♥️2/2♣️

Apenas logro sacar la lasaña del horno cuando el sonido del timbre se hace presente.

Dejo todo a un lado y quitándome los guantes de cocina camino hacía la puerta lista para saltar sobre la persona que se que estará tras ella.

-Pensé que ya no vendrías- es lo primero que digo cuando enredo mis piernas en su cintura y me gira abrazándome como si no nos hubiéramos visto unas horas atrás.

-Tuve que pasar antes por casa de mis padres, pero ya estoy aquí y para compensarte traje Milsetentayseis. Si la memoria no me falla dijiste que se convirtió en tu nuevo vino preferido.

¿Cómo podía ser tan hermoso? Verdad que no había nada mejor que cuando me consentían. Era una cosita que me subía al corazón y me bajaba al coño que no se explicar.

Le doy un beso más que merecido antes de obligarlo a bajarme, porque si es por él me lleva en brazos hasta la cocina y se nota que recién salió de la ducha. Su perfume Calvin Klein que le regalé hace unas semanas es todo lo exquisito que existe, y solo quiero empaparme de él.

Por un lado estaba él, con sueter mangas largas que torneaba sus perfectos brazos y su pantalón negro por encima de esta. Bañado perfumado y peinado, si es que se le puede llamar peinado a ese reguero de risos indomables. Y por el otro estoy yo, con ropa deportiva sin ducharme, con un moño desecho y con todo el sudor de un día común.

El caso que a su lado me siento asquerosa pero se que no me va a dejar ducharme antes de cenar o por el contrario se meterá conmigo y ahí sí que no cenaremos hasta pasadas las diez y no creo que mi apetito aguante tanto.

-Eres el mejor, ¿sabías?- asiente y sonríe mientras me sigue a la cocina- Sara hizo lasaña así que abre el vino en lo que lo llevo a la mesa.

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-¿Me diras de una vez que es eso que tanto necesitas contarme?- pregunto después de disfrutar una exquisita cena, un vino espectacular y de la compañía ya ni hablemos.

Con Dante nunca hay silencios incomodos, ni conversaciones innecesarias. Cada cual sabe como es el otro, lo que nos gusta y eso muchas veces lo compartimos. A mi me encanta escucharlo hablar de sus partidos aunque sino comparto la necesidad de correr de un lado a otro tras una pelota, pero cada quien se mata como más le guste.
Pero la cosa mejoró cuando me contó sobre sus cuadros, ahí si que entendía el brillo que se notaba en su mirada al relatar su otra pasión, una que yo compartía por igual.

-Si, pero no ahora. No quiero arruinar el momento.

Habíamos decidido cenar en el exterior. Cerca de la piscina tenía una zona con un mullido sofa blanco en semicírculo. En el medio un centro de fuego y calefacción exterior que era más bien como una pequeña hoguera de metal dentro de una mesa circular. A mi me encantaba porque su interior estaba lleno de piedras que servían de pista para el baile de las llamas. Dichas llamas que fueron el encendedor de un porrillo de marihuana que compartimos por los viejos tiempos.

La luz y calor del fuego le daban a mi acompañante un brillo increíble a su rostro de perfil. Y su cabello de por si rojo, bañado en luz y sobra de la hoguera igualmente, era un vivo y perfecto cuadro ante mi.

Inmortalice esa imagen en mi mente para recrearla en algún momento sobre el lienzo. Tal vez sonaba descabellado o tal vez se escuchaba como algo que yo nunca diría pero culpare de ello a la botella y media de vino y droga que ya estaba haciendo de las suyas.

Anécdotas fueron contadas entre risas escandalosas y gestos exagerados, pero todo era mejor así. Un momento para pasarla bien y olvidarnos de las cosas que estaba fuera de este lugar.

Hasta que llego un momento en que las palabras se fueron acabando y quedamos en un cómodo silencio junto al otro. Su cuerpo a mi lado, la manta cubriendo mis piernas que permanecían sobre su regazo y la hogera que teníamos delante me daba todo la sensación de confort y calidez que podría necesitar para sentirme en casa. Hasta percibí los ligeros rastros de sueño que me iba poseyendo.

