Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 52 (primera parte)

~Adrien~

Luka y Alya ya estaban en el lugar que les había indicado y a los pocos minutos llegué junto con Chloe.

Aterrizamos en el techo y ambos héroes se giraron a vernos.

-Le paon y Rena Rouge.- hablé firme en mi posición.- ¿que pudieron descubrir sobre el akuma?

-Ha estado quieto desde hace bastante, es como si nos estuviera esperando.- respondió Luka extendiendo una de sus plumas enfocando al sujeto desde lejos.

Y efectivamente estaba quieto viendo al frente con sus brazos cruzados, usaba un casco que cubría sus ojos por completo.

-Pero que traje más anticuado.- soltó Chloe viendo por sobre mi hombro.

-Yo te conozco.- habló Alya viéndola detenidamente.

-No se distraigan ahora.- fruncí el ceño.

-Hey, debes calmarte un poco.- habló la morena.- estas demasiado tenso.

-Lo que menos necesito ahora es una charla motivacional. Estoy hablando en serio.

-Oye, Chat Noir.- habló Luka frente a mi y alcé la vista.- ¿podemos hablar un momento?.- me erguí en mi posición y asentí.- ustedes hablen o algo así.- se dirigió a las chicas y ambos nos apartamos.

-¿Qué?.- pregunté cruzando me de brazos.

-Adrien... debes relajarte un poco.- tomó ni hombro con su mano y la quite rápidamente viéndolo a los ojos.

-¿Eso querías hablar?.- cuestioné molesto y él frunció el ceño.

-Escúchame, se que estas en una posición difícil ahora. Estas guiandonos para que podamos ayudarte y estas ideando un plan intentando pensar fríamente, pero nada de eso funcionará si sigues con esa actitud.

-Me tomo esto en serio. Y todos deberían hacer lo mismo.

-Créeme que lo hacemos.

-No, no lo hacen. Ustedes no saben lo que es perder a alguien a manos de un akuma o tener que ver como sufre la persona que más amas sujetando tu cuerpo sin vida.- apreté mis puños a ambos lados y Luka me miró entristecido.- Ladybug no está y no tenemos su miraculous, si alguien muere, cargaremos con eso por el resto de nuestras vidas y déjame decirte que no es bonito querer devolver todo a la normalidad y no poder hacerlo.

-Adrien... no puedo sentir lo que tu sientes, pero puedo intentar entenderlo y ahora somos un equipo, debemos estar unidos o todo se irá al demonio, ¿puedes entender eso?.

Me quedé en silencio un momento viéndolo fijamente y luego suspiré.

-No estás solo, estamos contigo.

-Está bien... .- musité.

-¡Oigan!.- habló Alya a nuestras espaldas.- ¿vamos a atacar o no?.- cuestionó y nos acercamos.

-Claro que si, Chat sólo necesitaba hablar conmigo.- respondió Luka abrazandome por el costado.

-Bien, ¿cual es el plan?.-preguntó Chloe cruzándose de brazos.- debo volver sana y salva con mi novio.

Tomé aire y me puse firme delante de ellos.

-Le Paon.- miré a mi azulado amigo.- tu anticiparas sus movimientos, observa todos los puntos débiles que puedas encontrar.- asintó.

-Cuenta con eso.

-Mientras Rena y yo lo distraermos y agotaremos para que entres tu Queen.- las miré a ambas.- debemos neutralizarlo.

-¿Te refieres a atraparlo?.- preguntó Alya y asentí.

-Con el poder de Queen bee podremos paralizarlo mientras encontramos el akuma.

-Entiendo.

-Bien, entonces vamos.

Luka fue el primero en irse y voló acercándose más al akumatizado. A los pocos minutos mi barra comenzó a sonar y conteste.

-Tiene prácticamente todo libre para escapar, creo que debemos bloquear sus salidas.

-Yo me encargo de eso.

-Aún no se mueve y los rehenes están atados con una cuerda. Creo que el akuma puede estar en su casco, será difícil quitárselo, pero podremos hacerlo si nos apegamos a tu plan.

