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Capítulo 12. 10 de agosto












Takemichi entrecerró sus ojos al tener los rayos del sol pegar fuerte en sus orbes hasta que su vista se aclaró encontrándose al comandante de la ToMan durmiendo tranquilamente sobre una estructura de la azotea del hospital, como le dijo Draken al haber ido a visitarlo en su habitación luego de aquella noche del 3 de agosto.

Hoy ya era 10 de agosto.

¡Lo había logrado!

¡Había salvado a Draken! En consecuencia, había logrado salvar a Hina y a Akkun.

Estaba feliz.

Nada podía arruinar su felicidad.

—Mikey.— saludó contento el de orbes celestes.

—Sigo inquieto.— respondió levantándose de aquel lugar, dándole la espalda al menor Hanagaki.— No puedo quitarme esta inquietud...

》¿Por que intentaría Hanma causar un conflicto interno en la ToMan? ¿Por qué insitó a Kiyomasa y sus lacayos a matarlo? Y el mayor misterio de todos es... que sabías del conflicto interno y del intento de asesinato de Kenchin y te dispusiste a impedir que sucedieran.《

—¿Quien diablos eres?— preguntó Mikey mirando desde arriba a Takemichi que tragó saliva del miedo.

— Yo... yo...

—¿Y esa ropa tan patética?— se burló Mikey, cortando la tensión en el ambiente, dando un pequeño salto acercándose al menor.— aunque siempre has sido patético.

—¡¿Eh?! Esto es... pu-pues...

—Por suerte Riry si sabe vestirse bien.— habló sonriendo al mencionar al lindo orbes dorados de sus labios.— Deberías pedirle consejos Takemitchy.

El rubio rió avergonzado  y dijo.

—Si... mi primo ha insistido en cambiar mi guardarropa.— volvió a reír, acariciando su nuca, ambos volviendo hacia el interior del hospital.— aunque no me lo diga en la cara... se que también odia mi ropa... y bueno... él quiere cambiarla ya que sabe de moda y como es modelo...

—¿Cómo?— preguntó sorprendido Mikey mirando al menor Hanagaki que lo miraba confundido.— ¿Modelo?

—¿No sabías?— preguntó Takemichi que al ver como negaba, continuó.— Si, trabaja como modelo y es muy popular.

—Vaya...— murmuró Mikey llevando sus manos detrás de su nuca, mirando hacia el frente, los dos caminando por el pasillo del hospital en dirección hacia la habitación del tatuado.— Riry es increíble...

—Si, que lo es.— sonrió orgulloso el menor.

—Y por cierto... ¿Lo has visto?

—¿Eh? ¿A Ryota?

—Si, ¿Quien más?— rodó los ojos Mikey.

—No, no lo he visto.— contestó Takemichi mirando hacia arriba, recordando.— De hecho... después del 3 de agosto, se fue de mi casa... no me dijo nada.

》No lo he visto ni hablado con el desde ese día.《

—Si, lo sé.

—¿Eh? ¿Y como lo sabes?

—Porque Riry vino a visitar a Kenchin el otro día.

—¡¿En serio?!

—Sip.

FLASHBACK

—¿Por que debería estarlo?

Silencio.

Draken frunció el ceño ante aquella pregunta y la sonrisa amable que le brindaba, aunque sentía una mala sensación por parte del rubio ojidorado.

—Te noto... tenso y molesto.— se sinceró el del tatuaje.

—Oh... bueno es que me crucé con el novio de Mei.— respondió acariciando su nuca en un intento de desestresarse, ignorando el dolor en todo su cuerpo.— fui a visitarla y ese idiota estaba allí.

—Oh... ¿Ella...

—No hay ningún avance.— le interrumpió con pesar.— todo sigue igual.

—Ya veo.— murmuró incómodo.— aunque no hay que perder la fe ¿No?

—Si, estoy seguro que Meichii despertará.— murmuró Ryota mirando hacia un punto inexistente de las sábanas que cubría las piernas del rubio.— ella no me puede dejar, ella fue mi primer amiga desde que entré al bachillerato... ella es mi luz, ella es mi alegría y la persona que me hace dar cuenta que puedo lograr mis metas.

》Sin ella... estoy acabado.《

—Como tu y Mikey.— continuó Ryota volviendo su mirada al rubio ceniza que seguía durmiendo.— Eres una persona muy importante para él.

—Lo se.