Dejo mi cabeza reposar sobre su hombro. Los dos nos perdemos en nuestros pensamientos mientras la danza del fuego continua ante nosotros.

En un momento dado, siento su mano recorrer mi mejilla hasta posarse en mi barbilla y obligarme a mirarlo.

-Eres hermosa, Khaity.

Él ya me miraba a mi y no sé si es por las llamas reflejadas en sus ojos o el efecto del vino, pero vi un brillo diferente en su mirada que no me gustó para nada y me asustó. Llamame loca, pero asi era como papá veía a mamá por estar idiotamente enamorado de ella y eso no podía ser.

Pero mi duda ni siquiera llega a ser formulada en alta voz porque su boca cae sobre la mía robándome hasta cordura. Me dejo envolver por su ritmo, lento y posesivo hasta que se vuelve en uno totalmente violento y dominante. El tipo de besos que eran catapultas para un polvo salvaje.

Dejo que me quite de encima de él y me gire poniéndome en cuatro sobre el sofa y con el culo en pompa hacia él.

-Estos leggins me están matando desde que llegué, beba. No sé si te propusiste volverme más loco de lo que ya estoy por ti, pero creeme que lo lograste.

No puedo ni preguntra de que habla porque mi cabeza se siente pesada y yo ahora mismo soy una muñeca de trapo en sus brazos, puede hacer conmigo lo que le de la gana. Una palmada en mi trasero me hace chillar de la sopresa y ni siquiera me importa estar en una terraza con baranda de cristal frente un parque y calle transitada. Ahora mismo solo me interesa como los dedos de Dante rompen mis leggins como salvajismo, dejando una enorme abertura en mi entrepierna.

Ni siquiera voy a reclamar nada porque el frió aire entra en contacto con mi caliente coño que ya estaba mojándose desde que ese beso me puso hambrienta.

Su boca no pierde tiempo y me devora como cada vez que tiene mi vagina a su disposición. Luego me folló en esa posición hasta que nos vinimos. Tomando mi coleta en su mano y dejando mi coño bañado y necesitado de más. Un orgasmo me sabía poco para el nivel de cachondeo que me cargaba en ese momento. Entre lamidas, empujones y piezas de ropa volando a lugares que a ninguno le importaba fuimos a parar a la piscina climatizada en la cual seguimos comiéndonos como si no pudiéramos tener suficiente del otro.

El agua, el fuego y el cielo fueron testigo de mis gemidos, jadeos, rasguños y corridas. Pero también de sus embestidas, sus gruñidos, sus mordidas en el cuello y sus palabras cargadas de morbo.

La noche dio paso a la madrugada y no se como fuimos a parar a la cama pero me despierto y aun veo que esta oscuro afuera. Quito el brazo que descansa sobre mi espalda y miro mi despertador notando que son las 4:45 de la mañana.

Me levanto de la cama con la boca seca, asi que cojo una bata de seda blanca y la anudo a la cintura.

Compruebo que Ossy duerme en su otra cama que tengo en mi habitación y bajo los escalones bostesando como loca. Me apoyo en la encimera en lo complazco a mi sedienta garganta con un vaso de agua y mi mirada se va a esa carpeta que me olvidé en una esquina de la encimera y que no he leído aun.

La tomo y salgo de la cocina caminando por el pasillo junto a esta, hasta llegar a la última habitación. Apoyo mi pulgar en el lector dactilar que tengo como seguro y esta se abre inmediatamente. Silbo y las luz inactínica se apaga para dar paso a la luz normal, dejándome repentinamente cegada ya que el resto de la casa permanecía a oscuras. Una vez me acostumbro a la luz recorro la habitación con la mirada.

Este era mi apreciado cuarto oscuro. Un estante de metal estaba en una esquina con todos mis utensilios: guantes, pinzas, químicos, bandejas y demás. En la pared del fondo tenía una repisa a la altura de mi cabeza exponiendo todas las cámaras que he tenidos desde que descubrí mi pasión por la fotografía. Un archivo ordenado alfabéticamente se encuentra debajo de esta, guardando celosamente todas las fotos y proyectos personales que he hecho durante los años.

