-No voy a lastimarte ¿Okey? Yo te saque del agua, vas a estar bien.

-¿Dónde estoy?- se se tía desorientada, y era normal había tenido un viaje muy largo y una caída un tanto brusca.

-Estamos en un lago- Lo señalo- de allá te saque. —volvio a observarla y tragó grueso— Estás... Estás desnuda, te pondré mi camisa ¿Está bien?

El rubio estaba realmente sorprendido, no lo podía creer, se veía como una persona normal, La ayudo a ponerse la camisa que estaba junto a su chaqueta.

-Mejor.

-Gracias, Gael.

El rubio le sonrió y asintió. Rápidamente borro la sonrisa de su rostro. ¿Cómo sabía su nombre? No sé lo había dicho.

-¿Dónde estoy?

-En el lago ya te lo dije.- resoplo, detestaba tener que repetir las cosas

-Si, se que lo dijiste pero no sé dónde me encuentro, ¿Que planeta es este?- observaba todo con atención, hasta que su vista cayó en el hombre que la había sacado del agua.

-Emmm. Estas en la tierra ¿Eres un estraterrestre? ¿No vas a matarme verdad?- le pregunto preocupado, De pronto la idea de haberla sacarla del agua no le parecía muy buena que se diga. Estaba muy bien así como estaba.

-¿Que? No, porque haría eso.- rio bajo, negando con su cabeza.-y no soy extraterrestre, bueno técnicamente existo muy lejos del planeta pero no, no soy extraterrestre.

- ¿Y entonces que eres? Porque te vez como una mujer comun.

-Pues yo soy...

No pudo seguir hablando, sus amigos habían llegado al lugar haciendo un gran alboroto.

-Hermano ¿Estás bien?- Lucas fue el primero en llegar a él, los demás estaban alumbrando en los alrededores y otros ni falta le hacían, podían  ver perfectamente, Vio que su amigo estaba ocultando a alguien tras su espalda. -¿pero que? -pudo detallar que estaba en boxer y mojado - a ver Gael ¿Que estabas haciendo?

Ella estaba pegada a la espalda del rubio, temblando, más por miedo que por frío, el sintió como temblaba así que intento calmarla, viendola sobre su hombro. -Vas a estar bien, no te pasará nada.- le susurro tratando de calmarla— ¿Pero que hacen aquí?

-hermano vimos que estaba cayendo un meteorito y quisimos ver dónde había caído, y resulta que te encuentro aquí, medio desnudo, haciendo quien sabe que cosas. ¿Quien es? -le dijo intentando señalar a la persona detrás del rubio.

Ella tenía ganas de llorar, no controlaba bien las emociones, no pudo evitar sollosar.

-Ay no, no llores -la abrazo, cosa que llamo la atención de su amigo Lucas.

Ella se abrazo a él, como si su vida dependiera de ello. ¿Ahora como le decía a su amigo de dónde había salido ella? Lo tomaría por loco y si los demás se enteraban también capaz y se la llevaban y experimentaban con ella, no, no quería eso. Pero algo tenía que decir para evitar llamar tanto la atención.

El rubio vio como su piel se desprendia una tenue luz y se preocupo, si el podía verlo los demás también.

Ella vio su rostro preocupado y le sonrió.

"No te preocupes, solo tu puedes ver mi luz"

Le dijo una voz en su cabeza y comprendió que era ella comunicándose con él.

-Lucas quédate con ella un momento mientras me visto.

-claro hermano

-No. No me dejes sola.- se aferró más a él.

-No voy a dejarte sola, solo voy a vestirme, por si no te has dado cuenta estoy casi desnudo.- a ella no le importaba eso realmente, la separo
sutilmente de su cuerpo para vestirse rápidamente.

Lucas se acercó a la mujer  y se quedó a su lado, vio que tenia puesta la camisa de su amigo y que le llegaba a mitad de los muslos, era una mujer pequeña comparada con su amigo que era alto.

La miro con curiosidad ¿Por eso no quería que nadie lo siguiera? Se lo tenía bien guardado, pero ya le reclamaría por no contarle.

-¿Hola bonita, me llamo Lucas, soy amigo de Gael? ¿Tu quien eres? -le tendió la mano para saludarla.

No sabía que decir, sabía que no todas las especies tenían buenas intenciones pero, este no parecía ser uno de los malos.

Gael vio como su amigo le tendía la mano a esa chica, y se apresuró en llegar a ella, su piel parpadeaba nuevamente y eso lo inquietaba ¿Cómo era posible que solo el pudiera ver su brillo? Y ¿Cómo era posible que la escucho en su cabeza? Se estaba volviendo loco, si, eso era.

- Ya basta Lucas déjala en paz, vámonos de aquí, sabes muy bien que está zona está prohibida.

-Esta bien, está bien, solo quería saber cómo se llama esta belleza, CHICOS VAMONOS, NO PODEMOS SEGUIR AQUI... ya. ¿Feliz?

El grupo emprendió la caminata fuera del lago y Gael se dió cuenta de que ella estaba descalza así que sin pensarlo dos veces la tomo en brazos y la cargo como a una novia.

Su piel se erizo al sentirla tan cerca y la de ella también, acostó su cabeza en su hombro y a los pocos minutos se quedó dormida, esa metamorfosis la dejo agotada.

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