¦Nota del autor:¦

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CAPÍTULO: Dosis.

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Era más un día en Play time Co; Dogday fue el primero en despertar, se levantó con mucha pereza, lavó su rostro con agua y jabón de olor a vainilla. Suspiró al ver su apariencia en el espejo, no era nada feliz, su aspecto era de cansancio, sentía que su interior era vacío, suspiró y se forzó a sonreír como siempre lo hacía. Despertó a sus amigos con un falso entusiasmo.

Los amigos despertaron uno a uno, Kickin Chicken fue el segundo a levantarse, luego Hoppy, Picky Piggy, Bobby, Bubba y por último Catnap que seguía en su habitación. El felino morado, era el apodo que le daban los demás juguetes, Catnap era él único de los Smile Critters que dormía solo. Generalmente era Dogday que lo visitaba pero después de lo que sucedió, ya no. Kikin envidiaba un poco a Catnap porque quería un cuarto solo para él.

Hoppy: buenos días a todos! - sonrió arreglando su cama con entusiasmo.

Kikin: desperté primero, eres muy floja y perezosa - dijo a Hoppy.

Hoppy: grr, no se puede ni despertar con un buenos días contigo! - dijo enojada.

Kikin: quizás si fuera una tortuga, ganaría igual - se burló de Hoppy.

Hoppy: pero que molesto eres!! - lo empujó. Picky Piggy los separó poniéndose en el medio de ellos mientras aún tenía sueño.

Dogday: hey chicos, no! Porfavor el día apenas empieza! - sonrió nervioso.

Bobby: yo diría que están muy enamorados si se pelean demasiado - señaló a Hoppy y Kickin y luego puso sus manos sobre su cadera.

Kickin y Hoppy: ¡¿que?! Estás loca!

Bubba: eso es verdad, hay una probabilidad de 68% de que se enamoren pues son amigos - mencionó mientras lavaba su rostro.

Kickin: ese porcentaje está muy alto para mi gusto - se fue al baño para lavar su rostro.

Hoppy: jamás aceptaré ese porcentaje! - señaló a Bubba con enojo. Algunos se rieron de su reacción.

Mientras ellos apenas se levantaban, los médicos, científicos y empleados de la empresa ya estaban despiertos. Los que estaban en el área del laboratorio, discutían sobre el comportamiento de Dogday.

Mientras los Smile Critters se preparaban para iniciar el día, en una sala de control oculta en las entrañas de Playtime Co., un grupo de científicos y médicos observaba atentamente a través de las cámaras de vigilancia.

Médico: Miren a Dogday - señaló a un vídeo que se reproducía en la televisión - al parecer tiene crisis de estrés pós-traumático. Su comportamiento ha afectado a los demás de los Smile Critters, y su nivel de estrés es alarmante.

Científico: Deberíamos comenzar el tratamiento cuanto antes - respondió el otro, tomando notas en su tableta - No podemos permitir que se deteriore más, hay que evaluarlo y ver que haremos a seguir - Un asistente asintió y marcó algo en el tablet que llevaba en manos.

Asistente: Programaré su evaluación para esta tarde en el laboratorio, con su permiso - salió la mujer, dejando a los hombres pensaren que tipo de tratamiento sería más efectivo.

Dogday empezaba su rutina junto a sus amigos para cuidar a los niños en la guardería, aunque sus amigos no estaban de acuerdo en dejar a Dogday cuidar de los niños. Bobby convenció a todos para que lo dejaran, pues Dogday insistió en que quería cuidar a los pequeños pues se aburría.

Además su única función era esa, cuidar a los niños huérfanos de la guardería.

En un momento de descuido por parte del canino amarillo, Lucía, la niña de ojos verdes que siempre acompaña a Dogday, se cayó de un tobogán. Lucía empezó a llorar desconsoladamente, había hecho una pequeña herida en su rodilla, la sangre se contaminaba con la arena del suelo del parque.

Dogday: oh no Lucía - la ayuda a levantarse - tranquila, t-todo estará bien! - trató de consolarla pero ella siguió gritando y llorando de dolor.

