Taehyung veía a Jungkook moverse de un lado a otro de aquí y allá, iba a la cocina, al comedor, ensuciaba algo, iba al cuarto de limpieza, limpiaba, regresaba, recogía algunas cosas, iba a la cocina y así constantemente, Taehyung ya se estaba mareando.

Taehyung suspiro y se levantó del sofá cuando vio a su alfa limpiar por décima vez la mesa de entrada, lentamente el omega se acercó a su esposo y lo detuvo agarrándolo de un brazo.

—Cariño—. Hablo dulcemente el omega. —Creo que esa mesa está lo suficientemente limpia.

—Nada es lo suficientemente limpio—. Taehyung volvió a suspirar.

—Cariño, solo vendrán a cenar nuestros padres, tampoco es como que vendrá la reina de Inglaterra—. Ahora fue el turno de Jungkook de suspirar.

—Lo sé—. Jungkook dejó el trapo y abrazó a su omega sintiendo aquel bultito. —Solo que tu sabes como es mi familia de especial, además mi ansiedad regresó después de lo que pasó en la exposición de arte, no quiero que me de un ataque en plena cena y piensen que soy... débil.

—Cariño, ¿Cómo crees?, se que tu familia es bastante especial pero jamás pensaran eso—. Taehyung dio leves caricias a su mejilla. —Y si te dicen algo, no te preocupes, aquí está tu omega para defenderte—. Taehyung le dio un beso esquimal a Jungkook mientras este sonreía.

Realmente era muy afortunado de que la diosa luna le diera a Taehyung como pareja, un mejor omega no pudo pedir.

Eran pasado de las 4 y Jungkook mordía sus uñas de los nervios, había quedado con su familia y a la familia de Taehyung a las 4:30, para eso solo faltaban 10 minutos.

Sus padres como buenos coreanos que eran tomaban la puntualidad muy en serio, le decían una hora y esa hora tenían que estar. En cambio la familia de su esposo...bueno, eso es otra historia.

Jungkook escuchó pasos en las escaleras que lo hizo voltear a esa dirección, ahí encontró a su omega bajando de estás con ropas holgadas para ocultar su embarazo.

—Amor cálmate, todo el departamento huele a tus feromonas de nervios—. Por medio del vínculo mando calma haciendo que Jungkook se relajara. —Cariño ya hablamos de esto—. El omega le dio leves cariños a la mejilla de su esposo. —Tus padres amarán la noticia al igual que los míos.

—Lo sé, lo siento pero simplemente no puedo evitarlo—. Taehyung sonríe enternecida, se pone de puntillas y besó a su bebé alfa.  —¿Tú cómo te sientes? Ya casi se cumple el quinto mes, ¿No te sientes cansado?

—Un poco—.  Dijo ya en su postura normal pasando su mano en su pancita ya bastante grandecita pero que no se nota por las ropas. —Pero nada que no pueda soportar.

Minutos después el timbre sonó poniendo nervioso a nuestro protagonista alfa, Taehyung sonrió para tranquilizarlo y le dijo que él abriría. El Omega se dirigió a la puerta y la abrió viendo frente a él a sus suegros.

—Jieun, Young Bae—. Saludo el omega dando una pequeña reverencia (de lo que su pancita le permitía) hacía los dos mayores, aunque no parecía que lo fueran, ellos podían estar pegados a los 60 pero parece que están en sus 20.

—Oh Taehyung, ya te dijimos que nos dijeras Taeyang y IU, no es necesario tanta formalidad—.  Mencionó el alfa entrando al pent-house seguido de su esposa.

—¿Dónde está Jungkook?—. Preguntó la omega hacia su yerno.

—Aquí—. Apareció Jungkook saliendo de la cocina con su delantal de Iron Man, sus guantes de cocina que recreaban las manos del superhéroe de hierro estaban en sus manos a la vez que sostenían una olla la cual guardaba el alimento caliente. Jungkook dejó la olla en la mesa y sacó sus guantes.

—Cariño—. Empezó la Omega adulta a hablar. —Eso deberías dejárselo al omega, tu eres el alfa.

Si...¿Recuerdan cuando Jungkook mencionó que su familia era espacial? Bueno pues la familia Jeon es bastante tradicional. O como muchos le dicen chapados a la antigua.

—Mamá, no me hace mal ayudar a mi omega, además tú sabes que Taehyung no tiene tiempo de hacer las cosas de la casa ya que él está trabajando en su empresa—. Respondió el alfa.

Jieun suspiro para nada feliz, ella sabía que el omega era el que trabajaba en una oficina mientras que su hijo, un alfa puro, se la pasaba en casa haciendo el trabajo que debería de ser del omega.

