( Viñeta LXXIV)

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__ Zue... __

Le hablaba calmo, acariciando su suave cabello, le preocupada de sobremanera su estado anímico. __ Por favor, debes comer algo. __

La mujer se cubrió más con la manta y se hizo un ovillo en el futón. No parecía aquella demonia aguerrida que todo el mundo solía conocer.

__ Soy un demonio, no necesito de ello. __

Inuyasha chasqueó su lengua y se metió dentro de la manta con ella para tomarla entre sus brazos girandola.

Esos hermosos ojos dorados, estaban totalmente, opacados por la tristeza.
Sus parpados hinchados y su nariz roja.

Llevaba una semana llorando.

En el palacio nadie decía absolutamente nada, no volaba una sola mosca. Jamás en los siglos de su vida creyeron ver a la ama en ese deplorable estado pero comprendían que la demonia siempre había tenido una sola debilidad y esa, era su único hijo, con el mismo que habían peleado tan solo, días atrás.

__ No importa lo que sea, necesita comer. __

Ella negó y nuevamente, unas cuantas lágrimas rodaron por sus mejillas.

Extrañaba tanto a su cachorro.
Tuvo la esperanza de que quizás, regresaría a disculparse, más no fue así, aunque ello tampoco la sorprendió, después de todo, lo conocía bien.

Seshomaru era tan altanero, soberbio, orgulloso...

Tan igual a ella , tan suyo.. Su pequeño gruñón que tanto adoraba molestar.

Volvió a romper en llanto, desconsolada, al recordar su pelea con él.

Jamás, se mostró así, mucho menos ante nadie.

Se encontraba destrozada por dentro y vulnerable porque no podía perdonarse así misma por haber golpeado y amenazado a su niño.

__ Creo que a él, se le pasará el enojo. Lo conozco. Con el correr del tiempo aprendí a conocer a Sesshomaru y sé, que en algún momento, recapacitará.  __

__ No lo hará. __

__ Tsk... claro, que lo hará. Podrá ser un imbécil pero usted es su madre y eso no lo puede cambiar nada ni nadie. __

__ Él no me perdonará. __

El platinado, suspiró.

__ No sabe lo que hace. Yo nunca he conocido a mi madre y pese a que soy un adulto hay veces que necesito el consuelo, un consejo o simplemente saber que se siente estar en los brazos de mamá.  __

Tomó el rostro de su mujer. Y besó su luna.

__ Tengo fe en que Kagome lo hará entrar en razón quizás, no ahora pero con el tiempo, lo hará. Uno siempre necesita a su mamá, incluso ese idiota que tiene por hijo. __

__ No lo llames así a mi niño. También he tenido la culpa de esto. Es lógico que se haya enojado. Me he enamorado de su hermano. __

Inuyasha trató de disimular lo que esas palabras provocaban en él, creyendo de algún modo que su mujer se arrepentía de lo que ellos tenían. Sabía que estaba mal. ¿ Pero cómo callar a sus corazones ? Latían juntos con el solo hecho de mirarse.

__ ¿ Se arrepiente? __

Acarició, su varonil rostro.

__ Me vuelves loca, Inuyasha. Me haces muy felíz. __

El hanyo pese a toda la mala situación y sentirse culpable aunque no lo demostrase, solo para no hacer sentir peor a su demonia. La consentía, besando su rostro, lamiendo sus lágrimas, llenándola de besos. Sacandoles por momentos unas hermosas sonrisas entre tanto llanto pero su estado lo preocupaba. Y necesitaba hacer algo al respecto.

__ Quiero hacerla felíz, quiero amarla por el resto de la eternidad. Su sufrimiento es mío. Lo vivo en carne propia. Y me desespero al no poder hacer nada. __ Besó, sus labios.

__ Mantente cerca mío, solo ello. __ pidió , acurrucandose contra su pecho como si fuese una niña pequeña.

El platinado acató aquello besando su cabellera, acogiendola en sus brazos notando que el cansancio la había dejado rápidamente dormida.

( Ese idiota deberá escucharme)

Y con ese último pensamiento se durmió junto a su bella dama.

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__ Te gusta mucho este árbol ¿ No es así? __

La azabache se sentaba a su lado apoyando su cabeza contra el hombro de su demonio.

__ Ha sido un buen compañero a lo largo de mi vida. __, suspiró.

Veía como sus pequeños corrían alrededor, muy felices, ignorando todo a su alrededor.

Extrañaba aquellos tiempos donde, él, solía ser un cachorro y lo único que importaba era jugar y hacer travesuras quizás,  por ello todas las tardes desde que había peleado con su madre acudía a aquel árbol para meditar.

Kagome comenzó a moverse más, como buscando que la abrazara.

( que cosita más hermosa )

-- Ella es mi vida --

La levantó como si nada, atrayendola, para cubrirla como la joya más preciada, entre sus brazos.

__ Sessh... __

__  Mi humana quería mimos. __ dijo, besando su mejilla, acariciandola con su nariz como un perrito.

Sonrió, dejándose complacer. Pero ello, no quitaba la gran preocupación que sentía por su demonio.

__ He traído comida para que almorcemos juntos. Por favor, necesito que pruebes algo, esta vez. __

__ Sabes que me encuentro inapetente. __

__ Me preocupas, mi amor. Se que eres un demonio y que puedes tolerar mucho más que en un humano sin alimento pero no es el caso de que no pruebes bocado. __

Los ojos de la joven amenazaban con llorar.

( También estoy triste pero te obligo a que recapacites y dejes de hacer preocupar a nuestra hembra. Come algo aunque no tengas hambre. )

Yako tenía toda la razón. No podía seguir haciendo vivir esa preocupación constante a su mujer. Ella admirablemente no preguntó absolutamente, más nada de lo que había ocurrido con su madre y había respetado su postura. Lo acompañó cada día llenandolo de amor y él, lo único que le estaba brindando era preocupación, angustia pero ya no más.

Apartó a un lado sus rizados cabellos y depositó un beso en su nuca.

__ Comeré, solo si tú, eres mi postre. __

No podía evitar que su felicidad reaparecería. Allí estaba su candente demonio que conocía. Solo quería verlo felíz.

Ella se giró, miró esos dorados que tanto amaba y besó sus labios con suma dulzura mientras susurraba palabras cargadas de amor.

__ No sabes cuan felíz soy de tenerte. __

__ Te amo tanto mujer. __

__ También te amo amor mío. __

Toda esa felicidad fue fugaz porque un olor muy conocido para él, llegó a su agudo olfato y se enfureció al instante.

-- ¡ Maldito ! --

__ Oye, Idiota contigo quiero hablar . __

Inuyasha sabía que podía costarle la vida pero no aguantaba ver un solo día más a Irazue en ese deporable estado, si seguía así, sentía que algo malo podría llegar a sucederle y eso, no lo permitiría jamás...

Continuará ...

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Buen día, mi gente ♥️ 

Espero hayan disfrutado del capítulo. Como verán la suegra está sufriendo del mismo modo que Sessh. Quizás Inu y Kag logren hacer que ellos se reeconcilien o quizás, no.

Veremos que sucede 🙊

Les mando un fuerte abrazo de oso 🐻y sin más, nos leemos mañana 💕