—No, realmente no lo sabes.— interrumpió el Hanagaki mirando fijamente a Draken, que recordó aquel momento de derrumbe total por parte del líder de la pandilla, como se había puesto a llorar de alivio por haberse salvado el rubio con tatuaje de Dragón.— Eres su corazón Draken.

》Mikey sin ti... se perdería por completo, caería en una gran depresión, en un vacío difícil de volver a levantarse. Se que lo que te digo sonará estúpido y que claramente uno no busca que lo apuñalen, pero... ten más cuidado, cuídate mucho y cuida de Mikey.《

—Entiendo.— murmuró Draken mirando hacia el ojidorado que tenía una mirada de tristeza, esos orbes mirando a su mejor amigo durmiendo.— apenas nos conocistes y te preocupas por nosotros...

》De hecho... realmente te preocupas por Mikey, él me dijo lo que hiciste por él... lo consolaste, gracias por no haberlo dejado solo.《

—¡¿Eh?!— chilló sonrojado apartando la mirada del rubio ceniza para mirar con pánico al del tatuaje.— ¡¿Él te lo dijo?!

—Sip.— respondió confundido.— ¿Por qué te pones nervioso?

—Es que... ¿Tam-También te contó que me quedé dormido?

Ryota no tuvo que escuchar palabras ya que la gran carcajada del de tatuaje respondió su duda.

—¡No te rías! ¡Fue vergonzoso!— chilló abochornado y en voz baja continuó.— y ya basta o vas a despertar a Mikey.

El de tatuaje estaba a punto de volver a hablar intentando calmar su risa cuando el sonido del celular del ojidorado interrumpió el silencio.

—¿Todo bien?— preguntó preocupado Draken al ver la mirada oscura del mayor Hanagaki que no atendía el celular, es más lo sostenía con fuerzas entre sus manos.— ¿Ryota?

—¿Eh?— parpadeó sorprendido, volviendo en sí, bloqueando su celular.— todo bien, ya debo irme.

》Dentro de unas horas, tengo entrenamiento.《

—Si...— asintió con la cabeza Draken, viendo al ojidorado mirarlo con una sonrisa aunque sus orbes se movían hacia su amigo que seguía durmiendo.— Nos vemos, si ves a Takemichi salúdame por mi ¿Si?

—Lo haré.— respondió inclinándose hacia el rubio para luego mirar por última vez al pequeño rubio ceniza que seguía durmiendo y salió de aquella habitación.

—¿Seguirás fingiendo?

Draken vio como Mikey abría sus orbes y levantaba su cabeza para mirar hacia la dirección en donde se había marchado el ojidorado.

—¿Cómo supiste que estaba despierto?

—Duh, soy tu mejor amigo.— respondió rodando los ojos para luego sonreír ladinamente y le dijo.— ¿Cuanto escuchaste?

—Mmm...— apoyó el codo sobre el apoya brazo de la silla y a la vez puso su mentón en su mano aún mirando hacia la dirección que se había ido el ojidorado.— cuando empezó a hablar de Mei...

》Realmente deseo y espero que esa chica despierte... no me gusta ver a Riry así.《

Draken rió llamando la atención del rubio ceniza que frunció el ceño.

—¿Que?

—También te preocupas por Ryota.

—Si... ¿Por qué no lo haría?— respondió moviendo su cabeza hacia un lado.— Riry es mi amigo.

Draken negó con la cabeza.

—Yo soy tu amigo.

—Si... y Riry también.

—Pero no te preocupas por él, como te preocupaste por mi.— explicó Draken.— es diferente, el ambiente entre ustedes dos es distinto.

—¿Distinto? ¿Y eso es malo?

—¿No te das cuenta?— preguntó irritado el del tatuaje al tener la mirada confundida de su mejor amigo  sobre él.

—¿Darme cuenta de que?

—Eres un idiota.

—¡Kenchin!

FLASHBACK

—Así que mi primo estuvo aquí.— susurró el menor Hanagaki pensativamente, sin entender muy bien porqué desapareció tan de repente.

—Si y se le notaba molesto.— comentó Mikey pasando por un pasillo, cerca de la habitación de la mejor amiga del mayor Hanagaki.— y Draken dijo que tenía un moretón en el rostro y el labio partido.

—¡¿Eh?! ¡¿Mi primo está lastimado?!— gritó aterrado Takemichi.— ¿En qué momento? El sábado estaba bien.

—¡A ti te quería encontrar maldito idiota!

—¿Eh?