En medio de todo este caos organizado que era mi pedazo de vida estaba la mesa de metal que es testigo de las revelaciones de todas las almas que puedo capturar con un simple click.

Ahora, lo que me trae a mi querido cuarto es la pared que está junto a la puerta. Allí tenía una pizarra que contenía toda la vida de mi querido profesor. Abro la carpeta y leo el contenido, absorbiendo la información y las nuevas fotos antes de fijarlas en los sitios estratégicos y huecos que me faltaban por llenar con ayuda de unas tachuelas . Una vez hecho esto, doy un paso atrás y apoyo mis nalgas y manos a cada lado de mi en el borde de la mesa.

Mis ojos recorren cada pequeña vivencia de mi objetivo, repasando cada parte de su vida como si de una película se tratara.

Klaus Cavalli, nacido el 28 de noviembre de 1992 en Nápoles, Italia. Hijo único del matrimonio de Pietro Cavalli de 60 años y Ottavia Cavalli de 53. Su padre era un importante director de banco mientras su madre dividía en tres trabajos de medio tiempo, mayormente de mesera hasta que se casó.

Al cumplir los 15 te viste obligado a salir del país junto a tu madre cuando Pietro fue demandado por estafas de carácter continuado a los mismos clientes de su banco. Aquello los puso en el lente crítico de la población cuando fue enjuiciado a 10 años de prisión.

Al verse sin un euro y en la calle ya que les fueron confiscadas las propiedades, y congeladas las cuentas bancarias Ottavia decidió escapar del ojo público que los tachaba a su hijo adolescente y a ella de ladrones, cuando la verdad es que ninguno de los dos tenía conocimiento de las actos ilegales del hombre de la familia. En un giro de desesperación escapan de Italia, convirtiendo a Barcelona en su nuevo lugar de inicio.

Problemas económicos, de idioma y laborales fueron el pan de cada día durante los meses siguientes, pero eso no los detuvo. Tu tenías sobresaliente en cada asignatura y tu madre se partía el lomo trabajando 16 horas al día en una fábrica de embutidos.

Así pasó un año tras otro hasta que te graduaste en la universidad a que entraste gracias a las becas ya que su situación económica no había mejorado a lo largo de los años ni aunque tu ayudarás económicamente con los gastos de la casa con trabajos de medio tiempo.

Creíste que todo mejoraría al encontrar trabajo luego de graduarte así que comenzaste tu Maestría también con la ayuda de becas. Tu madre había conseguido un nuevo empleo en un hotel 3 estrellas como recepcionista y a ti te iba de maravilla en tu carrera.
Las suerte les empezó a sonreír como tanto habían pedido.

Tanto que te independizaste a las 24 y te casaste cuatro años después.

Maya Gómez, trigueña de piel marfilada y ojos negros. E increíble corredora de bolsa. Durante tiempo de casados tu situación económica mejoró ya que invertías tu capital con la asesoría de tu mujer.

Debo decir que la tipa era inteligente, invertían pequeñas sumas en cada ocasión dado el caso de que si llevaban a tener perdidas estás no afectara tanto su patrimonio.

Todo iba a la perfección. Tenías una esposa, un hermoso departamento en una muy buena zona de la ciudad y tu madre ya no trabajaba porque le habías pedido que se retirara y la mantenias dándole una mejor vida.

Así fue, hasta que un años y medio después llegó la infidelidad a la puerta de tu casa y en un sangriento divorcio con unos abogados que más bien debería llamar carroñero contratados por tu ex, supiste lo que era volver a empezar desde cero sin un euro en el bolsillo.

El juicio estuvo en pausa unos largos meses hasta que se dictó a favor de Maya hijueputa Gómez y es aquí que entra la información nueva.