Dogday al ver la sangre, se sintió un poco mal, el llanto de Lucía empeoraba la situación, el cuerpo de Dogday empezaba a temblar ligeramente. Los demás voltearon a mirarlo, escucharon el llanto de Lucía, Dogday la abrazaba y acariciando su cabeza. Catnap al verlo un poco inestable, se apresuró para acercarse a él.

Dogday: p-por favor Lucía deja de llorar - la cargó y la dejó sentada en una banca colorida.

El llanto de la pequeña de ojos verdes era abrumador, Dogday trataba de calmarla pero ella solo seguía llorando y el estrés estaba empezando a hacer efecto en Dogday. Su cuerpo se tensaba, su respiración empezaba a agitarse. Otra vez podía ver imágenes sangrientas, niños muertos tirados por el suelo, empezaba a resonar las voces en su cabeza gritando por ayuda y los llantos de desesperación.

Lucía: ¡me duele! - dijo mientras lloraba y seguía gritando por el dolor.

Dogday: Lucía cállate... - puso su mano en la frente empezando a tener dolor de cabeza.

Lucía: pero me duele!! Aaah!!

Dogday: ¡¡SOLO CÁLLATE!! - Gritó casi dándole una bofetada en su mejilla, pero Catnap lo impidió con una mano.

Dogday lo miró sorprendido, repiró jadeando, estaba a punto de agredir a una niña y no se había dado cuenta. Catnap agarraba a Dogday de la muñeca mirándolo con seriedad. Lucía dejó de gritar llorando para mirar con terror a Dogday. El canino se sentía confundido por su reacción, Dogday no era para nada agresivo, pero había cambiado demasiado.

Catnap: ve con Bobby BearHug, ella te llevará a la enfermería - dijo en voz baja, la pequeña asintió con la cabeza.

Lucía: ... - se fue rápidamente a abrazar a Bobby asustada.

Bobby: ven pequeña - salió del parque de la guardería para ir a la enfermería.

Catnap, al soltar la muñeca de Dogday, notó como él lo miraba con ganas de llorar, entonces lo abrazó hundió su rostro en el pecho de Catnap. Su llanto era silencioso, los demás de los Smile Critters, Kickin, Hoppy, Picky Piggy y Bubba, miraban a Dogday un poco asustados, con algo de miedo y sorpresa.

Inesperadamente algunos niños se acercaron a Dogday y Catnap, se preocupaban mucho con Dogday. Ellos vinieron en grupo de 12, querían respuestas a sus dudas. Dogday secó sus lágrimas y Catnap se sentó en la banca colorida al lado de Dogday.

- Dogday...... Porqué estás tan triste? - preguntó una niña.

- pero él se ve molesto, no triste - dijo un niño.

- que no ves que está llorando? - dijo otra niña.

- podrías respondernos? - todos los niños lo miraban con ternura.

Catnap observó a los niños y a Dogday un poco sorprendido. Dogday miró a los niños con una mezcla de tristeza y vergüenza. Su voz temblaba al intentar explicar:

Dogday: ¿A-Alguna vez se han sentido como si llevaran una mochila muy pesada y no pudieran quitársela? Eso es lo que siento a veces... como si todo fuera muy difícil de cargar - Los niños intercambiaron miradas, intentando comprender.

Niño: pero... ¿Por qué no pides ayuda para cargarla? - Dogday sonrió levemente, pero sus ojos seguían brillando por las lágrimas.

Dogday: A veces olvido que puedo hacerlo... pero ahora tengo amigos que me ayudan, como Catnap y ustedes.

De pronto, Hoppy corrió rápidamente a dónde estaba Dogday y Catnap con los niños. Se veía angustiada, Catnap al notar eso, se levantó del asiento para escuchar lo que tenía que decir.

Hoppy: l-los de la enfermería quieren que Dogday vaya allá - Catnap miró a Dogday de reojo.

Los niños seguían haciendo preguntas incómodas para Dogday, lo tomó del brazo abriendo paso entre los niños y Hoppy avisó que tenía que irse de inmediato a la enfermería. Dogday se sorprendió al mirar a lo lejos las ventanas de monitoreo, ahí estaban los científicos mirándolo con seriedad. Sintió un escalofrío recorrer su cuerpo, se despidió de sus amigos y se fue.