Cuando conoció a Taehyung ella no estaba muy contenta, el omega tenía visiones y metas que un alfa solamente podría cumplir, ella quería que su hijo se casará con un o una omega que le ayudará en la casa mientras su hijo se encontraba en su oficina, es por esa razón que le presentaba a varios omegas para que su hijo se diera cuenta que había mejores omegas que estar con uno defectuoso.

Había sido tanta su insistencia que había logrado lo que quería.

Separar a Taehyung y a Jungkook.

Su celebración no duró mucho cuando vio a su pequeño hijo sufrir. Jungkook había entrado en depresión muy severa, se había encerrado en su cuarto, no comía, apenas y se levantaba para ir al baño, su lobo estaba muriendo lentamente al igual que su hijo y eso le destrozaba el corazón.

Porque todo era su culpa. Ella amaba a su hijo, solo quería lo mejor para él, pero lo único que había logrado era lastimarlo.

Taeyang había intervenido para reprender a su esposa al igual que su hijo mayor

"Eres su madre" dijo Tae hacia la omega bastante enojado "Deberías estar contenta que encontró a alguien que lo haga feliz. ¿Pero qué haces? Los separas ¿y por qué? por tu orgullo y egoísmo"

"El omega ya tuvo suficiente daño por mi culpa" mencionó Junhyung "No le agregues más daño a su vida que no tiene la culpa de nuestros ideales alfistas"

"Si mueren es tu culpa" dijeron ambos alfas.

Y claramente la omega tuvo que arreglar todo el daño que había causado. Al final se arregló todo, Taehyung y Jungkook volvieron a estar juntos y la omega disculpándose varias veces, su hijo lo había perdonado sin problema, el omega fue un poco más difícil pero lo había conseguido.

Taehyung y Jieun no tenían la mejor relación de yerno y suegra pero al menos se toleraban.

—Tengo que felicitarte Taehyung—. El rubio volteó a ver a su suegro con los nervios a tope ¿A caso se dio cuenta?. —Tu negocio está rebasando el mío, que a pesar de no ser competencia me estás quitando mi puesto de #1 en las empresas coreanas que mejor inversión tienen—. Taehyung suspiro de alivio. —Muchas felicidades—. Taeyang le dio una palmada en la espalda a su yerno, no fue muy fuerte para lastimarlo pero si lo suficiente para sacarle un pequeño quejido.

Claramente no era su intención, claro que no, pero Jungkook no pudo evitar soltar un gruñido hacia su padre. Rápidamente tapó su boca avergonzado mientras tres pares de ojos lo voltearon a ver.

—¿Me acabas de gruñir?—. Preguntó incrédulo Taeyang. Jamás, ni siquiera desde que se presentó, su hijo le había gruñido (A excepción de su celos, pero no contaba ya que el lobo tomaba el control).

—Yo...—. El sonido del timbre sonó por todo el pent-house.  —Yo abro—. Dijo el alfa dirigiéndose a la puerta y soltando un suspiro de alivio.

Jungkook abrió la puerta y se encontró con sus suegros.

—Jungkookie ¡Cuánto tiempo sin vernos!—. Habló feliz la omega en inglés, la latina abrazó con efusividad al alfa mientras que Jungkook se quedó como estatua. Todos estos años y aún no puede acostumbrarse a lo exageradamente cariñosa que es su suegra.

—Becky cariño, ¿Qué hemos dicho del contacto físico?— La omega resopló.

—Nada de abrazos o besos, solo reverencia—. Respondió la peli castaña como una grabadora. —Pero Hoseokie, es de Jungkookie del que hablamos.

—¿Mamá?—. La voz de su hijo mayor llamó la atención de la mexicana/estadounidense, la castaña soltó un grito haciendo brincar a todos los presentes.

Becky fue a abrazar a su hijo. —Mi bebé hermoso.

—Mamá...— Empezó Taehyung apenado.

—Pero mira esas mejillas—. La omega mexicana apretó las mejillas regordetas del rubio. Regresaron tus lindos cachetitos, volviste a hacer mi lindo y pequeño TaTa.

—Mamá—. Se quejó Taehyung tratando de soltarse del agarre de su progenitora.

—Y ese olor—. La omega empezó a olfatear a su hijo. —Hueles diferente—. Becky empezó a olfatear un poco más a Taehyung poniéndolo nervioso.

—¿Mamá no vas a saludar?—. Preguntó Taehyung apuntando a sus suegros tratando de distraer a su madre, cosa que funcionó.

La omega volteó y se encontró con los padres de Jungkook, rápidamente se alejó de su hijo y saludó a ambos adultos.

Tiempo después llegaron los hermanos de Taehyung con sus parejas (y cuando digo que llegaron con sus parejas me refiero a que Daehyun llegó con Sana y su bebé ya que Yang era el único soltero). Todos estaban en la mesa degustando la comida que hizo Jungkook junto con un buen trago de alcohol.

Excepto Taehyung.

