( Viñeta XV)

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( Pov-Sesshomaru )

Ni yo mismo, se porque he regresado por ella. He inrrupido a altas horas de la noche. Le he obsequiado las mantas del palacio de la Luna que solo debían ser entregada a mi legítima compañera.

No se en que demonio he estado pensando y estoy seguro que ha de haberme influenciado Yako, porque no solo he terminado devorandome su apetitosa boca nuevamente.

Si no, que estoy en medio de un prado como los kamis me han traído al mundo con mi miembro tan caliente y duro que apunta al cielo como si fuese una flecha.

-- Una flecha que incrustaré en el centro de su cuerpo. --

Es tan descarada, audaz y tan condenadamente bella que cuando cae aquella tela y queda con esas vestimentas diminutamente vulgares.

Todo mi ser tiembla y mi mandíbula se tensa.

__ Ven aquí, ahora. __

Le ordeno totalmente fuera de sí, porque estoy muy enojado como jamás lo he estado antes.

Estoy enfurecido conmigo mismo.

Esta maldita y sensual humana me tiene a su merced pero no lo admitiré jamás. Lleva provocando a este Sesshomaru por varias lunas. Instandolo a tomarla como un animal , provocado por su dulce y embriagador aroma que despide, alborotando cada particula de mi cuerpo.

Quiero devorarla, comerla y enterrarme sin piedad en lo recóndito de su ser, hasta que no le queden ganas de seguir perturbando mi tranquilidad.

Sus senos sobresalen de esas llamativas telas, se ven tan apetitosos, tan suaves, que muero de deseo por llevarlos a mi boca para degustarlos, así como cada parte de su majestuoso y pequeño cuerpo .

Se contonea de una manera felina y muerde sus labios porque la muy desgraciada no ha puesto su vista, ni un solo minuto en mí, sino toda la atención se la ha llevado mi falo qué parece alegrarse y se mueve involuntariamente, saludándola.

¡Es una agonía! ¡ me está torturando! Estoy seguro de ello.

Bajo mi mano hacía mi hirviente, palpitante y dura carne, masajeandome suave, muy suave....

De arriba... a abajo... y bombeo...

Más y más...

Se siente tan bien hacerlo viendo su cuerpo ...

__ Yo quiero. __

La escucho decir y nose en que momento ha llegado hasta aquí, pero se encuentra arrodillada ante mí.

Mi pene ha comenzado a gotear. Ella abre su boca para sacar su lengua.

--¿ Qué hace? --

Quiero tomarla de su brazo y colocarla en pie para impedirle algo que está meramente prohibido.

-- ¡ Maldita Mujer!

Quedo estático al sentir su pequeña mano rodear mi erección.
Gruño como un salvaje cuando comienza a lamerle desde la base de mis testículos, subiendo muy lentamente, hasta la punta donde se detiene a dibujar círculos de una manera tan deliciosa que no puedo evitar enredar mi mano en sus cabellos y profundizar este extraño beso que hace con su inquieta lengua.

Mis caderas posevas, se mueven a un ritmo que ella lo disfruta y se come por completo toda mi masculinidad.

Mis ojos solo tienen espacio para ver su enorme, perfecto, firme y sublime trasero que se mueve junto a todo su cuerpo mientras me chupa queriéndome succionar hasta el alma y lo logra.

__ Detente. __

Nuevamente le ordeno tratando de no sonar desesperado.

Se que me ha escuchado perfectamente pero no quiere detenerse, tampoco quiero que lo haga pero ahora, es mi turno de probarla.

La jalo de sus cabellos un tanto brusco y ella queda con esa boquita traviesa abierta, llena de mis jugos y sus ojos tienen unas cuantas lágrimas.

Esa cara de ángel es solo una fachada...

Me arrodillo para quedar a su altura. Está tan agitada, tan malditamente exitada que su vagina clama por mi .

Aprieto su barbilla y entre dientes le hablo.

__Recuestate y abre las piernas. __

Lo hace sin poner pretextos, sin cuestionar y comienzo a adorar a esta humana obediente.

Desgarro aquellas telas sin problema, ella grita en respuesta.

Sus atributos quedan expuestos solo para mi deleite como debe de ser.

Mi corazón comienza a latir a prisa.

