XXXI
Tengo tantas ideas para este fic, tiene tanto potencial y yo como naca lo dejé en el abandono, perdonen, pero ya venimos con todo 👹👹👹👹
COMENTEEEEEEN.
.
Ni-ki miraba a Sunoo mientras este hablaba con la mesera para pedir el almuerzo, él era tan lindo, su sonrisa era tan angélical, su forma de hablar, el gesto con sus manos, la forma en que sonreía cuando se equivocaba al hablar.
Su silueta en la sombra, sus piernas que se cruzaban al sentarse, sus espesas pestañas que abanicaban el aire al pestañar.
No supo cuándo, pero se dió cuenta tarde.
Cuando Sunoo se tiñó el pelo de rosa, le gustaban las chicas con esa característica, cuando se enteró que a Sunoo le gustaba pintar, le gustaban las chicas apasionadas por el arte, cuando Sunoo reveló sus pecas, le fascinaban las chicas con esas manchitas en el rostro, cuando Sunoo expresó su amor por el romance, le empezaron a gustar las chicas románticas y femeninas.
Le gustaba Sunoo, desde hace tanto, talvez más de lo que Sunoo le empezó a gustar Ni-ki.
-¿Está todo bien?- Sunoo preguntó, le había preguntado a Ni-ki si quería algo más para ordenar.
-A-ah... ¿Cómo?
-Que si quieres algo más, para ordenarlo ahora.
-No, con eso es suficiente.
-Bueno, entonces eso sería todo, gracias- Sunoo le dijo a la chica con una sonrisa y esta se fue con su orden ya tomada.
Ni-ki pensaba que ya todo estaba bien, o que faltaba poco para que lo esté y Sunoo pensaba que solo era el principio de las tantas cosas que tenían por arreglar.
-Creo...- Ni-ki iba a decirlo -que te queda muy bien el café.- pero no lo dijo.
-Gracias- Sunoo le sonrió.
Ni-ki quería decírselo, pero talvez arruinaría el momento, y eso, Sunoo estaba siendo flexible al darle una oportunidad más, si arruinaba esto, probablemente no podría estar más a su lado.
Pero la comida llegó, interrumpiendo sus pensamientos, obligándolo a dejar de pensar en qué pasaría si lo dijera.
Si dijera que te amo.
.
.
-¡Mira!- Sunoo, mientras caminaban hasta un parque cercano, vió un salón de patinaje, esos que son de cuatro ruedas -¿Vamos? ¿Si? ¿Si? Por favooooooor.
-Claro, iremos a donde tú quieras.
Ni-ki era feliz cumpliendo todas las peticiones de Sunoo, por más infantil, inmaduro, loco, bochornoso, vergonzoso o ruidoso que fuera, si Sunoo quería hacerlo, eran órdenes y no peticiones.
Sunoo iba a esos lugares de patinaje desde muy pequeño con su papá, hace tanto que no iba y lo extrañaba mucho, por eso mismo, cuando lo vió, sujetó a Ni-ki de la mano y lo llevó hasta dentro con emoción y mientras Ni-ki pagaba, él iba a escoger unos patines bonitos, dejando sus zapatos en el lugar correcto.
-¿Te ayudo?- Ni-ki se agachó para amarrar las agujetas de Sunoo, sin darle opción a responder.
Sunoo estaba feliz, pero por alguna razón, aún había una "espinita" que le molestaba y no le dejaba disfrutar por completo el día.
-Listo- dijo Ni-ki, elevó su vista a Sunoo, quien tenía un rostro algo melancólico.
-¿Ah?- volvió en sí -Ah... Gracias... ahm... ¿Vamos?- desvió su mirada y se paró, mejor dicho, trató de hacerlo.
Al haber pasado mucho tiempo sin patinar, no podía mantenerse de pie por mucho tiempo sin perder el equilibrio o sujetarse de lo primero que encontrara... o caer al suelo, que fue lo que pasó justo en ese momento.
En vez de que Ni-ki lo trate como el príncipe en peligro, se escuchó su risa, puede que haya sido algo cruel reírse de Sunoo, pero esa acción hizo que el menor ya no se sintiera tan preocupado por lo que pasará después, tan solo se echó a reír también.
-Ayúdame, tonto- Sunoo elevó sus manos y Ni-ki hizo caso inmediato mientras reía.
-Es que te caíste muy lindo- seguía riendo, sujetando ahora su cintura.
Ambos así, semi abrazados, caminaron hacia la pista, empezando a patinar juntos, bajo las luces "Disco" y todo el lugar ambientado en los 80 y 90, hasta la música.
-Vamos lento primero- Ni-ki dijo, él aprendió hace no tanto, por cierta chica que no quiere recordar, pero la cosa es que lo aprendió y aunque no era experto, podía girar y controlar su velocidad.
-Yo sabía hacer esto- dijo Sunoo, sujetándose fuerte de Ni-ki para no caerse -Yo antes iba AY-- casi cayó, de no ser porque Ni-ki lo sujetaba de la cintura con ambas manos, mientras Sunoo iba para adelante, Ni-ki retrocedía.
-Lo sé- dijo mientras Sunoo lo miraba para arriba por la casi caída.
De pronto, algo que hace algunos meses había dejado de sentir, se instaló de nueva cuenta en su pecho, solo un momento, talvez tres segundos antes de que su mente lo volviera a bloquear, pero fue lo justo para hacer que sus mejillas se calienten y esa corriente eléctrica recorra toda su espalda.
Justo en ese momento, justo en ese, no podía ser otro, la música cambió a "It's been a long long time"
¡Mierda!
Sunoo pensó, puesto que Ni-ki lo acercó a él e instintivamente cerró sus ojos, según él, no quería que pasara, pero cuando Ni-ki lo abrazó, se sintió decepcionado porque no pasó.
Se sentía como un tonto y probablemente lo era.
.
.
-Tonta cita, tonto Ni-ki, tontos patines- decía Sunoo mientras se sacaba estos, ya era hora de volver a casa y Ni-ki había ido al baño.
No quería que le gustara, no quería sentirse tan querido por él, odiaba sentirse así, odiaba sonreir cada vez que Ni-ki rozaba sus manos, odiaba Ni-ki.
¿Odio a Ni-ki?...
No, no lo hacía, pero tenía tanto miedo, ¿Y si volvía a ser como antes? ¿Y si se quedaba otra vez como la segunda opción? ¿Y si dejaba de ser una opción?
Suspiró mientras iba a dejar sus patines al mostrador, seguro Ni-ki ya estaba ahí, el baño estaba cerca de este.
Pero antes de pasar los casilleros de los zapatos, vió a Ni-ki hablar con esa chica.
Nada malo ¿No?
Se dijo a sí mismo, pero por alguna razón, se escondió de su vista mientras escuchaba su conversación.
-¿Tienes tiempo algún día?- dijo la chica.
-Ah, sí, con las vacaciones estoy libre.
Solo están hablando hasta que se vaya, solo eso.
-Eso es bueno... Ah... antes de que te vayas ¿Podemos intercambiar teléfonos?
Dile que no, por favor, dile que no.
-Claro.
¿Porqué pensé que iba a ser diferente ahora?
Cami~
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro