- ¿Por qué deberíamos arreglarnos cuando ellos seguramente van como vagabundos? -se quejó.

- Porque queremos que nos vean como mujeres -respondió Emma arreglando la yukata la ojirosa.

- ¿Y qué somos? ¿Una cuchara? -dijo con sarcasmo- Además Ryuguji es un amigo.

- Si tú lo dices Serafine -se unió Hinata con una mirada picara ocasionando que la mayor se sonrojase de pena.

Serafine estaba muy feliz de haber hecho amigas tan lindas y puras como lo eran Hinata y Emma, se sentía tan tranquila con la presencia de las dos, quería verlas cumplir sus sueños y esperaba seguir junto a ellas por muchos años más.

Las parejas de esa noche eran: Hinata con Takemichi, Emma junto a Raiden, y Serafine con Draken.

Aunque la Seki solo les hizo caso a sus amigas, solo lo invitó suponiendo que era como amigos, sin conocer las intenciones de las dos jóvenes. A pesar de que coquetea con algunos hombres, no tiene conocimientos acerca del romance, al igual que cierto rubio de tatuaje, quien aceptó la invitación.

Las tres adolescentes ya estaban preparadas para ir al festival junto a su compañero.

La pelirroja decidió portar una yukata que heredó de su madre, este poseía una falda de color rojo a la altura de sus muslos, la parte superior era blanca junto a unos bordados de rosas en las mangas y pecho izquierdo, además de combinarla con unos zapatos de tacón ancho color blancos ya que las getas de su madre le andaban pequeñas, a pesar de que no le gustan decidió utilizarlas ya que le quedaban lindos. Su cabello lo decidió recoger con dos trenzas a sus costados y unirlas en una coleta alta, dejando dos mechones sueltos a sus laterales.

- ¡Lo siento! ¿llegamos tarde? -saludó Emma con un sonrojo a los tres varones.

- Les dije que vendrían como vagabundos -bufó cruzándose de brazos.

- Vamos antes de que se haga más tarde -sugirió Draken mirando a su compañera y haciéndole una seña con la cabeza para que avanzara.

- Si si ya voy Ryuguji -lo siguió.

Los cuatro restantes se habían dado cuenta de ya no se insultaban cada tanto y su relación era más llevadera.

- ¡Ánimo Sera-chan! -dijeron las dos chicas viendo cómo su amiga y Draken se perdían por la multitud.

- ¿Por qué le dices eso Emma-chan? -le preguntó Raiden.

- Se gustan -contestó segura.

Los dos hombres quedaron en shock.

- Solo no se dan cuentan -intervino Hina al verlos- Dicen que del odio al amor solo hay un paso.

- Nosotras nos encargamos que sea una salida romántica para unirlos -suspiró la rubia- Imagínenlos tomados de la mano o jugando algún juego para parejas ¡Kya! ¡Me emociono de solo pensarlo!

- ¡Vamos Ryuguji, con más fuerza!

- Eso intento -gruñó.

Los dos estaban en una pequeña atracción que consistía en medir la "hombría", el masculino debía unir su mano con el aparato y apretarlo hasta ver dónde llega la fuerza, y si pasa el último record se gana un premio.

- ¡Tenemos un nuevo récord! -anunció el señor encargado- Elija su premio jovencito, su novia debe estar muy feliz de tener a un chico guapo y fuerte que la proteja.

- ¡No es mi novio/a! -gritaron sonrojados.

- Deme el zorro de nueve colas que está en el centro -se rascó la nuca por los nervios.

Una vez el anciano se lo entregó, él inmediatamente se lo extendió a Serafine.

- Toma, no me gustan los peluches.

- Quien diría que tienes tu lado romántico -bromeó con un calor en las mejillas que no podía explicar- ¿Por qué elegiste el zorro?

- Me hace acordar a ti -la tiró de la muñeca para que siguieran caminando- Es rojo y molesto.

- A la mierda lo romántico, la cagaste -gruñó y caminó delante de él.

Los dos comenzaron a reír y continuaron su camino comiendo uno que otro dulce mientras el más alto llevaba en sus brazos aquel premio, era más grande de lo que se imaginaba, incluso a él le costaba llevarlo.

Su salida iba asombrosa, se hacían bromas constantemente y se retaban en cada atracción que veían para ver quién era el mejor; sin embargo, unas pequeñas gotas de agua comenzaron a caer.

- Ven -lo tomó de la mano- Vi un negocio antes, compremos unos paraguas.

Dicho y hecho, el dúo se habían protegido de la lluvia con los artefactos que compró la chica.

Mientras caminaban Draken sujetó con más fuerza al peluche para evitar que se cayera al suelo y se manchara.

- Maldito zorro -maldijo.

- No lo trates asi.

La Seki se lo quito y con las dos patas delanteras se lo ató a la espalda por delante de su cuello.

