Nada de lo que pase en este especial influirá en los demás episodios.

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La nieve caía en copos, el frío era alto, por todas partes habían decoraciones verdes, rojas y doradas y demás.

Era la mañana de 24 de Diciembre en Auradon, el espíritu de navidad era más alto que nunca.

Lonnie abrió somnolienta los ojos y pestañeó un par de veces al sentir el sonido su alarma de su celular.

La apagó para después sentarse en la cama y estirándose.

—Buenos días Jane—dijo Lonnie, pero como acababa de despertar, su voz estaba algo ronca.

Jane gruñó—no quiero ir a la escuela.

—Hoy no hay escuela, es víspera de navidad—dijo Lonnie haciéndose una coleta.

—Claro víspera...víspera...¡Mi aniversario de mi primer beso con Carlos! ¡Llegaré tarde!—exclamó Jane levantándose de golpe, tomando la ropa que dejó en una silla y entrando rápidamente al baño.

Lonnie rió un poco y negó con la cabeza.

La navidad era la festividad favorita de Lonnie desde siempre, le encantaba la nieve, pasar tiempo con la familia y los seres queridos, también porque la navidad le traía muchos buenos recuerdos de su infancia.

A la hora de una cita con Carlos, Jane se demoraba muuucho tiempo en arreglarse, así que Lonnie esperó como una hora asta que Jane al fin salió del baño.

Su pelo estaba tomado en una coleta baja atada por un listón celeste claro. Llevaba una bufanda azul celeste rodeando su cuello y unas orejeras que de adorno llevaba unas orejas que simulaban ser de perro y era de color celeste cielo, resaltando los ojos de Jane. También llevaba un poncho del mismo color que el listón con algunos detalles blancos y unos pompones blancos colgando de este. Bajo el poncho llevaba una camiseta negra manga larga. Llevaba una falta del color del poncho que llegaba a la altura de las rodillas, abajo de esta llevaba unas calzas negras largas y por último unas largas botas marrones.

—Ya era hora—dijo Lonnie

—Como me veo—dijo Jane viéndose al espejo—¿no es mucho celeste? ¿Me hace falta más negro? ¿Me pasé con las orejeras?

—Tranquila, te ves genial, dejarás a Carlos babeando

—No se, siento que no me veo lo suficientemente bien para el

—Jane, Carlos te va a adorar, te veas bien o no, además, te apuesto mi orgullo a que te dirá que te ves más hermosa que nunca—dijo Lonnie sonriendo

—Wow, si apuestas tu orgullo debes estar hablando en serio

Lonnie se acercó a Jane y puso una mano sobre su hombro—siempre lo hago, y si no te molesta, debo cambiarme, que hoy yo también salgo.

Jane sonrió pícaramente.

—No lo malinterpretes, es que como todos saldrán hoy con su pareja yo...salgo con Jay, o sea, no es que sea mi pareja pero...ya sabes

—Ajá—dijo sarcásticamente Jane

Lonnie rodó los ojos y entró al baño al cambiarse.

Se demoró en salir básicamente mucho menos de la mitad del tiempo que tardó Jane en estar lista.

Lonnie llevaba el cabello suelto con un cintillo rosa pastel que tenía a un lado un moño azul. Llevaba un abrigo rosa largo que llegaba asta la altura de sus rodillas con botones azules y abajo llevaba unos pantalones color negro y unas botas largas color rosa oscuro. Era algo simple, sin embargo así se robaría la mirada de muchos chicos.

Al salir se escuchó unos cuantos golpes en la puerta.

—Yo abro—dijo Jane

Jane abrió y se encontró a Carlos con un ramo de rosas azules.

—Carlos—exclama felizmente Jane.

—Feliz aniversario Hadita—dijo Carlos entregándole el ramo a Jane y después le plantó un tierno y largo beso en los labios y luego se separan por falta de aire—tan bueno como el primero.

—Te amo

—Y yo a ti, por cierto te ves más hermosa que nunca—dijo Carlos mirando a Jane de pies a cabeza

Lonnie sonrió sabiendo que tuvo razón.

—Awww—dijo con ternura Jane y se puso de puntillas para besar los labios de su amado, aunque Carlos tuvo que agachar su un poco la cabeza ya que Jane es mucho más bajita que el.

—Bueno ya salgan de aquí, antes de que me maten por exceso de ternura —bromeó Lonnie

—Tienes razón, nos vemos a la noche Lon—se despidió Jane

—Adiós, diviértanse—se despidió Lonnie

Al cerrar la puerta Lonnie se miró al espejo y respiró profundo.

—Hoy será una gran navidad, lo puedo sentir.