Takemichi y Mikey miraron confundidos hacia el frente, parando de caminar, encontrándose a dos personas. A Yui y a un chico de la misma altura que la castaña pero de cabellos negros al igual de sus ojos con cejas gruesas, mirando furioso al de orbes celestes.

—Kasamatsu, tranquilízate.

—¿Cómo quieres que me tranquilice cuando lo veo contento presumiendo ser un delincuente cuando Ryota la está pasando mal?

—¡¿Eh?!— se sorprendió Takemichi al igual que Mikey pero que éste no lo demostró.— ¡¿Mi primo está mal?!

—¡En serio! ¡¿En qué mundo vives?!— gritó furioso agarrando por el cuello al menor, que Yui tanto como Mikey intentaron apartarlo.

—Tranquilízate Kasamatsu.— advirtió Yui, sabiendo que el rubio ceniza era peligroso.— si Ryota se entera lo que pasó aquí, se enojará mucho.

—No me importa que se enoje ese idiota con nosotros.— bufó cruzándose de brazos el pelinegro.— él debería enojarse con este imbécil, pero no.

》 En cambio, se la pasa entrenando todo el tiempo. Su cuerpo no se ha recuperado del todo y tu viste esos moretones...《

—Así que... es verdad...— susurró asustándose el menor.— ¿Saben que fue lo que le pasó?

—Tu eres su primo, el está todo el tiempo contigo.— escupió furioso el pelinegro.— pero ni siquiera eso sabes...

》¿Sabes que? Realmente no te mereces a Ryota, él siempre se preocupa por ti, siempre busca la manera de ayudarte y ayudar a tu madre, trabaja, entrena y estudia duro todos los días para satisfacer sus necesidades y siempre piensa en ti, siempre busca mimarte ¿Y tú? ¿Tú qué haces por el? Nada, ni siquiera fuiste capaz de ir al torneo, ni de avisarle que no irías.《

Takemichi se congeló en su lugar sin entender muy bien las últimas palabras del pelinegro. Hasta que una fuerte puntada apareció en sus sienes provocando que se quejara.

—No comprendo.— respondió realmente avergonzado el menor.— ¿Cual torneo? ¿De qué hablas?

—¡Eres un idiota!— gritó furioso Kasamatsu queriendo realmente pegarle.— ¡Ryota te dio la entrada del campeonato de baloncesto! ¡Estuve allí, tú mismo lo agarraste y le dijiste que irías!

》¡Pero no fuiste! ¡Nunca apareciste! ¡Él te esperó hasta el último segundo antes de que arrancara el partido! ¡Esperó un maldito mensaje tuyo pero nunca fuiste capaz de responderle!— gritó perdiendo la paciencia al ver cada vez más el rostro de confusión del rubio.— ¡Realmente aplastaste sus sentimientos! ¡Le rompiste el corazón! ¡Y dolorido tanto físico como sentimental él fue a verte al maldito hospital! ¡Salió del gimnasio cansado, agotado, triste porque perdimos, y aún así fue a verte al hospital! ¡Porque Ryota si es buena persona! ¡Y tú realmente no te lo mereces!《

Takemichi no sabia que decir.

Cada vez le dolía más la cabeza y sus orbes se llenaron de lágrimas sintiéndose mal. Él realmente no lo sabía, no lo recordaba, supuso que se lo había dicho a su yo del pasado que cada vez que volvía no recordaba nada de lo que había dicho o hecho.

Pero... ahora entendía esa noche, cuando fue a verlo en el hospital y tenía el uniforme del instituto.

Ahora entendía el porqué se fue.

Porque estaba enojado.

Se sentía mal.

Ese chico tiene razón, no se merece a su primo.

Ni en la línea temporal anterior, ni en esta se lo merece.

Había decepcionado a Ryota.



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¡Acá les traigo un nuevo capítulo!

¿Que les pareció?

Takemichi ya sabe la razón y el comandante de la ToMan también escuchó... ¿Que creen que pasará?

Espero que les haya gustado el capítulo y perdón por no haber subido el miércoles que era su segundo cumple mes </3 pero es que estaba enferma y no daba más. :(

¡Voten y comenten!

Voy a tratar de terminar el próximo capítulo y hacer doble actualización, que estoy emocionada porque esta pasando muchas cosas y necesito que lo lean para que se emocionen como yo... *no se emocionaban, ni votaban ni comentaban* ahre.

En mi PERFIL publiqué una historia de BONTEN, si quieren ir y darle amor me haría feliz.

Cuídense.

Besitos.

~M.



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