Vinieron a Madrid cuando conseguiste empleo en la Universidad Elite de Bellas Artes donde el salario no estaba mal para empezar una nueva vida con tu madre hasta que pudieran estabilizarse. En ese año yo empecé la universidad y fue donde te conocí mi sabroso papi de catálogo de bomberos. Ottavia por su lado, consiguió un nuevo empleo en un hotel, pero en esta ocasión de mucama.

Y así llegamos a la actualidad, donde tu madre en un accidente laborar que el seguro se niega a pagar diciendo que fue su culpa, y donde ella cinco meses después continua en coma. Y tu con mil deudas que te dejó un juicio injusto al que continúas pagando mensualmente porque la vibora de tu ex mujer es una mierda de persona. Y esto me trae a mi, mi rey de ojos grises. Tu siempre fiel ángel de la guarda.

A esa mujer del infierno que ojalá y le echen ácido en el shampoo cuando este en el gimnasio estoy levantándole un proceso de demanda por infeliz aprovechada. Mira que cogerte a ti, mi sexy profesor como chequera andante para pagar sus caprichos cuando eso es ilegal ya que ni siquiera hubieron hijos en el matrimonio. Pero tranquilo, a esa mis abogados le van a quitar hasta las pestañas postizas que tiene y la depositaran en tu cuenta bancaria en cuanto acaben con ella.

Tu mami por otro lado, ya me estoy encargando de pagarle sus tratamientos y tener un ojo fijo en los doctores. A mi suegra no le puede pasar nada y me la deben cuidar como una reina. Esa mujer solo se merece los mejor del mundo solo por traerte a este mundo y luchar tanto por ti para que ahora tu seas mío.

Y todo por ti, mi pequeño ingrato que no se deja follar. Estoy limpiando cada mal de tu vida para que cuando te tenga, en tu cabeza solo pueda haber espacio para mi y solo para mi. Te quiero en mi cama, a mis pies y en mi vida hasta que me aburra. Y para tenerte tengo que hacer todo esto, lo haré complacida.

Miro tus fotos, las primeras de caundo eras pequeño, otras en tu adolescencia y así hasta llegar a la actualidad. En tu pequeño departamento de 20 metros cuadrados y otras en tu destartalado Fiat del 2004.

Las mejores son las del gimnasio de tu edificio, pero mis preferidas son en donde caminas por la universidad o estás en un salón de clases. Esa cara seria, esos lentes, esos trajes perfectamente estirados y bailando sobre tu cuerpo mientras se aferran a cada uno de tus músculos. Tu mandíbula cuadrada que siempre mantienes en alto y tus manos en los bolsillos son todo lo que necesito para introducir mis dedos en mi coño y masturbarme en las noches en el que me gana el deseo por ti.

Miro con admiración mi pizarra. Que se note que hice la tarea y que mi padre es el mejor profesor de vida que me podría tocar.

-No imaginé que estarías aquí, a esta hora- mi mirada se va a Dante que se mantiene en la puerta con los brazos cruzados y cubierto solo por sus boxers. Ni siquiera me había dado cuenta que la puerta estaba abierta.

-Perdí el sueño- me encojo de hombros.

-Tal vez no es exactamente un tema para tratar a las 5:30 de la mañana pero necesito que hablemos.

Es cierto, con todo lo que ocurrió tras la cena lo había olvidado y si bien ya me tenía presa de la curiosidad tanta insistencia sobre el tema, la verdad es que nadie podía culparme cuando el me mete la lengua hasta la campanilla y se me olvida hasta respirar.

-Te escucho- lo veo tomar aire por la boca antes de empezar y es como si algo dentro de mi dijera que no me va a gustar.

-Conocí una chica- hace una pausa y yo solo puedo hacer un gesto con la mano para que continue- la conocí hace un tiempo pero no es nada serio. Solo algunos encuentros casuales de vez en cuando. Pero hace unos días, cuando fui a su departamento me pidió que fueramos algo mas. La verdad es que ella me gusta y me siento bien a su lado, tanto que estoy considerando en si darle lo que me pide o no.

