"Siempre, siempre estarás en mi corazón, Brina.
En el mejor lugar disponible en mi memoria es donde almaceno tus recuerdos. Todos separados, todos por orden. Vivaces y alegres, sin pausas o sensuras.
Con alegrías y penas siempre te llevo conmigo."

"Lavo, limpio, ordeno, cocino y hago ejercicio.
Trabajo, trabajo y leo. Leo muchísimo.
Y te escribo.
Te dibujo.
A veces tus ojos.
Otras tus labios.
Y rara vez, todo tu rostro."

"Trato.
Y te juro que a veces fallo.
Hoy es un claro ejemplo de ello.
No me molesta pensarte, sé que es normal; preguntarme cómo estás o recordar momentos juntas porque aún sigo en esta casa. Con eso puedo.

Pero días como hoy, no soy capaz de andar con ese pensamiento. Y mi garganta quema, apenas estos garabatos son legibles.

Las lágrimas no cesan y el escosor es mayor.

Y de saber que así sería, te juro que jamás te habría visto, jamás te habría visitado.

Jamás me habría arriesgado."

"Renové todo.
Cambie cada mueble de esta casa.
Vendí lo que dejaste.
Pinté de nuevo las paredes.
Ahora hay nuevos muebles.
Ya no como lo mismo de antes.
Y todo se siente como un comienzo.

Pero tristemente, ni con eso me alcanzó.
Por ello voy a mudarme.
A un espacio más adecuado a mí.
Algo más pequeño.
Me iré a un sitio que no me recuerde que en algún momento, fuimos dos y que ahora sólo queda una.
Me voy a un lugar lejos de este vecindario que está lleno de ti y de esta casa que sigue impregnada de tu esencia aunque hace tanto que solo queda tu ausencia.

Me voy a un sitio que solo grite mi nombre, uno con mi carácter y olor.  Y tal vez así, todo finalmente cambie."

"He conocido a un sinfín de tipos, con los que de una corto. No pasan siquiera de una segunda cita.

También a varias chicas y ninguna conecta con mi energía.

Y estoy segura que ellos no son el problema.

Estoy segura que yo soy el problema.

Porque me parecen muy intensos o intensas. Porque hablan poco o no tienen sentido del humor, porque hablan tanto que me marcan o son clasistas, racistas y lo disfrazan diciendo que es humor negro.

Porque no son ridículamente duros consigo mismos y tampoco me cuentan cosas triviales e interesantes de sus trabajos como tú.

¡Pero claro que el problema soy yo!

¿Por qué comparo a los demás contigo?

¿Por qué trato de encontrarte en otra gente?

¿Por qué después de tanto tiempo sigo extrañándote?"

"Cuatro meses.
Salí cuatro meses con un payaso mitomano.
Y en mi defensa estaba ridículamente aburrida.
Ni yo me lo puedo creer.
Te lo juro que no sentí mucho.
Nada real, más que mi rabia.
Bueno, lo quise, pero tú sabes que querer no es lo mismo que gustar y no está cerca de amar. Lo quise como pude querer a cualquier amigo.

Solo que con besos y poco sexo.

Un pequeño episodio dramático para mí caótica vida.

Uno con el que te dolería la panza de la risa.

Uno que me encantaría contarte en persona.

Ojalá y volvamos a ser amigas, Brina."

"Es un nerd.
Uno real.
Es un presumido, también. Y parece que lleva una biblioteca en su cabeza.

No puedo creer la química que tenemos, lo bien que la paso con él.

Hace tanto que no me reía y me interesaba por cosas que no entiendo al cien por ciento.

Con completa honestidad, sólo me estoy dejando llevar. Quien sabe lo que vaya a pasar.

~•~•~•~•~•~•

Pasó de todo.
Ya llevamos cinco meses se novios.
Ni puedo creer que realmente me gusta un hombre.
Ni la forma en la que nos enamoramos.
De verdad, estoy enamorada.
Siento que algo saldrá mal, debe ser mentira que cada día sea tan genial.

Quizás algún día nos podamos encontrar.
Y yo pueda hablarte de esto y no tener que escribirlo en un papel."

"Hoy es un lindo día.
Uno en dónde me encantaría reírme contigo y hablar sobre algún libro.

Estoy contenta con mi vida porque finalmente vuelve a ser mía.

De nuevo soy yo y no una bola apestosa que funciona cuatro días y falla tres.

De nuevo llevo un buen estilo de vida.

En un lugar que solo está hecho para mí.
Y para algunas cosas que mi novio ha ido dejando aquí.

En esta casa, solo hay de ti mis memorias.

Y estás pequeñas cartas."

—Eliza, mi vida, ¿dónde estás?  —la lejana voz de una madre llamó la atención de la niña.

»Princesa, me asustaste. —Los brazos de Sabrina rodearon a su pequeña.

—Mami, ¿Que son estas? —dijo las niña moviendo las cartas. Brina se tensó un poco al notar qué eran y las tomó con cuidado.

—Un recuerdo mío de hace años, linda —cargó a la niña, agradecida de que ella no supiera leer todavía—. Te hice unas galletas, ya están frías.

—¡Sííí! —la niña abrazó con emoción a su mami.

En el camino, Sabrina aprovechó y tiró a la basura aquellas pequeñas cartas.

La niña lo noto y preguntó—: mami, ¿Por qué botas a la basura tus recuerdos?

Ella tardó en responder.

—Porque lo llevo en mi memoria, corazón.

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Adiós al amanecer es una historia corta.
Gracias por leer, disfrutar de ella y brindarle la oportunidad.

—albysoo

Playlist! Adiós al amanecer

Bad liar — Selena Gómez
Bonita — Mon La Ferte
Antes de ti — Mon La Ferte
LMLY — Jackson Wang
¿Y cómo es él? — Marc Anthony
Cómo repartimos los amigos — Ella Baila Sola