—¿Así? —preguntó el menor terminado de hacer un ejercicio de matemáticas.

En la escuela le estaban enseñando a sumar, pero a Jimin se le complicaba un poco las matemáticas, por lo que Yoongi decidió ayudarle a repasar por las tardes.

—Bien Minnie, estás aprendiendo muy rápido.

—Es porque tengo al mejor maestro. —el menor le sonrío ampliamente volviendo sus ojitos en dos medias lunas.

—Puedes tener el peor maestro del mundo, pero el aprender está en ti.

—¿Ya podemos jugar?

—Tengo una mejor idea.

—¿Cuál Hyung?

—Deberíamos subir a tu habitación y....—Yoongi guardo silencio dándole más suspenso a sus palabras mientras el menor lo miraba fascinado, esperando con ansias lo que él mayor fuera a decir. —Dormir en tu cómoda cama.

Jimin frunció ligeramente su ceño. —Pero prometió jugar conmigo si hacia bien los ejercicios que tenía de tarea.

—No recuerdo esa promesa. —comentó el mayor colocando sus brazos sobre la mesa apoyando su cabeza en estos.

—¡Hyung! —Yoongi se levantó de golpe casi cayendo de la silla.

—Jimin, mañana jugamos lo prometo.

El menor hizo un puchero al mismo tiempo que sus ojos se cristalizaban amenazando con soltar lágrimas en cualquier momento.

—Noooo...—se quejó el mayor, sabía que era inútil querer resistirse a esa carita que ponía el menor. —Bien jugamos un ratito, pero después me dejarás descansar hasta que vengan por mí.

El menor sonrió y se apresuró a guardar sus cosas, pequeño chantajista pensó el mayor, sabía perfectamente que Jimin no lloraría, al igual que el menor sabía que su Hyung no le diría que no cuando hacía sus pucheros.

Ambos niños salieron al jardín ya que Jimin tenía unos columpios que le encantaban, le gustaba columpiarse en ellos cuando andaba triste, o feliz o en cualquier momento, el menor imaginaba que volaba cuando subía y regresaba solo para tomar impulso para llegar cada vez más alto.

—Hyung ¿Por qué no se está columpiando también?

—Lo hago, me estoy meciendo lentamente de atrás hacia adelante.

—Pero sus pies no deben de tocar el suelo. —el menor rápidamente se detuvo para bajar del columpio, colocándose detrás del mayor. —Dejé que lo ayude. -comenzó a empujar a Yoongi para que se pudiera columpiar junto a él, pero el mayor no hizo ni el más mínimo esfuerzo por moverse. —No lo hace bien. —se quejó el menor.

—Lo siento Minnie, pero hoy no tengo ánimos de jugar.

—¿Se siente bien Hyung? —preguntó Jimin parándose frente al mayor.

—La verdad no pequeño.

—¿Qué le pasa? ¿Está enfermo? —Jimin ladeó su cabeza tratando de descifrar que podría tener su Hyung.

—Me podría considerar como enfermo.

—¿Por qué lo dice Hyung?

—Creo... creo que me gusta alguien.

Al escuchar eso Jimin no pudo evitar sentir una presión en el pecho, ¿Quién sería él o la afortunada que tuviera la atención de su Hyung?

—¿Y usted cree que él o.... ella sienta lo mismo?

—No lo sé, pero me conformo con verlo todos los días.

Así que es él, pensó Jimin, en esos momentos el menor quería ponerse a llorar, no quería perder la atención de Yoongi, le gustaba mucho estar junto al mayor, que lo ayudara con sus tareas a pesar de que él tenía las suyas, que jugara con él, aunque tuviera que usar su carita especial o cuando se quedó a dormir con él y le ayudó a ya no tenerle miedo a la oscuridad.

—Espero que le corresponda Hyung. —comentó el menor agachando su cabeza, no quería que Yoongi se diera cuenta que estaba a punto de llorar.

—Yo también lo espero. —suspiró el mayor mirando al menor.

Al notar que Jimin seguía parado frente a él sin decir nada se levantó del columpio para acercarse al menor, lo sujeto por detrás y comenzó a hacerle cosquillas, Jimin comenzó a reír y trató de separarse del mayor, ambos terminaron en el suelo mirando al cielo, Jimin tenía su cabeza apoyada en el brazo del mayor y no pudo evitar suspirar.