Catnap lo miró irse con mucha melancolía, quería protegerlo de lo que sea, incluyendo a los médicos y científicos pero ninguno de los juguetes tenían autorización. Dogday, al llegar a la enfermería, vió a un enorme equipo de médicos para evaluarlo. Eran 15 en total, querían saber como podrían tranquilizar a Dogday de la mejor forma posible.

Al pasar unas horas, todos los Smile Critters estaban ansiosos por ver a su líder nuevamente, Catnap y Bobby eran los que más estaban ansiosos. Todos seguían cuidando de los pequeños, trataban de mantenerse juntos formando un círculo para jugar de forma grupal con los niños.

Picky Piggy: tranquilizense amigos, Dogday pronto va a volver sano y salvo

Hoppy: no lo creo - miró al suelo cabisbaja.

Kickin: Dogday enloqueció, de seguro lo dejarán en un lugar apartado y tendremos que elegir un nuevo líder.

Craftycorn: no digas eso frente a los niños! - tapó el oído de un niño que estaba cuidando.

Bubba: la probabilidad de que lo alejen de nosotros es de 83% y eso que no calculé el tiempo que lleva allá sin que tengamos alguna información sobre él.

Bobby: dejen de ser tan negativos! Ya basta con la ansiedad que tenemos al querer verlo de nuevo!

Catnap: ... - suspiró pensando sobre que pasaría con Dogday ahora.

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Evaluación Médica:

Médico: El sujeto Dogday presentó reacciones agudas de hipervigilancia y una respuesta exagerada al estrés emocional. Sus signos vitales durante las simulaciones de estrés controlado indicaron un incremento significativo en la frecuencia cardíaca y respiratoria, así como sudoración excesiva - dijo grabando su voz, con una grabadora tecnológica.

Enfermera: Se observó un patrón repetitivo de disociación acompañado de recuerdos intrusivos no verbales. El análisis conductual sugiere una capacidad limitada para la regulación emocional autónoma.

Médico: Se recomienda el inicio de un protocolo farmacológico para atenuar los síntomas agudos y facilitar la intervención cognitiva-conductual posterior. El sujeto será sometido a observación continua para medir la efectividad de las intervenciones. - dejó de grabar su voz.

Enfermera: este es un caso grave señor? - preguntó al médico principal.

Médico: temo que si, si no solucionamos a tiempo su condición, tendremos que hacer intervención quirúrgica junto a los científicos.

Enfermera: disculpe señor pero, no sería demasiado arriesgado? - lo miró con cierta inseguridad.

- suspira - Médico: eso no le importaría a los hermanos Ludwig, no está a mi alcance evitar que hagan estupideces con los juguetes que crean para la fábrica - contestó con sinceridad.

La enfermera se quedó callada, sabía que tenía razón, los hermanos Ludwig habían comprado a "Play Time Co" Para seguir el legado de su familia. Ellos no tenían piedad, hacían su trabajo y era eso lo que importaba para ellos.

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Cuando Dogday volvió a la guardería, todos lo miraron con sorpresa, él caminaba un poco atontado por la medicación, estaba siendo guiado por una enfermera hasta la habitación de los Smile Critters. Sus amigos miraron entre ellos eligiendo quién podría ir a verlo primero, Catnap se adelantó y corrió a las habitaciones para ver a Dogday.

La enfermera lo dejó en su cama y se fue, Catnap se acercó para verlo, Dogday suspiraba con cansancio, estaba algo mareado y su respiración era lenta. Su mente estaba en un blanco total, su cuerpo parecía no reaccionar de la forma que quería, se movía de forma irregular. Catnap, al ver a Dogday, sonrió un poco.

Catnap apenas llegó y Dogday cerró sus ojos, ahora estaba durmiendo plácidamente, Catnap se acercó y acarició su cabeza. Dogday se acomodó en la cama quedándose acostado de lado, Catnap cubrió su cuerpo cuidándolo con cariño usando una manta. Lo quería cuidar de la forma que nunca lo hizo, quería aliviar la culpa que sentía.