Y valla que Lonnie tenía razón ¿porque? Pues ya lo sabrán más adelante.

Lonnie siente unos golpes en la puerta que la hacen salir de sus pensamientos. Sabiendo que es Jay, Lonnie se aparta unos mechones de cabello que había en su rostro y va a abrir la puerta.

—Hola Lo...wow—dijo Jay hipnotizado por la asiática, casi se le caía la baba.

Lonnie rió—Hola Jay, ¿vamos?

—Vamos—respondió.

Jay y Lonnie salieron de la preparatoria, Lonnie le tenía una sorpresa.

—¿A donde me llevas?—preguntó Jay.

—Ya lo verás—dijo divertida Lonnie

Jay y Lonnie llegaron al bosque , pero debido a la época parecía un bosque hecho de hielo, la nieve estaba sobre las ramas de los árboles y sobre todo lo que era césped.

—Adivinare, ¿vamos al lago encantado?—preguntó Jay reconociendo aquel camino tan familiar.

—Si, el lago está congelado, así que patinaremos—dijo Lonnie

—¿Patinar?—pregunto Jay parando en seco—vamos Lonnie, no se patinar y lo sabes.

—Ay vamos, ¿no tienes espíritu navideño?—reclamó Lonnie

—Lo tengo, pero mi versión de espíritu navideño no implica que me duela sentarme por caer repetidas veces sobre mi trasero encima el hielo.

—Porfa—suplica Lonnie haciendo cara de perrito mojado

—No...te...debo...mirar...a los ojos—dice Jay mirando a un lado, ver a Lonnie hacer esa carita era definitivamente su eterna debilidad. Sin embargo Lonnie no desistió con su "arma"—bien, me rindo, patinaré contigo—Lonnie soltó pequeño chillido y dió un salto.

Finalmente llegaron al lago el que, como dijo Lonnie, estaba completamente congelado. Ambos se pusieron los patines y Lonnie fue la primera en entrar al hielo.

—Vamos Jay, inténtalo

—...Si tu lo dices.

Jay dió un paso en el hielo, pero eso bastó para que se resbalara y cayera de cola al piso, provocando que Lonnie se burlara de el.

—No te rías—dijo Jay haciendo puchero.

—Perdón perdón—se disculpó Lonnie limpiándose una lagrima de risa—ven, te ayudaré, agarra mis manos

Jay la obedeció y se agarró de ambas manos de Lonnie y levantándose del hielo.

—Solo intenta seguirme—dijo Lonnie empezando a patinar arrastrando a Jay con ella.

Lonnie patinaba por todo el congelado lago tomando ambas manos de Jay para guiarlo, Jay constantemente se tambaleaba o se caía pero aún así Lonnie en ningún momento lo soltaba.

Finalmente cuando Jay pareció estabilizarse más o menos, Lonnie le soltó una mano, sin embargo, seguía agarrando firmemente la otra.

—No está tan mal ¿cierto?—dice Lonnie mirando a Jay y sonriendo.

—De hecho...no tanto.

—Bien intenta hacerlo solo—Lonnie, sin previo aviso soltó la mano de Jay y saliendo disparado.

Debido a la repentina acción de la asiática, no le dió tiempo a Jay de prepararse, así que pocos segundos después se callo de cola y resbaló asta chocar contra una roca.

Lonnie patinó rápidamente hacia Jay.

—Lo siento enserio—se disculpó Lonnie y le ofreció su mano a Jay.

Jay tomó su mano, pero no precisamente para levantarse, jaló con fuerza su mano haciendo que Lonnie cayera al hielo, como venganza.

—¡Jay!—reclamó Lonnie, provocando la risa de Jay. Lonnie intentó levantarse pero al hacerlo se volvió a caer, clara lección del karma. Jay se levantó—oh no, no lo harás—Lonnie le jala la mano a Jay tirándolo al hielo.

Después siguieron "luchando" para ver quien iba a quedarse tirado en el piso y quien de pie, aunque era algo difícil considerando que luchaban encima de una superficie resbaladiza.

Llegó un punto donde Lonnie se puso a horcadas sobre Jay y apoyó sus manos sobre el pecho de Jay para evitar que se levantara.

—Yo gané—exclama Lonnie orgullosa. Se sintió extrañada al ver que Jay no dijo nada o se defendió al respecto.

Luego comprendió la situación, la posición en la que estaba con Jay podía llegar a parecer bastante comprometedora.

—Este...mejor levantémonos—dijo Lonnie levantándose y ayudando a Jay a levantarse.

Pasaron toda la tarde juntos, patinando, jugando riendo, asta que tuvieron que separarse, tenían que prepararse para la fiesta navideña, que se haría en el castillo de Ben.