- Hay que ponerle un nombre.

- ¿Y por qué me lo dices a mí?

- Porque ahora eres su papá -le sonrió con sus mofletes rojos.

- No molestes -le contestó evitando mirarla y luego suspiró rendido- No se me ocurre un nombre ahora, después lo pensamos.

- Que mal padre -suspiró burlona- Nuestro hijo ha nacido y ni siquiera tiene un nombre. Servicios sociales nos lo quitarán.

- ¡Seki! -le gritaron a sus espaldas interrumpiendo su caminata.

"Todos aceptaron que Pachin decidiera dejar su puesto en la ToMan para ayudar a su padre, pero el único que estuvo en desacuerdo fue Peyan. Él cree que es culpa de Seki-chan que Pachin dejó la ToMan. El propósito de Peh es cazar a Seki-chan mientras que el objetivo de Moebius es matar a Draken, por lo que se unieron para atraparlos"

Los dos voltearon a ver el causante del grito.

- ¿Peh? -ella se mostró confundida- ¿Qué sucede?

- ¿Te encuentra bien Peyan? -preguntó Draken- Tu cara está muy seria y estás vistiendo un tasuki.

- Ahora entiendo -le habló despacio- Es por mi ¿verdad? Peyan.

El castaño se mantuvo en silencio viéndola con odio.

- ¿De qué hablas Serafine?

- No seas cobarde -sonrió burlona- Ven hacia mi Peh, tengamos un uno a contra uno.

Serafine comprendió al instante, la mirada que tenía el vice capitán era una que conocía muy bien ya que la había recibido incontables veces en su anterior vida: odio, la quería muerta.

Tampoco debió pensar demasiado para averiguar que esto se relacionaba con la renuncia de Pachin.

Y a Draken no le costó mucho para estar al mismo nivel que la ojirosa.

- Enfrentándose a una mujer, que poco hombre eres Peh -dijo el rubio cerrando su paraguas y tirándolo por algún lado- Yo me enfrentaré a ti en lugar de ella.

- Puedo sola.

- Lo sé -caminó hasta Peh- Pero no eres de la ToMan, este problema se resuelve entre nosotros, tú no tienes nada que ver con nuestros conflictos.

El silencio reinó entre los presentes hasta que ella gritó al ver las intenciones de un ajeno.

- ¡Ken! -con su paraguas amortiguó el golpe del bate que iba dirigido a la cabeza del tatuado- Así que te uniste a Moebius, Peh...

Más de treinta miembros de la pandilla enemiga los rodearon.

- Atacar en grupo -rió sin gracia- Que poco hombre, me decepcionas.

- Tienes que irte Sera -le dijo colocándose delante suya- Yo me encargaré de esto.

- No te hagas el héroe ahora -se posicionó a un lado de él- No me perderé esta batalla por nada, tendré tacones, pero puedo moverme bien.

- ¿A cuántos puedes derribar? -la miró con una sonrisa cínica.

- Ya lo veremos.

Tras finalizar esas palabras el dúo corrió hasta los demás para comenzar una batalla.

Ella debía cuidar tanto su espalda como la de Draken, esta emboscada solo confirmaba que el rubio no estará a salvo como creía su mejor amigo.

Querían matarlos. No tenía que haber bajado la guardia sin antes haber pasado el 3 de agosto.

De pronto un tipo se le acercó de frente con un palo de madera, la Seki tomó posición de boxeo para esquivar el golpe y con su pierna derecha golpeó con fuerza la rodilla de su oponente, causando que cayera al piso con un gran dolor.

- Te sugiero no moverte, está quebrada -acomodó de mejor manera a su zorrito en la espalda- Mira a tus padres golpear a los tipos malos, hijo sin nombre.

- ¡¿Cuántos llevas?! -le preguntó su compañero con alguien tomado de los pelos y varios tipos tirados a su alrededor, al igual que ella.

- ¡Dejé de contarlos cuando llegué al trece! -contestó- ¿¡Tú!?

- ¡Más de veinte, perdedora!

- ¡Seki, Draken-kun! -un grito los sacó de su competencia.

Serafine giró para ver a unas personitas bien conocidas. Ahí estaba su hermano, Takemichi y Mitsuya sin las chicas, por lo que ella deduce que ya conocían esta situación y las resguardaron.

- ¡Peyan maldito! -habló el de pelo lila- ¿Qué estás haciendo con Moebius?

- Cierra la puta boca Mitsuya, o también te mataré.

La ojirosa giró su torso y golpeó el cuello de uno que se le acercó por detrás y junto a Draken se acercaron al trio.

- Parece que más se unen a la fiesta -comentó viendo a Mitsuya.

- ¿Creen que entre ustedes tendrán una oportunidad? -comentó un miembro de Moebius.

- Cállate idiota -sonrió Mitsuya.

