera y sus mejillas se tiñen de vergüenza.

"Les escuché hablar sobre mí. Necesito un respiro de esto, si usted ya sabe lo que siento, no es de importancia repetirlo, pero necesito respirar o estaré agobiado y pasará, príncipe, si es su principal preocupación". Le mira fijamente con la mano en el corazón, no hay nada que ocultar, él lo sabe.

De repente, el más alto siente la garganta cerrada y quiere hacer la cantidad de preguntas que le sean posibles, pero es imposible.

No tiene la confianza suficiente con su esposo. No está en el lugar de nada y aún así desea cumplir con el capricho de sus más profundos deseos y...

De repente Jimin se ha ido.

Y la noche llega con rapidez, Jimin llega tarde a la habitación, Jungkook no pregunta, pero decide dormir en una de las sillas.

Está por buscar un edredón, cuando el Omega, con su camisón que deja a la vista sus piernas (Jungkook debería dejar de verlas por unos segundos), golpea el colchón.

"Puedes dormir aquí, tonto. A menos que no desees, por supuesto".

El alfa muerde su labio inferior y asiente, haciéndose a su lado.

"Lamento haber sido tan irrespetuoso, es sólo que estaba preocupado y pensé que algo andaba mal...No es mi derecho, pero realmente necesito saber que estás bien, tampoco debí hablar mal de ti".

Se están mirando frente a frente, Jimin parpadea lento y la luz de la luna ilumina la habitación. Todo es extraño para ambos. Hace algunas horas habían hecho un voto de silencio y ahora parecía que querían decir algo más.

Jimin sonríe y oh, Jungkook está cayendo, al parecer, porque queda encantado con su sonrisa.

"Está bien, yo también fui irrespetuoso y no comprendí que estaba asustado, lo siento".

Jungkook niega y de repente, la mano de Jimin se entrelaza con la suya, están por dormir, ambos lo juran, pero no pueden.

Sienten algo más, un deseo inexplicable...Si tan solo cumplieran con el impulso.

Jimin pregunta, interrumpiendo lo que está por decir el príncipe. "Su marca, puedo...¿puedo verla?"

El alfa se sorprende, asiente con una sonrisa encantadora. Ambos toman asiento y de repente, se están acercando al otro, Jimin se asoma y se le escapa un pequeño oh.

"¿Qué sucede?" Parpadea al sentir el aliento cerca a un punto de sensibilidad.

"Es una marca muy bonita...¿Qué se siente, es feliz con ella?"

La pregunta inocente, les causa una punzada en el pecho. La culpabilidad inunda a ambos. Jungkook no debería permitir que lleguen a un terreno de ese nivel, la marca es íntima cuando se trata de la pareja, pero ahí estaba Jimin, su esposo al que no podía negarle absolutamente nada.

"Sí. Me hace sentir lleno, es una sensación que va más allá de lo inexplicable. Una conexión, ¿sabes?"

Jimin carcajea, tal vez con dolor o felicidad genuina, o una mezcla de las dos. "No, realmente no lo sé".

Jungkook toma su delicada muñeca y el tacto, oh, tocar su piel le genera una corriente extraña a ambos. "Escucha..."

"¿Puedo tocarla?" Lo que menos necesita el rubio es verlo a los ojos, sabe que caerá más por la oscuridad en ellos.

El Delta asiente resignado y cuando Jimin le toca allí, algo más le llama para tocarlo. Suelta un pequeño gemido y suspira.

"¿Acabas de...?"

Y luego todo se vuelve rojo. Muy rojo.

Jimin se sorprende por el cambio repentino de actitud. "Siento tu aliento, todo en este momento, si me dejas..."

Su mano se acerca temblorosa sobre su cintura, Jimin parpadea lento, hipnotizado por sus ojos que se han vuelto rojos, su forma animal y humana se han combinado. Casi imposible. La otra mano de Jungkook se acerca a su mentón y le besa sobre su manzana de Adán.

Jimin suelta un ruido sorprendido y cierra los ojos, es un sueño, jura por sus ancestros. El Omega asiente cuando el alfa pregunta si puede continuar y luego deja un beso sobre su mentón.

Luego vuelve a preguntar, casi rogando al Omega, quien asiente, dejándose llevar por el deseo.

Sabe lo que significa.

Y luego sucede lo que debe pasar.

La mano de Jungkook le acaricia el rostro y con la otra le ha dejado sobre sus muslos, Jimin se agarra de su cuello.

Sus labios están frente al otro, Jungkook está sonriendo y Jimin está por derretirse. Sonreír en una situación así, le parece sorprendente (Miente si dice que no está por desmayarse).

Sus alientos chocan y ahora sus bocas también.

Es un beso delicado y lleno de emociones. El primer beso de Jimin y Jungkook parece notarlo, pues no ejerce dominio en él. Sus labios saben a gloria y a los mejores manjares.

Se separan unos segundos más y la respiración del Omega se acelera. Jungkook vuelve a sonreír y le recuesta sobre la cama.

Vuelven a besarse, pero tocándose un poco más. Jimin explora su pecho y agarrar el pectoral derecho del alfa. Gime cuando Jungkook comienza a acariciar su abdomen mientras le sigue besando, su mano está tocando su piel debajo de la única tela que le cubre.

Es una sensación que jamás imaginó sentir, al menos junto a su esposo, quien, se supone, está enamorado de otro alfa y no debería estar besándolo.

Jimin aparta a Jungkook y el alfa frunce el ceño como un cachorro dolido.

"Taehyung". Murmura sobre sus labios, Jungkook niega.

"No hables de otro alfa cuando estás conmigo".

Recibe un pequeño golpe en la cabeza. Los ojos rojos de Jungkook parcen perder su color, al retomar la cordura.

"Oh", murmura, antes de separarse del Omega que ahora parece un desastre.

Cabello enredado, sudor por su frente, blusón hacia arriba, con su ropa interior expuesta.

Jungkook no sabe como sentirse, pero logra analizar lo único que su última neurona le permite hacer.

"¿Usas encaje?"

AL FIN ESTÁ mi escena favorita!! omgg, por fin se nos dió 🥳🥳

lamento la actualización tardia, ya entré a la universidad y ando llena de cosas ya jdjs