-Ya oyeron a Le Paon, manos a la obra.- agregué y colgué.- Rena, tendrás que distraerlo sin mi por mientras, yo bloqueare sus posibles vías de escape.

-No te preocupes, puedo hacerlo.- Alya tomó su flauta y se paró el borde del edificio saltando hacia el akumatizado.

-Queen Bee, necesito que esperes aquí y no te muevas hasta que te necesitemos.

-Pero puedo ayudar a Rena Rouge.- me miró severamente.

-No, no te pondrás en peligro demás. Ella puede hacerlo, conoce a los akumas.

-Chat Noir, yo también los conozco. No se si recuerdas que yo fui un akuma también.

-Esto no es como en esos años Chloe.- tomé sus hombros.- necesito que estés a salvo, serás la única capaz de frenarlo. Si esto falla tendremos a muchos heridos y no podemos regresarlo a la normalidad.

-Si veo que todo se complica no dudaré en ir.- me miró fijamente y suspiré.

-Eres muy terca, no has cambiado nada.

-Tu si has cambiado mucho, no he oído ningún chiste de gato.- me miró extrañada y me paré en el borde del edificio.

-Las personas cambian...

-Creo que a todos nos hace falta Ladybug y tu eres el más afectado.

-¿Qué te puedo decir?, este gato necesita a su mariquita.- le regalé una media sonrisa antes de saltar.

Y tenía razón, me hacía falta Marinette, pero por ella haré esto lo mejor que pueda y podré estar a la altura de ser llamado el compañero de Ladybug.

Cuando toqué el piso con mis pies me dispuse a acercarme a la Torre, Alya había comenzado un combate con el akumatizado y a pesar de él ser mas veloz se mantenían parejos con los golpes.

De a poco comencé a mover los autos al rededor de la Torre bloqueando todas las posibles salidas. Cuando ya tenían casi todo cubierto llamé a Luka.

-Necesito que saques a los rehenes mientras ayudó a Rena a distraer al akuma.

-Bien.- colgué y me acerqué del todo a la pelea.

-¿Necesitas ayuda?.- pregunté por lo alto mientras Alya mantenía un golpe del sujeto con su flauta.

-Pero miren a quien tenemos aquí.- habló el sujeto.- al mismísimo Chat Noir, ¿que le pasó a tu bicho?.- sonrió alejándose rápidamente de mi compañera.

Tomé mi barra con ambas manos apretandola fuertemente por sus palabras.

Corrí hacia él con todas las de darle un golpe, pero lo esquivó rápidamente.

-Fallaste.- se burló.- soy demasiado rápido para ti.- volví a mi posición nuevamente y esta vez dirigí mi barra a sus pies, pero cuando cambio de dirección le di en la espalda.

-Serás rápido, pero eres muy predecible.- sonreí y soltó un gruñido.

-Oh querido Chat Noir, si tan solo supieras que todo esto es una mera distracción.

-¿De que hablas?.- cuestioné viéndolo fijamente.

Luka aterrizó detrás de mí junto a Alya.

-Liberaron a mis rehenes, ¿no es así?.- miré levemente a Luka hacia atrás y asintió.

-¡Habla de una vez!.- exclamé y soltó una carcajada.

-Mandale saludos a Ladybug en el hospital de mi parte.- sonrió y me aproximé rápidamente cayendo sobre él mientras fue taba firmemente mi barra contra su cuello.

-¡Dime!, ¡¿Cómo sabes donde esta ella?!.- lo miré con enojo y sujetó la barra intentando quitarla.- ¡habla!

-Él lo sabe todo... .- sonrió y mi respiración se agitó rápidamente.

-¡Queen Bee!.- llamé a mi amiga y rápidamente hizo acto de presencia.- ¡tu poder ahora!

-¡Picadura!.- exclamó y usó su poder en el akumatizado inmovilizadolo al instante.

Quité su casco, pero no lo rompí. Se lo pasé a Luka.

-No lo rompas, necesitaremos purificar el akuma.

-Bien.

Tomé mi barra y me dispuse a salir de ahí rápidamente.

-¡Oye!, ¡¿a donde vas?!.- exclamó Alya y me volteé.