Eran las 20:00Pm, Jay llegó al castillo de Ben, donde estaban Jane con Carlos (tan acaramelados como siempre) también estaban Doug, Gil, Uma, Harry viendo "Mi pobre angelito". Ben, Chad, Audrey, Lonnie, Mal e Evie no habían llegado aún.

—¿Donde demonios están los demás? Prácticamente nos amenazaron a muerte para llegar temprano y ellos llegan a la hora que se les da la regalada gana—se queja Harry

—Siempre, en cada víspera de navidad todos los que descienden de familias reales o pertenecen a la realeza tienen una reunión—explica Jane

—¿Pero Evie porque está ahí?—preguntó Carlos.

—Pues, ella es hermanastra de Blancanieves y además ahora que la reina malvada fue liberada de la isla, recuperó su título como reina, bueno, como ex-reina, o sea que Evie podría considerarse legalmente como una princesa—dijo Doug.

—Bien...voy a...buscar el baño—dijo Jay buscando una excusa para apartarse de los demás y pensar.

Jay se paseó por los pasillos del gran castillo de Ben, quería meditar sobre algo.
Jay planeaba algo, quería que esa navidad fuera especial, que resalte sobre las demás navidades, quería intentar dar el siguiente paso con cierta chica asiática, la cual lo volvía loco

Pasó caminando por un frío pasillo que sorpresivamente nunca había visto antes, este tenía unas cuantas decoraciones navideñas, pero lo que más llamó su atención fue que a lo largo de ese pasillo yacían pinturas de las familias reales.

Jay caminó viendo cada pintura, pasando por las pinturas de la familia Charming, la familia Beauty, la familia Beast, se detuvo al encontrar el cuadro de la familia Li, donde yacía una pintura donde estaba Lonnie junto com sus padres y su hermano mayor.

Se quedó unos segundos contemplando aquel cuadro, específicamente los ojos de Lonnie plasmados en pintura del cuadro.

Estuvo un minuto así, respiró profundo, estaba decidido, esa navidad si o si la iba a recordar toda su vida como un momento especial o como un momento vergonzoso pero si la iba a recordar, pase lo que pase.

Decidió devolverse a donde estaban los demás.

Mientras tanto, la reunión con los reales ya había terminado, duró mas de lo planeado así que Lonnie se apresuró en ir a su habitación para cambiarse y maquillarse.

Se puso un vestido rojo con mangas largas y unos cuantos detalles de copos de nieves blancos, a su cintura tenía atado un listón blanco, llevaba unas calcetas que le llegaban asta las rodillas y unos zapatos negros, y por último, llevaba un broche de muérdago en su cabello, el cual estaba suavemente ondulado.

Finalmente logró llegar a la fiesta.

—Bien, ahora que estamos todos empecemos la cena—anunció Ben.

Todos se sentaron en las sillas de la larga mesa, Jay se sentó apropósito a la derecha de Lonnie, aunque ella no parecía haberse inmutado, ya que estaba conversando con Audrey, la cual estaba a su izquierda.

—¿Me dan su atención?—dice Ben golpeando una copa con un tenedor llamando la atención de todos.

—Les quería agradecer por venir a esta fiesta de navidad—dijo Ben parándose de su asiento—en esta ocasión no solo importan los regalos, o la cena, si no la amistad, el compañerismo, el amor. Es una ocasión para pasar tiempo con aquellas personas que amas, que estuvieron para ti siempre—conforme Ben seguía hablando, por debajo de la mesa, Lonnie acercó su mano a la de Jay y la apretó ligeramente—con esas personas, con las que tienes un fuerte lazo de amistad, o para ciertas personas, algo más—Jay sonríe y aprieta de vuelta la mano de Lonnie— todo eso celebramos hoy, y por estar todos reunidos acá, un brindis.

Todos levantan sus respectivas copas y brindan por esa navidad.

Después de una gran y deliciosa cena, era hora de abrir los regalos. Anteriormente los chicos decidieron hacer el "amigo secreto" debido a que eran muchas personas como para comprar un regalo a cada uno.

—Sigo yo—dijo Jay levantando la mano y después sacó un regalo de debajo del árbol.—este va para la persona asiática favorita de todos acá.—dijo mirando a Lonnie y esta misma sonríe ante su comentario.

—¿Jackie Chan?—preguntó Chico, Lonnie lo fulminó con la mirada.

Jay lo ignoró y se acercó a Lonnie, la cual estaba sentada en el piso. Jay se arrodilló y le entregó el regalo—feliz navidad.

