Quedabas esperando ecos que no volverán
Flotando entre rechazos
Del mismo dolor
Vendrá un nuevo amanecer

Jimin entro a ese lugar creyendo que un buen café y poco de tiempo a solas lograrían calmar su enojo. Había discutido con su pareja y las cosas podrían haber terminado mucho peor si él se hubiera quedado en el departamento. Es algo que aprendió con los años, tener paciencia y dejar que ambos se calmen para hacer las pases entre besos y caricias un par de horas después.

Taehyung, su pareja es bastante peculiar y difícil de entender. Aunque lo ama, a veces piensa en terminar la relación, sobre todo cuando las peleas se vuelven algo rutinario. Pero el no es esa clase de persona, el nunca se rinde y mucho menos en sus relaciones. Ha sufrido demasiado a causa de alguien que prefirió darse por vencido con el amor que él le ofrecía.

Lo que Jimin no esperaba es que se encontraría con esa persona en aquel lugar.

No lo vio cuando entró, estaba demasiado metido en el lío de su cabeza pensado en cómo solucionar su problema, pero si logro sentir una mirada sobre él; cuando por fin levanta la vista de su celular y lo ve, lo primero que piensa es que no puede ser el mismísimo Kim SeokJin, porque a pesar de que se había mantenido bastante bien, ese traje azul y su semblante serio le daban a entender que no era el mismo hombre que conocía de toda la vida.

Por alguna razón, algo dentro de él se encendió. Nunca le había guardado rencor al mayor, a pesar de lo mucho que sufrió y de las incontables noches de lágrimas, Jimin seguía queriendo a SeokJin, talvez no de manera romántica pero si como un buen amigo. Por eso había querido hablar con él, preguntarle como estaba y que había pasado en su vida en los últimos 20 años.

Lo llamo, pero no obtuvo respuestas. Una pequeña sonrisa se dibujo en su rostro y decidió que era hora de volver a casa. Mañana volvería a ese lugar para enfrentar a SeokJin.

A la mañana siguiente Jimin esta radiante y más enamorado que nunca. A veces esas peleas que tiene con Taehyung le hacen darse cuenta de lo mucho que lo ama, y es que fue Tae quien se encargo de reparar su corazón y cada día le demuestra lo importante que es para él.

Vuelve a esa cafetería a la misma hora que el día anterior, con la esperanza de encontrarlo.

Se auto convence de que es lo correcto. Después de todo solo quiere hablar.

SeokJin aparece y sus piernas tiemblan. Miles de recuerdos lo abruman, el deseo de abrazarlo es casi insoportable.

_Hola SeokJin_ dice cuando por fin se calma.

SeokJin a penas puede respirar con normalidad. Las palabras no salen y solo mira al hermoso y sonriente chico frente a él. Jamás imagino que volvería y le hablaría.

Jimin puede notar las enormes bolsas debajo de esos ojos apagados, también huele los restos de alcohol, ignora todo aquello y sonríe antes de volver a hablar.

_¿Como has estado? Lamento aparecer así, pero realmente quería hablar y decir algunas cosas, nada malo, no te preocupes_ Jimin lo mira expectante.

_Lo lamento, pero debo volver a la oficina_ SeokJin desea escapar, pero Jimin es más rápido y le toma la mano, haciendo que sus miradas se conecten y se sienta como si volvieran a tener 17 y 19 años.

_Solo será un momento hyung, por favor_ Es en ese momento cuando Jin pierde y se rinde. Su cuerpo se relaja y por primera vez en años una leve sonrisa aparece antes de decir..

_Te escucho.

_Gracias hyung. En realidad sólo quería decirle que no le guardo rencores, y de cierta forma le agradezco, si no me hubiera lastimado como lo hizo probablemente mi vida sería muy diferente. Me costó mucho entender sus motivos, pero creo que en ese momento pensó que era lo correcto. Lo seguí amando y esperando por muchos años, hasta que alguien logró curar esas heridas. Hay algo que siempre quise saber.._ Jimin se toma un momento para ver las reacciones de Seokjin, entonces sigue._ ¿Alguna vez me amo como yo a usted? ¿También le dolió como a mi? ¿Por que no hablo conmigo en vez de tomar la decisión usted solo? Aunque esas preguntas ya no tienen sentido, ¿podría al menos contestar una de ellas?.

Para SeokJin todas esas palabras eran pequeñas agujas colándose en su pecho, pero su rostro seguía serio, tan duro como una piedra.

Suspiro antes de contestar.

_Siempre te ame Jimin, pero  en ese momento creia que el amor no era  suficiente. No tienes idea de cuanto me arrepiento.  Pero no puedo cambiar lo que paso.

Es decepcionante darse cuenta de que sigue siendo el mismo hombre frío y arrogante que lo dejó años atrás. La sonrisa de Jimin desaparece y deja de mirarlo, muy en el fondo esa repuesta logra abrir un poco las heridas.

_Gracias Seokjin, es lo que necesitaba saber para seguir con mi vida.. de verdad espero que algún día llegue alguien y te demuestre lo equivocado que estás.. adiós hyung.

El vacío en su pecho se siente como un agujero negro. Se odia, odia ser ese maldito monstruo que lo destruye todo. Su semblante serio se transforma en uno de suma tristeza y comienza a llorar desconsoladamente cuando ve a Jimin alejarse.

Su vida fue un desastre desde que nació, Jimin fue lo único bueno que alguna vez tuvo. No supo mantenerlo a su lado, e incluso ahora vuelve a lastimarlo sin querer hacerlo.

SeokJin jamás dejó de amarlo. Pero tampoco tuvo el valor de luchar por ese amor..

Jimin decidido decir adiós y crecer..

Separarse de la especie por algo superior
No es soberbia, es amor

Poder decir adiós
Es crecer

Gracias por leer..