-Sabe donde está ella, debo ir al hospital.- respondí y todos me miraron.

-Espera... ¿quieres decir que el villano está en el hospital?.- cuestionó Alya y asentí.

-Voy para allá.

-Chat Noir, por algo está ahí.- se interpuso Luka.- no puedes ir.

-No la dejaré sola.- me fui rápidamente entre los techos y ellos me siguieron detrás incluida Chloe.

-¿Sabes que es una trampa no?.- habló Plagg en mi mente.

-Lo sé, pero debo protegerla.

-Querrá tu miraculous...

-Y no se lo daré, voy a enfrentarlo y ganaré. Más le vale No le haya tocado ni un pelo a Marinette o será hombre muerto.

Plagg no respondió más y aceleré el paso por los tejados, sentía que en cualquier momento mi corazón se saldría del pecho. Pensar en que Marinette estaba en peligro, pensar en que mi hijo estaba en peligro me provocaba una enorme angustia.

~Marinette~

Estaba viendo por la ventana cuando oí un fuerte estruendo venir de afuera, a los pocos segundos una chica de cabello castaño entró a mi habitación completamente agitada.

-¿Quien eres tu?.- pregunté y se acercó rápidamente a mi.

-No hay mucho tiempo de explicar, debo sacarte de aquí.- se aproximó a un rincón de la habitación donde había una silla de ruedas.

-¿Qué?.- cuestioné sin comprender.- ¿por qué?

-Marinette, debemos salir de aquí por el bien tuyo y de tu hijo.- me miró fijamente.- confía en mi, soy amiga de Luka y Adrien.- asentí y me ayudó a quitarme las agujas posandome en la silla de ruedas.

-¿Al menos me dices tu nombre?.- abrió la puerta y miró por ambos lados volviendo hacia a mi y poniéndose detrás para empujar la silla.

-Fanny, me llamo Fanny.- salimos de la habitación y aceleró el paso por un enorme pasillo, pero frente a nosotros apareció una enorme sombra y Fanny se detuvo rápidamente dando la vuelta.

-¡¿Qué es eso?!.- pregunté asustaba viendo detrás cuando comenzó a seguirnos.

-¡Si lo supiera no estaría corriendo ahora!.- exclamó abriendo una de las puertas al final del pasillo.- ¡lo único que se es que necesitaré terapia después de esto!

Se detuvo de golpe nuevamente al ver otra sombre frente a nosotros la cual se acercó y la tomó por el cuello.

-¡No!, ¡sueltala!.- intenté golpearla, pero solo la atravesé.- ¡Fanny!.- se estaba retorciendo y la sombra que venía detrás de nosotros me atrapó.

La sombra que tenía a la chica la arrojó hacia una pared y ella intentó levantarse.

-M-marinette... corre...

-¡Fanny!.- grité pero la sombra me sacó de ahí rápidamente.- ¡sueltame!.- me intenté soltar, pero a penas podía moverme aún y era demasiado fuerte para mi.

La otra sombra apareció nuevamente cargando a la chica inconsciente en su hombro.

No entendía lo que estaba pasando.

Llegamos a la azotea del hospital, vi a cuatros sombras sujetando en el aire a cuatro hombres, había un anciano, dos rubios y Nino, todos y cada uno con sus ojos vendados al igual que sus bocas. Estaban suspendidos en el aire próximos a ser sueltos en el vacío del edificio.

Al centro había un sujeto con un traje morado y una máscara plateada, y frente a él en el concreto una camilla con una chica, conectada a máquinas por todos lados.

-Marinette.- habló el de traje morado y los cuatro hombres sujetos por lados su sombras se removieron en sus lugares.- veo que casi te escapas.- hizo una seña a la sombra que cargaba a Fanny y esta la dejó en el suelo, no se movía.

-¿Quién eres tu?, ¿qué es lo que quieres?

-Estoy esperando a alguien.

-¿A quién?.- solté débilmente y me comenzó a doler enormemente la cabeza.

-Realmente no recuerdas nada... lamento lo de tu accidente.