- Nee-san -la llamó el ojiceleste y la abrazó- Perdón, si hubiéramos sido más inteligentes ustedes no estarían en esta situación.

- No pude protegerlos -sollozó Takemichi.

- Tranquilos tontos -le sonrió- Entiendo la situación asique no se preocupen.

- No es eso -habló el ojiazul- Kiyomasa anda en busca de Draken para matarlo, hay que protegerlo.

- Eso lo suponía -sonrió orgullosa.

Su conversación fue interrumpida por el sonido de un caño de escape, uno que solo dos de los presentes conocían muy bien.

Una motocicleta derrapando hizo su entrada para mostrar al comandante de la Tokyo Manji.

- Llegó el líder -les sonrió para calmarlos- Él detendrá esto.

- Asique me llevaron a otro lugar para atacar a Kenchin -habló Mikey- Y no les bastó eso sino que incluyeron a Rafi-chan, quien ni siquiera es un miembro de la ToMan.

- ¡Hago esto solo por Pachin! -le gritó Peh.

- ¡Este no es tu estilo! ¿Quién te guio a esto?

Eso quiere decir que Otto siguió con su plan aun cuando Osanai falló, no solo está utilizando a Peh sino que también a Kiyomasa ¿pero por qué Kiyomasa quiere matar a Draken si él no le hizo nada? En todo caso me debería querer matar a mí ya que fui yo quien lo golpeó ese día de las apuestas -pensó ella- Esto es una mierda, además no tenemos idea quien es Ottito pero Hanagaki nos habló de un tal Kisaki ¿y si él es Otto? Es una gran probabilidad si contamos con que él en un futuro es la mano derecha de Mikey.

- Wow -habló un nuevo personaje llamando la atención de todos- Parece que Mikey no es solo fuerza. Que aburrido.

- Y otro más aparece -comentó mirando a un lateral- ¿De quién es el cumpleaños?

- ¿Y tú eres?

- No importa quién soy, pero por el momento estoy a cargo de Moebius, mi nombre es Hanma.

- Dice que no nos importa su nombre y lo dice, en fin la hipocresía -bufó divertida.

- Asique tu eres el asqueroso rarito que está detrás de todo esto...

No, no lo es -pensó la Seki con una mueca en la cara- No debo juzgar un libro por su portada, pero él no se ve inteligente, Hanma es fuerza... Alguien más debe ser el cerebro ¿será Otto o Kisaki?

Cuando pensó eso algo se le vino a la mente, por lo que, ignorando todo el panorama, tomó a su hermano y a Takemichi de la mano y los alejó un poco.

- Oye Takemichi -le habló- Anteriormente tú nos contaste que en el futuro Raiden te hablará sobre un tal "Hanma", que supuestamente él será quien le contará sobre el plan de Kisaki a Den-Den ¿verdad?

- Tienes razón -sus ojos brillan comprendieron- Eso quiere decir que quien está detrás de todo esto es Kisaki... y Hanma es otro títere.

- Nuestro Otto tiene identidad -sonrió el pelirrojo.

- Aún así -habló el rubio- El problema de ToMan debería ser detenido, pero otro acaba de empezar ¿podría ser mi culpa? Toda la línea temporal se fue de las vías.

- No -respondió el menor- Kisaki debe haber pensado en todo ya que sabía que Mikey le ganaría a Osanai, también debe haber previsto el problema con Pachin, por lo que le comió la cabeza a Peyan y Kiyomasa para que continuaran con el plan: Matar a Draken... Nosotros caímos en su juego, era obvio que esto no terminaría con la victoria de Mikey hacia Osanai.

- ¿Entonces que se supone que haga? -el rubio se estaba desesperando.

- Escucha Hanagaki -ella sonrió entusiasta al oírla el sonido de motores acerándose- Vienen refuerzos...

Los miembros de la Tokyo Manji hicieron su aparición, los capitanes de las divisiones encabezaban a los demás para posicionarse detrás de su comandante.

- Una battle royal en el día de un festival -habló Draken con emoción- En verdad hace la sangre bombear ¿verdad, Mikey?

El líder solo rio comprendiendo a su mejor amigo.

- ¡Hagámoslo! -ordenó corriendo hacia la pandilla enemiga.

- ¡Matenlos a todos! -siguió el otro líder.

Nota: buenassss, se acerca la batalla del 3 de agosto jujuju

Me gustaría aclarar algo por si hubieron confunciones: en esta historia Draken y Emma no guardan sentimientos entre ellos, solo se ven como hermanos.

Sería spoiler lo que diré, pero el interés amoroso de Serafine será Draken, por lo que no me gustaría que hubiera conflicto con Emma por este tema. Y si se preguntan por la linda Emma, ella será el interés amoroso de Raiden y visceversa <3

Aquí una foto del hijo de Draken y Serafine ¿cómo le gustaría que se llamara? Leo sugerencias :)