Está totalmente desnuda para mí. Tan expuesta y vulnerable.

( Solo para mí)

Y aunque me cueste admitirlo, es mejor de lo que mi mente se la ha imaginado durante tanto tiempo. No tiene comparación con nada de lo que he visto.

(Definitivamente es una deidad, no tengo dudas.)

Se que está por decir algo, pero antes que se arrepienta.
Acaricio con cuidado de herirla, uno de sus pechos. Cierro mis parpados para memorizar su suave textura y grabarla en mi memoria, necesito retener este momento para siempre.

__ Oh sessh... __

Gime, cuando jalo de su dura protuberancia qué me recuerda a una deliciosa cereza madura.

Acerco mi boca deseoso, pasando mi lengua por ella, está tibia y sensible, me deleito con tanta dulzura.

Comienza a retorcerse bajo mío y succiono finalmente, como si fuera un cachorro recien nacido mientras amaso sin piedad el otro.

__ Si... más, más...

Mis besos quedan perdidos entre el valle de sus senos y voy bajando de manera lenta, torturandola así, como lo ha hecho ella conmigo.

Y finalmente, llego...

Llego a su monte de venus. Aquel lugar sagrado y prohibido.

Es terso, suave, tan utópico, tan irreal, que por primera vez, no me creo digno de tanta divinidad.

Abre aún más sus piernas, invitándome a profanarla y no espero tan solo un segundo más.

Hundo mi rostro entre sus labios del pecado, dejándome conducir al abismo del infierno que se encuentra entre sus piernas donde este demonio, pierde la batalla y comienzo a comer desesperadamente de su dulce fruto prohibido.

Hambriento, chupo, jalo, succiono, escarbo con mi lengua lo más profundo de su orificio y mi boca se apresura en recolectar cada gota de su elixir.
Ese mismo que se ha creado solo para mí deleite y que ni siquiera el suelo es digno de sentirlo porque tan místico almíbar, solo puede ser mío, de mi pertenecía.

__ ¡Oh si, asi! ¡Sigue así, por favor!. __

--Insolente humana.--

Jala de mis cabellos y con sus piernas me encierra para que no tenga escapatoria y reciba el desborde de su incoloro manantial.
Me bautiza con sus sagradas aguas y mi paladar danza ante semejante exquisitez.

Me detengo unos segundos a observarla, a grabarme su imágen en mis retinas y fundirla allí, cuando sus piernas deciden soltarme.

Sigue agitada y me sonrie.

Con su mano acaricia mi rostro de manera dulce y aunque no quiero hacerlo, apaciguo mi mirar .

Me acomodo mejor entre sus hermosas piernas y mi miembro comienza a humectarse con sus fluidos...

__ Mnn... __

Pego más mi cuerpo contra el suyo.

Nuestras bocas están a escasos centímetros. Mis cabellos caen por los lados de sus hombros y los suyos crean una bella cortina sobre el césped.

Sus senos chocan mi torso y el calor de nuestros cuerpos se vuelven uno, erizandonos la piel, delatandonos todo lo que no podemos expresar en este agitado combate.

Está totalmente lista para ser mía.

Mi glande palpita, goteando contra su clitoris y no puedo contenerme más.

__ Dolerá. __, advierto.

Esta vez, toma con sus dos manos mi rostro y besa con cariño mis labios, saboreandolos.

__ Lo soportaré. __

Eso es suficiente para mí.

Me voy introduciendo lentamente en su tan diminuto interior que estruja mi carne de una manera atroz.

Mi alma abandona mi cuerpo cuando veo sus gestos de dolor y placer.

Yako se estremece y quiere retroceder cuando ella arquea todo su cuerpo y debo de sujetarla ante su desgarrador grito.

__ Tranquila. __

Lamo sus lágrimas y dejo que se acostumbre a mi tamaño.

Me quema, es tan ardiente que no puedo comprender como mi lado animal no la destaza viva. Porque me estoy volviendo loco, totalmente loco, mi carne crece y crece.

Me calienta tanto que sea tan diminuta  que me lastime de tal manera, que me genere un dolor tan intenso, un dolor que no puedo evitar disfrutar de sobremanera.

La acaricio, la lleno de besos y me como nuevamente sus senos.