-¿Qué sabes de mi accidente?.- pregunté y se acercó a mi.

-¿No lo recuerdas?.- lo miré fijamente en silencio.- hiciste un acto muy noble, pero jamás pensé que se me saldría de las manos.

-No entiendo que quieres decir.

-Sólo intento disculparme contigo, pero eso ya no importará. Quiero que sepas que no es mi intención dañarte, no es mi intención dañar a nadie.

-¿Entonces que es esto?.- miré a los sujetos detrás de él y suspiro.

-Necesito esto para negociar y tu serás lo más preciado para conseguir lo que necesito.

-¿Por qué yo?

-Porque él te ama.

-¿De quien hablas?.- pregunté aún sin comprender y la sombra se elevó poniéndome detrás de él sujeto de traje al centro de todos los demás.

Miré hacia abajo y podía ver las luces de las calles y los autos, el miedo me invadió al sentir mis pies en el aire.

-De él.

Sentí un fuerte golpe frente a mi y alcé la vista rápidamente encontrando a un hombre con un traje de gato y cabello rubio. Sus ojos hicieron contacto conmigo al instante, eran verdes muy brillante y sus afiladas pupilas se movían de un lado a otro observándome.

Se puso en posición de ataque frente al sujeto de traje morado sujetando una barra de metal con fuerza.

-Sueltala o juro que te mataré con mis propias manos.- habló haciéndome estremecer por sus palabras.

-No creo que quieras que caiga al vacío, ¿quieres probar si puedes alcanzarla antes de tocar el suelo?.- alzó su mano y la sombra que me sujetaba aflojó su agarre.

-¡No te atrevas!.- habló el rubio apuntandolo con su barra.- ya le quitaste lo que querías, ahora dejala en paz.

-Te equivocas.- habló esa voz robotica.- sin ella, tu no harás lo que necesito.

-Con o sin ella yo no haré nada para ti.

-Entonces no te importará que tu padre, tu mejor amigo, tu primo y tu querido maestro mueran.- alzó ambas manos y las sombras a mis costados sujetaron a los hombres sólo de sus manos.

-¡No!, ¡detente!.- exclamó y los hombres se removieron intentando hablar, pero no se les entendía nada al tener sus bocas cubiertas.

-No puedes salvarlos a todos, pero si me das el anillo te prometo que no lastimaré a nadie.

-Deja ir a todos y te daré lo que quieres, de lo contrario no haré nada.

-Creo que eso no es posible, nada me garantiza que lo harás si los libero.

Él gato soltó un bufido y luego bajó su vista a la chica en la camilla.

-¿Por qué sacaste a Bridgette?

-Porque es mi propósito.

El chico rubio a mi costado comenzó a moverse e intentar hablar, pero rápidamente fue silenciado por la sombra.

-Silencio Félix, deberías estar feliz por lo que haré.

-Quieres despertarla... .- musitó el rubio.- ¿por qué?

-Todos amamos a alguien y no soy la excepción, no hay nada que no haría por ella. Así como se que no hay nada que tu no harías por la mujer que amas.

Aparecieron unos sujetos con trajes y se posicionaron detrás del hombre con traje felino, uno tenía un traje azul, una de las chicas uno anaranjado y la otra una amarillo.

-Veo que tienes compañía.

-Que te puedo decir, este gato tiene contactos.

Mi cuerpo comenzó a fallarme y el dolor en mi cabeza no cesaba.

-Necesito... ayuda... .- musité como pude conectando mis ojos con los felinos del chico frente a mi.- ayuda...

-Debes soltarla, ahora.- intentó acercarse pero apareció una sombra impidiendoselo.- ¡la vas a matar!, ¡esta muy delicada!, ¡por favor!

-Dame el miraculous e invoca el poder ahora.

-Te sacaré de esto princesa.- me miró con completa preocupación.- lo prometo.

-Adrien... .- musité y mis ojos se cerraron.- eres Adrien...

-¡Se fuerte Marinette!.- gritó, pero no podía abrir mis ojos, me sentía muy cansada.- no hagas esto.

-Si no haces lo que te digo ella morirá.

-¡Cataclismo!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro