Ciudades arrasadas, saqueadas, en llamas, aún se podía oír el estruendo de la Artillería que bombardeaba las últimas posiciones enemigas y desde la lontananza éstas explotaban por los aires. La resistencia de aquella localidad había fracasado y ante ellos, delante de los que estaban dirigiendo esa feroz ofensiva sobre Canadá y ahora en EEUU, estaban hechos prisioneros pero no vivirían mucho tiempo. Sabían que, en un par de minutos, sus vidas iban a terminar de la peor manera. Un grupo de Soldados provenientes del "Imperio del Este" conversaban entre ellos, en su respectivo idioma, el cual era el Bosnio-Herzegovino, mientras que uno de ellos miraba a los prisioneros. 

Uno de los que estaba atado de manos y de rodillas contempló el uniforme que poseían aquellos efectivos: Era de la época de la Primera Guerra Mundial, muchos tenían el Prusiano Imperial con los Cascos Pickelhaube y los Stahlhelm; mientras que los otros estaban con los de la Rusia Zarista y Soviética. Un Oficial de Croacia se acercó y miró a los capturados con un aire frío, lanzando una bocanada de humo, producto por el cigarrillo que éste fumaba. A través de sus ojos, el prisionero notó que éste llevaba el uniforme de las "SS", siendo de color negro, como los otros que eran verde y los de marrón con camuflaje, incluso se hallaban de blanco por la nieve que aún caía.

- ¿Por qué...Por qué no llevas la Esvástica, maldito ignorante?.- Preguntó éste, mientras que el Oficial se volteaba para verlo a los ojos.

- Para ser un asqueroso "SWJ", tienes el cerebro del tamaño de un guisante: Nosotros no estamos a favor del Nazismo y la superioridad racial.- Le respondió fríamente aquel Oficial.- ¿Acaso ves alguno de nosotros matar a los que no son como nosotros? ¿Acaso no te has preguntado de por qué hay negros con este uniforme?.- Se acercó aún más a su rostro.- Porque somos Humanos, somos iguales ante la ley y no existe esa estupidez de que unos son superiores a los otros. Deberíamos replantearte tu pregunta porque ustedes eran los verdaderos villanos: Imponían una falsa "igualdad" pero a los que no eran como ustedes los trataban igual que hicieron Nazis y Comunistas en el Pasado: O estas conmigo o date por muerte. Eso es lo que son ustedes. Izquierda y Derecha, el cáncer que este Mundo no soporta. Nosotros somos Patriotas, amamos nuestra cultura y lo mismo nuestros Camaradas de otros países. Queremos un Mundo más justo, donde se respeten las leyes, el orden y que haya un verdadero progreso.- En aquel momento, el Oficial de las "SS" les lanzó una mirada llena de asco hacia esa gente.- Pero todos ustedes, jejejeje, no existirán nunca más.- Dijo y de ahí vio que se acercaba alguien hacia ellos.

Otro cañonazo y una serie de edificios se vinieron abajo. Delante de ellos, los Ejércitos Nacionalista e Imperial dejaron lo que estaban haciendo y tomaron posición de firmes ante la persona que avanzaba hacia ellos. Los prisioneros comenzaron a temblar del miedo cuando oyeron sus pasos sobre la tierra de Invierno. Uno que otro rompió en lágrimas, sabiendo de que su fin estaba cerca. La persona que se hallaba ante ellos era de cabellos blanco-plateados, igual a la Luna cuando está en el Firmamento Nocturno, sus ojos, rojo-escarlata, alto y delgado pero con algo de contextura musculosa en su pecho por la actividad física en los entrenamientos. Vestía un uniforme imperial de Oficial color negro, gorra de plato con el Águila Imperial bordada en su Centro, de la Primera Guerra Mundial, gabardina "Trench Coat" gris niebla, largas botas de montar oscuras, guantes términos finos, podía apreciarse un cinturón con pistolera junto a sus pantalones del mismo color, en el cual había una Pistola Parabellum y una Espada. Sobre su cuello se pudo apreciar una "Cruz de Hierro de Primera Clase" con la "Cinta Prusiana" y en el uniforme había otra y una tercera que era sostenía por un Águila, así como también una "Cruz al Mérito" y un par más. 

Su rostro, frío, gélido, de personalidad severa, inteligente, calculadora, se acercó y llevó a que uno de los Oficiales le pasara un informe del cual leyó con pausa y de ahí asintió con la cabeza.

- La última ciudad canadiense ha caído, Su Alteza.- Informó una mujer, la cual estaba a cargo de la "Cúpula Imperial".

- Excelente. Envíen a la Caballería, la "Guardia Imperial" junto a los "Einsantzgruppen" para asegurarse de que no quede ni un solo enemigo vivo. Aseguren las fronteras y que sigan llegando más tropas para continuar con la invasión a EEUU.- Ordenó el joven y la muchacha acató el pedido, saliendo para allá. Luego de ello, él miró a los prisioneros.

- Son todos los "SWJ" que capturamos, Señor.- Dijo el Oficial de las "SS". El peli blanco-plateado asintió con la cabeza y de ahí hizo una seña con su mano derecha para que vinieran un grupo de Soldados, los cuales se posicionaron y apuntaron con sus armas, detrás de ellos. 

Entre lágrimas y la histeria que había en algunos de ellos, el joven se quedó mirándolos con frialdad y de ahí se inclinó para verlos de cerca. Pasó su mano por las mejillas de uno de ellos y sintió el calor de aquel líquido que bajaba por los ojos de ellos, así como también mostró una sonrisa malvada en su rostro.

- ¡¿Por qué nos haces esto?! ¡¿Por qué?! ¡¿Qué te hicimos?!.- Preguntó uno de los capturados, quien lanzó ese grito ante él.

- Es fácil ocultar la verdad ante sus propios ojos. Pero yo me pregunto hasta cuánto tiempo puede permanecer bajo las sombras.- Sostuvo aquel muchacho, quien empuñó su Espada Imperial y la colocó debajo del cuello de esa gente.-

- ¡¿Quién eres?!.- Quiso saber otro de los prisioneros.

- La pregunta no es el quién, sino el por qué: ¿Por qué están aquí?.- Señaló el peli blanco-plateado con seriedad en su voz.- Ustedes mismos lo saben, ¿no es así? ¿Dónde estaban sus ONG cuando  masacraban sus mercenarios a mi gente en los Balcanes? ¿Adónde estaba la ayuda prometida?. Ustedes iban a dormirse con el estómago lleno, mientras que los míos pasaban hambre, suplicando por un plato de comida para poder sobrevivir al Invierno. No tenían ningún problema y ahora salen con sus patéticas películas y series donde salvan al Mundo, pero no pueden hacerlo con ustedes mismos. Jamás lo supieron hacer.- Respondió y aquello fue como un sable que les atravesaba el corazón. 

- ¡Eso es mentira!.- Se negó en creer uno de ellos, por lo que se ganó un golpe en la cara de parte del peli blanco-plateado.

- Cuando yo te diga que hablarás, lo harás.- Le espetó el muchacho y el otro notó que sus ojos parecían brillar ante aquel color.- ¿Acaso se han olvidado de lo que fueron los genocidios perpetrados por su gente? ¡Por los "Cuervos Errantes"!.- Bramó y de ahí varios de los capturados comenzaron a llorar más fuerte.- Ustedes son cómplices, asesinos de mi familia, todos y cada uno de estos, malditos Norteamericanos, Canadienses, de los que han formado parte de la OTAN.- Dijo y eso no parecía tener fin en lo que decía.- 

Por las últimas ciudades que quedaban de pie, las Fuerzas de Alexander seguían con su imparable avance, masacrando a todo el que se interpusiera en su camino. Árboles, postes y faroles se convirtieron en cadalsos para los que eran ahorcados, así como también las calles que quedaron cubiertas por los cuerpos de los que fueron fusilados. Las estaciones de radio y televisión eran destruidas e incendiadas, así como también cualquier rastro de sus aficionados, los cuales eran expulsados de sus casas, incendiadas y luego muertos en la acera.

- ¡Nosotros nunca tuvimos nada que ver con los Balcanes! ¡Por favor, pare, son civiles los que están muriendo en las calles!.- Rogó una mujer, pero el joven se volteó, frío.

- Así es la guerra.- Respondió del mismo modo que antes.- Ustedes la empezaron, pero, ¿saben una cosa?. Que mis tropas lleven esos uniformes, tal y como dijo el Teniente Primero SS Vrakokic de Serbia, esto es, simplemente, "luchar fuego contra fuego ", volverlos a usar pero con un objetivo y es cuidar de los pueblos Eslavos y ahora, con ustedes, va a ser todo lo contrario: La exterminación para que este Mundo sea mejor.- Señaló y de ahí sacó su Parabellum.- Y creo que tú serás el primero en morir.-

- ¡NO, ESPERE....!.- Rogó el que lo había insultado pero se terminó por ganar un tiro en la cabeza, desplomándose contra el piso bajo un charco de su propia sangre.

