Ian y el resto no eran constructores de barcos. Sin embargo, él diría que habían hecho bastante bien arreglando el barco, sin mencionar que no hubo muchos daños. Bert tenía un poco de conocimiento en esta área y era él quien les decía a cada uno de ellos qué hacer.

Aún así, Ian tomó nota de que la nave se examinara correctamente en un futuro próximo. Tan pronto como conozcan a un experto en esto.

Con tantas cosas que hacer ahora, le costaba pensar en qué hacer primero.

Sabía que Dragon probablemente lo encontraría pronto, cortesía de Yu, quien sospechaba que trabajaba para el ejército revolucionario. Pero no quería conocerlo antes de confirmar lo que su padre le había dicho en su isla sobre la 'D' y los dragones celestiales.

Para hacer eso, tenía que encontrarse con Garp y Sengoku lo antes posible. Pero estaba seguro de que no le dirían nada sin que él hiciera algo por ellos a cambio. Así que ya había planeado algo para eso.

En este momento estaba sentado en la cubierta del barco y mirando al cielo, mientras sus pensamientos vagaban.

Bert estaba leyendo un libro para variar. Stella se estaba relajando en una silla y Robin entrenaba con Elene.

Los dos habían estado perdonados por un tiempo. Aunque su lucha fue sin armas y sin habilidades de fruta del diablo. Fue un combate puramente desarmado.

Una fina capa de sudor ya era evidente en sus cuerpos.

Ian sabía que estaban cerca de llegar a su destino. Isla de aliso. Quizás mañana por la mañana en el peor de los casos.

El cual supuso sería el lugar donde el dragón se encontraría con él. Considerando que era el único lugar donde podía de todos modos a menos que se arriesgara a entrar en el territorio de la gran mamá.

Así que decidió ir rápidamente a buscar la información que necesitaba. Y eso sería exactamente ahora.

"Hola, chicos ..." Ian habló un poco fuerte, llamando la atención de la tripulación. A lo que caminaron hacia él. Bert cerrando su libro, Stella trayendo su vaso de jugo con ella, y Elene y Robin usando algunas toallas que estaban cerca para secarse el sudor.

Cuando todos se acercaron, empezó a hablar.

"Han surgido cosas. Y necesito hacer un viaje rápido". Él dijo. Su tono implica que no cambiará de opinión.

Se quedaron mirando eso un poco. Antes de que Elene hablara.

"¿Qué pasa con los prisioneros que estamos cazando?" Ella, como el resto, asumió que Ian quería decir que todos ellos tendrían que hacer el viaje. Lo que significaba que dejarían a los fugitivos de impulsos.

"Oh. Seguirás yendo allí. Me refería solo a mí." Respondió al notar el problema.

"Necesito reunirme con Garp y Sengoku y confirmar lo que mi padre había dicho antes de conocer a Dragon", dijo Ian. No iba a ocultar nada a su tripulación.

"También está el hecho de que necesito la ayuda de Garp y Sengoku en el futuro, y esto iría más allá". Ian, haciéndoles el favor que tenía en mente, haría que ambos abandonaran los marines por completo.

Asintieron con la cabeza como entendieron.

"Está bien", dijo Elene con una pequeña sonrisa.

"Tengo confianza en ustedes, y esos dos nunca pueden ser una amenaza para ustedes, así que si no regreso a tiempo, son libres de hacer el trabajo ustedes mismos", dijo Ian. Luego, cuando mencionó la palabra trabajo, miró brevemente a Bert, antes de volver la mirada.

Bert se las arregló para entender lo que significaba mientras le devolvía el asentimiento. El deshacerse de ellos le quedaría a él. Ian y él habían tenido esta conversación antes. Y le había asegurado que matar gente mala no era un problema para él. De acuerdo, Stella era igual en eso, pero Ian preferiría que lo hiciera él mismo, o en el caso, no podría, al menos Bert.

"Si conoces a Dragon, asegúrate de llamarme pase lo que pase," les dijo Ian con firmeza.

No hubo pruebas de que el dragón no atacará a su tripulación cuando vea que no está allí, así que les recordó que lo llamaran. Aunque todo esto era solo por si llegaba tarde a regresar.

Cuando asintieron, Ian se puso de pie, abrazó a Elene y Robin, antes de que se hiciera a un lado y se concentrara antes de ser envuelto en sombras que partían de sus piernas hasta cubrir todo su cuerpo. Y luego las sombras se desvanecieron y con ellas Ian.

Simplemente negaron con la cabeza ante la pantalla antes de que cada uno de ellos reanudara lo que estaba haciendo antes.

Bert volvió a su asiento y empezó a leer su libro de nuevo.

Stella dejó el vaso a un lado y sintió ganas de tomar una pequeña siesta, así que se acostó en la tumbona.

Mientras tanto, Elene y Robin todavía estaban de humor para más entrenamiento.

"¿Quieres continuar?" Preguntó Elene.

Robin asintió.

"Sí, por supuesto." Ella respondio.

"Bueno, vayamos a la parte de atrás, puedo ver que la niña quiere dormir... y no la molestará" Elene negó con la cabeza mientras decía.

****

Mientras tanto, Ian resurgió de la sombra de Garp.

Parecía estar en una habitación con un escritorio, sillas y una mesa. Cuando se volvió hacia un lado, encontró que Garp y Sengoku estaban allí.

Ambos estuvieron en guardia hasta que las sombras se desvanecieron y vieron que era Ian.

"¿No podrías llamar primero?" Sengoku se quejó.

Mientras tanto, Garp solo se rió.

"Ha pasado un tiempo, mocoso", dijo riendo.

Ian asintió.

"De hecho fue." Él dijo.

"Entonces, ¿qué te trae por aquí?" Sengoku fue directamente al tema. Estaba claro que no le agradaba Ian.

"¿Qué isla es esta?" A cambio, Ian lo ignoró, lo que hizo que aparecieran venas en la parte superior de la cabeza del anciano.

"Ex Marinford" fue declarado por Garp. Ian sabía que la base se llamaba G1 ahora o algo así. Pero por la reacción de Garp, parecía que no le gustaba.

"Entonces, ¿qué te trae por aquí, Ian?" Garp luego preguntó cuando notó que su amigo estaba a punto de explotar de ira. Él resopló divertido.

"Bien, necesito confirmar algo tuyo y Sengoku" respondió Ian.

Sengoku estaba a punto de responder acaloradamente, pero Garp levantó las manos para que se detuviera.

"Por supuesto, te daré información importante a cambio", dijo Ian.

Garp asintió con la cabeza para que continuara.

"Quiero saber sobre los que tienen la letra 'D' en sus nombres", dijo finalmente Ian.