Para todos (excepto Jungkook, Daehyun y Sana) se les hacía raro que Taehyung no tomara ni una gota de alcohol, porque es conocido por ser amante de beber bebidas alcohólicas.

—¿Hijo enserio te sientes bien?—. Preguntó su madre poniendo su mano en la frente de su hijo mayor midiendo la temperatura.

—Mamá, ya te dije que estoy bien—. Se quejó el rubio quitando la mano de la mayor.

—A mí no me mientas Kim Taehyung que soy tu madre, algo tienes—. Apuntó con su dedo índice a su primogénito.

—Solo exageras madre, solo no tengo ganas de tomar alcohol.

—Pero si eres bien borracho—. Taehyung rodó los ojos mientras escuchaba a sus hermanos reírse.

—Ammm ¿Alguien quiere postre?—. Preguntó Jungkook con su inglés pobre. Aprender idiomas nunca fue su fuerte. Podía entenderlo más no hablarlo.

—Yo cariño—. Respondió su madre seguido de los demás, Jungkook se levantó del asiento y se dirigió a la cocina.

—Y... ¿Para cuándo los hijos?—. Preguntó Taeyang hacia su yerno que se atoró con el agua al escuchar aquella pregunta.

—No lo asustes cariño—. Reprochó su esposa.

—Pero ya son cuatro años juntos, deben pensar en tener hijos propios, ¿Cómo sacará Taehyung adelante su empresa? Necesita un heredero—. Objetó el alfa empresario. —Daehyun lleva un año casada con Sana y ya tienen una hija—. Dijo apuntando a la hermana de Taehyung que se encontraba sentada al lado de Sana y cargando su bebé de un mes.

—Cada quien a su tiempo ¿No?—. Trato de salvar Hoseok a su hijo. —Cada quien tiene hijos en el momento que quiera tenerlos y si es que lo quiere.

—P...—. En eso Jungkook apareció con una charola llena de platos con pedazos de pastel de fresa hecho por él.

Empezó a entregar las rebanadas cuando llegó a su esposo, Taehyung arrugó la nariz cuando el aroma a fresa llegó a sus fosas nasales.

Jungkook y Taehyung habían calculado todo, prepararon los alimentos con los ingredientes que Taehyung no le causará náuseas, así para no levantar sospechas antes de lo planeado.

Claro, tampoco querían poner alcohol en el menú, pero sus padres alfas habían insistido mucho en servir alguna bebida alcohólica.

Y a Taehyung lo tachan de borracho.

Regresando al postre, Taehyung jamás (en sus 5 meses de embarazo) había sentido náuseas con las fresas. Pero ahora, en estos momentos, dónde tenían a sus padres, a sus suegros y querían darles la noticia al terminar la cena, le había provocado un gran asco al sentir el aroma a fresas.

—¿Todo bien hijo?—. Preguntó su padre cuando vio a su hijo hacer una mueca y pasar su dedo índice sobre su nariz.

—¿Ah? Si, si, solo...se me quitó el apetito—. Taehyung hizo hacia el frente el plato.

—Ah, nada de eso—. Renegó su madre. —Por algo estás tan flaco, anda come.

¿Flaco? Si estoy obeso mamá. Pensó Taehyung más no le dijo nada a su madre. A regaña dientes Taehyung volvió a acercar el plato, sabía que discutir con su madre era inútil..

Todos veían al omega, Daehyun y Yang burlones, Taeyang y IU divertidos, su madre sería mientras que su padre preocupado al igual que Jungkook y Sana. Taehyung agarró una pequeña porción y se lo metió a la boca sintiendo el sabor de la fresa en su boca y las náuseas en su sistema.

—¿Hyung?—. Jungkook vio preocupado a su esposo cuando éste se tapó la boca y se levantó rápidamente para dirigirse al baño. —¡Hyung!

Todos se levantaron y se dirigieron tras del omega, antes de que Jungkook pudiera entrar al baño Taehyung cerró la puerta en su cara evitando el pasó, rápidamente Jungkook tocó mientras sobaba su adolorida nariz.

—¿Hyung estás bien?—. El sonido del vómito no tardó en aparecer preocupando a los presentes.

—S-si...e-estoy fantástico—. Y nuevamente el sonido del vómito.

—Vaya—. Empezó hablar Yang. —Si no conociera a mi hermano dijera que está embarazado—. El cuerpo de Jungkook se tensó al igual que el de Daehyun y Sana y eso no pasó desapercibido por nadie. —No me digan que...

—Sorpresa—. Jungkook se volteó regalándole una sonrisa nerviosa a su cuñado, suegros y padres acompañado de pequeñas risitas por parte de Daehyun y Sana igualmente nerviosas mientras que el vómito del omega se escuchaba al fondo.

Así no es como se debieron enterar.

Faltan dos caps pero ando en mates, en un rato se los traigo (apenas termine este porque ya empezó) Comenten y voten así lo traigo más rápido <3.