- ¡HIJO DE PUTA!.- Le gritó una mujer, la cual era Feminista pero Alexander la encaró de frente.

- ¡¿Y tú qué eres?! ¡¿Eh?! ¡No eres una mujer! ¡Pones en vergüenza a las verdaderas mujeres que han dado y siguen haciendo grandes cosas por este Mundo, solo eres una malcriada que nunca supo apreciar el amor de una familia porque ellos cometieron el error en malcriarte en vez de ser una buena ciudadana y ahora mírate: Querías hacerte la guerrera y terminaste capturada en pocos minutos, como tus otras amigas que ahora están desolladas o colgadas de los árboles! ¡El verlas a todas ustedes me dan ganas de vomitar, ya que no llegan ni a los talones a mi hermana Natasha, asesinada por su vil y corrupto gobierno!.- En aquel momento, él se puso de pie y dejó unos pasos de distancia entre los capturados y los demás.- Aprendí una cosa muy valiosa en esta guerra y es que si debo proteger a los que quiero, entonces yo seré el "Villano", pero el que triunfará sobre los supuestos "Héroes"  para que mi pueblo tenga un Futuro.

- ¡¿A base de odio?!.- Le reprochó otro de los "SWJ".

- Oh, "hablando del Rey de Roma, por la puerta asoma".- Se burló Alexander de ese muchacho.- ¿Y ustedes qué han cosechado todos estos años?. Hablaban de que eran "Guerreros de la Justicia Social" y que combatían al odio pero empleaban al mismo como arma de doble uso. Tal vez sean estúpidos de nacimiento o porque se creyeron que su "Mundo" iba a ser construido en base a una fantasía, pero optaré por ambas, ya que, al final, terminaron recibiendo lo que se merecían. Y eso mismo fue lo que me ayudó a seguir adelante en esta guerra.- Cancelaciones, caprichos de parte de una bola de ignorantes que no tienen ni un significado o un propósito para vivir en este Mundo. Una imitación de que, para ustedes, el "Mundo debe ser perfecto según a lo que nosotros digamos" mejor dicho cuando lloriqueamos y amenazamos a la gente que tiene éxito y capacidad, incluso si es algo que apoyamos, pedimos su cancelación. Aunque, solo una mente tan inferior como ustedes puede considerarse "razonable" pero hasta un mono sabría muy bien discernir el bien del mal. Pero descuiden, yo haré de este lugar uno mejor, pero donde se peleará por causas, motivos y no se arreglará todo con un besito y palabritas lindas. Eso terminó.- Anunció el joven y de ahí dio por finalizado su discurso.- Acaben con todos ellos, no sin antes hacerlos sufrir.- Ordenó y el Capitán a cargo del pelotón de fusilamiento fue a cumplir con lo dicho, llevándose a esas personas hacia un sitio donde iban a pasar hasta el último minuto de sus vidas gritando e implorando.

Una vez terminado el trabajo, los incontables Ejércitos reanudaron la marcha. La Caballería iba al frente junto a la Infantería Motorizada, siendo los primeros en portar las banderas, estandartes e insignias imperiales como el Águila, así como también los que llevaban espadas y sables que avanzaban junto al "Príncipe Imperial", quien comandaba a aquellas vastas fuerzas hacia la victoria.

- "Solía ser una persona con una gran familia. Éramos felices en Sarajevo, Capital de Bosnia-Herzegovina, hasta que llegó la maldita "Guerra de los Balcanes" que destruyó lo que quedaba de la Yugoslavia del Mariscal Tito. En ese conflicto entre hermanos, los "Cuervos Errantes" mataron a mis seres queridos, quedé huérfano, conocí y sufrí la crudeza, el odio y el rechazo por no ser como ellos querían".- Se detuvo y de ahí caminó hasta una colina, poniéndose de pie, firme, sobre ella.- ¡Nuestros enemigos conocerán de lo que somos capaces y nos temerán, Mis Hermanos! ¡Y en especial tendrán miedo de mí, todos ellos. Soy Alexander Vladimir Ivanisevic...morí en el Pasado, renací en el Presente desde las cenizas y a partir de hoy en adelante, hacia el Futuro, me conocerán por mis múltiples "Títulos", los "Apodos de Guerra" que ellos me han puesto, que inspirarán miedo en sus corazones...yo soy el "Demonio del Danubio" y con ello, todos mis enemigos morirán de la peor manera, encontrándolos con expresiones de terror, angustia, miedo y desesperación en sus rostros!.- Anunció, mientras que apuntaba con su Espada Imperial hacia el objetivo final: EEUU.