-A ver si entiendo. Estas con una chica, que debe ser increíble porque para que llegues al punto de plantearte algo serio con ella debe ser especial, pero aun así no estas convencido. Si lo que quieres es un consejo de hermana lo que te puedo decir es que lo intentes. A penas si te he conocido algún rollo de fin de semana, incluso mis tios se preguntas si eres gay, claramente yo se que no. Pero ellos solo han conocido a una chica y es de cuando cumpliste 18- me alejo de la mesa hasta ponerme ante él y acunarle la mejilla con mi mano- quiero que seas feliz y si ella te hace bien, para mi ya tiene 20 puntos y ni siquiera la conozco.

-¿Es lo único que vas a decir?- quita mi mano de su rostro de forma brusca y sus rasgos faciales pasan de sereno a molesto en unos segundos- ¿De verdad eso es lo que tienes para decirme? Después de todos los años que llevamos escondidos, de todas las primeras veces que fui para ti. ¿lo único que me dices es que me vaya a los brazos de otra? Me tienes que estar jodiendo.

Ahora si que me qede to'loca. A lo mejor la marihuana no se ha ido del todo de mi o yo estoy perdiéndome una parte de la pelicula.

-Dante pero ¿qué es lo que quieres que te diga? Llevas todo el día queriendo contarme algo, resulta que es de una chica que te gusta y a la que planeas darle una oportunidad yo te doy mi opinión creyendo que lo que necesitabas era apoyo para dar el paso y ahora me sales con chorradas de mi primera vez. Si, fuiste mi primer beso. Si, fuiste mi primera vez. Si, fuiste mi primer secreto oscuro y prohibido que aun le ocultamos a nuestros padres, pero tu y yo somos hermanos. ¿Cómo no te voy a apoyar si te gusta una chica?

-Es que no me puedo creer que no te des cuenta. O es que te haces la que no ve las cosas para no tener que afrontarlas- ya a este punto no es una conversación, son palabras subidas de tono y resentimiento hacía mi y de completa ignorancia sobre el tema, de mi para él.

- ¿Todo este lío es porque estoy de acuerdo con que salgas con alguien? ¿Cuando mierda me has visto hacerte una escena cuando te lias con tías a los bares a los que vamos? Nunca hemos tenido problemas cuando nos vemos con otros. No se porque pensaste que esta vez sería distinto. Me vas a volver loca.

-Porque te amo maldita sea- grita colérico mientras su respiración es igual a la de un toro embravecido. Me toma de la mandíbula con fuerza y me empuja hasta dejarme acorralada entre su cuerpo y la mesa- por estúpido que sea, creí que si te decía que tendría novia me dirías que no lo hiciera, que lo intentaramos en serio. Deseaba que al escucharme dijeras algo parecido porque estoy maldita y jodidamente enamorado de ti. No se desde cuando y no se como. Tal vez por las cosas que vivimos. El secreto que compartimos. Las ganas que nos tenemos, no lo se joder, pero me veo cada día despertando contigo me veo intentando una rutina incluso cenando con nuestros padres los domingo. Me muero de ganas de poder gritarle al mundo que te amo y que mi otra mitad es esa misma que me obligaron ver como una hermana, pero es algo que ya no puedo hacer porque la veo como mujer.

OH- MY- FUCKING- GOD

Esto no puede ser cierto, que alguien me pellizque y me diga que estoy teniendo una pesadilla pero que esto no es real. No puede ser putamente real.

-Me estás cargando- digo ocultando la risa nerviosa que quiere escapar de mis labios- vamos Dante, dime que me estar cargando y que todo esto es una venganza tuya por dejarte caliente el otro día- él sigue serio, escrutando mi mirada como si quisiera que yo viera por mi misma que sus palabras son reales- ¿por qué?-
digo en un susurro-
DIME ¿POR QUÉ MIERDA TUVISTE QUE CAGARLA ASI?- mis voz se rasga con el grito- La jodiste imbécil. Teníamos un puto acuerdo Dante, un fucking pedazo de acuerdo cuando comenzamos esta locura. Nadie se entera, nadie se cela y nadie se enamora. ¿Qué tan jodido tienes que tener la cabeza para enamorarte de tu hermana? Joder.