__ Ah...

Sonrio cuando escucho el dulce sonar de sus gemidos. Le gusta que este lord le brinde caricias y que adore su cuerpo.

Siento como mueve sus caderas levemente, indicandome que está preparada para sentirme mejor.

Vuelvo a pegar mi rostro contra el suyo y esta vez, soy yo quien la besa apasionadamente, mientras mis caderas comienzan el dulce vaivén.

Entro de manera lenta, sacando solo un poco de su interior para volver a introducirme, con certeras y profundas estocadas.

__ Se siente tan bien... Tu coño es delicioso... __

__ Ah... __

La sujeto con fuerza y comienzo embestirla sin piedad, sus senos rebotan hermosamente, al compás de cada movimiento.

__ Más... más... __,suplica.

Mi pene sale cubierto de sangre y fluidos. Eso me enorgullece, me vuelve más loco de lo que estoy porque comienzo a salir de ella y meterme, tan velozmente, que el ruido de nuestros fluidos mezclados, generan una sinfonía que mis oídos jamás olvidarán. 

Es tan obscena, sus gestos son tan malditamente atrevidos y estoy más que seguro sus gritos dañarán su garganta pero nada me importa en este momento.

No me importa nada como he dicho porque paso sus piernas sobre mis hombros y me profundizo lo más que su frágil cuerpo me lo permite.
Paso la palma de mi mano por su bajo vientre, sintiendo cuan abultado está con mi miembro acunado allí.

__ ¡ Oh por kami!__

__ Dímelo... Dime que quieres que me derrame todo en ti... Que te llene con mi esencia, humana...__

Le doy brutales penetraciones, tan fuertes y profundas que jala de sus propios cabellos fuera de si.

Estoy seguro que otra obra estaría muerta.

__ ¡Si! ¡Hazlo! ¡Hazlo Sesshomaru! Córrete en mi, todo en mi... __

Clavo mis garras en sus perfectos glúteos y la embisto demencialemnte hasta que sus paredes de carnes tibias me estrujan causandome un escalofrío en mi columna vertebral, estremeciendo mi cuerpo y me dejo ir convulsivamente en su acojedor interior, llenándola de mi exclusiva esencia que solo ella, ha tenido el honor de sentir.

Nunca he experimentado esto antes pero haber alcanzado la cúspide juntos ha sido la experiencia más sublime que he tenido en mis siglos de vida, aunque no pienso admitirlo jamás.

Quiero preguntarle como se siente, no soy tan descortés con alguien que ha sido exclusivamente mía.

Pero sus ojos se han cerrado totalmente y de su boca solo salen dulces suspiros.

Ha quedado completamente exahusta y dormida.

-- Lo lógico.--

Sonrio, pese a alardear como una indecente, es una tierna cachorra.

Me salgo con mucho cuidado de ella, siento que emite un leve quejido y veo la verdadera cantidad de sangre que hemos dejado, es demasiada.

Algo en mí, se remueve e inquieta.

Aunque se que ella se encuentra bien, puedo olerla pero de todos modos, quedará débil por unos días.

La levanto del suelo y la acomodo contra mi cuerpo para luego recojer su hamakka y poder cubrirla.

Me siento con ella unos minutos, observando su frágil cuello y con uno de mis dedos lo acaricio.

Yako está ofendido porque no la he marcado. Me grita ciento de cosas indebidas y jura no volver a hablarme.

Una propuesta que no pienso desperdiciar, claramente.

A estas alturas, no me importa lo que mi bestia piense o diga.
Ya le di lo que tanto quería, lo disfruté y también sacié la curiosidad de su onna.

Debe de entender que no ataré mi vida a una hembra...

Mucho menos, a una humana...

El deseo, no es amor, eso es algo que no existe, al menos no en este demonio y Yako deberá de entender, que hasta aquí llegó con este juego....

Continuará...

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Buen día, mi gente 🩷 jajaja ahora si me tiran con la chancla, tan bien que veníamos, dirán 🤣. Bueno, pasa es que necesito al menos, algo de trama, recuerden que más adelante habrá una fiesta, antes, de todos modos pasarán cositas, en fín 🙈 está todo fríamente calculado como diría el chavo😅.

Les mando un fuerte abrazo de 🐻 y nos leemos mañana sin falta ♥️