Lonnie abrió cuidadosamente el regalo. Adentro había una foto enmarcada de ella y de el, específicamente del primer campeonato que ganó el equipo de R.O.A.R de Auradon Prep con Lonnie siendo capitana, a un costado había una pequeña nota que decía "para la mejor capitán que se podría pedir-firma: Jayden"

—Se que quizá esperabas algo mucho mejor pero...—Lonnie no dejó terminar a Jay ya que se abalanzó sobre el casi tirándolo al piso dándole un gran significativo abrazo

—Gracias Jay—dijo Lonnie aún aferrada al cuerpo de Jay.

Ese regalo significaba mucho para ella,ya que ese momento remarcado en el cuadro era el momento en el que, por primera vez, ella demostró ser una verdadera líder que lleva su equipo a la victoria.

—En serio gracias—repite Lonnie.

Jay le corresponde el abrazo, se quedan así algunos segundos pero se tuvieron que separar para seguir con los regalos.

Después de que todos los regalos fueron entregados a Mal se le ocurrió la brillante idea de sacar un muérdago de su bolso.

—Oh, beniboo—canturrea Mal sacudiendo el muérdago en su mano—mira lo que tengo.

Ben sonríe y se inclina hacia Mal con la intención de besarle sus rojos labios, pero ese beso es interrumpido.

—Con permiso, gracias—dijo Evie arrebatándole el muérdago y poniéndolo encima de ella y Doug.

—¡Ey! Eso era mío—reclama Mal

—Exacto, ERA—dijo Evie. Tomó a Doug de la camisa para besarlo, pero antes de que sus labios se tocaran, Carlos le arrebata el muérdago.

—Los menores primero—dijo Carlos mientras tenía a su hadita agarrada de la cintura.

—La belleza antes que la edad—dijo Chad quitándoles el muérdago y lo puso sobre el y Audrey, la cual estaba sentada sobre las piernas de su príncipe.

—Exacto, por eso nosotros empezamos—habló Harry quitándoles el muérdago con su garfio y luego lo pone sobre el y Uma.

—¡No se vale!, yo traje el muérdago, yo debería comenzar—reclama Mal

Todas las parejas empezaron a discutir sobre quien se iba a besar bajo el muérdago primero, Lonnie veía la escena junto con Jay, mientras reían.

—¿Me acompañas a la cocina?—le pregunta Lonnie a Jay, el asiente y sigue a Lonnie.

Llegaron a la cocina fuera de todo el alboroto de la sala y Lonnie sacó una botella de agua del refrigerador y luego la abrió.

—Es gracioso ver como los chicos pelean por esas idioteces—comenta Lonnie y luego le da un sorbo a su agua.

—Y que lo digas—respondió Jay riendo y sentándose sobre una pequeña isla de la cocina. Lonnie se sienta a su lado.

—¿De donde sacaste la foto?—preguntó Lonnie cambiando de tema.

—Digamos que tuve un poquito de ayuda—dijo Jay

—¿De quien?

—Eso no es relevante—dijo rápidamente Jay y Lonnie rió—admito que tu regalo fue de última hora, lamento que haya sido tan simple, seguramente tenías altas expectativas.

—Jay no te sientas mal por eso, la navidad no se trata de los regalos que des, se trata sobre pasar tiempo con tus seres queridos, además, estoy más que satisfecha con el regalo.

—¿Lo crees realmente?

Lonnie se inclinó hacia Jay, acortando la distancia entre sus sonrojados rostros.

—Si Jay, realmente lo creo—Lonnie se sacó su broche de muérdago y lo pone sobre ella y Jay, luego se acercó más a Jay y depositó un beso en su mejilla—te quiero

Ese "te quiero" no era uno que decía "estoy enamorada de ti" más bien uno que decía "te aprecio" como ese te quiero que le dices a tu madre o a tus hermanos, Jay comprendió eso, sin embargo, muy en el fondo de Lonnie, ella expresó algo más que solo aprecio.

Jay sonríe—También te quiero, Lon—dijo y ambos se abrazaron, olvidando completamente lo que ocurría en su entorno.

El objetivo de "dar el siguiente paso" para Jay no funcionó, aunque, su objetivo de que esa navidad fuera inolvidable sin duda lo cumplió.—feliz navidad, Lonnie.

—Feliz navidad, Jay.

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Este es mi regalo de navidad :3.

Esperen, ¿No es navidad? ¿ya es 31? Rayos ;-;, pos...este es mi regalo de año nuevo :D(?

Pero bueno, solo les recuerdo que todo lo que pase acá ocurre en este especial pasa alternativamente a la historia original, por lo tanto, en los capítulos comunes de After R.O.A.R nunca ocurrió el beso, ni la confesión, ni nada :3

Nos vemos el próximo año ;).

Se despide Consuelo3456~