- No eres mi puta hermana, entiéndelo. Yo no te veo como hermana y las cosas que hacemos tampoco son de hermanos. ¿Qué mierda quieres que te diga?- se aleja de mi mirándome con asombro, como sino se esperara está reacción de mi- yo no busque enamorarme de ti, pero cogíamos y luego me sonreías. En las mañanas desayunábamos y íbamos juntos a la universidad, te veía reir a mi lado y...

- Para Dante, para. No me puedes hacer esto, no puedes. No tienes el maldito derecho de joderlo todo así. Yo no estoy enamorada de ti, tu eres mi apoyo, eres uno de mis mayores pilares, eres mi hermano maldita sea. Yo no te amo mas que como un hermano. Yo no me veo haciendo eso contigo, ni con nadie. Yo no nací para ser la mitad de nadie y no lo seré jamás.Te llenas la boca al decir que me conoces pero luego vienes con una jodida declaración de amor y es cuando sale a la luz que no me conoces de nada. Yo no me veo compartiendo mi vida contigo solo por qué se te dio la gana de pasarte nuestro acuerdo por las bolas. Lo mío son los encuentros de pasión con orgasmos asegurados. Lo nuestro si fue distinto al resto porque estamos juntos desde que somos unos malditos niños, pero mi amor por ti es por eso. No por un sentimentalismos romántico- ahora soy yo quien se aleja de él llevandome la mano a la boca tratando de controlar los sollozos que ya se hacen presentes- joder Dante, esto estaba claro. No me hagas esto. No tu, nene. Dime que todo es una equivocación, que te confundiste y sigamos como hasta ahora. Olvidemos que tuvimos esta conversación.

Me negaba a perderlo por una gilipollez como esta, él no podía hacerme esto. No lo acepto.

Sin querer recuerdo una discusión como esta con dicho asiático con el que me encontré en la tarde y no puedo creer que ellos que me conocen desde la infancia, hallan cometido el estupido error de tener sentimientos por mi sabiendo como soy ¿es que están putos locos o que demonios les pasa?

-Yo en verdad creí que teníamos algo especia. Nuestra complicidad. Nuestras miradas. Esas no son cosas que se pueden fingir ni se pueden malinterpretar. Tenemos una química que se nota a kilómetros, y me estas diciendo ¿que no te causaría nada verme con otra? ¿no te causa nada verme abriendo mi corazón por ti? Dios, mirate- me mira de arriba abajo y esta vez su mirada es tan fría que no me creo que él me mire asi, nunca imagine que llegara a verme de esa manera- no sientes nada, estas como un pedazo de hielo. Insensible como si lo que esta pasando lo estuvieras viendo en una película que no te afecta en los más mínimo. Está no es mi Khaity.

-Vamos a ver, vienes aquí diciéndome que estas con otra para que te diga que no lo hagas porque te amo y que me demos una oportunidad- rio con maldad y hasta mi risa me supo amarga, siento lágrimas deslizarse por mis mejillas y no es por dolor ni mierdas de esa, es por le puto coraje de que no se puedan atener a un maldito trato y hechen todo a perder- se ve que no me conoces una mierda. Si eres especial pero no por eso tendrás algo que yo no se dar. No se dar amor, no puedo darte lo que pides y dudo mucho llegar a corresponderte de esa manera algún día- digo más nada calmada ya las cartas están puestas no vale nada gritar ni llorar en vano- lo que ves es lo que hay y lo que se dar. No me pidas más porque no lo habrá. ¿Quieres estar con ella? hazlo. ¿Quieres casarte y tener hijos? yo llevaré los putos anillos y seré la madrina de mis sobrinos y hasta seré tu amante si se da el caso, pero no me pidas unos celos y una respuesta que no te voy a dar por más que lo pidas, porque esa no soy yo.

El me priva de mirar esos ojos verdes que tanto me gustan porque no soporta verme a la cara, pero estos se desvían y posan en la pizarra a su lado y que hasta el momento no había notado. Lo veo reir. Ríe a golpe de carcajada seco al mismo tiempo que noto unas lágrimas bajar por sus mejillas que se mantenían roja por el calor de la discusión.

- Es por él, ¿no?- sigue riendo- que estupido de mierda. Me acabo de ganar el Óscar al imbécil del año. Este discurso de mierda que acabas de soltar con toda la frialdad que te cargas sobre que no lo perteneces ni eres la mitad de nadie, no es otra cosa más que por él.

Va hacia la pizarra y arranca varias fotos para luego tirármelas a al cara.

- El karma un día va llegar y ese si que es una perra hermanita. Espero que de él te enamores y la vida te ponga en la posición en la que estás acostumbrada a dejar a estúpidos como yo, rebajandose y arrastrándose por ti y por más de tu atención. Pero ¿sabes que te va a doler? Maldita sea, como te va a doler y ¿sabes por qué?- escupe cada envenenada palabra a centímetros de mi cara- porque eres una maldita cría que se dice ser una mujer liberal y lo que eres es una jodida niña con pánico al efecto emotivo y una egocéntrica de mierda que mira a todos por debajo de la suela de su zapato y por eso vas a quedarte sola. Te deseo lo mejor, HERMANA.

Da un beso en mi frente con sabor a corazón roto y se va dándome la espalda. Yo no siquiera pude darle una respuesta a su ataque porque no me lo esperé de él. Pero bueno, que más.

Limpio mis falsas lágrimas con el pulgar. Y sonrio con todo el cinismo que tengo hacía las pocas fotos que quedaron intactas en la pizarra. Recojo las que están en el suelo y acaricio una en donde el rostro de Klaus se ve de perfil.

-Bueno muñeco, ya resolvimos el último inconveniente. Ahora si soy toda tuya- beso su foto y salgo con ella en mano en busca de una botella de vino que me acompañara a ver el alba.

Dante me jodió. Ya no voy a tener su boca, su polla o sus brazos cargándome como me gustan pero bueno, hay que ver el lado positivo siempre de todo. Ya no voy a tener más distracciones y estaré divirtiéndome con mi verdadero objetivo.

Dicen que todos los días se aprende algo nuevo, esta madrugada aprendimos que nunca, por ningún motivo, razón o circunstancia TE ENAMORES DE KHAITY.

NO LO HAGAS.

Porque me vas a amar. Me darás cada parte de ti, y pondrás incluso mi vida por encima de la tuya. Pero  jamás te miraré como otra cosa que no sea un juguete más de mi colección.

♠️

Bueno, bueno aquí estamos dejando claros varios puntos importantes que no podía posponer más.

A

ntes de que digan algo debo salir en defensa de mi niña.

Khaity es así, no porque le digas que la ama, le bajes el mundo y la mimes harás que ella deje de mirar solo por si misma y lo que quiere. Ella compartirá contigo solo esa parte que quiere que conozcas de si, pero nada mas. Nunca será la mitad de nadie, esa no es mi nena. Ella deja las cosas claras, solo será un polvo, si lo haces bien puede que se repita, pero no pidan más de donde no hay porque terminaran acompañando a Tyler en el psicólogo.

Ahora bien, se preguntaran porqué durante estos capítulos me he centrado más en la interacción con Dante que con Klaus quien viene siendo el verdadero protagonista. Bien, diré que no lo hice por puro relleno o que lo escribí para alargar los capítulos y agregar datos innecesarios a la trama, no es el caso. Si decidí profundizar en la extraña relación de Dante es porque necesito que comprendan la personalidad y forma de pensar de Khaity para que no les tome de sorpresa y se queden con dudas mientras la historia va avanzando. Esto es muy importante que lo tengan en cuenta así no me matan más adelante.

Aclarado esto.. Y diciendo que ahora todo girara en torno a los protagonistas, preguntaré:

¿Impresiones?

¿Qué pensamos de Dante?

¿De Khaity?

¿De Klaus?

Ya muero por escribir el próximo capítulo.

Hasta pronto...