—Lo quiero mucho Yoongi Hyung.

—Yo también te quiero mucho Minnie. —acerco más el menor a su cuerpo haciendo que Jimin apoyara la cabeza en su pecho. —No sabes cuánto te quiero.

Y Jimin en ese instante quiso creer que había más detrás de ese "te quiero".

☀️

Yoongi se encontraba plácidamente dormido en su cama tapado con una manta roja que él tenía y era su favorita, cuando él dormía era mejor no despertarlo porque su humor no era demasiado bueno.

La puerta de su habitación se abrió dejando paso al menor de mejillas regordetas que al mirar a su hyung acostado no dudó en subirse a la cama quedando frente al rostro del mayor.

—Yoongi Hyung, despierte. —movió el cuerpo del mayor, pero este no dio indicios de querer despertar—-Hyung. —siguió insistiendo el menor, con una de sus manos abrió uno de los párpados de Yoongi, el mayor solo retiró su mano y se tapó la cara con la manta, el menor hizo un puchero ante la acción de este. —Lo prometió.

—Minnie. —el mayor destapó su rostro. —Ven aquí. —el menor se acercó a Yoongi quien aprovechó para sujetarlo abrazándolo fuertemente, tapo al menor con la manta y se apoyó en el pecho de este como si fuera una almohada.

—¡Hyung! ¡No, usted prometió que me enseñaría!

—No recuerdo haber prometido nada. —protestó con los ojos cerrados.

—¡Hyung siempre me dice eso! ¡Lo prometió!

—Agh mocoso. —bufó.

De mala gana se levantó de su cómoda cama y busco sus zapatos, para después colocárselos.

—¿Duerme con ropa para salir? Pensé que tenía pijama.

—Te estuve esperando y tardaste mucho por eso me dormí.

—Solo tarde 15 minutos.

—¿Y que querías que hiciera en esos 15 minutos?

El menor volvió a hacer un puchero inflando más sus mejillas, Yoongi le sonrió acercándose a él, cargo al menor como si de un costal se tratara y comenzó a caminar para salir al patio trasero.

—Hyung va a tirarme.

—Nunca te dejaría caer Minnie. ¿La trajiste?

—Si hyung.

—Bien.

❄️

—No...no me suelte Hyung.

—Tranquilo, mira solo tienes que seguir esa línea mientras mantienes el equilibrio.

Jimin pedaleo despacio mientras que Yoongi lo sujetaba del asiento, avanzaron poco a poco, repitieron el mismo recorrido al menos unas 7 veces y en la vuelta numero 8 Yoongi soltó al menor sin que este se diera cuenta.

—¡Lo haces muy bien Minnie! —le gritó al menor cuando este ya iba a mitad del recorrido.

—¡Hyung me soltó!

—¡Concéntrate en el canino! ¡No me mires a mí! ¡Jimin te vas a....!

El mayor corrió hacia el menor ayudándolo a levantarse, por suerte había sido el susto y el menor no tenía ningún rasguño.

—Me soltó. —se quejó el menor cruzándose de brazos una vez que estuvo de pie.

—Pero tú solito lograste andar en la bici.

—Hyung malo. —el menor se alejó de Yoongi ligeramente molesto.

—Minnie. —se acercó abrazando al menor por detrás. —No te enojes con tu hyung.

—Dijo que no me soltaría.

—Pero aprendiste a andar por unos momentos, solo no debes perder la concentración en el camino y serás imparable.

—Aun así, hyung me mintió. —el mayor beso la mejilla del menor y este no pudo evitar sonrojarse. —No haga eso.

—¿Me perdonas?

—No.

—Okey. —comenzó a dejar muchos besos sonoros en la mejilla de Jimin, causando que el menor riera.

—Está.... ya... lo per...do perdono, pero pare. —decía el menor entre risas.

—Vamos a dar un paseo Minnie.

El menor sonrío y ambos subieron a sus bicis. Esa tarde Jimin se divirtió mucho con Yoongi, se portaba tan bien con él y le ayudaba a aprender cosas nuevas, sin darse cuenta Jimin comenzaba a sentir un gran afecto por el mayor que aún no podía describir o mas bien a su corta edad aun no era consiente de ese gran sentimiento.

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Adoro el Yoonmin 💕
🧡Gracias por leer🧡