Al día siguiente, Dogday se levantó, seguía teniendo ojeras de cansancio pero sonreía con una alegría y entusiasmo que eran resultados de la medicación. El camino salió de la cama, arregló si cama como nunca lo hacía, despertó a todos con su habitual energía, como si nada hubiera pasado. Parecía que estuviera totalmente bien.

Dogday: ¡buenos días amigos! - dijo con emoción y su sonrisa habitual.

La mayoría lo miró con confusión. Dogday rápidamente limpió su rostro, corrió para empezar su día laboral de cuidar a los niños. Algunos de los Smile Critters se sentían incómodos por el rápido cambio de actitud de la noche a la mañana, sentían que había algo raro pero no quisieron decirle nada a su líder, a final, era su naturaleza ser así y debía ser así.

Debía ser "feliz" por ser el líder.

Por la tarde, Dogday volvió a ir a la enfermería y su alegría seguía intacta, parecía estar realmente "bien" con los medicamentos administrados. Habían dado algunos frascos a Dogday con píldoras, para que pueda tomarlos por su cuenta en los horarios establecidos por los médicos.

Catnap: buenos días Dog...

- lo interrumpió - Dogday: buenos días Catnap! - sonrió mientras se iba con un grupo de niños, para cuidarlos mientras juegan.

Catnap: ... - lo mira con desconfianza.

Catnap sabía que algo no iba bien, llamó a Bobby para hablar con ella sobre la condición de su amigo, ella no sabía que decir. Casi ningún juguete o niño confiaba en los médicos y científicos, sabían que siempre había una intención oscura. Lucía era uno de esos niños, sabía que algo le estaba pasando a Dogday.

Lucía: ¿estás bien señor Dogday? - lo miró con preocupación.

Dogday: estoy perfectamente bien pequeña - acarició su cabeza - lamento haberte asustado la otra vez - sonrió con calidez.

Al pasar 2 semanas, Bobby, Catnap y Bubba fueron los primeros en notar patrones repetitivos en el comportamiento de Dogday, a veces tenía reacciones exageradas o un entusiasmo que parece demasiado forzado. Un día, los 3, habían llamado a los demás Smile Critters, hicieron una pequeña reunión para debatir si deben intervenir en el tratamiento de su líder y amigo.

Bobby: ¿No creen que está... demasiado feliz?

Picky Piggy: yo lo veo normal - dijo mientras intentaba comer una ensalada sin sentir asco.

Craftycorn: No ves lo rápido que se "mejoró" cuando empezó a hacer ese tratamiento de los médicos? chicos, esto no es normal, esto no es Dogday.

Kickin: creo que estamos exagerando, solo está feliz, que tiene de malo en eso? - curzó los brazos.

Hoppy: yo lo veo feliz, eso es lo que importa - dijo con algo de indiferencia.

Bubba: através de mis cálculos, existe un 40 % de probabilidad de que Dogday se vuelva adicto a los medicamentos - escribió en su cuaderno - no creo que sea algo saludable.

Craftycorn: ¿qué piensas sobre esto Catnap?

Catnap: ... - pensó en las palabras adecuadas, todos lo miraron esperando una respuesta.

Catnap: hay que vigilarlo... - sugirió en voz baja a todos y todos se pusieron de acuerdo.

Bobby: nos diviremos en duplas en cada parte del parque para vigilarlo entre la semana, estean atentos a cada cosa que haga o pase - todos sintieron con la cabeza.

Mientras los días pasaban, Dogday seguía tomando su "mágico" medicamento. El sabor del medicamento no era del todo agradable pero a Dogday no le importaba, le hacía sentir bien. Para Dogday, el sabor amargo poco a poco se volvió algo ácido, solo debía tomar uno a las dos de la tarde, el efecto es a largo plazo.

Dogday a veces tomaba dos al día, era permitido pero un poco arriesgado si eran 3 o 4 al día. La relajante sensación que lo hacía sentir se había vuelto costumbre, a veces se olvidaba de cosas pequeñas pero eso no llamó la atención de nadie. Solo son pequeñeces, que cosas podría pasar, verdad?

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